Ciudad de México. Tras el caso de María del Carmen
Sánchez, atacada con ácido por su expareja en 2014, el Congreso del
Estado de México (Edomex) reformó su Código Penal para castigar este
tipo de lesiones como graves.
El castigo para quien cometa el delito de lesiones con ácido,
materiales corrosivos o químicos en la entidad mexiquense será de 5 y
hasta 10 años de prisión y una multa de 100 a 200 días, determinó
unánimemente la LX Legislatura del Edomex este 2 de julio.
La propuesta para reformar la fracción XI en el artículo 238 del
Código Penal del estado, sobre lesiones, fue presentada el 3 de
diciembre de 2019 por la diputada local Mariana Uribe Bernal, del Grupo
Parlamentario de Morena y presidenta de la Comisión para la Igualdad de
Género de la Legislatura.
Para esta iniciativa, la diputada se basó en datos de la organización
Acid Survivors Trust International (ASTI), que calcula que anualmente
ocurren en el mundo mil 500 agresiones con ácidos y sustancias
corrosivas, de los cuales 80 por ciento son en contra de mujeres, aunque
se estima que esta cifra únicamente refleja 40 por ciento de los casos
ya que la mayoría no se denuncian.
En el caso de México estas agresiones suceden cada vez con mayor
frecuencia, declaró la diputada el día que presentó esta iniciativa
basada en el caso de Carmen Sánchez y Esmeralda Millan, ambas víctimas
de esta violencia, quienes estuvieron en el congreso ese día.
Como María Elena, la saxofonista rociada con ácido en Oaxaca, Carmen
Sánchez y Esmeralda Millán habrían sido agredidas por sus exparejas,
quienes las amenazaron de estar con ellos a la fuerza o de lo contrario
las marcarían para que no pudieran estar con nadie más. En el caso de
Carmen, su agresión ocurrió en el Estado de México, donde las
autoridades calificaron el delito como lesiones leves. Actualmente ella
busca que este tipo de ataques contra las mujeres sea investigado como
tentativa de feminicidio.
Este caso derivó en 2019 en la recomendación 85/2019, por violaciones
a los Derechos Humanos cometidas por la Fiscalía General de Justicia
del Estado de México, por la indebida procuración de justicia y
deficiencia en investigar con perspectiva de género esta violencia, para
lo cual dictó medidas de reparación, de compensación y de no
repetición, entre otras.
Actualmente Carmen, impulsa dentro del Congreso del estado que los
ataques con ácido se tipifiquen como “intentos de feminicidio” y no solo
como “lesiones dolosas”, además de estar en contacto con siete víctimas
más de esta violencia, de acuerdo con información del Museo Memoria y
Tolerancia, donde en febrero pasado dió una conferencia sobre ataques
con ácido en México.
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