11/03/2018

Un grito cargado de futuro

Violencia de Género & Sociedad


Sobre los efectos de la violencia de género en la vida cotidiana de las mujeres y en la sociedad.
Y la niña preguntaba ¿por qué mi mamá siente tanto miedo cuando sale a la calle? a lo que ellos respondierían con una verdad a medias: por ser mujer. Ella, al igual que muchas mujeres cargamos con el estigma de haber nacido en un sistema que sutilmente nos enseña a odiar la condición de mujeres, antes que soportar con resignación el paradigma que nos oprime.

El sistema capitalista y patriarcal por antonomasia, ha entrenado bien el pensamiento, a tal magnitud que cualquier argumento misógino y retrógrada resulta lógico para muchas personas, lo cual es sumamente grave. Nuestra capacidad de discernir entre la maldad y bondad de nuestras acciones se ha visto relativizada en medio de la masa informativa que impide condenar la violencia de género en todas sus dimensiones.

¿Acaso asesinar, violar, golpear, acosar, difamar, amedrentar, hostigar o intimidar no son actos malos? Nadie va por la vida clamando que lo asesinen, lo violen o vulneren su dignidad. No son actos deontológicamente deseables. Además de buscar los puntos de encuentro entre las distintas posturas feministas para conciliar y fortalecer un movimiento que lleva décadas luchando por los derechos de las mujeres en todo el mundo y por la equidad entre ambos géneros, es urgente una llamada de atención y una llamada a la acción ante la violencia sexista más evidente, pero también, ante aquellas formas de violencia sexista normalizadas y de baja intensidad. En México ésta se torna una medida acuciante.

Gran parte de la violencia que se ejerce sobre las mujeres permanece invisibilizada, y tal parece que mientras se configura a cuentagotas una sociedad que tolera las desigualdades de género y alimenta la misóginia, hay quienes se mantienen a la expectativa. Alguien dijo que a “palabras necias, oídos sordos”. Sin embargo las reacciones sociales que se suscitan ante estas agresiones y actos delictivos en contra de las mujeres contienen una carga de necedad que resulta enormemente ofensiva para la condición humana. Y ante esto no podemos callar, ni continuar impasibles. Ya no. -Una mujer sale a correr como cada mañana. Un hombre la acosa y ella, guiada por el instinto de conservación y la rabia corre tras él enfurecida.

En el camino encuentran a una patrulla y consiguen localizarlo. El hombre es detenido y ella oscila el resto del día de una a otra comandancia. Al final, debido a su templanza emocional, las “autoridades” consideran que no parece tan afectada como debería. Bajo tal argumento el agresor sale en libertad y su caso no procede.

-Una periodista denuncia acoso sexual y es insultada y amenazada por la red. Cansada de que las autoridades tampoco intervengan en su caso, se ve forzada a abandonar el país.

-Una joven denuncia cómo un cerdo depravado (tengo que usar esos epítetos, porque no hay otros) eyacula encima suyo en el metro de la Ciudad de México. La chica comparte su desconcierto por la agresión en internet y a cambio recibe insultos porque “se lo merecía, por provocadora”.

-Una mujer de 60 años es condenada a 25 años de prisión por herir a su pareja en defensa propia, quien falleció a causa de la lesión. El ministerio público no consideró como atenuante la defensa propia, ni la violencia sistemática a la que estuvo sometida a manos de su agresor, quien era adicto a las drogas.

-Grupos de “juniors” agreden a jovencitas, abusan sexualmente de ellas, alardean de los abusos en las redes sociales, operan con total impunidad y siguen libres ante las pruebas fehacientes de su conducta delictiva y sistemática, simplemente por ser hijos de “gente influyente”.Internet arroja estas historias día tras día. Más terribles aún son las historias de feminicidios que llenarían infinidad de páginas con tinta de humo.

Eso no basta para interiorizar la magnitud del problema pues en cualquier momento, las víctimas podríamos ser nosotras, nuestras compañeras, nuestras hijas, nuestras madres, nuestras esposas, nuestras hermanas. La ley nos ampara, pero no quienes la hacen efectiva, en su mayoría varones.

La sociedad se indigna, pero no repele tales agresiones y en la mayoría de las ocasiones criminaliza a las víctimas después de juzgarlas con su dedo moralizante. Las familias se sorprenden y atemorizan, pero continúan delegando los estereotipados roles de género en la crianza de hijas e hijos, instruyéndolas a ellas para ser madres y a los otros para no llorar. Los medios de comunicación, como extensiones de un sistema opresor, construyen un imaginario en el que las mujeres continúan siendo objetos de intercambio y reproducen un lenguaje con una fuerte carga sexista y androcentrista.

Las escuelas se alarman ante la amenaza real de que sus alumnas sean objeto de una agresión sexual, sin embargo, no rompen con los esquemas educativos en pro de la equidad de género, los derechos humanos, el respeto y la reciprocidad, e igualmente reproducen el mismo discurso patriarcal que neutraliza e invisibiliza esta problemática. ¿No son éstas razones suficientes para movilizarnos? ¿En qué momento se rompió el eslabón de la cadena o se insertó un eslabón equivocado?¿Cómo hemos llegado a esta situación? La pregunta es retórica, sin embargo la explicación puede ser muy sencilla.

La violencia de género es estructural y se basa en relaciones de dominación, y aunque socialmente hemos alcanzado a reconocer la necesidad de un cambio, no se ha dimensionado la urgencia para frenar esa violencia. No se persiguen ideales opuestos, sino un imaginario social en el que la igualdad y la equidad sean transversales. La educación es fundamental, pero también las políticas públicas, las garantías en el ejercicio de las leyes, la empatía y las redes de solidaridad.

Nunca deberíamos responder que nos provoca miedo nuestra condición de género, mucho menos, despreciarnos o avergonzarnos por haber nacido mujeres. Debemos frenar el acoso y la violencia, con nuestras voces, con nuestro grito cargado de futuro.


Racismo, sí... y machismo

Miguel Lorente Acosta


El episodio ocurrido en un vuelo de Ryanair ha dado la vuelta al mundo varias veces a una velocidad que ni siquiera la luz puede igualar en su huida de la oscuridad. Y al igual que sucede con el paso de la luz, tras su presencia pasajera queda un resplandor que a veces sirve para mostrar la realidad y otras para ocultar parte de ella.
Es lo que ha ocurrido con este episodio, como sucedió con las palabras del líder del PP, Pablo Casado, sobre el día de la Hispanidad, en las que todo el mundo vio “nacionalismo”, pero muy pocas personas vieron el machismo que contenían.
El machismo vuela a ras de suelo, aunque lo haga en avión y el vuelo sea de bajo costo, y va tan rápido que no siempre se logra identificar. Nadie duda de que las palabras de David Mesher, “pasajero blanco” del vuelo de Ryanair Barcelona-Londres, iban cargadas de racismo, pero de nuevo pocas personas han visto en las palabras de David Mesher, “pasajero hombre” del vuelo Ryanair Barcelona-Londres, machismo. Los insultos que profirió contra la pasajera Delsey Gayle iban llenos de racismo, como, por ejemplo, cuando la llama “horrible negra bastarda”, pero antes y después de cada una de las referencias al color de su piel, sus palabras iban dirigidas contra su condición de mujer, atacando aquello que el machismo utiliza para dar reconocimiento a las mujeres a través de su cosificación, concretamente la estética de las mujeres y el “interés sexual” que puedan “despertar” en un hombre, aunque sea en un encuentro fortuito y temporal. De ahí que en sus ataques David Mesher utilizó contra ella expresiones como “no quiero sentarme junto a tu fea cara”, “tu puta fea cara”, o “no me hables un puto idioma extranjero, puta vaca fea”.
Estoy convencido de que el motivo principal de la agresión fue más la condición de mujer por encontrarse “fuera del rango” que el machismo considera “respetable”, que la de ser afro-descendiente. Si en lugar de 70 años, como tiene el propio David Mesher, la mujer hubiera tenido 30, dudo que la hubiera insultado, es más, quizás hasta habría intentado mantener una conversación con ella durante el vuelo. Y del mismo modo, si en lugar de mujer hubiera sido un hombre jamaicano de 70 años, tampoco creo que hubiera hecho ninguna referencia al color de su piel ni a los rasgos de su fisionomía.
David Mesher, hombre blanco que viajaba en el vuelo de Ryanair Barcelona-Londres, llevó a cabo una agresión machista y racista, no sólo racista, sobre Delsey Gayle, mujer afro-descendiente que volaba junto a él. Los testimonios de sus vecinos que se han hecho públicos, además, confirman que muestra una conducta acosadora en sus relaciones.
El machismo es la esencia sobre la que se construye el odio y la discriminación al ser la primera referencia utilizada para considerar a quien no comparte los elementos de identidad, no sólo como diferente, sino “diferente e inferior”. En el Neolítico, hace más de 10.000 años, cuando se inicia el control de las mujeres por parte de los hombres y el desarrollo de la cultura patriarcal, dentro de los grupos no existía ningún otro elemento diferencial, sólo el sexo y la condición de hombre y mujer en cada una de las personas. A partir de esa construcción sobre la condición de las personas y la desigualdad, conforme los grupos crecieron y las sociedades se hicieron más complejas y plurales, surgieron otros elementos de discriminación a partir del color de la piel, la procedencia, las creencias… y todos ellos sufrieron el mismo esquema a partir de la condición considerada superior: fueron personas consideradas “diferentes e inferiores”, no sólo diferentes.
Por eso hoy el machismo es racista, xenófobo, homófobo… y crítico con todo aquel que no comparta su condición (hombre, blanco, nacional, heterosexual…), podrá expresarlo de una forma u otra dependiendo de las circunstancias y de otros elementos, pero el machismo contiene el núcleo del odio al diferente y el de la discriminación. Por ello, la cultura machista que tenemos tiende a justificar, a minimizar y a aislar cada uno de los episodios en los que refleja esa construcción de poder y odio, lo hace con la violencia de género y lo hace con los ataques racistas. Todo es una trampa, primero porque la crítica se lleva a cabo sólo sobre los problemas que superan el umbral de “corrección” y “normalidad” que previamente impone la cultura, y después porque la propia existencia de ese umbral significa que hay toda una serie de situaciones con el mismo significado que nunca llegan a ser cuestionadas ni criticadas.
La desigualdad está construida sobre el pilar del machismo, aunque luego tenga muchas derivadas. Por eso debemos prestar toda nuestra atención para no dejar pasar el machismo que se esconde bajo muchas manifestaciones revestidas de normalidad o de otras formas de discriminación y violencia.
El episodio protagonizado por David Mesher, hombre blanco pasajero del vuelo de Ryanair Barcelona-Londres, fue racista y machista, sobre todo machista.
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Miguel Lorente Acosta es médico y profesor en la Universidad de Granada y fue delegado del Gobierno para la violencia de género.

Canadá se echa al hombro el empoderamiento de las mujeres


Ministra de Desarrollo Internacional de Canadá, Marie-Claire Bribeau, gran defensora de elevar los fondos para el desarrollo. Crédito: Cortesía Ryan Brown/ONU Mujeres.
OTTAWA, 31 oct 2018 (IPS) - Canadá, muchas veces descrito como uno de los países más progresistas del mundo, legalizó los derechos de la comunidad LGBTI, aboga por el empoderamiento de las mujeres, apoya al derecho al aborto y, en los últimos tiempos, pasó a ser una de las economías más grandes en legalizar el consumo de marihuana con fines recreativos.
En la actualidad, este país está en quinto lugar como donante de organizaciones de desarrollo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), está al frente de la Presidencia del Grupo de los siete (G7) países más ricos y busca ocupar un asiento no permanente en el Consejo de Seguridad para el período 2021-2022.
Además de organizar la 7 Conferencia Internacional de Parlamentarios sobre población y desarrollo, que tuvo lugar en Ottawa la tercera semana de octubre, tras haber organizado la primera en 2002, Canadá también lanzó la Política de Asistencia Internacional Feminista (FIAP).
Sandeep Prasad, director ejecutivo de Acción Canadá por los Derechos y Salud Sexual, señaló que Canadá se reubica como líder en materia de equidad de género, derechos en salud sexual y reproductiva de las mujeres, con la organización de la próxima conferencia Women Deliver, que se realizará en Vancouver en 2019.
“Para que el compromiso de Canadá sea realmente duradero, las defensoras de los derechos humanos y feministas que trabajan con las autoridades en todos los niveles del gobierno necesitan apoyo para crear y proteger las leyes, las políticas y los programas que salvaguardan esos derechos”, indicó Prasad.
Al frente de la lucha por los derechos de las mujeres, el empoderamiento de género y los derechos en salud sexual y reproductiva, se encuentra la ministra de Desarrollo Internacional, Marie-Claude Bibeau, quien también es una gran defensora de elevar los fondos para el desarrollo.
Los encuentros internacionales, como la conferencia de parlamentarios, pueden ser grandes catalizadores para movilizar personas, ideas y recursos, comentó Bibeau en entrevista con IPS.
“Por eso la conferencia es tan importante y es una oportunidad única para que los parlamentarios del mundo se reúnan a discutir el papel que ocupan en la implementación del Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo (CIPD)”, destacó
Canadá seguirá siendo un fuerte defensor de los objetivos fijados en la CIPD de 1994, incluidos los derechos de salud sexual y reproductiva.
“Estoy orgullosa de decir que, desde el lanzamiento de la Política de Asistencia Internacional Feminista, en junio de 2017, 93 por ciento de la asistencia humanitaria incluye un componente de empoderamiento de mujeres y de derechos de salud sexual y reproductiva”, destacó Bibeau.
“También estamos encantados de organizar la conferencia Women Deliver, en 2019, que es un movimiento para empoderar a mujeres y niñas y construir un mundo mejor”, añadió.
IPS: Estados Unidos recorta varias de sus contribuciones, como los 300 millones de dólares a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos en Oriente Próximo y 69 millones de dólares al Fondo de Población de las Naciones Unidas, ¿existe alguna posibilidad de que Canadá, junto a otros países occidentales, llene el vacío?
MARIE-CLAUDE BIBEAU: Canadá se comprometió a proveer asistencia humanitaria y a responder a las necesidades de las personas más pobres y más vulnerables.
Por eso estaba orgullosa de anunciar el 12 de octubre que el apoyo de Canadá aumentó a 50 millones de dólares en dos años para los refugiados palestinos a través de la UNRWA.
Los nuevos fondos para la UNRWA, que eran urgentes, ayudarán a mejorar la vida y a proteger la dignidad humana de millones de refugiados palestinos.
Canadá también es socio desde hace tiempo del UNFPA, y está entre sus principales 10 donantes bilaterales. Entre 2017 y 2018, colaboró con 142 millones de dólares, con el fin de contribuir a cubrir la faltante de fondos que sufre la agencia.
IPS: Los países en desarrollo, y en especial los 134 del Grupo de los 77, protestaron en la declaración ministerial de septiembre por la disminución de la asistencia oficial al desarrollo. ¿Eso también implica a Canadá, cuya contribución de 0,26 por ciento está por debajo del compromiso de 0,7 por ciento, el que solo alcanzaron seis países: Noruega, Luxemburgo, Suecia, Dinamarca, Alemania y Gran Bretaña? ¿Cuándo tiene pensado Canadá alcanzar esa meta?

MCB: Nuestros socios le pidieron al gobierno de Canadá tres cosas: fondos, buenas políticas y liderazgo, y eso es lo que ofrece Canadá.
El presupuesto de 2018 incluye 2.000 millones de dólares en nuevos fondos para cinco años para ayudar a implementar la Política de Asistencia Internacional al Feminismo y apoyar la Agenda de Desarrollo Sostenible, así como 1.500 millones de dólares para cinco años, a partir de 2018-2019 para ampliar el impacto de la asistencia internacional de Canadá.
Canadá también promueve buenas políticas, lo que no se mide por el volumen de su asistencia oficial al desarrollo, sino por la calidad y la efectividad de su asistencia y de sus contribuciones a la innovación de políticas que permiten obtener mejores resultados para las personas más pobres y vulnerables.
Además, como lo demuestra la inversión histórica en educación para mujeres y niñas en crisis y en conflictos en la cumbre de líderes del G7 en Quebec, Canadá impulsa varias iniciativas y alienta a otros países y socios a realizar inversiones significativas, en especial en materia de educación de niñas y mujeres en contextos frágiles, de conflictos y crisis.
IPS: El actual presidente del G7, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, encabezó la cumbre del grupo en junio de este año, cuando se comprometieron 3.800 millones de dólares canadienses (unos 2.900 millones de dólares estadounidenses) para promover la educación de niñas y mujeres en zonas de guerra, ¿en qué plazo se entregarán esos fondos? ¿Ya comenzó la movilización?
MCB: Canadá se sintió muy orgulloso de liderar el anunció de la histórica contribución de 3.800 millones de dólares para la educación de las niñas en la cumbre del G7 en Quebec y de comprometer una inversión de 400 millones de dólares para tres años.
El anuncio significó un cambio fundamental hacia la mejora y la reducción de las barreras a una educación de calidad en el mundo.
En la actualidad, trabajamos con otros países y organizaciones que colaboran con los 3.800 millones de dólares (la Unión Europea, Alemania, Japón, Gran Bretaña y el Banco Mundial) para desarrollar un marco de responsabilidad y registrar e informar sobre los detalles, que incluirán parámetros como el plazo, los resultados y los indicadores.
Juntos, nos aseguraremos que las voces de mujeres y niñas estén incluidas en la toma de decisiones sobre educación y empleo.
Traducción: Verónica Firme
      

Iniciativas para “despenalizar” aborto contemplan sanciones


Proponen reformar Constitución federal, Código Penal y Ley de Acceso 


La semana pasada en la Cámara de Diputados se avivó el debate sobre la despenalización del aborto en toda la República mexicana, sin embargo, entre las y los diputados persiste la idea de que las mujeres que abortan deben recibir una sanción, sin importar si la interrupción del embarazo fue provocada o fortuita.
En esta Legislatura, la primera con 48.2 por ciento de mujeres, se han presentado tres propuestas relacionadas con el aborto; sin embargo ninguna busca eliminar o derogar el delito de “aborto”.
Todas las propuestas: una del grupo parlamentario de Partido de la Revolución Democrática (PRD), apoyada por sus 20 legisladores; y dos de diputados de Morena: Lorena Villavicencio Ayala y Porfirio Muñoz Ledo, dejarían en la ley sanciones para las mujeres que aborten.  
De acuerdo con una revisión de Cimacnoticias sobre el contenido de las propuestas, sólo una sigue el modelo parlamentario que se planteó en 2007 en la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México (ALDF), cuando el 24 de abril de ese año se despenalizó el aborto hasta las 12 semanas de gestación.
Hace 11 años, la entonces ALDF reformó el Código Penal y la Ley de Salud capitalina. La modificación a la norma penal hizo que el aborto se castigara con una sanción de tres a seis meses de prisión o de 100 a 300 días de trabajo a favor de la comunidad, siempre y cuando fuera después de las 12 semanas de gestación.
La reforma en materia de salud incluyó la obligación de las instituciones públicas de salud del gobierno capitalino de atender las solicitudes de interrupción del embarazo y dio carácter prioritario a la atención de la salud sexual y reproductiva.
Desde entonces hubo intentos por despenalizar el aborto a nivel federal ante la falta de apoyo parlamentario las propuestas no prosperaron. Ahora el debate resurgió tras la intención de las y los legisladores federales de Morena por aprobar una reforma que deje bases para que el aborto sea legal en todo el territorio mexicano.
No obstante, ninguna de las tres propuestas de reforma que ya se presentaron en la Cámara de Diputados hace referencia a modificar la Ley General de Salud para garantizar la oferta de la interrupción del embarazo en los servicios de salud de todo el país, como sucede en la Ciudad de México.
La iniciativa más publicitada es la de la diputada morenista Lorena Villavicencio Ayala, quien el pasado 23 de octubre presentó la propuesta para reformar el Código Penal Federal y la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
La legisladora propuso un cambio normativo similar al de la Ciudad de México. Se trata de modificar el Artículo 330 del Código Penal Federal para despenalizar el aborto hasta las 12 semanas de gestación y reducir la pena, que actualmente es de uno a tres años de prisión, y pasarla a una condena de tres a seis meses.
En esta propuesta plantea que el Artículo 332 de dicha norma diga que otras excluyentes de responsabilidad penal serán si el embarazo sea resultado de una violación; si corre peligro la salud de la mujer; si dos médicos especialistas diagnostican malformaciones del feto; y si es “resultado de una conducta culposa de la embarazada”.
Actualmente el Código Penal Federal dice que se puede reducir la pena por aborto si la mujer no tenía mala fama, si logró ocultar su embarazo y si éste fue fruto de una unión ilegítima.
Con el objetivo de marcar una ruta legislativa a los Congresos estatales, la diputada Villavicencio Ayala también propuso reformar el Artículo 20 Bis de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia para considerar violencia institucional, el embarazo forzado, y la tipificación del aborto como delito.
La iniciativa no considera que de acuerdo con organizaciones civiles muchas mujeres que tuvieron un aborto, incluso espontáneo, fueron sido acusadas y sentenciadas por los delitos de homicidio en razón de parentesco o infanticidio y no por aborto.
La propuesta de la legisladora tampoco considera modificar la Ley General de Salud por lo que no habría acceso gratuito a servicios de interrupción legal del embarazo en instancias de salud federales.
La iniciativa de la diputada morenista no es la única. La primera propuesta en la Cámara de Diputados se presentó el 6 de septiembre de 2018 por el grupo parlamentario del PRD, la cual busca una modificación a nivel constitucional.
La iniciativa del partido, avalada por todos sus legisladores, es señalar en el Artículo 4 constitucional que “se garantizará este derecho (decidir el número de hijos), estableciendo la prestación de servicios de salud sexual y reproductiva, incluida la interrupción del embarazo cuando la mujer interesada así lo solicite o lo necesite, como una obligación institucional”.
En este caso, la propuesta no busca cambios en materia penal ni de salud, aun cuando esos cambios en la capital del país han salvado la vida de 202 mil 698 mujeres que en los últimos 11 años (hasta octubre de 2018) recurrieron al servicio de interrupción legal del embarazo, una política exitosa que incluso cobija a las mujeres que radican en otras entidades.
Por otro lado, el 23 de octubre de 2018 el diputado de Morena y presidente de la Mesa Directiva, Porfirio Muñoz Ledo propuso una reforma que también busca modificar el Artículo 4 de la Constitución federal para garantizar el “derecho a decidir sobre tener hijos o no” y la “autonomía reproductiva”.
Aunque la propuesta no hace cambios penales la agenda parlamentaria de Morena plantea en su punto 22 el objetivo de impulsar reformas a la Constitución federal y al Código Penal federal para despenalizar el aborto e incluirlo en los servicios de salud pública en todas las entidades del país, garantizando el derecho de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo.
A estas propuestas se podría sumar una más de la diputada, también de Morena, Miroslava Sánchez Galván, quien ha dicho a los medios de comunicación que buscará modificar la Ley General de Salud para legalizar el aborto, aunque esta iniciativa aún está en elaboración.
Las propuestas de Morena podrían ser impulsadas y aprobadas porque su bancada es mayoría, con 51.2 por ciento de diputaciones, y porque el grupo perredista suma 20 legisladores a favor de la despenalización, además de dos independientes, Ana Lucía Riojas Martínez y Carlos Alberto Morales Vázquez, quienes como integrantes del movimiento “Ahora” se dijeron a favor del aborto.
Además porque la ex ministra y futura secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, es una promotora del derecho a decidir de las mujeres y si bien el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, no está a favor del aborto sí buscaría una consulta ciudadana en la materia.\\CIMACFoto: César Martínez López
Por: Anayeli García Martínez
Cimacnoticias | Ciudad de México.- 

Migración forzada sigue ante la indiferencia de gobernantes


Desenredo



A pesar de tantas inclemencias que están sufriendo personas de todas las edades, miles continúan su caminata hacia el norte y otras caravanas recién inician su recorrido cercanos a Guatemala mientras los gobiernos centroamericanos guardan silencio o hacen llamados timoratos para que sus connacionales “no se vayan si no tienen permiso para entrar a Estados Unidos”, como si tales palabras sirvieran para desalentarlos.
Basta con dedicar un minuto a pensar: cómo es posible que familias enteras dejen su país de origen, si antes lo hacían preferentemente hombres; por qué las migraciones que han existido durante años, hasta ahora se convierten en problemática transnacional; qué tanta responsabilidad tienen en el éxodo de miles de personas quienes gobiernan, dan “ayudas” o invierten en Centroamérica.
Los dramas que encierran las migraciones se han ocultado o minimizado, descalificando de diferentes maneras a quienes se ven forzados a dejar su país, al grado de considerarlos delincuentes.
También se ignora los resultados de los reasentamientos de extranjeros en Estados Unidos, los que aunque han requerido gran tenacidad y múltiples esfuerzos, para miles de personas ha significado “una superación”: comer bien tres veces al día, enviar a sus hijas e hijos al colegio, construir su casa, aprender nuevos oficios, tener acceso a la salud. En suma, mejorar su calidad de vida.
Es increíble la cantidad de estereotipos que se montan -por ignorancia o perversidad- sobre la población migrante o solicitante de refugio, con tal de justificar la indolencia de gobernantes, incapaces de garantizar a sus gobernados oportunidades de estudio y capacitación, fuentes de trabajo dignas y seguridad pública.
Los presidentes Jimmy Morales de Guatemala y Donald Trump de Estados Unidos coinciden en priorizar las inversiones en temas de seguridad y en industrias extractivas, lo que ha aumentado los índices de desempleo y el armamentismo.
También coinciden en desalentar las migraciones con la fuerza militar. Trump ordena sacar al ejército estadounidense para impedir la entrada de la caravana centroamericana, mientras Morales autoriza militarizar la frontera con Honduras y saca a la Policía Nacional Civil para impedir traslados por parte de gente solidaria, y todavía no responde a las denuncias de extorsión que han cometido sus agentes policíacos.
Esta población caminante también está evidenciando otras problemáticas que siguen sin ser atendidas de raíz, y una de ellas es la corrupción, ese manejo ilícito de los erarios públicos por parte de quienes gobiernan, lo que ha significado una merma importante en la construcción de servicios públicos y el enriquecimiento de algunos mafiosos.
En Guatemala se están dando avances en juzgar a empresarios y altos funcionarios públicos de lavado de dinero, enriquecimiento ilícito, fraude y tráfico de influencias. Por ello, se exige que la Comisión Internacional contra la Impunidad (CICIG) continúe su trabajo y se renueve las visas a su personal, lo que rechaza tajantemente Morales, propagando mentiras que sobrepasan la cordura.
Qué panorama más inhumano. En lugar de conocer el impulso de nuevas políticas que corrijan el rumbo para desalentar las migraciones en Centroamérica e impedir que los Estados sigan siendo un botín de estructuras mafiosas, se escucha declaraciones insubstanciales del presidente hondureño Juan Hernández y las prédicas religiosas de Morales, cuyo gobierno gasta dinero público en la “evangelización” de policías y maestros, violentando el mandato constitucional que se refiere al Estado laico.
*Periodista mexicana, residente en Guatemala y coeditora de la publicación feminista LaCuerda.
CIMACFoto: César Martínez López
Por: Por Rosalinda Hernández Alarcón*
Cimacnoticias | Guatemala, Gua .-

