10/12/2024

3 obras de Han Kang, primera mujer asiática en ganar el Premio Nobel de Literatura

 

El terreno de este reconocimiento continúa siendo una muralla difícil de atravesar para las mujeres, por ello, el fallo de la Academia a favor de Han Kang es una doble victoria: Primero, sobre el androcentrismo del Nobel y posteriormente, contra el eurocentrismo, pues sólo 4 personas asiáticas han sido reconocidas con un Nobel; todos, hombres. Yasunari Kawabata (Japón), Kenzaburo Oe (Japón), Gao Xingjjan (China) y Mo Yan (China), este último, en 2012.

Kang ha sido reconocida por su «intensa prosa poética que expone la fragilidad humana» y posteriormente, la institución compartió una llamada con la escritora donde refirió sentirse profundamente conmovida y que la noticia la había sorprendido cocinando junto a su hijo. La celebración de Han Kang será una tarde de té en familia.

La historia de una madre ama de casa que, un día, despierta sin deseos de comer carne tras vivir sanguinarias pesadillas, para posteriormente, deja de comer en absoluto.

Movida por el deseo de sacudirse de la depresión y de comenzar a vivir como un árbol, la historia confrontará los traumas humanos e históricos que atraviesan a la pequeña isla de Corea del Sur; esta obra titulada La Vegetariana es, tal vez, uno de los puntos primarios para entender los terrenos literarios de Han Kang, la primera mujer asiática y surcoreana en ganar un Premio Nobel.

A los 9 años, la escritora se mudó a Seúl y en 1993, publicó sus primeros poemas y dos años después, publicó un recopilatorio de cuentos «Amor de Yeosu«. El éxito comenzaría a llegar a principios del milenio, cuando en 2002 publicaría su primera novela titulada «Tus manos frías».

Uno de los sellos características de Han Kang es la facultad de exponer la frialdad del sistema patriarcal y violento de Corea del Sur, pues usualmente, sus obras son narradas desde la perspectiva de los hombres y sus protagonistas, son mujeres; narra los pensamientos desdeñables sobre el cuerpo de la protagonista, la violencia emocional, sexual, la misoginia de los hombres disfrazada de empatía y finalmente, la libertad onírica para sus protagonistas mujeres. Como por ejemplo:


«Así pues, fue natural que eligiera casarme con ella, que tenía el aspecto de ser la mujer más corriente del mundo. De hecho, jamás he podido sentirme cómodo con las mujeres bonitas, inteligentes, sensuales o provenientes de familias adineradas. Si al menos hubiera usado sostén con relleno, no me habría hecho quedar tan mal cuando la presenté a mis amigos.» (Fragmento, «La Vegetariana» de Han Kang)


Tres obras de Han Kang

Human acts (Actos humanos), 2014


En la ciudad natal de Han Kang se presentó un movimiento estudiantil y político llamado el Levantamiento de Gwanju en los años 80s que buscaban la democracia para Corea del Sur. Ante la presión del movimiento, el Estado reprimió haciendo uso del Ejército y asesinó a un aproximado de 165 estudiantes y civiles durante las manifestaciones.

La obra fue elogiada por la Academia, pues de este cruento evento, se desprende una mirada completamente innovadora de escribir donde las almas de los cuerpos pueden separarse de los cuerpos y presenciar su muerte, cómo son lanzados a fosas comunes sin ser identificados, la rabia y la tristeza de haber perdido todo.
Según se refirió durante el evento de anunciación «Human Acts» es la obra con la que se debe comenzar a leer a Han Kang para empaparse de su pluma y su visión del mundo.

Decir adiós, es imposible (2024)

Inseon ha sufrido un accidente y permanecerá internada un buen tiempo, su preocupación fundamental, será alimentar a su pájaro. Por esto, busca a Gyeongha, su amiga quien acepta moverse a su domicilio y cuidar del ave; es invierno y debe apresurarse si quiere llegar bien a la casa de Inseon.

Una vez en el domicilio, Gyeongha descubrirá por accidente un archivo compilatorio sobre la masacre en la isla de Jeju en 1948 donde murieron aproximadamente 30 mil personas y con horror, encontrará la conexión entre la familia de Inseon y este suceso.
La historia contada en el presente conectará de forma natural con el pasado, las heridas de la represión, las y los muertos que nunca encontraron la paz y cómo, aunque se quiera, el presente nunca logrará escapar de la violencia del pasado.

Esta obra ya ha sido traducida al español y se apunta a que llegará a las librerías hispanohablantes bajo la editorial Random House a lo largo de 2025.

Blanco (2020)

La protagonista de esta historia ha cargado desde siempre un dolor existencial; algo duele y no la deja vivir tranquila. Con esta inquietud es que comenzará a buscar dentro de la cotidianidad qué es lo que la aqueja y cómo esto, se liga directamente con la muerte de su hermana a quien no conoció.

El hilo de la historia será el color blanco, considerado en la cultura asiático el color del luto y del duelo, indagará en todas aquellas cosas blancas que continúan albergando el dolor; las bombillas, el escritorio de su hermana, los faros de los autos que corren a medianoche y la luz que irradian las pantallas. Cuestionará la idea de cómo sanar algo que nunca se conoció, la existencia, la introspección y cómo librarse de la tristeza.

«Ella está sentada ante el escritorio como alguien que no sufre ningún dolor. Como si no hubiera existido nunca el tiempo en que el único consuelo era que la eternidad no podía ser nuestra» (Fragmento «Blanco» de Han Kang)

Ada Loveace, la británica programadora que permitió crear las primeras computadoras

 

.-Ciudad de México.- Son los primeros días de octubre lo que significa que es el momento del año de nombrar a una de las matemáticas y programadoras más poderosas de la historia; Ada Lovelace, a quien se le atribuye la posibilidad de haber creado las primeras computadoras de la humanidad y por ello, el segundo martes de octubre se celebra un día en su honor.

Nacida en Gran Bretaña en 1815 es hija de Anabella Milbanke quien fue la responsable del cuidado de Ada; ella se encargó de que su hija aprendiera las matemáticas desde una edad muy temprana con tutores y posteriormente, de forma autodidacta.

En aquella época, las mujeres eran educadas para el trabajo doméstico y que su vida girara en torno al matrimonio y labores de cuidado, sin embargo, la madre de Ada Lovelace, la impulsó para elevar sus conocimientos matemáticos a la creación de planos de aeronaves, máquinas y resolver problemas complejos, esto, a pesar de que la salud de Ada se ha reconocido como «muy débil desde su nacimiento«.

Su padre, el escritor Lord Byron se desentendió de ella a los meses de su nacimiento; nunca le conoció, ni la buscó, según refiere la revista National Geographic.

El tema de la programación resultaba lejano para la época, sin embargo, a principios de sus veintes, la vida de Ada Lovelace cambiaría luego de un encuentro con un hombre llamado Charles Babbage considerado el padre de la programación e inventor de las máquinas calculadoras.

El programador compartió con Ada el desarrollo de un innovador dispositivo que permitiría calcular valores y funciones; la idea se enquistó en la joven matemática y convirtió la programación en su terreno de investigación.

La curiosidad se había despertado y esto sería sólo el primer paso para desatar el potencial de la mujer que crearia las bases de la programación contemporánea.

Ada Lovelace comenzó a realizar anotaciones y algunas recomendaciones importantes sobre el proyecto de su par, Charles Babbage quien se encontraba por Italia exponiendo el prototipo de su máquina constituida por 25 mil piezas.

Difundiendo este hecho y en un intento de recaudar fondos, Ada Lovelace tradujo los folletos -que estaban en italiano- y comenzó a repartirlos; la sorpresa fue grata, no sólo para su compañero, sino que la esfera intelectual británica puso especial foco en Lovelace.

Sus anotaciones eran visionarias e incluían términos innovadores que continúan siendo aplicados en la actualidad como el algoritmo informático.

