Entrega de la riqueza nacional
Carecen de reglas y normas enfocadas a combatir la corrupción, señala la comisión de vigilancia
Se requiere riguroso control tributario para maximizar los recursos que capte el Estado
Roberto Garduño
Periódico La Jornada
Domingo 15 de junio de 2014, p. 4
La legislación secundaria de la reforma energética carece
de reglas y normas enfocadas a combatir la corrupción, permite alta discrecionalidad de la elite burocrática que se encargará de aplicar los cambios y pone en riesgo la renta petrolera.
En un análisis elaborado por la Comisión de Vigilancia de la Cámara
de Diputados sobre la legislación que debatirá el Congreso en la
materia, se advierte que la propuesta no atiende la necesidad de
impulsar la transparencia en el terreno energético.
De las nueve leyes propuestas, sólo en cinco se definen apartados de
fiscalización, y en cuatro (industria eléctrica, energía geotérmica,
órganos reguladores en materia energética y agencia nacional de
seguridad industrial) no se contemplan apartados que combatan la
opacidad.
El organismo legislativo advierte que para maximizar la renta
petrolera debe haber riguroso control del sistema tributario aplicable
a los contratistas privados y a las empresas que participen en el
terreno energético. Con esto se pretende evaluar con estándares
internacionales y mediante auditores especializados si el régimen
fiscal propuesto en la reforma impulsa la renta petrolera,
como lo hace el de países como Noruega. Si derivado de esta evaluación se concluye que no es óptimo, se deberán hacer los cambios legislativos para que el Estado cobre la renta petrolera máxima.
La comisión encabezada por el perredista José Luis Muñoz también
considera necesario –mediante revisiones periódicas– valorar la
efectividad de cobro del gobierno, derivado del régimen fiscal y
tributario que el Congreso apruebe. La Auditoría Superior de la
Federación participaría elaborando estudios sobre las nuevas tendencias
internacionales que se desarrollen para tal propósito y evaluaría el
desempeño de los funcionarios y servidores públicos de la Secretaría de
Energía y de la Comisión Nacional de Hidrocarburos.
Asimismo,
el análisis refiere que el Fondo Mexicano del Petróleo para la
Estabilización y Desarrollo es un elemento central de la reforma
energética, el cual pretende reproducir el de Noruega.
El propósito de lo anterior es invertir a largo plazo la totalidad
del excedente generado por el sector petrolero de aquel país, derivado
de impuestos y cobranza de derechos a las empresas del sector. No
obstante, el Fondo Mexicano del Petróleo, advierte la Comisión de
Vigilancia,
no tiene como prioridad el ahorro de largo plazo y se circunscribe a ser una supertesorería de recepción de ingresos y pago de compromisos con las empresas privadas y las trasnacionales petroleras que celebren contratos con el gobierno.
En el caso de la ley de hidrocarburos –en el terreno de la
transparencia– no se señala un plazo límite para que la información
–producto de los contratos con empresas privadas– sea puesta a
disposición del público en general.
La comisión legislativa señala que la ley sólo define “que la
información será separada por meses, sin especificar la fecha en que
deberá ser proporcionada, lo que puede generar una laguna importante.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario