En junio de 2016, el Gobierno de Colombia firmó el primer acuerdo
histórico de cese al fuego con el grupo insurgente de las FARC. Aunque
este primer acuerdo de paz fue rechazado en un referéndum, un segundo
fue ratificado por el Congreso colombiano en noviembre del mismo año,
poniendo fin a 52 años de conflicto armado. Las mujeres constructoras de
paz desempeñaron un papel fundamental en el logro de un consenso y en
la toma de conciencia de las necesidades y vulnerabilidades de las
mujeres y las niñas a lo largo de todo el proceso.
Feminismo en tiempos de guerra y paz, un documental
producido por ONU Mujeres, cuenta la historia del revolucionario trabajo
de las mujeres colombianas que condujo al país a la paz definitiva. La
película recoge las historias personales de las integrantes del Grupo
Asesor de la Sociedad Civil (GASC) de ONU Mujeres Colombia, y su visión
sobre el proceso de paz, explorando sus vidas como mujeres y defensoras
de la igualdad de género.
“Nosotras, las mujeres de Colombia, hicimos nuestra la causa para
conseguir varias cosas, una de ellas asegurar que la redacción y las
definiciones del acuerdo de paz incluyeran a hombres y mujeres “, dice
Janneth Lozano, ex coordinadora de la Red de Educación Popular entre
Mujeres de América Latina y el Caribe (REPEM). “El acuerdo reconoce el
impacto de la guerra en las vidas de las mujeres; reconoce que hemos
sido víctimas de una exclusión sistemática, y que se nos ha negado el
derecho a la participación política, que hemos sido víctimas de los
peores actos de violencia, de la pobreza más profunda y del poco acceso a
la propiedad de la tierra “.
“El acuerdo de paz establece claramente que” la violencia sexual no
es amnistiable”, dice Gloria Gil, de la Red Nacional de Mujeres. “Esa
declaración es una garantía para las mujeres que fueron víctimas de
violaciones y otros actos de violencia durante el conflicto. Ahora las
mujeres reclaman su derecho a la verdad. ‘¿Por qué fueron violadas, por
qué fueron asesinados sus maridos … ¿cuál fue la causa?’ Y en algunos
casos, para saber también dónde están los cuerpos de sus seres queridos.
Esta es la verdad que buscan”.
Los esfuerzos de promoción de las mujeres constructoras de paz dieron
como resultado el establecimiento de una subcomisión dedicada al
género, una institución que continuó para asegurar que las perspectivas
de género y los derechos de las mujeres estuvieran incluidos en todos
los acuerdos.
“El papel de las mujeres en el logro de la paz es muy importante”,
dice Magda Alberto, joven feminista y defensora de los derechos de las
mujeres. “Hemos sido actores clave porque siempre hemos reconocido la
importancia de sentarnos juntos para hablar sobre la paz a pesar de
nuestras diferencias”.
Los Grupos Asesores de la Sociedad Civil de ONU Mujeres incluyen
destacadas defensoras de la igualdad de género y los derechos de las
mujeres en países de todo el mundo. ONU Mujeres trabaja para ampliar el
diálogo y la colaboración con estas lideresas y aliadas de primera
línea, para alcanzar la igualdad de género.
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