Paralelamente, desarrolló planos de otro aparato que permitiría leer datos y resolver problemas matemáticos con precisión y velocidad, Ada Lovelace siempre tuvo la mirada en el futuro y aseguraba que la humanidad crearía maquinaria que pudiese hacer más que sólo calcular o procesar números, sino que podrían realizar millones de tareas a la vez, la matemática proyectaba que el futuro sería mucho más complejo y brillante.

Esta idea le permitió entender que, a través de la manipulación de símbolos y reglas definidas, las máquinas podrían actuar en otras cosas, como por ejemplo, piezas musicales complejas.

Esto es, probablemente, la punta de lanza que la distinguió de sus pares, Ada Lovelace entendió que no todo se trataba de cálculos, sino más bien, de computar los aparatos para que estos pudieran acotar tareas elaboradas que sólo fueran limitadas por la creatividad de quien programe. A sus 28 años, Ada Lovelace habló, por primera vez en la historia, en hablar de lenguaje binario de programación.

Ada Lovelace: La lucha contra el machismo y el borrado histórico

Ada Lovelace no accedió a la educación universitaria como el gremio de matemáticos, ni tampoco gozó del reconocimiento por su mente brillante; Ada Lovelace debía cumplir con su rol de esposa luego de contraer matrimonio con el duque de Lovelace y posteriormente, cuidar de sus 3 hijos.

La maestra Amanda Hernández de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales refiere en el artículo académico para el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (CONACYT) que las mujeres de aquella época no eran enseñadas hacia las ciencias exactas y que si bien, algunas clases sociales más nobles y aristócratas podían acceder a la educación, esta estaba limitada a aprender de literatura, poesía, danza, letras o canto.

Materias consideradas propio de su sexo y que sólo eran consideradas un «aditamento» a su personalidad, pues al momento de contraer nupcias, su prioridad sería el cuidar de su esposo y posteriormente, tener hijas e hijos.

A pesar de este rígido sistema patriarcal, algunas mujeres, como Ada Lovelace, se rebelaban y de manera autodidacta, consultaban libros de matemáticas y ciencias, de esta resistencia, es que existió la astrónoma Caroline Herschel, la matemática Marie Sophie Gereximirmain o la estadística sanitaria, Florence Nightingale.

Paralelamente, el artículo de la CONACYT, refiere que estas pequeñas rebeldías se gestaban entre mismas mujeres apasionadas por las matemáticas, pues en aquella época, se publicaba «El diario de las señoritas» que contenía datos de interés para las mujeres victorianas, algunos crucigramas o recetas, sin embargo, entre sus hojas, se encontraban a veces problemas matemáticos complejísimos.

Las mujeres resolvían estos ejercicios, los firmaban de forma anónima -o con seudónimos- y posteriormente, los enviaban a la revista que a la siguiente edición, publicaba las respuestas. Esto incentivo a las matemáticas y aficionadas británicas que encontraban en la revista un refugio.

Con esto se apunta a derribar el mito de que no existían las mujeres programadoras o matemáticas en la época victoriana; siempre lo hicieron.

A pesar de ser una de las mentes más brillantes y reconocida por su par, el maestro de la Universidad de Londres, August Morgan como una matemática de primera categoría, el mismo Morgan, refirió en una carta que su problema era no ser un joven (varón), pues de serlo, él lo habría profesionalizado.

Ante la injusticia que la excluía de los círculos de matemáticos a causa de su género, se unió el deber que debía cumplir como madre y esposa de un conde.

Tenía compromisos todo el tiempo, educaba y procuraba a sus hijos pequeños y la idea de desarrollar la máquina que tanto anhelaba parecía cada vez más lejana; no había posibilidad de dedicarse de lleno a la programación como el maestro Morgan o Babbage, aunado a esto, la salud de Ada Lovelace empeoraba sintiéndose cansada todo el tiempo y muy débil.

A la edad de 36 años recibió la noticia de que tenía cancer y sólo un año después, murió. Su máquina nunca fue construida, sus textos fueron olvidados por más de un siglo y nunca fue reconocida por sus importantes aportes a la programación.

No fue hasta 1953 que estas notas fueron recopiladas y publicadas con su nombre real, originándose de aquí, el reconocimiento que en vida tanto mereció y nombrándola como la primera programadora en la historia que permitió la construcción de las computadoras contemporáneas.

Al frente de todas, Claudia Sheinbaum

Elena Poniatowska

Como periodista y escritora

, pienso que el hecho de que Claudia Sheinbaum dirija nuestro país en los próximos seis años fortalece nuestra fe en nosotras mismas y alienta nuestro afán de superación. A raíz de su triunfo, muchas aspirantes a universitarias insistirán en su carrera, muchas dependientas en tiendas, muchas deportistas, enfermeras, secretarias en oficinas sentirán que pueden lograr un reconocimiento inesperado. De ahí que sea tan importante la aseveración de Sheinbaum: No llego sola, llegamos todas, el lema más alentador de los años recientes.

Al lanzar esas palabras desde la plaza pública, fortaleció nuestra vocación por el estudio y nuestro deseo personal de superación. Además de enaltecernos, su nombramiento nos hermana, porque a su lado sentimos que también nosotras podemos superarnos y destacar en nuestro empeño. Su insistencia en el No llego sola, llegamos todas da en el clavo de nuestras inseguridades y la imagen que tenemos de nosotras mismas.

Varias mujeres vivimos el triunfo de Claudia Sheinbaum como personal. “Indudablemente –plantea la feminista Marta Lamas–, la llegada de Claudia Sheinbaum a la Presidencia es un hecho histórico y simbólico, pero lo que me parece más significativo es que sea precisamente Claudia la que llegue al poder, porque ella tiene un proyecto para las mujeres. Su eslogan, No llego sola, llegamos todas, nos asegura que ha vivido los conflictos que tenemos las mexicanas que conciliamos trabajo y familia. Claudia sabe lo que es tener un hijito enfermo en casa y no poder llegar al trabajo o desvelarse para terminar la tesis.

“Claudia plantea echar a andar su proyecto del Sistema Nacional de Cuidados con las jornaleras agrícolas y las obreras de la maquila. Tengo la certeza de que ese proyecto será la palanca para lograr un cambio estructural en nuestra sociedad. Lo del espacio público, el espacio privado, el tema del cuidado a las personas mayores o con alguna discapacidad, y el caso de enfermos que se quedan amarrados en casa para que no se extravíen preocupa desde siempre a nuestra sociedad. Claudia apunta a un cambio estructural importantísimo. Por eso, más allá del hecho simbólico e histórico,me parece que su mandato va a cambiar la vida de las mujeres en nuestro país.

“También pienso que no hay que mistificar ni creer que por ser mujer va a dejar de cometer errores. No, no, Claudia es un ser humano. En los países en los que una Presidenta se equivoca suele decirse: ‘¡Ah, las mujeres no saben gobernar!’ Hay que tener una mirada equilibrada, en el sentido de reconocer que lo importante y significativo del momento que ahora vivimos es que Sheinbaum llegue al poder, porque ya ha demostrado que sabe gobernar.

“Me preocupan las expectativas en situaciones que nos importan mucho a las mujeres, porque no van a cambiar pronto; por ejemplo, el tema de los feminicidios, que no va a poder resolverse en sus seis años de gobierno, porque se trata de una violencia estructural del microcapitalismo que ahora vivimos; va a poder sentar cimientos para una política distinta, y a lo mejor en tres sexenios lograremos, gracias a su gestión, acabar con los feminicidios en la Ciudad de México.

Claudia no tiene una varita mágica con la que pueda acabar con esa barbaridad y ese horror que son los feminicidios y la violencia contra las mujeres, porque también hay que acabar con la violencia de los hombres. Yo diría: congratulémonos de que llega Claudia Sheinbaum, pero al mismo tiempo también démosle la oportunidad de sentar las bases para los cambios que queremos, y no nos hagamos ilusiones de que por ser mujer ella va a poder cambiarlo todo.

