Encuesta de Salud y Derechos aplicada en 7 entidades del país
Mujeres indígenas de entre 15 y 59 años ha sufrido violencia
Por Anayeli García Martínez
México, D.F., 25 mar 10 (CIMAC).- La violencia contra las mujeres indígenas de siete entidades del país, se acentúa entre las que tienen entre 15 y 59 años de edad, reveló la Encuesta de Salud y Derechos de las Mujeres Indígenas (ENSADEMI 2008), aplicada entre 2006 y 2007, a 295 mil 194 mujeres.
Esta encuesta, primera en su tipo, ofrece un panorama del fenómeno de la violencia contra las mujeres usuarias de los servicios de salud públicos de la Secretaría de Salud (SS) y del programa IMSS-Oportunidades y revela que cerca del 26 por ciento de las entrevistadas fueron víctimas de violencia en su relación de pareja.
Las mujeres originarias de Chiapas, Oaxaca, San Luis Potosí, Querétaro, Oaxaca, Veracruz y Yucatán, señalaron haber sufrido algún tipo de violencia: psicológica, de negligencia, física, económica o sexual de parte de su pareja en los últimos 12 meses al momento de ser entrevistadas: entre septiembre de 2006 y marzo de 2007.
CHIAPAS: ALTOS ÍNDICES DE VIOLENCIA
De estos datos resalta que los Altos de Chiapas, -una de las cuatro entidades más pobres del país – con altos índices de rezago social y de pobreza, reporta una mayor concentración de población joven, el 72.73 por ciento tiene menos de 40 años, sin embrago, también es la región donde se registran los índices más altos de violencia.
El 34 por ciento de las chiapanecas reportó golpes y/o humillaciones en la infancia, mientras que cerca de 2 de cada 5 señalaron que sufrieron maltrato infantil. Este patrón fue similar en la relación de pareja, 25.5 por ciento de las chiapanecas afirmaron haber sido victimas de algún tipo de violencia de pareja.
En la región de la Costa y Sierra Sur sólo se registró un 16 por ciento de prevalencia de violencia contra las mujeres. Respecto de la severidad de la violencia de pareja, en total 15.5 por ciento de las encuestadas reportaron violencia “no severa”, mientras que 10.06 por ciento dijo que fue “severa”.
Como violencia no severa se consideraron las heridas, intimidaciones, humillaciones verbales, amenazas o en que el marido impidiera a la mujer atenderse médicamente cuando ella lo necesitó. La severa se refirió a la violencia con arma de fuego o punzo cortante, o bien, forzar a la mujer a mantener una relación sexual.
La prevalencia para cada uno de los tipos de violencia de pareja arrojaron que es más persistente la violencia psicológica: 21.09 por ciento de mujeres la reportaron. Por otra parte 9.83 por ciento fue física, 10.06 por ciento económica, 6.12 por ciento de negligencia y 6.75 por ciento sexual.
VIOLENCIA EN LA INFANCIA
En la encuesta se incluyen diferentes formas de violencia; durante la infancia, etapa formativa y desarrollo físico, y la vida adulta, cuando se concentra el desarrollo. En total, 34 por ciento de las entrevistadas reportó golpes y/o humillaciones en la infancia.
Destaca que en 48.5 por ciento de los casos de golpes y/o humillaciones, el padre aparece como el agresor principal, seguido de la madre con 45.2 por ciento. En menor proporción se menciona a otro familiar o persona ajena, abuelos, padrastro y madrastra.
El tipo de agresores que reportan las mujeres golpeadas en la infancia son similares: el padre y la madre en una mayor proporción; y luego siguen otro familiar, otro no familiar, madrastra, padrastro y abuelos.
Las consecuencias físicas producto del maltrato en la infancia fueron diversas, desde cortaduras que necesitaron curación, con un 9 por ciento; desmayos o pérdida de la conciencia, con un 7 por ciento; fracturas, con un 6 por ciento; hasta quemaduras, con un 4 por ciento.
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