“Nunca hay
que abandonar una lucha justa, un derecho natural y humano que es el de
buscar respuestas a estas ausencias”, enfatizó Carlotto.
(Foto: Karina Maciel)
¿Por qué quieren someter a un pueblo al olvido? No hay que permitir olvidar y hay que hacer ahora un recuento hacia atrás, pidió Estela Carlotto,
presidenta de la asociación Abuelas de Plaza de Mayo, quien se
encuentra de visita en México, y se reunió con familiares de los
desaparecidos de Ayotzinapa.
En entrevista para Aristegui CNN, dijo que los antropólogos forenses
argentinos (que han nacido con la asociación que preside), con los
datos que proporcionen, van ayudar a que las cosas no se repitan,
a que sepa el pueblo que la amenaza de ser desaparecido existe para
todos. “En una democracia no puede pasar algo y decir pensemos en otra
cosa y olvidemos esto ya”, sostuvo.
“Nunca hay que abandonar una lucha justa, un derecho natural y humano que es el de buscar respuestas a estas ausencias”, enfatizó Carlotto.
Estela Carlotto se encuentra en México para asistir a diversas
actividades en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara pero
señaló que “mi compromiso era juntarme con los familiares, para compartir experiencias.
Les decía que no hay recetas que dar, porque cada país tiene su propia
historia, lo de Argentina fue durante una dictadura y la asociación
lleva ya 37 años”.
En México estamos hablando de gobiernos constitucionales,
elegidos por el pueblo, uno piensa que esos horrores no pueden suceder,
pero que si vamos a remontar la historia de México, uno no quiere
injerir tampoco en las políticas propias de un país, pero sí acompañar
a estos familiares de las víctimas, hay un arrastre hacia atrás de
desapariciones, las mujeres en Ciudad Juárez, los decapitados. El
terror paraliza, la desaparición de los 43 jóvenes es una bisagra muy dolorosa, indicó.
Dijo que en la reunión con los familiares de los desaparecidos “no
quería dejarle a ellos la idea de que tienen que luchar 37 años para
saber algo, sino que esto tiene que tener una respuesta rapidísima,
el Estado de derecho que se confirió por el voto popular obliga a las
autoridades a hacer cosas, pero no que sean como una oferta absurda de
dinero o de bienestar, porque como dicen ellos, la vida de los hijos no
tiene precio. El pueblo debe unirse en paz, porque la violencia no
sirve.
“Todos deben apoyar, juntarse con los familiares,
consolarlos, darles fe y confianza, así el duelo se puede hacer. Pero
no con engaños, ni falsas hipótesis, sino con una realidad concreta,
par demostrar qué paso y si están vivos que vuelvan a sus hogares”,
agregó.
En cuanto a los antropólogos argentinos que colaboran en las
investigaciones por los desaparecidos de Ayotzinapa, Carlotto comentó
qué es un grupo que se fue perfeccionando de manera tal que se
creó y hoy es internacionalmente famoso por su idoneidad científica,
por su discreción y confiablidad de que no utilizan en absoluto el
estudio que hacen de esos cuerpos, de esos restos, hacia otros fines
que no es darle a las familias su mensaje, por eso es llamado
mundialmente para que exhumen cuerpos en el mundo.
“Veo y he leído que hay iglesias que han cerrado las puertas en
señal de repudio a estas desapariciones de estos 43 jóvenes y eso me
parece también que involucra a un poder que es la iglesia, y los
católicos que somos la mayoría de los latinoamericanos que
esperamos siempre que tuvieran un rol importante, en mi país no lo hubo
lamentablemente, pienso que acá puede haber una respuesta que también
se una, a todas estas manifestaciones”, mencionó.
La activista llamó a “perder el miedo y juntar las manos, sumarse en
cada pueblo en cada ciudad, sumarnos como si fuera propio, siempre sin
violencia, porque genera represión y después vienen más víctimas, la
vida es sagrada”.
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