La documentalista Soco Aguilar se entusiasma: Ella me cae muy bien. Me parece maravilloso que llegue a la Presidencia porque las mujeres siempre estamos sometidas a las decisiones que toman lo hombres. Espero con todo mi corazón que Claudia, tan preparada, logre para nosotras esta independencia de acción y decisión.

Soy Carolina Aranda, tengo 27 años. Terminé mi licenciatura en literatura en la Universidad de las Américas, Puebla. El primero de octubre me levanté y me sentí diferente porque Claudia es mi presidenta. En lo primero que pensé fue en todas las brujas que quemaron en la hoguera en el siglo XIV; pensé en las mujeres de la Revolución Mexicana, como Jesusa Palancares; en las mujeres que buscaron a sus hijos desaparecidos, como Rosario Ibarra de Piedra, y en otras a quienes todavía les desaparecen a un hijo cuya ausencia se convierte en un sufrimiento cotidiano.

“Yo soy María Martínez; tengo dos hijos, Alejandro y Nayeli; tengo 55 años y soy trabajadora del hogar. Tener ese empleo me ayudó mucho a mantener a mis dos hijos; mi hijo Alejandro Ramírez tiene 18 años, terminó su carrera de ingeniería en transporte en el Politécnico… Me enorgullece haber podido ayudarlo al emplearme en el quehacer doméstico. Me da gusto que una mujer dirija al país, porque siento que vamos superándonos, que ya hay más igualdad. Ahora veo que más mujeres estudian.”

“Soy Yunuhen González y soy bailarina de folclor. Como mexicana, me emociona que seamos un referente al tener a la primera presidenta. Brasil, Argentina, Chile, Costa Rica, por mencionar algunas naciones, ya lo lograron, y si bien en México las mujeres se han responsabilizado de cargos públicos de gran relevancia, la Presidencia parecía inalcanzable. Recuerdo que la primera vez que fui a votar, Patricia Mercado era la única mujer que contendía por la Presidencia de México; le siguió Josefina Vázquez Mota y ahora gana Claudia Sheinbaum, para mi beneplácito. En estas elecciones de 2024, me parece que el papel de la mujer en la política tuvo la suficiente contundencia para fincar dos opciones; dejar de ser una ‘representación femenina’ en sus respectivos partidos para convertirse en protagonistas de la gran contienda electoral. Ahora, con Claudia Sheinbaum en la Presidencia, hay esperanza, porque su triunfo es un ejemplo a seguir para miles de mujeres y niñas que sueñan con llegar tan lejos como sea posible. Cuando la Presidenta dice: ‘No llego sola, llegamos todas’, su mensaje es formidable, porque miles de madres, estudiantes, jornaleras, artesanas confían en que ella hará un gran trabajo como la primera Presidenta de México.”

María Consuelo Mejía, quien fue directora de Católicas por el Derecho a Decidir nos comparte: “Por primera vez en sus 200 años como República, México tiene una Presidenta, la doctora Claudia Sheinbaum Pardo, física, ingeniera ambiental y de la energía; en sus palabras, científica humanista con profundo amor a su patria y a su pueblo.

“En México, el machismo sigue siendo una actitud dominante en las relaciones entre mujeres y hombres, así como la misoginia que se expresa en los altísimos niveles de violencia contra las mujeres, las adolescentes y las niñas. En este país machista y misógino ganó Claudia con 35 millones de votos, más que los que obtuvo López Obrador en 2018, y con una distancia de 30 puntos de su más cercana contendiente. Un triunfo realmente histórico.

“Claudia Sheinbaum enarbola un proyecto de nación progresista e incluyente, que ha denominado el ‘humanismo mexicano’, en el que, como su antecesor, pone en el centro a las clases más desprotegidas: por el bien de todas y todos, dijo en estos días, primero las mujeres indígenas, primero las pobres.

Sin duda alguna, para implementar sus políticas, enfrentará obstáculos y tendrá que resolverlos con el apoyo de un excelente equipo de gobierno y de los 35 millones de personas que votaron por ella. Temas como las consecuencias del cambio climático, el narcotráfico, la violencia generalizada, el equilibrio político necesario para fortalecer la democracia, la escasez de agua y el posible triunfo de Trump, tendrán que ser abordados de manera prioritaria. ¡No la tiene fácil nuestra primera Presidenta!

A mis 92 años (71 en el periodismo), la emoción de ver a Claudia Sheinbaum llegar a la Presidencia es inmensa. En mi niñez y en mi juventud supe de reinas por un día y princesas que perdían su zapato, como Cenicienta, y eran rescatadas por un hombre, pero nunca imaginé que una mujer rescataría a todo un pueblo; nunca pensé que a México lo gobernaría una universitaria, una luchadora social, la hija de la científica Annie Pardo, a cuyo lado me senté en la toma de posesión del primero de octubre y no supe decirle qué orgullo sentí de estar ahí junto a ella y de compartir el triunfo de Claudia Sheinbaum Pardo.

El ilustrativo caso de la esposa y «primera autora» que no ha recibido el premio Nobel

 rebelion.org

Rosalind Lee fue coautora del trabajo de 1993 sobre microARN por el que su marido ha sido reconocido este lunes con el Nobel de Medicina, lo que ha despertado de nuevo las críticas por sexismo a la Real Academia Sueca: ¿están justificadas?

“Felicitaciones a nuestro premio Nobel de Medicina 2024, Victor Ambros. Esta mañana celebró la noticia de su premio junto a su colega y esposa Rosalind Lee, quien también fue la primera autora del artículo Cell de 1993 citado por el Comité Nobel”. Estas dos breves frases, acompañadas de una foto de la pareja, fueron publicadas el pasado lunes a mediodía en la red social X por la organización de los premios Nobel (@NobelPrize). 

Desde entonces se ha producido un aluvión de críticas por sexismo a la academia sueca, que tiene un amplio historial de injusticias respecto a las mujeres científicas, a las que ha dejado y sigue dejando sistemáticamente fuera del foco. “Si Rosalind fue la primera autora de dicho artículo, ¿quizás también debería ser una de las premiadas?”, se pregunta alguno de los investigadores a los que este mensaje de la academia les ha parecido “machista y desalentador”. “Ella es autora de todos sus trabajos”, subraya otro de los mensajes. “Suena como la historia de Rosalind Franklin”.

Indignación por el motivo “equivocado”

Algunos de los científicos consultados por elDiario.es coinciden en que el tuit es inoportuno y sexista y que las críticas al machismo de los Nobel están justificadas, aunque en este caso se producen por el motivo equivocado. Porque el hecho de ser “primera autora” no significa lo mismo en todos los campos de la ciencia ni es lo que se puede interpretar desde fuera de este mundillo. “En Biomedicina, el último autor suele ser el senior, el que ha tenido la idea en grande y el primer autor es el que hace el experimento y ha hecho el trabajo material”, explica Sara Rodríguez Heras, especialista en microARN de la Universidad de Granada (UGR). El Nobel se suele dar a quien ha tenido la idea y ha dirigido a la gente para demostrarla, subraya, pero este caso también refleja una situación que se repite y sigue pasando: las mujeres son las que trabajan en el laboratorio y él dirige el grupo.

Para Sònia Guil, líder del Grupo de Regulación del ARN y Cromatina del Instituto de Investigación contra la Leucemia Josep Carreras, la polémica, tal y como se plantea, no tiene fundamento. “Ambros era el que lideraba el grupo de investigación en el artículo del 93”, asegura. “Hasta donde yo sé, no hay duda sobre su papel principal en la investigación de ese año y posteriores y por tanto sobre el merecido premio”. “Esto no quita —matiza—, que en otros casos se haya podido despreciar o no valorar como se merecía el papel de las mujeres, pero no me parece que sea este sea el caso”.

¿Un premio para más de dos?

