Escrito por Pedro Quiroga Jimenez | |
21 de enero de 2013, 11:27Por Pedro Quiroga Jimenez La Habana, 21 ene (PL) El joven cineasta cubano Miguel Coyula destacó aquí hoy el rodaje de su tercer largometraje independiente en el que incluye la obra de su coterráneo, el célebre pintor Mario García Portela. Ver imágenes en FotosPL Bajo el título de Corazón azul, la película de ciencia ficción cuenta con los protagónicos de Héctor Noas, Lyn Cruz y Carlos Javier Martínez, y utiliza piezas de la muestra Tierra oscura que exhibe el paisajista en la capitalina Biblioteca Nacional José Martí. En declaraciones a Prensa Latina, Coyula subrayó que los cuadros de García Portela -grandes árboles en un bosque con escasa luz- evocan la oscuridad misma de uno de sus personajes: una muchacha genéticamente manipulada, con la capacidad de ver más allá de todo cuanto le rodea. Ahora en proceso de filmación y edición, el filme de unos 90 minutos de duración deberá quedar listo en 2015 y es considerado por su realizador dentro de una realidad alternativa: Una sociedad donde los individuos han sido manipulados por la genética para ser más inteligentes y fuertes. Se trata, dijo, de un experimento que sale mal y a partir de entonces surgen los cambios y afectaciones que inciden negativamente en esos seres. Desde su inauguración en diciembre último, Tierra oscura ha ganado incontables elogios por parte del público y la crítica especializada. Tras un reciente recorrido por la galería El reino de este mundo, donde se exhibe, el presidente de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba, Miguel Barnet, expresó que en ella se reflejan las tribulaciones de una persona enfrentada a un mundo fragmentado. Es algo que debían ver todos los jóvenes, para que aprecien cómo antes de ser un gran pintor, hay que ser primero un gran dibujante, sentenció. Por su parte, el director de la Biblioteca Nacional, Eduardo Torres-Cuevas, aseguró sentirse muy honrado en que su institución sea depositaria de la muestra y lamentó tener que darle fin cuando merece indefinida permanencia. Hay que incitar a verla y experimentar la sensación que cada cual puede tener frente a esas imágenes. Pueden ser árboles pero también son raíces profundas que mantienen la esperanza del árbol, precisó. Compuesta por 23 piezas de gran formato y con la técnica de acrílico sobre lienzo, Tierra oscura sobresale por el atípico montaje de las obras -inmensos árboles con tres y cuatro metros de altura o anchura- que, concebidas en cinco dípticos, tres trípticos y un políptico, sugiere figuras asimétricas para resaltar la unidad dentro de la fragmentación. Asimismo revela otra mirada al paisaje típico cubano, esta vez al detalle del árbol, esencialmente del tronco, en colores ocres, sienas y sombras, estas últimas protagonistas de ese ambiente lúgubre e íntimo que refuerza la integralidad del entorno. Profesor de pintura y dibujo, Mario García Portela (Pinar del Río, 1942) cuenta con más de 100 exposiciones colectivas y otras tantas personales en Chile, Costa Rica, Panamá, México, Trinidad y Tobago, Canadá, Estados Unidos, España, Alemania, Francia, Italia, Malasia, El Líbano, Noruega y Cuba. En su extensa carrera profesional sobresale el ejercicio de la docencia, durante 38 años, en la Escuela Provincial de Artes Plásticas y en la Universidad Pedagógica de su ciudad natal. rmh/pqj |
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