Marlies Kraemer, la feminista que desafía a la burocracia alemana


A sus 81 años trabaja por la inclusión de las alemanas en documentos oficiales

Cuando se trata de lenguaje inclusivo, existe una autoridad en Alemania que no tiene maestría en lingüística, ni en estudios de género. Es su sentido de rebeldía y lucha contra el patriarcado lo que ha caracterizado a Marlies Kraemer, una mujer de 81 años de edad, del pueblo de Sulzbach, en el suroeste de ese país.
Su tenacidad para incluir a las mujeres en el lenguaje de documentos oficiales le ha ganado fama en toda Alemania. Actualmente lucha en la instancia más alta de las cortes Alemanas: contra la Caja de Ahorros de su región, la “Saarbruecker Sparkasse”.
Y es que la “Saarbruecker Sparkasse”, en sus formularios oficiales y cartas, únicamente habla de “cliente” o “propietario de cuenta”. Pero Kraemer es mujer, por lo tanto, no podrían estar dirigiéndose hacia ella, concluyó, por lo que demandó a la Caja de Ahorros.
Sin embargo, quien dirige la Caja insistió en que el uso de la forma masculina no era discriminatorio, sino que incluye a todas y todos los clientes.
Cuando Marlies Kraemer habla del asunto, se indigna. En entrevista con Cimacnoticias afirmó: “en el idioma se expresa el sentir, hablar y actuar ¡es nuestro patrimonio cultural más alto! Y nosotras las mujeres ¡no aparecemos en nuestro idioma materno!” Está convencida de que el idioma influye nuestro pensar y actuar, y que el lenguaje incluyente es la clave para la igualdad de género.
En cambio, una de las tres instancias que hasta ahora han dictado sentencia en contra de ella, constató que el uso de la forma masculina era “neutral”, y que “desde hace 2 mil años” incluía a mujeres y hombres.
El Bundesgerichtshof, la segunda Corte más importante de Alemania, siguió esta argumentación diciendo que la gente está acostumbrada a expresarse a través de la forma masculina, y que “nadie sufre daños” por eso. “No es cierto”, dice molesta Kraemer, “somos invisibilizadas y silenciadas. Se viola el principio de igualdad expuesto en la Constitución”.
Sin embargo, la feminista no quedó sorprendida por el fallo de la Corte porque explicó que cuando estuvo en la sala de audiencia “vi estas miradas entre el juez y el abogado de la Caja de Ahorros, y entonces yo supe como iba a terminar la cosa”, dijo.
Eso no quiere decir que Kraemer va a ceder. Ya tiene una nueva abogada: “es una mujer feminista y estoy muy contenta con ella”, dice. Ella presentará su apelación ante la Corte Constitucional Alemana, el Bundesverfassungsgericht. Y si éste le niega su derecho a ser “clienta”, ya sabe que quiere ir hasta el Tribunal de Justicia Europeo.
Y eso a pesar de que ya no camina muy bien y evita viajes largos. Contó que hace algunos años solía hacer caminatas pero luego se fracturó el fémur en una caída, y desde entonces le da miedo pisar terreno desconocido. Su base de activismo está en su casa en Sulzbach, y todas las periodistas y equipos de televisión que quieren hablar con ella, tienen que visitarla. A cambio, reciben un té.
Kraemer colecciona todos los artículos y documentos, pero también las cartas de apoyo que recibe. “Ya tengo cinco carpetas llenas, donde me dicen que siga, porque el lenguaje es importante”, afirmó. De Austria, Suiza, y hasta España le han llegado “y cuando la gente joven me dice que quieren ser como yo cuando sean grandes, eso me empuja para seguir adelante”, dijo.
El camino de la luchadora por los derechos de las mujeres no fue prescrito para Marlies Kraemer. Nació en una familia pobre, la primera de cuatro hermanos y hermanas. El dinero nunca alcanzó para zapatos nuevos, “siempre tuve que ponerme el calzado viejo de otra gente, por eso mis pies son arruinados”, contó.
La niña Marlies siempre estuvo ansiosa de aprender, sobre todo le gustaban los idiomas, el inglés y el francés. Cuando recibió una beca para seguir estudiando, a mediados de los años 50, su padre lo prohibió. “Para qué si de todos modos te vas a casar?” fue su respuesta. Y así pasó.
Marlies se casó jóven, tuvo tres hijos y una hija, pero quedó viuda a los 35 años y siguió la vida al margen de la precariedad. Vendía comida en la calle, limpiaba y trabajaba de mesera. Finalmente, consiguió un trabajo como asistente de cocina en una universidad, y ahí empezó su carrera feminista.
Cuando su empleadora, la universidad de Saarbruecken, ofreció estudios para personas mayores sin bachillerato, Marlies se inscribió en sociología. “Fue lo mejor que he hecho en mi vida. Ahí se deshicieron los últimos nudos patriarcales que tenía en mi cabeza!”, afirmó.
Se integró al sindicato y al partido socialdemócrata y entró en la política municipal. En 1990, pidió un pasaporte. Pero en el documento que le llegó decía: “El propietario de este pasaporte es Alemán”.
“Eso no soy yo”, dijo Kraemer “¡no soy propietario sino propietaria, no soy alemán, sino alemana!”. Durante 6 años se negó a firmar su documento oficial. Hasta que en 1996, el Estado alemán adoptó la directiva europea que imponía poner “Firma del propietario/de la propietaria” en el pasaporte.
Su gran apoyo en ese tiempo fue su pareja, quien la acompaña a los procesos, y ayuda en las campañas solidarias. No son casados, pero viven juntos desde hace 40 años. Él se retira al primer piso cuando Marlies tiene visitas de periodistas. “Es tu cosa”, dice.
Pero ella narró que fue él quien la ayudó “muchísimo” para juntar firmas en su exigencia de cambiar el mapa meteorológico del país. Y es que hasta los años 90, todas las áreas de alta presión meteorológicas que significaban buen tiempo, tenían un nombre masculino en alemán. Todas las áreas de baja presión, que significaban lluvia, tenían nombre femenino.
Los nombres fueron dados por el Instituto de Meteorología de la Universidad Libre de Berlín. “Estructuras patriarcales por excelencia”, analizó Kraemer, y junto con una periodista emprendió la batalla mediática en contra.
Estuvo sorprendida por la respuesta a esta iniciativa. “El primer día lo pasé en el teléfono desde las siete de la mañana hasta las seis de la noche”, narró. Cada vez que colgaba, sonaba otra vez.
Kraemer no se cansó de explicar sus motivos. “La gente me pregunta: ‘¿No encuentras nada más importante por qué luchar?’” y de una vez compartió su respuesta: “Yo les digo: ¿y qué? y cuando empiezan a enumerar les pregunto qué hacen para combatirlo. Se callan enseguida”, comentó sonriendo.
A los comentarios misóginos y mensajes de odio, ni siquiera les hace caso. “Decidí hace años que no quiero invertir mi energía en este tipo de gente. Que se mueran tontos”, explicó. Kraemer no tiene cuenta en redes sociales, pero admira a las feministas jóvenes que responden a las discusiones con personas sexistas día a día.
La lucha por los nombres meteorológicos se ganó rápidamente y desde 1998, la Universidad de Berlín alterna entre nombres masculinos y femeninos para las presiones bajas y altas.
Ahora, a sus 81 años de edad, Kraemer quiere agregar otra victoria contra el lenguaje patriarcal a su cuenta. Dos instancias le quedan en su lucha contra la Caja de Ahorros: La Corte Constitucional, el Bundesverfassungsgericht, y la Corte Europea de Derechos Humanos.
La activista estimó que le quedarían “unos diez años” para luchar contra la corriente. Una vez, una periodista la preguntó si era “feminista radical”, y con su astucia, ella contestó: “Radical viene de la raíz, y si se trata de erradicar el patriarcado desde la raíz, estoy muy de acuerdo. Soy feminista radical, con todo gusto me puede llamar así.”
CIMACFoto: Sonia Gerth
Por: Sonia Gerth
Cimacnoticias | Ciudad de México.-

Cuba: Cuidados ¿deber de quién?