Otros especialistas expresan serias dudas sobre la oportunidad desaprovechada de reconocer a Rosalind Lee, que está como coautora en todos los trabajos relevantes de la carrera de Victor Ambros, el único de la pareja que ha sido reconocido. De hecho, ambos compartieron algún premio anterior con el mismo nivel de reconocimiento. El trabajo de Rosalind Lee, junto a la investigadora postdoctoral Rhonda Feinbaum —que aparece en el famoso trabajo de 1993— fue esencial para generar las cepas de C. elegans que sirvieron para estudiar el microARN en el laboratorio y caracterizar su función, mérito suficiente para haber recibido el Nobel. 

“Ha habido muchas personas así en mi carrera, incluida mi esposa, Rosalind Lee, que trabaja en mi laboratorio y ha contribuido enormemente a mi éxito”, reconoció el propio Ambros en una entrevista. “Ella y una postdoctorada en mi laboratorio, Rhonda Feinbaum, fueron quienes clonaron y caracterizaron el primer microARN, lin-4, mientras yo estaba en Dartmouth”.

Mujeres fuera de la foto

Para algunos, son claras las reminiscencias con el caso de Rosalind Franklin, que fue eclipsada por Watson y Crick a pesar de que su trabajo fue esencial para el descubrimiento de la estructura del ADN. “El planteamiento de la polémica, apelando a su condición de ‘primera autora’, no tiene sentido, pero viendo la aportación que hizo Rosalind Lee, tiene toda la pinta de que esta mujer podría haber compartido el Nobel”, asegura César Tomé, especialista en historia de la ciencia y coordinador del Cuaderno de Cultura Científica de la UPV/EHU. “La academia debería justificar por qué a esta señora no se la premia, pero no porque sea ”primera autora“ del paper, sino porque parece que contribuyó significativamente a los hallazgos”. 

“Si el premio se otorga por el artículo de Cell de 1993 que citan, tendrían que ser premiados con el Nobel los tres autores, no solo Ambros y Lee, sino también la tercera firmante”, sostiene Gemma Marfany, catedrática de Genética de la Universidad de Barcelona (UB). Pero esto raramente sucede, reconoce, aunque existen precedentes en los que se reconoce al jefe y su estudiante de doctorado, como sucedió con Elizabeth Blackburn y Carol Greider en 2009. Aunque habría que saber con precisión cuánto participó Lee en los descubrimientos antes de calificar la decisión de los Nobel de machista, defiende Marfany, “teniendo en cuenta que en todos los trabajos destacados de él, ella también está, me parece que es más injusto su olvido, porque todo lo bueno que Ambros ha aportado en el campo también es por ella”.

El día de la marmota machista

Marta Macho, matemática y editora del espacio digital Mujeres con Ciencia, cree que seguramente el comité del Nobel no es quien ha dejado fuera a Rosalind Lee, sino las personas o entidades que han propuesto la candidatura de Ambros. El hecho de que Lee se haya ocupado del trabajo de laboratorio, opina, ha sido juzgado por muchos como secundario. “Los roles y las relaciones de poder se afianzan y son difíciles de invalidar, también en el entorno científico, que está altamente jerarquizado”, subraya. “Lamentablemente, esto lleva al pensamiento de que él lidera y ella colabora”. 

Independientemente del fondo de la cuestión, el tuit de los Nobel pone encima de la mesa un hecho: la recalcitrante falta de sensibilidad de la Real Academia Sueca hacia la cuestión de la igualdad y la necesidad de poner un poco de equilibrio en una larga lista de reconocimientos exclusivamente masculinos. Y este nuevo episodio es ilustrativo porque refleja una situación de asimetría en la investigación entre hombres y mujeres que forma parte del paisaje, un estereotipo en el que ellos son los jefes y ellas hacen el trabajo duro y discreto por detrás.

“Esa asimetría existe, lo que ocurre es que se va desgastando con el tiempo, cada vez hay mayor número de mujeres que son investigadoras principales, jefas de laboratorio”, indica César Tomé. “Ahora mismo se están premiando trabajos que provienen de una época donde todavía la inmensa mayoría de los puestos de investigadores principales las tenían varones. Yo quiero pensar que de aquí a 30 años, cuando se estén premiando las cosas que se están investigando ahora, cambiarán las tornas y empezará a haber un mayor número de mujeres premiadas”.

Mientras tanto, y aunque parezca increíble, la rueda que deja a las mujeres fuera de los premios y el reconocimiento sigue girando. “Un caso muy conocido en genética es el de los fragmentos de Okazaki”, recuerda Gemma Marfany. “Siempre se habla de él como el creador, pero eran un matrimonio de investigadores y la aportación la hicieron los dos”. A su juicio, es una enorme injusticia que ocurre bastante a menudo. “Tienes un matrimonio que se dedica a hacer ciencia en el que el famoso es él, aunque quien lleva el laboratorio es ella”, describe. “Eso en España pasa y ha pasado durante muchos años”. 

Para Marta Macho, el sexismo recorre todas las etapas de la nominación para un premio, desde la decisión de a quién se propone para un reconocimiento, pasando por las resoluciones intermedias, hasta el momento final del fallo del comité del Nobel, en el caso de este galardón. “Por eso tantas mujeres quedan fuera, porque van quedando atrás en todas y cada una de las etapas”, concluye. “Y por eso desanima y exaspera esta especie de ”día de la marmota“ en el que tantas mujeres brillantes siguen sin conseguir el reconocimiento que sin duda merecen. Ni es justo ni es aceptable el olvido sistemático de los éxitos de las mujeres”.

Fuente: https://www.eldiario.es/sociedad/ilustrativo-caso-esposa-primera-autora-no-recibido-premio-nobel_1_11716917.html

Morena acumula poder en el Senado, leyes fundamentales para mujeres deberán pasar por su aprobación

 

Es importante señalar que las comisiones de la Cámara de Senadores se componen de grupos de trabajo que pueden ser permanentes o constituidos para un objetivo específico. Su función es discutir e informar sobre un proyecto de ley o tema. 

Estas comisiones son esenciales porque se encargan de estudiar proyectos de ley y producir dictámenes sobre ellos. También pueden crear comisiones especiales para investigar asuntos no reglamentados o sobre las funciones del Senado. Estas comisiones también contribuyen a que la Cámara de Senadores cumpla con sus atribuciones constitucionales y legales.

Debido a la relevancia de estas comisiones para aprobar proyectos de ley, no es sorpresa que, ahora que Morena es mayoría, el partido guinda y aliados cuenten con la mayoría de las presidencias de estas comisiones, facilitando la aprobación de dictámenes.

Presidentas y presidentes de comisiones

En el portal de las Comisiones Ordinarias del Senado de la República se ostentan actualmente los rostros de las y los nuevos representantes de cada una de las comisiones.

Entre las comisiones de Igualdad de Género, Pueblos Indígenas y Afromexicanos, Salud, Bienestar, Asuntos Migratorios, Defensa Nacional, Derechos Humanos, Economía, Educación y Justicia, por mencionar algunas, podemos destacar a senadoras y senadores de Morena, PT y PVEM. 

Esto no sólo demuestra el músculo legislativo de la mayoría, también nos permite entender cómo será la toma de decisiones en adelante al interior del Senado. 

Asimismo, es importante señalar que algunas de las comisiones más importantes lideradas por Morena y aliados, son presididas por mujeres.

Por ejemplo, la Comisión de Igualdad de Género está integrada sólo por mujeres y será presidida por Martha Lucía Micher Camarena (Morena); la Comisión de Pueblos Indígenas y Afromexicanos será dirigida por Edith López Hernández (Morena); por su parte, la comisión de Derechos Humanos tendrá a la cabeza a Reyna Celeste Ascencio Ortega y la Comisión de Defensa Nacional tendrá como presidenta a Ana Lilia Rivera Rivera (Morena).

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Otras comisiones de igual relevancia que no fueron otorgadas a miembros de Morena y aliados fue la Comisión de Marina, que será presidida por Alejandro Morena Cárdenas, presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI) desde 2019, o la Comisión de Anticorrupción y Transparencia, dirigida por Francisco Daniel Barreda Pavón.

