Cléo Fatoorehchi entrevista a JOAN WINSHIP, de la Asociación Internacional de Mujeres Juezas
Cortesía de IAWJ. Crédito: Joan Winship | |
Esta organización sin fines de lucro fundada hace dos décadas y con más de 4.000 miembros en 90 países ha diseñado e implementado numerosos programas para potenciar el papel de las mujeres y, a través de ellas, fortalecer las sociedades en las que viven.
Con casi 10 años al timón de la IAWJ, Winship tiene una distinguida carrera en los campos de derechos humanos, imperio de la ley y asuntos internacionales. Esta jurista habló con IPS sobre los prejuicios de género en los tribunales y sobre la nueva agencia de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) dedicada a los problemas de las mujeres.
IPS: ¿Cuál es la importancia del elemento judicial en la situación de las mujeres?
JOAN WINSHIP: Se puede contar con movimientos de base, así como con legislaciones en temas de violencia y discriminación contra las mujeres, pero una vez que esas leyes han sido aprobadas no van a ser efectivas ni van a tener impacto a menos que sean implementadas. Y por eso en última instancia son los tribunales los que aseguran que se apliquen las leyes y que las mujeres obtengan justicia en la sociedad.
IPS: ¿Qué éxitos ha visto en los derechos de las mujeres desde la creación de la IAWJ?
JW: A lo largo de los 20 años de nuestra existencia, hemos concentrado gran parte de nuestro trabajo en la creación de más oportunidades de acceso a la justicia para las mujeres.
A través de nuestras integrantes y de las asociaciones que ellas forman dentro de sus respectivos países, hacemos capacitación con magistrados hombres y mujeres para garantizar que tomen decisiones de acuerdo con las convenciones internacionales sobre derechos humanos, la CEDAW (Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra las Mujeres) e instrumentos regionales como la Carta Africana y otros acuerdos similares.
Lo que tratamos de hacer es no sólo capacitar sino también llevar a cabo un seguimiento reuniendo información sobre fallos en que los magistrados aplican las herramientas legales internacionales en materia de derechos humanos, tomando decisiones que protejan a las mujeres en casos de herencias, derechos de propiedad, divorcios y custodias de hijos.
El otro rol que tienen las juezas es identificar las brechas en los sistemas legales y judiciales. Muchos de nuestros miembros presionan para que se aprueben leyes contra la violencia doméstica, para que esos delitos sean castigados a nivel federal, para que se creen tribunales juveniles o de familia donde no los hay. Así que hemos visto un considerable progreso, aunque todavía hay mucho por hacer.
IPS: ¿Podría darnos un ejemplo de su trabajo?
JW: La IAWJ está por completar un programa en sociedad con la Asociación Tanzana de Mujeres Juezas y con el grupo de base Sociedad para las Mujeres y Sida en África. Este proyecto se llama Jurisprudencia en el Terreno.
Todo surgió en una presentación que hizo la IAWJ en un panel durante una reunión de la Comisión sobre el Estatus de las Mujeres en 2007, en el que hablábamos sobre cómo las juezas identificaban vínculos entre el sida (síndrome de inmunodeficiencia adquirida) y temas como la discriminación y la violencia contra las mujeres.
El proyecto reunió a las juezas y líderes comunitarias de Tanzania. Juntas crearon una discusión en la que las líderes comunitarias comprendieron mejor sus derechos y recibieron información clave, como por ejemplo cómo presentar una demanda, por qué una mujer debe escribir un testamento y temas similares.
A cambio, las mujeres de las comunidades compartieron con las juezas lo que veían cómo obstáculos y barreras cuando se presentan ante un tribunal. Juntas acordaron qué tipo de capacitación necesitan las mujeres para entender estos temas. Las juezas desarrollaron e implementaron este programa de capacitación.
IPS: ¿Usted cree que la creación de ONU Mujeres es un paso positivo?
JS: Hemos trabajado y recibido financiamiento del Fondo Fiduciario de la ONU para Eliminar la Violencia contra la Mujer, y hemos participado en la Comisión y otras reuniones, así que hemos sido activas en diferentes entidades que ahora se unen para formar ONU Mujeres.
Creemos que contar con una sola entidad es un paso muy positivo, en vez de tener los roles y las responsabilidades divididas en diferentes partes del foro mundial. ONU Mujeres sin duda va a hacer más efectivos los programas en todo el sistema de Naciones Unidas.
IPS: ¿Cómo definiría usted la efectividad de la Comisión?
JW: Cada año, la Comisión pone en el tapete temas que no estarían allí de otra manera. Sin duda tanto el papel de los gobiernos como de las organizaciones no gubernamentales son clave para mantener los asuntos de género al tope de la agenda de la ONU. Siempre está la esperanza de que la Comisión logre un mayor impacto en programas y temas que la ONU afronta y no han sido aún respondidos.