Indispensable romper el esquema patriarcal que desconecta lo público y lo privado

Investigadoras y feministas alertan sobre la ausencia de un enfoque que ponga en juego las lógicas patriarcales

La Habana. 31 oct. 18. AmecoPress/ SEMlac.- El proyecto de Constitución que se somete a consulta popular en Cuba, actualmente, refrenda la responsabilidad familiar y estatal en el cuidado de grupos vulnerables. Pero, según especialistas y feministas cubanas, sigue pendiente un enfoque de corresponsabilidad en el texto constitucional.
Para la socióloga Magela Romero Almodóvar, en materia de cuidados la balanza se inclina más hacia las familias. "Existe una delegación del peso de estas funciones en las familias, ello se hace evidente a través del artículo 67", afirma la investigadora y profesora de la Universidad de La Habana.
El citado artículo establece que "El Estado protege a las familias, la maternidad, la paternidad y el matrimonio. El Estado atribuye a las familias, concebidas como células básicas de la sociedad, responsabilidades y funciones esenciales en la educación y formación de las nuevas generaciones y el cuidado y atención de los adultos mayores".
Otros cuatro artículos (70, 72, 73 y 74) hacen hincapié en la responsabilidad familiar, estatal y social en el cuidado y la atención de infantes, adolescentes, jóvenes, adultos mayores y personas con discapacidad. Sin embargo, la atención a la reproducción de la vida, el ámbito doméstico y la interrelación entre los distintos actores sociales que intervienen en el cuidado no son visibles en el texto constitucional.
Georgina Alfonso, directora del Instituto de Filosofía e integrante del colectivo feminista Berta Cáceres, reconoce esta carencia como una limitación generalizada en las sociedades modernas regidas por los enfoques economicistas clásicos.
"Hasta tanto la reproducción de la vida no se visibilice y se entienda su aporte a la economía, no habrá una verdadera corresponsabilidad. El espacio público y la economía tradicional persiguen la eficiencia y las ganancias y, con esa lógica, no funciona el cuidado", comenta Alfonso.
La baja natalidad y el envejecimiento poblacional son dimensiones de la compleja situación demográfica que vive la isla y que ponen los cuidados bajo reflectores.
El estado cubano desarrolla programas específicos, pero investigadoras y feministas alertan sobre la ausencia de un enfoque que ponga en juego las lógicas patriarcales.
Para la profesora Romero Almodóvar, en el actual proyecto "no se rompe con el esquema patriarcal que presenta lo público y lo doméstico totalmente desconectados.
"La manera en la que se está pensando el cuidado no se corresponde con las importantes mutaciones que ha tenido lugar en el mercado de trabajo a nivel nacional, y no toma suficientemente en consideración los costos de mantenerse o insertarse en él para quienes llevan sobre sus hombros la atención a familiares y personas dependientes, sobre todo las mujeres", agrega la socióloga cubana.
Ambas especialistas entrevistadas por SEMlac coinciden en que, en la práctica, son las mujeres quienes realmente están detrás de la expresión "las familias".
"Hoy podemos identificar que en Cuba hay una sobrecarga para las mujeres en término de cuidados. Políticas públicas que correspondían al cuidado han vuelto a las familias en condiciones de crisis económica; por tanto, con menos posibilidades de solución", afirma Alfonso.
Estudios sobre el tema confirman que, pese a los avances en materia de igualdad de género, en Cuba prevalece la división sexual del trabajo y la sobrecarga femenina en el trabajo doméstico no remunerado.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Igualdad (ENIG), realizada en 2016 por la Federación de Mujeres Cubanas y la Oficina Nacional de Estadísticas, las mujeres "dedican más horas a planificar, cocina, servir la comida, además de fregar, son quienes se encargan de la limpieza e higiene del hogar dedicándole 7,13 horas cada semana, a diferencia de sus pares varones que consumen como promedio 3,71 horas semanales en esas labores".

Corresponsabilidad: cuidado en varias manos

Poner al centro a las personas y su bienestar, asumir una perspectiva integral y romper con la lógica patriarcal no son ingredientes de una receta ante la complejidad del cuidado, cuyas soluciones no son sencillas.
Especialistas abogan por amplificar los debates sobre el cuidado como una cuestión pública en la que participan y se complementan diversos actores: el Estado, la familia, la comunidad, instituciones sociales y religiosas, el sector privado.
"Tiene que ser una política social que no defalque al Estado; pero la solución no es solo económica, tiene que ir acompañada de la dimensión ética, de una cultura que aporte a la sensibilización de la sociedad", explica Alfonso.
Se trata de algo que termina incidiendo, directamente, en "organizar la vida social de otra manera", opina Yohanka León, también integrante del colectivo que organiza el espacio feminista Berta Cáceres.
Antecedentes de este tipo abundan en el proyecto cubano y sus políticas sociales de apoyo al cuidado, como fueron la creación de círculos infantiles en la pasada década de los sesenta, la ampliación de servicios sociales e instituciones para el cuidado de ancianos, los comedores obreros, escuelas internas y seminternas, lavanderías estatales y otros.
Tanto Alfonso como León son partidarias de insertar el cuidado entre los derechos y deberes de la ciudadanía en el texto constitucional, para luego transversalizarlo al resto del articulado.
"Otra preocupación que tengo es que convirtamos el debate de la Constitución en un debate de términos jurídicos y técnicos. La Constitución es un documento político y ético, es importante que no se pierda esa perspectiva porque, tratando de acercarnos lo más posible al tecnicismo jurídico, podemos perder la perspectiva de que queden claros los posicionamientos políticos y éticos del proyecto", suscribe Alfonso.
Previendo resistencias en la redacción final de la Carta Magna y la inclusión de estos enfoques sobre el cuidado, Alfonso argumenta que "muchas veces sale a colación que no se encuentra el modo de refrendar estas perspectivas por pautas de las técnicas jurídicas o experiencias de otros países. Pero nuestro proyecto es una apuesta contra la lógica hegemónica del mundo —en la cual el cuidado no es una prioridad porque no representa ganancias para nadie— y no podemos perder la perspectiva de que esta es una cuestión humana", reafirma.
Foto: SemMéxico.

México: Misoginia un animal que camina

Mujeres y Política
Empezaron los prelados y siguieron diputados, jóvenes y personas adultas mayores

 
México, 30 oct. 18. AmecoPress/SemMéxico.- Desatada la misoginia o es mera percepción personal. Lo cierto es que los demonios andan sueltos y resultan peligrosos, son expresiones que vienen de todos lados y de todos los poderes. Algunos de ellos no tan poderosos, pero resultan igual de peligrosos.
Empezaremos por el obispo de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, el mismo a quien la madre de una víctima de feminicidio llamó a “limpiarse el hocico”, y no es para menos.
Y eso me lleva a recordar esa costumbre del gremio al que pertenezco de poner las grabadoras a todas las personas solo porque ocupan un cargo y su palabra parece tener mucho peso, aunque lo que digan sea totalmente contrario a la defensa de los derechos humanos, en específico, de las mujeres.
El obispo, como enumera la corresponsal de SemMéxico, Josefina Aguilar Pastor, ha hecho aberrantes declaraciones en los últimos días: el 17 de este mes llamó a participar en una marcha contra el aborto y declara que a las mujeres que son asesinadas es porque “no andaban en misa ni en la catedral” y tres días después agrega que son asesinadas porque están involucradas en el narcotráfico, la prostitución o son halcones (vigilantes de la delincuencia).
Sin duda, escuchar esto de un prelado de la iglesia católica es alarmante considerando, como ya se ha señalado, su nivel de injerencia en sus feligreses, resulta por ello un peligroso promotor de la violencia contra las mujeres. Una lástima porque en este país, como en muchos otros la violencia está directamente relacionada con la supremacía machista que, hay que decirlo, ha propalado a lo largo de los últimos XX siglos, la propia iglesia católica, donde las mujeres tenemos dos categorías: santas o putas.
En Oaxaca, como dicen aparentemente solo, un hombre mayor propaga la idea de asesinar a las mujeres “porque nos estamos reproduciendo exageradamente por culpa de ellas”, dice en papeles que pega en los camiones de transporte público.
“El Estado no hace nada para controlar la sobrepoblación; Guanajuato y el Estado de México ya empezaron bien y debe seguirle Oaxaca; son más de 67 millones, hay que bajar el número”, dice parte de los pegostes que ese señor no identificado sigue haciendo en los camiones, donde su objetivo es invitar a “matar una hembra”.
Esta persona, que hasta hoy se cree opera en solitario podría no estar tan solo y su propuesta sin duda es un permiso para matar para quienes consideran que las mujeres estamos de sobra en esta sociedad patriarcal.
La otra, que según se explica circula en redes sociales es producto de una escuela de la UNAM, y que sin embargo podrían encontrarse en otras escuelas del país de todos los niveles educativos. En la foto presuntamente tomada en un baño de la Facultad de Ingeniería de la UNAM se invita a “violar” a las “feminazis”, además, de advertir que “Ingeniera es para hombres”, doble acto de odio contra mujeres.
Y la última, la expresión violenta del diputado local en el congreso de San Luis Potosí del Partido Verde Ecologista de México, Edgardo Hernández Contreras, en contra de la diputada Beatriz Eugenia Benavente Rodríguez a quien le dijo “me hubiera gustado que fuera hombre para partirle la madre en esta tribuna” y amenazó a la Presidenta de la Mesa Directiva del Congreso, Sonia Mendoza Díaz, a quien le dijo: “ojalá que no le pase nada a su integridad física y a su familia, porque entonces la voy a ver aquí llorando”.
En suma, la misoginia no tiene edad ni posición. Puede ser un obispo o un diputado. Puede venir de jóvenes universitarios o de un hombre adulto mayor, todas van el mismo sentido: odiar a las mujeres.
Y la pregunta es ¿qué están haciendo las autoridades al respecto?
Foto: Archivo AmecoPress.