Podemos destacar que la Cámara de Senadores cuenta con paridad de género en cuanto al número de presidencias otorgadas a senadoras y senadores, pues hay 29 senadoras (14, Morena; 3, PT;  3, PVEM, 5, PAN; 4, PRI) y 29 senadores (17, Morena; 1, PT; 1, PVEM; 5, PAN; 3, PRI y  2, MC). 

El día de hoy se instalarán en el Senado las comisiones de Medio Ambiente; Federalismo; Marina; Desarrollo Social; Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación; Relaciones Exteriores Europa; Relaciones Exteriores América del Norte y el Caribe; Relaciones Exteriores América del Norte; Comisión de Trabajo y Previsión Social; Pueblos Indígenas y Afromexicanos; Seguridad Pública; Deporte y Relaciones exteriores Asia-Pacífico.

A continuación, te compartimos la lista los nombres que presidirán las comisiones ordinarias y los partidos a los que pertenecen: 

La prostitución es un "sistema de violencia" para relatora de la ONU

 ipsnoticias.net

Reem Alsalem (C), relatora especial de la ONU sobre la Violencia contra las Mujeres y las Niñas, en una conferencia de prensa en la que analiza sus hallazgos sobre la prostitución. Imagen: Naureen Hossain / IPS
Naureen Hossain

NACIONES UNIDAS – Reem Alsalem, relatora especial de la ONU sobre la Violencia contra las Mujeres y las Niñas, califica la prostitución como un «sistema de violencia» que no beneficia en nada a la sociedad, especialmente a las mujeres y niñas forzadas a formar parte de este sistema.

Alsalem habló el miércoles 2  en la Roosevelt Public Policy House de Nueva York sobre su informe especial, en el que sostiene que la prostitución es una forma de violencia contra las mujeres y las niñas.

El informe se hizo público por primera vez en junio, donde se presentó al Consejo de Derechos Humanos en Ginebra. Más de 60 Estados miembros respaldaron el informe y sus conclusiones, entre ellos Ghana, Sudáfrica, Egipto, Noruega, Suecia, Colombia, Francia, Bangladés, India y Nigeria.

Alsalem recibió más de 300 contribuciones para el informe de múltiples partes interesadas, entre ellas grupos de la sociedad civil, académicos, expertos, responsables políticos y, lo que es más importante, mujeres de todo el mundo con experiencias vividas.

En todo el mundo, la explotación de mujeres y niñas mediante la prostitución y el tráfico sexual es un problema generalizado que amenaza su seguridad y sus derechos.

Alsalem señaló que muchos sistemas de prostitución se basan en normas patriarcales que sitúan el abuso de poder en manos principalmente de los hombres, que son en gran medida los «compradores» o los que se benefician del comercio sexual.

Las desigualdades económicas más profundas y las complejidades de las situaciones humanitarias de emergencia no han hecho sino desplazar aún más a las mujeres y las niñas de los sistemas que las habrían protegido y empoderado.

La relatora especial señaló que los esfuerzos por normalizar o reconocer la prostitución como una forma de trabajo, como referirse a ella como «trabajo sexual», hacen más daño al convertir en luz de gas a las mujeres que la han experimentado, y no tiene en cuenta las graves violaciones de derechos humanos que pueden ocurrir dentro del sistema, como el daño físico y psicológico que experimentan bajo este paraguas de «trabajo».

Según Alsalem, la pornografía también debería clasificarse como una forma de prostitución y violencia contra las mujeres en general.

Señaló que su proliferación no ha hecho más que normalizar los actos de violencia y las actitudes perjudiciales hacia las mujeres y las niñas.

Alsalem dijo a IPS que las plataformas en línea que alojan material pornográfico sólo incentivan y promueven aún más estos actos y otras formas de actos sexuales coercitivos y no consentidos.

Independientemente de la plataforma, de su marca o de cómo se entre en el comercio, el sistema de prostitución se basa en la mercantilización del cuerpo para someterlo a actividad física y bajo eso no puede haber consentimiento, argumenta Alsalem.

«Tratar de fingir que existe algún tipo de consentimiento en la prostitución, que las mujeres quieren hacerlo, en realidad no tiene sentido en un contexto como el de la prostitución, porque el concepto de consentimiento no es relevante cuando existen sistemas de explotación y violencia», afirmó.

Añadió que «cuando el término consentimiento se utiliza como arma, sabemos perfectamente que cualquier noción de acuerdo que puedan tener las mujeres -o al menos algunas de ellas- se obtiene mediante la coacción física, la manipulación y la violencia».

Cuando se trata de los marcos jurídicos en torno a la prostitución, también se ponen de manifiesto las contradicciones existentes en los países sobre la letra de la ley frente a su regulación en la práctica.

Puede leer aquí la versión en inglés de este artículo.

El informe de la relatora especial indica que, bajo ciertos enfoques, en realidad se hace poco para desincentivar a los «compradores» u «organizadores» a la hora de participar en sistemas de prostitución.

Criminalizar la prostitución tiene más probabilidades de castigar a las personas prostituidas mediante la persecución y el encarcelamiento, el ostracismo social e incluso nuevos abusos a manos de las fuerzas del orden.

De hecho, con este enfoque, es raro que se castigue a los «compradores» o que se responsabilice a terceros.

Bajo el enfoque de la regulación, la prostitución legal asegura el control al Estado a través de los establecimientos comerciales y las leyes federales o nacionales, incluidas las leyes fiscales de las que se benefician, a menudo a expensas de las trabajadoras del sexo.

La despenalización de la prostitución permite que todas las partes operen sin temor a ser perseguidas; sin embargo, esto también ha dado lugar a un aumento de la demanda, y no impide que las partes explotadoras se lucren a costa de mujeres y niñas vulnerables y las lleven al comercio sexual.

El informe se pronuncia a favor del enfoque de la abolición, también conocido como «modelo de igualdad» o «modelo nórdico».

Según este modelo, los terceros (los «organizadores») y los compradores son penalizados por participar en la compra y promoción del sexo, mientras que las trabajadoras del sexo no se enfrentan a persecución penal.

En cambio, se invierte más en vías de salida para las trabajadoras del sexo a fin de garantizarles un trabajo alternativo, estabilidad económica, vivienda y apoyo para abordar traumas e incluso el abuso de sustancias cuando sea necesario.

En el informe, Alsalem señala que el modelo nórdico mantiene la norma internacional sobre explotación sexual y trata de personas al penalizar a terceros, y que reconoce que la mayoría de los prostitutos son mujeres y niñas.

Sin embargo, este enfoque podría tener sus limitaciones, ya que otro informe de la Escuela de Economía de Londres (LSE, en inglés) señala que la legislación sobre comercio sexual sigue variando en los distintos países que aplican este modelo, la seguridad de las trabajadoras del sexo sigue siendo incierta y aún se enfrentan al riesgo de la vigilancia policial.

En el caso de las trabajadoras del sexo inmigrantes, su condición les impide acceder a las protecciones sociales y, según las leyes de inmigración, la prostitución puede ser motivo de deportación.

Los problemas presentes en los actuales modelos legales de prostitución reflejan algunas de las estructuras institucionales que mantienen el statu quo en el que las trabajadoras del sexo son explotadas y quedan desprotegidas. Al mismo tiempo, también reflejan una cuestión cultural más amplia sobre cómo se discute y se percibe la prostitución y, más ampliamente, el sexo.

«Además de ser una violación de los derechos humanos que necesita soluciones jurídicas, lo que se menciona muy claramente en el informe es que estamos ante una cuestión cultural», afirmó Taina Bien-Aimé, directora ejecutiva de la Coalición contra la Trata de Mujeres.

Añadió que otros actos de violencia contra la mujer, como la violencia en la pareja, la violencia sexual y el acoso, se reconocen ahora como formas de abuso.

«Pero, por alguna razón, como en la prostitución se intercambia dinero, de algún modo se considera fuera del contexto de la violencia y la discriminación masculinas, en particular contra las mujeres y las niñas», dijo.

En su informe, Alsalem ofrece recomendaciones a los gobiernos sobre cómo pueden reconfigurar su legislación y sus políticas sobre prostitución hacia una dirección que sea más consciente de los derechos humanos y que se centre en las experiencias de las mujeres y niñas que se ven obligadas a participar.

Los gobiernos también deben tomar medidas para abordar las causas profundas de la prostitución y los factores que hacen que las mujeres y las niñas corran un mayor riesgo de caer en ella.

«La importancia de este informe radica también en sus recomendaciones, en las que la relatora especial pide a las jurisdicciones y a los Estados miembros de todo el mundo que encuentren soluciones legislativas y políticas a esta atroz violación de los derechos humanos», afirmó Bien-Aimé.

Cuando se le pidió que explicara los pasos que deben dar actores internacionales como las Naciones Unidas, Alsalem se refirió a la recomendación de que las agencias de la ONU adopten también un enfoque de la prostitución basado en los derechos.

La relatora especial comentó que se había puesto en contacto con varias agencias de la ONU.

En concreto, está manteniendo «conversaciones continuas» con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), sobre su recomendación de que estos organismos realicen estudios sobre las repercusiones más amplias de la prostitución en los supervivientes, dentro de sus ámbitos de atención de la salud y el trabajo.

Las organizaciones no gubernamentales, como Frontline Women’s Fund, y los grupos locales de la sociedad civil desempeñan un papel importante en la denuncia de este problema.

Alsalem dijo a IPS que necesitan unirse para escuchar a las sobrevivientes de la prostitución, así como comprometerse con todos los actores que trabajan en el asunto.

«Vemos que en los lugares de toma de decisiones, incluidos los gobiernos, los parlamentos, siempre que se discute el tema, se prepara la ley o se revisa la política, algunos tienen acceso privilegiado a estos lugares de toma de decisiones, y esos pueden ser los que abogan por la plena legalización de todos los aspectos», afirmó.

Añadió que «mientras que los que abogan por el modelo de abolición… no pueden tener el mismo acceso, y eso incluye a las y los supervivientes».

T: MF / ED: EG

América Central avanza muy poco en frenar la trata de personas

 

Agentes policiales desarticularon una estructura delictiva dedicada a la trata de personas, en Guatemala, uno de los tres países que conforman el llamado Triángulo del Norte, junto El Salvador y Honduras, una región donde la presencia de pandillas agudiza aún más el delito de trata. Imagen: PNC Guatemala

SAN SALVADOR – América Central aún tiene mucho por hacer para atajar la trata de personas, dada la falta de compromiso de los Estados para investigar a cabalidad los casos, así como la corrupción en instituciones gubernamentales, que minan los esfuerzos de las sociedades en su conjunto para frenar el fenómeno.

A esa conclusión llegan analistas y reportes internacionales que monitorean los pocos avances que dan los Estados en esa materia, así como los grandes retos que aún deben superar.

La región centroamericana es propensa a este tipo de criminalidad, sobre todo por ser generadora y tránsito de migrantes irregulares en su ruta hacia los Estados Unidos. Esos migrantes, sobre todo mujeres, niños y niñas, están entre los grupos más vulnerables a ser víctima de las redes de trata.

“Trabajamos el tema de migración al tránsito y migrantes deportados, y en toda esta migración al tránsito se sabe que hay una red de trata internacional que está operando y por lo que se escucha no es fácil desarticularla”, explicó a IPS, desde la ciudad hondureña de San Pedro Sula, Mercedes Pérez, activista de la Comisión de Acción Social Menonita, que trabaja en la defensa de la población migrante en Honduras.

“No puede desprenderse lo que está a la base de estos delitos: la misoginia, la explotación del cuerpo de las mujeres, también como objeto de mercancía”: Vilma Vaquerano.

El llamado Triángulo del Norte de América Central, conformado por Guatemala, Honduras y El Salvador, han mostrado históricamente altos niveles de violencia y de actividades relacionadas con el crimen organizado, además de la fuerte presencia de pandillas, que se han dedicado también a la trata de personas.

Las Naciones Unidas define la trata de personas como «la captación, el transporte, el traslado, la acogida o la recepción de personas, recurriendo a la amenaza o al uso de la fuerza u otras fuerzas de coacción, al rapto, al fraude, al engaño, al abuso de poder o a una situación de vulnerabilidad o a la concesión o recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimiento de una persona que tenga autoridad sobre otra, con fines de explotación».

Pese a que las autoridades en El Salvador persiguieron estructuras criminales dedicadas a la trata de personas, en este país de América Central no se condenó a nadie por ese tipo de delitos, según un reporte del Departamento de Estado de los Estados Unidos. Imagen: PNC El Salvador

Explotación sexual a la cabeza

Eso incluye explotación sexual, trabajos o servicios forzados en condiciones infrahumanas y sin remuneración, la esclavitud o las prácticas análogas a la esclavitud, la servidumbre o la extracción de órganos.

En esa “compraventa de seres humanos”, como llama la ONU a la trata,  puede ser transfronteriza o en los límites internos de un país, a diferencia del delito del tráfico de personas  migrantes, que siempre es transnacional.

“Al final en la trata puede haber diferentes tipos de agresores pero siempre son estructuras que de alguna manera tienen conexión entre países o dentro de los países, es otro tipo de agente delincuencial que los Estados están enfrentando”, señaló a IPS Vilma Vaquerano, coordinadora del Observatorio de Violencia, de la Organización de Mujeres Salvadoreñas por la Paz (Ormusa).

Vaquerano acotó que las víctimas de trata son sobre todo niñas, adolescentes y mujeres jóvenes debido a que los delitos más comunes vinculados a la trata son la explotación sexual o explotación laboral.

“No puede desprenderse lo que está a la base de estos delitos: la misoginia, la explotación del cuerpo de las mujeres, también como objeto de mercancía”, apuntó Vaquerano.

La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito publicó en enero de 2023 el Reporte Global sobre Trata de Personas 2022, en el que señala que en América Central y el Caribe las mujeres representaron 25 % de las víctimas, las niñas 58 %, los niños 15 % y los hombres 2 %.

En esta región, la explotación sexual va a la cabeza de las formas de trata, con 71 %, seguido del trabajo forzado, con 21 %; otras formas de trata con otros fines, con 7 % y el tráfico de órganos, con 1 %, detalló el documento.

Agregó que mientras en América del Norte la gran mayoría de los tratantes de la trata procesados y condenados son hombres, en América Central las mujeres representan casi la mitad de las personas procesadas y condenadas por el delito.

Esto sigue el patrón general de una mayor detección de la participación de las mujeres en el negocio de la trata, afirmó el documento.

Honduras cuenta con una buena norma legal contra la trata, pero el gobierno del país
 no informó sobre ningún procesamiento o condena de funcionarios por supuesta 
complicidad en ese delito, en un país donde la corrupción y la complicidad oficial 
en esos delitos siguieron siendo motivo de preocupación, señala el informe de 
este año del Departamento de Estado. Imagen: OIM

Un paso para adelante, dos para atrás

En junio de 2024, el Departamento de Estado, de Estados Unidos, publicó su anual informe global sobre el fenómeno de la trata, y sobre las naciones del Triángulo del Norte señaló, en cada uno de los reportes por país, que no cumplen completamente con los estándares mínimos para la eliminación del problema, aunque también reconoció los avances dados.

Se calcula que en todo el mundo hay 27 millones de personas explotadas laboralmente, por servicios de diversa índole o para el comercio sexual, refirió el estudio.

Sobre Honduras, el informe destacó que entre los avances alcanzados está el enjuiciamiento de más presuntos tratantes, la identificación de más víctimas y el aumento del financiamiento otorgado a Comisión Interinstitucional para Combatir la Explotación Sexual Comercial y la Trata de Personas.

Sin embargo, agregó que el gobierno “incumplió los estándares mínimos en varias áreas clave”.