La mitad de las niñas canadienses enfrentan sexismo entre los 10 y 13 años según encuesta de Guías Niñas

Según la encuesta, el 43% de las canadienses dicen haber sido víctimas de sexismo por primera vez alrededor de los 11 años. Foto: Radio-Canada / Maggie Brown

Por Leonora Chapman | amlat@rcinet.ca

Según una encuesta de las Guías de Canadá, las niñas canadienses de 12 a 17 años tendrían dos veces más probabilidades de enfrentar situaciones sexistas que los niños de la misma edad y esto tendría un impacto en sus vidas.

Más de la mitad de las niñas encuestadas dice que experimentaron desigualdad de género por primera vez entre los 10 y 13 años de edad.

Jill Zelmanovits, presidenta de Guías Niñas de Canadá, dice que diseñó la encuesta cuando vio cómo las experiencias sexistas comienzan temprano en los testimonios de mujeres que han participado en estudios sobre la brecha salarial.

Mucha gente piensa que la desigualdad de género aparece a medida que avanzamos en la vida, que es difícil llegar a puestos de alta dirección, pero lo que vemos en el estudio es que 1 de cada 3 dice que fue tratada injustamente debido a su sexo, y estas niñas tienen entre 12 y 17 años.

-Jill Zelmanovits, Presidenta de las Guías de Canadá



Más de la mitad de las niñas encuestadas dice que experimentaron desigualdad de género por primera vez entre los 10 y 13 años de edad.
(Girl Guides of Canada/Facebook)

Las Guías de Canadá, a través de Ipsos, encargaron una encuesta con 1,203 niñas y niños en Canadá, en su mayoría de 12 a 17 años, del 5 al 17 de septiembre de 2018. Una muestra aleatoria de este tamaño generaría margen de error de +/- 3.2%, 19 veces de 20.

Algunos resultados destacados de la encuesta
Los resultados de la encuesta nacional de Ipsos identifica los desafíos clave que enfrentan las adolescentes en Canadá. Las principales preocupaciones incluyen expectativas poco realistas, normas y estereotipos sociales dañinos, mensajes mixtos y cómo la sociedad continúa perpetuando ideales inalcanzables. Como resultado, muchas niñas en Canadá dicen que esto ha impactado negativamente su autoestima.

De hecho, la encuesta de la Asociación Guías de Canadá revela: 

*El 59% de las niñas sienten la presión de la sociedad, a través de los medios de comunicación, las redes sociales, las amigas, los padres o los maestros, para ajustarse a estándares poco realistas sobre lo que significa ser “una niña”.

*El 56% de las chicas está de acuerdo en que reciben mensajes contradictorios sobre cómo deben actuar y comportarse, y se ven y visten.

*El 55% informa que tratar de cumplir con las expectativas sociales sobre cómo deben verse o actuar ha impactado negativamente su autoestima

*Esto es más fuerte entre las grandes usuarias de las redes sociales en un 71%

Deporte e internet

Los participantes respondieron que este sentimiento de desigualdad es particularmente pronunciado en el campo del deporte y en línea, como en las redes sociales.

De acuerdo con los resultados de la encuesta, el 27% de las niñas dicen que ya han sufrido de una falta de consideración en comparación con los niños en los deportes.

En contraste, el 15% de los niños reconoce que, en general, son mejor tratados que las niñas cuando practican deportes.

Al mismo tiempo, el 31% de los encuestados creen que tienen mejores habilidades que las niñas para aprender matemáticas, practicar deportes y tomar iniciativas de liderazgo.

Casi una cuarta parte de las jóvenes canadienses informan que también enfrentan desigualdades de género en las redes sociales.

Tema delicado

Si bien este alto número de niñas habló de la desigualdad de género, alrededor de un tercio dijo que temía o dudaba en hablar de ello, que no querían hablar de ello.

-Jill Zelmanovits, Presidenta de las Guías de Canadá

Jill Zelmanovits dice que la proporción de niñas que aún temen testificar sobre sus experiencias es preocupante y que la única forma de cambiar esta tendencia es hablar de ello lo más posible.

La misión de la Asociación Guías de Canadá tiene por objetivo central educar integralmente a la niña y a la joven con el fin de desarrollar su máximo potencial como ciudadanas responsables, capaces de realizar aportes significativos a la sociedad.

Radio Canadá-Columbia Británica/Internet

El Estado le roba 3 años de libertad tras sufrir parto fortuito


 7 de noviembre Juez decide si libera a Dafne McPherson


La desesperación frustra a Edna Veloz. Ha visto encarcelada por tres años y dos meses a su hija Dafne McPherson en el penal de San Juan del Río de Querétaro. “Es inocente”, dice tajante Edna. Dafne tuvo un parto fortuito sin siquiera darse cuenta que estaba embarazada, la recién nacida murió por falta de auxilio.                                                                                   
Dafne no cometió ningún delito, la falta es de quienes no atendieron la emergencia obstétrica, pero la Fiscalía de Justicia de Querétaro marcó a Dafne como la asesina de su hija y en 2015 la sentenciaron a purgar una condena de 16 años en la cárcel por el delito de homicidio calificado.
La pesadumbre que viven Dafne Taniveth McPherson Veloz y su familia, podría acabar el próximo 7 de noviembre de 2018, cuando el Juez de Distrito Judicial de San Juan del Río, Alejandro León Guerrero, conozca dos peritajes sobre el estado psicológico y médico que le imposibilitaron a Dafne percatarse del embarazo y actuar en consecuencia en el parto fortuito, que le permitirán determinar si es inocente, y de ser así, ordenar su liberación.

INICIA LA PESADILLA

En Querétaro, entidad que en su Constitución “protege la vida” desde que el óvulo es fecundado y sólo permite la interrupción del embarazo cuando es resultado de una violación sexual o la causa un acto imprudencial, Dafne fue marcada como homicida por parir inesperadamente en un inodoro y no salvar la vida de la nacida al desangrarse por un desgarre perianal y perder la conciencia ante un embarazo que desconocía tener.
El 17 de febrero de 2015 Dafne McPherson regresó de comer a la tienda departamental Liverpool donde laboraba en Querétaro, comenzó a sentir fuertes dolores abdominales, llamó a la enfermera de la tienda para que la socorriera pero no tuvo respuesta. Corrió al baño, sintió que una “liga” se rompió dentro de ella, era un parto fortuito.
Un año atrás Dafne fue diagnosticada con hipotiroidismo, una enfermedad que le provoca cambios constantes de peso y menstruación irregular. “Ella nunca subió de peso como cuando se embarazó de su hija, usaba su uniforme normal, yo nunca noté que estuviera embarazada, nunca vi nada raro. Si dicen que mi hija es culpable por no haberse dado cuenta que estaba embaraza, también yo soy culpable por no darme cuenta”, sentencia la madre de Dafne, Edna Veloz, en entrevista con Cimacnoticias.
Entonces la pesadilla para Dafne McPherson comenzó. El personal de la tienda Liverpool no permitió el ingreso a los paramédicos de la Cruz Roja, y en su lugar, un servicio privado conocido como “Ambulancias Beyen” auxilió a Dafne, los abogados de la víctima han recabado pruebas de que estos paramédicos no tienen cédula profesional y por ende, son incapaces de atender emergencias obstétricas.
Los registros médicos revelan que Dafne fue trasladada al hospital pasada más de una hora de ocurrió el parto fortuito, y por medio de su relato, se conoce que la recién nacida no fue sacada del inodoro inmediatamente, para el momento que la intentaron ayudar, ya había perdido la vida ahogada. Dafne llegó al hospital ya escoltada por la policía del estado.

DE TENER UNA COMPLICACIÓN OBSTÉTRICA A HOMICIDA

En una audiencia para inculpar a Dafne del homicidio de su hija, el fiscal del Ministerio Público, Gustavo Dolores Acosta, dijo que ni una “perra provocaría la muerte de su hijo” que es “instinto” salvarlo. Por esta afirmación, el funcionario sólo tuvo una inhabilitación por 30 días. Según la autoridad, la mujer privó de la vida de manera dolosa a su hija y miente sobre desconocer que estaba embarazada.
La defensora legal de Dafne McPherson, Karla Micheel Salas Ramírez explicó a Cimacnoticias, que en principio, la Fiscalía de Querétaro acusó a Dafne del delito de aborto, crimen que según el Código Penal del estado amerita la condena de 6 meses a 2 años de prisión, pero al notar la avanzada edad gestacional del producto, cambiaron la acusación a homicidio agravado. Una práctica común de las autoridades que criminalizan a las mujeres en los casos de parto fortuito, afirmó.
“No le creyeron, en la Fiscalía fueron muy duros, los abogados por ejemplo nunca buscaron una prueba, y yo creo que tampoco quisieron creerle”, rememora Edna Veloz.
Las autoridades encargadas de impartir justicia de Querétaro nunca entrevistaron a Dafne sobre los hechos ocurridos el 17 de febrero y omitieron investigar su condición médica que le impidió percatarse del embarazo. Al final, la consecuencia de investigar un homicidio y no analizar una complicación obstétrica, hizo que en 2015 Dafne recibiera la pena de 16 años de prisión por el asesinato de la recién nacida, la sentencia fue ratificada por la Sala Superior del Tribunal de Querétaro.