Como ejemplo, el reporte señaló que si bien las autoridades investigaron a más presuntos implicados en redes de trata y enjuiciaron a más tratantes, al final hubo menos condenas: 21, una disminución con respecto a las 36 personas condenadas en 2022.

Además, el gobierno no informó sobre ningún procesamiento o condena de funcionarios por supuesta complicidad en delitos de trata, en un país donde la corrupción y la complicidad oficial en esos delitos siguieron siendo motivo de preocupación, “lo que inhibió la acción de las fuerzas del orden durante el año”.

El reporte también dijo que los funcionarios de justicia penal carecían de conocimientos especializados sobre los delitos de trata y con frecuencia volvían a traumatizar a las víctimas durante los procedimientos penales.

Se han dado pasos positivos, “pero necesitamos avanzar más en las investigaciones, creo que tener una ley ya es bastante, pero tenemos el reto de ver que esa ley se cumpla”, apuntó Pérez, refiriéndose a Ley contra la Trata de Personas, en vigor en Honduras.

Ese país reportó 95 víctimas, incluidas 78 explotadas en la trata sexual y 17 en la trata laboral, según el informe del Departamento de Estado. Esto representó un aumento con respecto a las 53 víctimas identificadas en 2022.

En Honduras, los tratantes de personas explotan a víctimas nacionales y extranjeras en ese país, y también las explotan en el extranjero, acotó.

Además, explotan a mujeres y niños hondureños en la trata sexual dentro del país y en otros países como Belice, El Salvador, Guatemala, México, España y Estados Unidos, señaló el informe.

“Los traficantes se dirigen especialmente a hondureños LGBTI, migrantes y solicitantes de asilo, hondureños indígenas y afrodescendientes, desplazados internos, personas con discapacidad, niños en trabajo infantil, niños cuyos padres han migrado y personas que viven en zonas controladas por grupos delictivos organizados”, destacó el estudio.

En el caso de Guatemala, las autoridades identificaron a 611 víctimas en los últimos nueve meses de 2023, afirmó el informe. Se trató de 104 adultos y 507 niños, lo cual significó un aumento con respecto a las 318 víctimas localizadas en 2022.

El Salvador, por su parte, identificó a 40 víctimas: 27 explotadas en trata sexual, cuatro en trata laboral y nueve en formas no especificadas.

Sobre este país, el Departamento de Estado señaló como positivo que el gobierno inició más investigaciones, asistió a más víctimas y aumentó la capacitación a los funcionarios de primera línea en la identificación y referencia proactiva de víctimas.

También mejoró el acceso a la justicia para las víctimas de trata que se encuentran fuera de la capital al ampliar el mandato de sus Unidades Especializadas de Atención a Mujeres, Niños y Adolescentes.

No obstante, a diferencia del año pasado, los tribunales no condenaron a ningún traficante.

Además, el gobierno arrestó y detuvo a miles de presuntos miembros de pandillas bajo cargos de asociaciones ilícitas, desmantelando redes criminales que alimentaban la trata sexual y laboral, sin embargo, “las autoridades arrestaron y detuvieron a niños afiliados a pandillas sin evaluar posibles indicadores de trata”, refirió el reporte.

En efecto, desde marzo de 2022, el gobierno de Nayib Bukele inició una política de mano dura contra las pandillas salvadoreñas con apoyo de un prolongado régimen de excepción, que si bien logró desarticularlas y ahora las personas respiran un ambiente de mayor seguridad, también se han cometido graves violaciones a los derechos humanos.

Empero, el desbaratamiento de las pandillas, parte activa en la trata de personas, ha aliviado el fenómeno, algo que no pudiera estar sucediendo en Guatemala y Honduras, donde esos grupos delictivos mantienen su presencia.

“Sí, de alguna manera hay una disminución de estos delitos”, debido a la desarticulación de las pandillas, sostuvo Vaquerano, de Ormusa, “pero no se debe de perder de vista que no solamente las pandillas estaban detrás de estos delitos, sino que hay otros agresores”.

Sobre Guatemala, el Departamento de Estado también mencionó algunos pasos positivos dados por las autoridades, pero cuestionó el caso de un oficial condenado que recibió la opción de pagar una multa en lugar de prisión.

Además, los tribunales condenaron a menos traficantes y el gobierno no asignó fondos suficientes para la aplicación de la ley contra la trata o los servicios para las víctimas fuera de la capital. También las víctimas adultas tenían pocas opciones de refugio, entre otros señalamientos.

El reporte sostuvo que la corrupción y la complicidad oficial en los delitos de trata de personas siguieron siendo un motivo de preocupación importante, lo que inhibió la actuación de las fuerzas del orden durante el año.

Este problema, añadió, fue especialmente agudo en las zonas fronterizas donde la presencia del gobierno y el estado de derecho eran débiles.

Niñas y mujeres violadas durante la infancia suman 375 millones

 

En los entornos frágiles, como los de gran número de personas desplazadas por inseguridad y conflictos, aumentan las probabilidades de violencia sexual contra niñas y mujeres, especialmenmte sobre las adolescentes. Las regiones con mayor número de casos son África subsahariana y el sur, sureste y oriente de Asia. Imagen: Bidel / Unicef

NACIONES UNIDAS – Cerca de 375 millones de niñas y mujeres vivas en la actualidad –una de cada ocho– han sufrido violaciones o abusos sexuales antes de los 18 años, estimó en un informe divulgado este jueves 10 el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).

“La violencia sexual contra la infancia es una mancha en nuestra conciencia moral. Inflige traumas profundos y duraderos, a menudo causados por personas que los niños y las niñas conocen y en quienes confían, y en lugares donde deberían sentirse seguros”, afirmó la directora ejecutiva de Unicef, Catherine Russell.

Unicef publica sus estimados en vísperas del Día Internacional de la Niña -11 de octubre- para “dar una idea del alcance mundial de estas prácticas nocivas, especialmente entre las adolescentes, así como de sus implicaciones a lo largo de toda la vida”, indicó la entidad.

“La violencia sexual contra la infancia es una mancha en nuestra conciencia moral. Inflige traumas profundos y duraderos, a menudo causados por personas que los niños y las niñas conocen y en quienes confían, y en lugares donde deberían sentirse seguros”: Catherine Russell.

La cifra de 375 millones ya es enorme, y si en los cálculos se incluyen formas de violencia sexual sin contacto físico, como el abuso verbal o en línea, el estimado de niñas y mujeres afectadas en todo el mundo se eleva hasta los 650 millones, una de cada cinco.

Se trata de “un hecho que subraya la urgente necesidad de adoptar estrategias integrales de prevención y apoyo para hacer frente de forma eficaz a toda forma de violencia y abuso”, destacó el informe.

Según sus datos, la violencia sexual contra la infancia está muy extendida y traspasa las fronteras geográficas, culturales y económicas.

El mayor número de víctimas se registra en África subsahariana, con 79 millones de niñas y mujeres afectadas (21 %). Le siguen Asia oriental y sudoriental, con 75 millones (20 %) y Asia central y meridional, con 73 millones (19,4 %).

Luego, Europa y América del Norte con 68 millones (18,1 %), América Latina y el Caribe con 45 millones (12 %), Norte de África y Asia occidental con 29 millones (7,7 %) y Oceanía con seis millones de víctimas (1,6 %).

En entornos frágiles –como los de instituciones débiles, fuerzas de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas o un gran número de refugiados desplazados por crisis políticas o de seguridad–, las niñas corren un riesgo aún mayor.

La incidencia de las violaciones y los abusos sexuales durante la infancia en esos peligrosos entornos se sitúa ligeramente por encima de uno de cada cuatro casos.

“Los niños y las niñas de entornos frágiles son especialmente vulnerables a la violencia sexual”, dijo Russell, y agregó que “estamos asistiendo a horribles actos de violencia sexual en zonas de conflicto, donde la violación y la violencia de género se utilizan a menudo como armas de guerra”.

El reporte indica que la mayoría de los casos de violencia sexual en la infancia se producen durante la adolescencia, con un repunte significativo entre los 14 y los 17 años.

Los estudios muestran además que los niños y niñas que sufren violencia sexual son más proclives a padecer abusos repetidos. En ese sentido, la implementación de intervenciones específicas durante la adolescencia es crucial para romper ese círculo y mitigar las consecuencias a largo plazo de los traumas.

Las supervivientes suelen arrastrar el trauma del abuso sexual hasta la edad adulta y corren un mayor riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual o de caer en el abuso de sustancias, el aislamiento social o trastornos mentales como la ansiedad y la depresión, además de encontrar dificultades para forjar relaciones sanas.

Los datos muestran también que las consecuencias se agravan cuando los niños y las niñas retrasan el momento de revelar sus experiencias de abuso sexual, a veces durante largos períodos, o simplemente mantienen el abuso en secreto.

Aunque las niñas y las mujeres son las más afectadas y sus experiencias están mejor documentadas, los datos muestran que los niños varones y los hombres también son víctimas de abusos.

Se calcula que entre 240 y 310 millones de niños y hombres –aproximadamente uno de cada 11– han sufrido violaciones o abusos sexuales durante la infancia. El estimado se eleva a entre 410 y 530 millones si se incluyen formas de abuso sin contacto físico.

La persistencia en la falta de datos, especialmente sobre la experiencia de los niños varones y las formas de violencia sexual sin contacto físico, muestra la necesidad de aumentar la inversión en la recopilación de datos para poder evaluar la dimensión exacta de la violencia sexual ejercida contra la infancia, indicó el reporte.

Unicef saludó que dirigentes gubernamentales y de la sociedad civil –incluidos activistas, supervivientes y jóvenes– preparan la Primera Conferencia Ministerial Mundial para Poner Fin a la Violencia contra Niños, Niñas y Adolescentes, que se celebrará en Colombia el mes próximo.

Presentó su informe como aporte para intensificar el combate mundial a la violencia sexual contra la infancia y construir un futuro más seguro para los niños y las niñas.

Entre las medidas que recomienda figura en primer lugar cuestionar y cambiar las normas sociales y culturales que permiten que se produzca la violencia sexual y disuaden a los niños y las niñas de pedir ayuda.

Luego, dotar a todos los niños y niñas de información precisa, accesible y adecuada a su edad, que los capacite para reconocer y denunciar la violencia sexual.

Asimismo, garantizar que todos los niños y niñas víctimas y supervivientes de la violencia sexual tengan acceso a servicios que promuevan la justicia y la sanación, y reduzcan el riesgo de mayores daños.

Propone reforzar las disposiciones legales destinadas a proteger a los niños y las niñas de todas las formas de violencia sexual (en particular, en las organizaciones que trabajan con la infancia), e invertir en las personas, los recursos y los sistemas necesarios para aplicarlas.

Finalmente, plantea establecer mejores sistemas nacionales de datos para supervisar los avances, y garantizar la rendición de cuentas bajo normas como la Clasificación Internacional de la Violencia contra la Niñez.

A-E/HM

El silencio atronador de las mujeres afganas

 Por Dorothy Estrada Tanck 

Fuentes: The Conversation

Los derechos humanos de las mujeres y de las niñas en Afganistán han estado bajo constante y cruel asedio por el Gobierno de facto de los talibanes. En semanas recientes, sin embargo, las restricciones han tomado proporciones insólitas: la Ley para la Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio, expedida en agosto de 2024 –la ley de moralidad–, prohíbe a las mujeres hablar en público por considerar que la voz femenina solo debe expresarse en un entorno íntimo, e incluso les impide cantar públicamente.

Cuando se lee esta noticia en la prensa, la primera impresión es que podría tratarse de una noticia falsa por lo absurdo y extremo que resulta pensar en vetar una expresión tan normal y propia de la esencia y dignidad humana, además de un derecho fundamental. Tristemente, es real. Esta ley es un componente más de un modelo de sociedad basado en medidas de deshumanización progresiva de las mujeres y las niñas.

Si bien anteriormente el Gobierno de facto en Afganistán ya había intentado borrar y silenciar a las mujeres en los espacios públicos, ahora presenciamos un silenciamiento literal y ya no sólo metafórico.

Normas rígidas también para los hombres y las minorías

La ley de moralidad del Emirato Islámico de Afganistán ordena a las mujeres “cubrirse totalmente el cuerpo y el rostro y no hablar ni cantar en voz alta de un modo en que las puedan oír personas ajenas a su familia”. Cabe hacer notar que los hombres y los niños están sujetos también a normas rígidas de vestimenta por las que deben cubrirse “del ombligo a las rodillas”.

La ley criminaliza y persigue a las personas LGBTQ+ y restringe los derechos de las minorías religiosas, entre otras medidas, prohibiendo las ceremonias no islámicas y prohibiendo también asociarse con no creyentes, afectando con ello no sólo a las mujeres y las niñas –la mitad de la población–, sino también a las minorías étnicas y religiosas no musulmanas.

Se ha enfatizado por personas estudiosas de la Sharia, incluyendo organizaciones feministas musulmanas, que este tipo de perspectivas son una interpretación errónea del islam y que no representan auténticamente la doctrina religiosa musulmana.

La ley de moralidad –condenada por activistas, medios de comunicación, mecanismos independientes de derechos humanos de la ONU y distintos órganos de Naciones Unidas, incluyendo el Consejo de Seguridad, con la notable ausencia de China, Argelia y Rusia– también incluye poderes discrecionales de aplicar castigos severos por su incumplimiento, acrecentando aún más un clima social de miedo e incertidumbre.

Si bien la indignación sobre la situación de las mujeres y niñas en Afganistán es crucial, es también esencial entenderla no como un hecho aislado de un solo país, sino como una situación sintomática –ciertamente de las más graves– de los retrocesos y los ataques a la igualdad de género a nivel global.

Siendo así, Afganistán es una prueba para la comunidad internacional, sus valores fundacionales y sus líneas rojas: la reacción a esta realidad indicará el camino frente a (potenciales) actos de opresión de género en otras partes del mundo. Evocando a Martin Luther King, “recordaremos no las palabras de nuestros enemigos, sino los silencios de nuestros amigos”.

Resulta notable y conmovedor ser testigos de las respuestas de las mujeres afganas que, cubiertas completamente de cuerpo y cara, se han grabado en vídeos circulados en redes sociales, cantando a manera de desafiar el régimen de dominación. La lucha por la igualdad y justicia de género ha sido apoyada por distintas figuras públicas, entre ellas Malala Yousafzai, Premio Nobel de la Paz 2014, ella misma sobreviviente de un disparo en la cabeza a los 14 años por parte de fundamentalistas talibanes a raíz de su defensa del derecho a la educación de las niñas.

Persecución de género

La realidad de las mujeres y niñas afganas puede caracterizarse como persecución de género, un crimen contra la humanidad perseguible por la Corte Penal Internacional. Se ha sugerido que la discriminación, segregación y subyugación institucionalizada y sistemática que ellas viven reviste también la condición de apartheid de género y que debe reconocerse así explícitamente por el derecho internacional.

A tres años vista de la toma del poder en Afganistán por los talibanes, resulta decisivo seguir apoyando la lucha de las mujeres afganas y solidarizarnos con sus movimientos. Esto puede hacerse de maneras concretas como la financiación a las organizaciones lideradas por mujeres, la difusión de sus propuestas, el reconocimiento por terceros países del estatuto jurídico de refugiadas a quienes huyen y la ayuda para amplificar sus voces y su esperanza, aún viva, de que otro Afganistán, y otro mundo, son posibles.

Dorothy Estrada Tanck. Profesora Contratada Doctora de Derecho Internacional Público, Facultad de Derecho, Universidad de Murcia

Fuente: https://theconversation.com/el-silencio-atronador-de-las-mujeres-afganas-239369