DAFNE A UN PASO DE LA LIBERTAD

La esperanza en Dafne y su familia se avivó cuando su expediente cayó en las manos del Grupo de Acción por los Derechos Humanos y la Justicia Social (Gadh), una agrupación civil de abogados expertos en la defensa de mujeres cuyos derechos fueron violentados. Para entonces, cuando intervinieron en el caso de Dafne, ella ya había sido sentenciada, recuerda la abogada Karla Micheel Salas Ramírez. Su única oportunidad para liberarla era recurrir a un juicio de amparo ante un Tribunal Colegiado Federal, en el que alegaron todas las violaciones procesales y a sus Derechos Humanos que cometió la autoridad.
Los magistrados concedieron parcialmente la razón a la víctima a finales de 2017, no había pruebas suficientes para determinar la culpabilidad de Dafne por lo que ordenaron que se repusiera una parte del juicio con el objetivo de aclarar, por medio de pruebas, su estado de salud y psicológico en el momento que tuvo el parto en la tienda Liverpool. Pero en tanto, ella seguiría en situación de reclusión.
Estas pruebas se presentarán en una audiencia el próximo miércoles 7 de noviembre, en donde tres especialistas independientes propuestos por las abogadas de Dafne explicarán al Juez de Distrito, León Guerrero, 3 peritajes: uno médico, otro psicológico y el tercero que demostrará la falta de capacitación del personal médico que la atendió.

En el primero, explicó Salas Ramírez, una especialista en emergencias ginecoobstétricas expondrá al juez porqué este caso se trata de un parto fortuito, además, detallará el tipo de atención médica que debió recibir Dafne y la recién nacida, y cómo la ausencia de esta se traduce en violencia obstétrica.
Esta prueba será reforzada por un investigador privado, quien también acudirá a la audiencia para dar cuenta que los paramédicos del servicio privado que atendió a Dafne no cuentan con cédula profesional, como tampoco la enfermera de la empresa Liverpool está capacitada para atender este tipo de emergencias médicas.
Por otro lado, está el análisis de otro especialista sobre el estado psicológico en el que entró Dafne al parir cuando desconocía del embarazo, y las afectaciones emocionales que esto le causó.
Los peritajes, seña la abogada del Grupo de Acción, están orientados a comprobar que Dafne no actuó dolosamente, aunque cabe mencionar que la Fiscalía de Querétaro tendrá también la oportunidad de contrarrestarlos por medio de peritajes iguales, médico y psicológico que tachan como culpable a Dafne.
“Es la audiencia donde se va decidir la situación jurídica de Dafne, mostrar elementos de su inocencia”, señaló Micheel Salas y agregó que será un caso paradigmático, pues este es sólo un ejemplo de cómo el Estado actúa en contra de las mujeres que abortan o tienen un parto fortuito y pierden a sus hijos.
El informe “Maternidad o Castigo” del Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), documentó que de 2007 a 2016, en total 850 mujeres fueron procesada por el delito de aborto en México y se dictaron de enero de 2007 a diciembre de 2016 unas 98 sentencias a mujeres por el mismo hecho.
Casos como el de Dafne, están ocultos en las cifras, pues el delito que se les imputa no es el de aborto sino infanticidio u homicidio, sometiéndolas a sentencias mucho más largas.

3 AÑOS QUE LE ARREBATARON A DAFNE

Detrás de la persecución en contra de Dafne hay una familia fragmentada. En estos tres años Dafne no ha visto a su hija, las llamadas telefónicas son el único medio que las mantiene unidas narra Edna Veloz. La familia ha ocultado a la niña de 9 años de edad que su madre está en reclusión diciéndole que está internada en un hospital.
Sin embargo la hija de Dafne crece, comenzó a utilizar el internet y al ver las campañas que han impulsado para liberar a su madre sospecha que en alguna situación está Dafne y cuestiona a su abuela, “¿Mi mami está bien? ¿come? ¿no la maltratan?”, preguntas que a Edna Veloz le cuesta responder.
“Mi desesperación es saber que ella está ahí, que no fue culpable de nada. Para mí eso es muy difícil ver a su hija estar angustiada, llorando”. Edna también ha tenido que dejar su trabajo en la venta de jugos y frutas para abocarse en conseguir la libertad de su hija y cuidar de su nieta.
Edna asegura que ella y su hija están confiadas que salga en libertad la próxima semana, que Dafne regrese con su familia, se reencuentre con su hija, termine la carrera de psicopedagogía que anhelaba para ayudar a la niñez, e intente de recuperar los tres años que el Estado le robó.

Imagen retomada del Grupo de Acción DH
Por: Hazel Zamora Mendieta
Cimacnoticias | Ciudad de México.-

La amenazan de muerte por escribir sobre feminicidio


Relatoría de CIDH pide a Uruguay protección para periodista
   

El pasado 10 de octubre la periodista y secretaria general del Sindicato de Periodistas del Paraguay (SPP), Noelia Díaz Esquivel, fue amenazada de muerte en redes sociales luego de escribir sobre un feminicidio ocurrido en Asunción, Paraguay.
Ante la amenaza, el Comité de Expertas del Mecanismo de Seguimiento de la Convención para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer (Belém do Pará) y la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), expresaron su preocupación por el riesgo y la inseguridad que enfrenta.
El 10 de octubre la periodista recibió una amenaza de muerte en su cuenta de Twitter. Un sujeto le escribió: “vos sí necesitás que te asesine y me encantaría asesinarte”. A raíz de estos hechos la periodista presentó una denuncia penal ante el Ministerio Público y pidió la aplicación del Protocolo de Seguridad para Periodistas en Alto Riesgo ante la  Policía Nacional.
De acuerdo con los mecanismos internacionales esta situación de riesgo requiere que el Ministerio Público haga seguimiento al caso y garantice un efectivo acceso a la justicia para la periodista, tal como lo establecen los compromisos internacionales adquiridos por el Estado en cuanto a garantizar el derecho de todas las mujeres a vivir libres de violencia y el derecho a la libertad de expresión.
En un comunicado los organismos dijeron que las mujeres periodistas son doblemente atacadas por ejercer su derecho a la libertad de expresión y por su género, por lo que enfrentan mayores riesgos de amenazas y violencia.
En este sentido, la Asamblea General de la OEA, en su resolución sobre Derecho a la libertad de pensamiento y expresión y la seguridad de los periodistas y trabajadores en medios de comunicación adoptada en 2017, manifestó preocupación “por los riesgos particulares que enfrentan las mujeres que ejercen el periodismo, quienes además son víctimas de discriminación, acoso y violencia sexual, incluso en Internet”.
Por todo lo anterior, el Comité de Expertas y la Relatoría Especial de la CIDH instan a las autoridades paraguayas a tomar todas las medidas necesarias para garantizar la protección y la seguridad de la periodista Noelia Díaz Esquivel y todas las mujeres que puedan estar enfrentando casos similares, así como garantizar su derecho a ejercer la libertad de expresión libre de violencia basada en el género.

Fotografía por Scarlett Arias
Por: la Redacción
Cimacnoticias | Ciudad de México.- 

Temen violaciones a Derechos Humanos con triunfo de Bolsonaro


 Ganó presidencia de Brasil con un discurso misógino y racista 
   

Organizaciones internacionales se mostraron preocupadas por el discurso misógino, racista, homofóbico y de admiración a la dictadura brasileña (1964-1985) del próximo presidente de Brasil, Jair Bolsonaro.
Este domingo 28 el ex militar y ultraderechista Jair Bolsonaro ganó la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Brasil, con 55.1 por ciento de los votos, frente a 44.9 por ciento que obtuvo el candidato del Partido de los Trabajadores (PT), Fernando Haddad.
Los reportes de medios internacionales muestran las reacciones regresivas de Bolsonaro ante temas relacionados con la igualdad de género, por ejemplo, el próximo presidente brasileño se mostró a favor de la tortura y la violación sexual y en contra de que mujeres y hombres tengan el mismo salario por las mismas actividades.
En reacción a la jornada electoral, la directora para las Américas de Amnistía Internacional, Erika Guevara-Rosas, advirtió en un comunicado que si su retórica se convierte en política pública “entrañar un riesgo enorme para los pueblos indígenas y quilombolas, las comunidades rurales tradicionales, la comunidad LGBTTI, la juventud negra, las mujeres, las personas que son activistas y las organizaciones de la sociedad civil”.
Al mismo tiempo, afirmó que Amnistía Internacional acompañará las luchas por la justicia y Derechos Humanos “para garantizar que el futuro de Brasil venga con más derechos y menos represión”.
El director para las Américas de la organización Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, aseguró que monitorearán las acciones del gobierno de Bolsonaro, al mismo tiempo que llamó a las y los jueces del país a  defender la autonomía judicial.
“Brasil tiene jueces independientes, procuradores comprometidos, defensores públicos, reporteros valientes, y una sociedad civil vibrante”, afirmó Vivanco, “juntos vamos a defender cualquier ataque que intenta erosionar derechos democráticos e instituciones que Brasil ha construido en las últimas tres décadas”.
En redes sociales, el hashtag #EleNaoEMeuPresidente (Él no es mi presidente) se volvió viral, con usuarias y usuarios afirmando que quieren resistir y defender los derechos de las mujeres, personas negras, indígenas, y LGBTTI. Las imágenes que muchas difundieron fueron de dos manos, con el lema “Nadie suelta la mano de nadie”.
Bolsonaro, quien se postuló como un candidato en contra de la élite política, a pesar de sus siete legislaturas como diputado en Brasilia, ha incitado al odio en tiempos pasados, por ejemplo, denigrando a una diputada del PT en 2014: “Ella no merece (ser violada), porque ella es muy mala, es muy fea”, dijo el ex capitán del ejército.
En 2016 afirmó durante una entrevista que no le daría empleo a una mujer por el mismo salario que un hombre, porque “quedan embarazadas”, aunque posteriormente dijo que fue malinterpretado.
En otras ocasiones, abogó por revocar la acción afirmativa para las y los brasileños afrodescendientes y revertir la legislación que aumenta las condenas por feminicidio.
Se expresó de manera denigrante hacia personas indígenas, habitantes de “quilombolas”, asentamientos en los que se refugiaban los esclavos rebeldes en Brasil y en las que ahora viven sus descendientes, y en contra de la comunidad LGBTTI.
En su primer mensaje en redes sociales después de la victoria, Bolsonaro prometió “cambiar el destino de Brasil”, y dijo que no se podía “seguir coqueteando con el socialismo, con el comunismo, el populismo o el extremismo de izquierda”.
Se refirió a la Biblia y citó versos bíblicos, diciendo que se trataba de una “caja de herramientas para arreglar al hombre y a la mujer”, y asegurando que su gobierno seguirá “las enseñanzas de Dios al lado de la Constitución”.
Las y los adversarios de Bolsonaro temen que su discurso podría provocar actos violentos en contra de minorías, los cuales ya se manifestaron en las celebraciones de simpatizantes del ultraderechista anoche. En Sao Paulo, amenazaron de muerte a políticas y políticos del PT y glorificaron la dictadura militar, según reportó el periódico alemán Neues Deutschland.
El gesto de Bolsonaro de simular una pistola con el dedo pulgar e índice se ha vuelto icónico y fue repetido por sus simpatizantes. En la ciudad de Niterói, a unos 13 kilómetros de Rio de Janeiro, un convoy del Ejército participó en las fiestas que celebraban su  victoria.
El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, tanto como sus homólogos en Colombia, Iván Duque Márquez, Argentina, Mauricio Macri, y Estados Unidos, Donald Trump, felicitaron a Bolsonaro por su contundente victoria y los últimos tres expresaron su deseo de fortalecer los vínculos políticos.

Imagen retomada del Twitter del portal colaborativo Matria
Por: Por la Redacción
Cimacnoticias | Ciudad de México.- 

Silvia Federici: "Los capitalistas se organizan internacionalmente, nosotras debemos hacer lo mismo"

Capitalismo & Feminismo
http://www.laizquierdadiario.com
En encuentros y actividades organizadas por la Fundación Rosa Luxemburgo y la editorial Tinta Limón, Silvia Federici está presentando, en estos días, su libro "El patriarcado del salario. Críticas feministas al marxismo".
Con un amable castellano, Silvia Federici recibió a un grupo de periodistas de medios alternativos y comunitarios en la sede que la Fundación Rosa Luxemburgo tiene en el barrio de Chacarita. Italiana de nacimiento, pero residente en Estados Unidos desde 1967, a dónde marchó para estudiar Filosofía, Federici tuvo una activa militancia en los años ’70 y hoy sus libros son verdaderos best-sellers para una generación de jóvenes feministas. Son bien conocidas sus críticas al marxismo y a los partidos de izquierda, hoy concentradas en El patriarcado del salario, aunque no deja de señalar los aportes que las lecturas de Marx han hecho al feminismo y las luchas de las mujeres. Heredera de una corriente de pensamiento autonomista y recorriendo, luego, otros caminos propios y particulares, Federici inscribe su preocupación por el reconocimiento del trabajo reproductivo de las mujeres, en un feminismo anticapitalista. 
Conversando con periodistas de medios alternativos 
Desde el inicio de la conferencia de prensa, se deslinda de lo que ella define como un "marxismo ortodoxo que siempre miró sólo la fábrica y el proletariado industrial, invisibilizando a otros movimientos y sujetos sociales." Pero yo tenía la oportunidad de hacer una única pregunta, así que en vez de usar ese tiempo en responder su crítica al marxismo, me preocupé porque mi interrogante obtuviera una respuesta de su parte que resultara realmente provechosa. Mientras tanto, las compañeras periodistas continuaban este diálogo sobre su nuevo libro y sobre distintos temas de la coyuntura nacional e internacional. Una de ellas preguntó si era posible un feminismo que no fuera anticapitalista. "Hay muchos feminismos, y muchos no son anticapitalistas. En los últimos cuarenta años, desde mediados de los ’70, el feminismo se fue institucionalizando, se hizo un feminismo de Estado, un feminismo de la ONU que se presenta ahora como quién nos emancipa. Ese feminismo dominante es pro-capitalista neoliberal. 
Impone una agenda domesticada, usando nuestro propio lenguaje para fundamentar la incorporación de las mujeres a la economía neoliberal, siendo las más precarizadas bajo la mistificación de la emancipación." Prosiguió: "Un feminismo que parta de la experiencia de las mujeres en su trabajo de reproducción, su trabajo doméstico, tiene que ser anticapitalista. El capitalismo sólo fue capaz de dar prosperidad para algunos sectores y por determinado tiempo limitado, mientras para la mayoría de las mujeres, nada." Con Silvia Federici hemos polemizado en un artículo titulado "Nosotras, el proletariado", precisamente, por la supremacía que le adjudica al trabajo reproductivo en el funcionamiento del capitalismo, al que considera más fundamental aún que a los mecanismos de extracción de plusvalía en el ámbito del trabajo extradoméstico. "El trabajo doméstico tiene una contradicción interna", dijo Federici, "porque reproduce la vida, pero en las sociedades capitalistas ese trabajo sirve para reproducir la existencia del capital, mediante la reproducción de la fuerza de trabajo. 
Es el trabajo más importante de la sociedad." Otras compañeras se adentraron en algunos de los temas que fueron debatidos durante este año en el movimiento de mujeres de Argentina, en las grandes movilizaciones del 8 de marzo y por el derecho al aborto. Hubo quien comentó sobre cómo el gobierno de Macri se había reapropiado de una agenda feminista, de manera oportunista y otra que preguntó cuál debería ser el rol de los compañeros varones en las marchas de mujeres. "Los varones que apoyan, al fondo de la marcha", respondió sonriendo Silvia Federici y eligió hablar de otra ubicación, de la ubicación política: "Deben elegir dónde se ubican en esta lucha de las mujeres: si lo harán para reafirmar las jerarquías o para abolirlas". 
También aprovechó para hablar de la violencia machista: "La violencia contra las mujeres es un sabotaje de la lucha anticapitalista". Aunque la lectura de sus libros, incluido El patriarcado del salario, me había despertado varios interrogantes, a mi turno tuve que decidirme por una única pregunta y planteé que, en general, se habla de los efectos negativos de la asalarización de las mujeres, porque se incorporan a trabajos muy precarios y además cargan con la doble jornada que representa el trabajo reproductivo no remunerado; pero que, actualmente, la mitad de la clase trabajadora asalariada son mujeres. 
¿Qué efectos puede tener, no sobre las mujeres que es lo que ya conocemos, sino sobre el conjunto de la clase trabajadora, sus luchas, sus organizaciones, su burocracia sindical y sus representaciones –que siempre fueron masculinizadas-, que la mitad de la clase sean mujeres? Tenía en mente el impacto que, en Argentina, está teniendo el movimiento de mujeres –mayoritariamente juvenil- entre las trabajadoras de la salud, docentes, trabajadoras de diferentes gremios y ramas de la producción y los servicios que están enfrentando el ajuste impuesto por el gobierno nacional y el FMI. Pensaba en cómo, a su vez, ellas interpelan a sus compañeros de trabajo. 
"Un efecto ya inmediato es el nuevo interés de muchas mujeres sobre la socialización del trabajo reproductivo; porque se ha quebrado la ilusión de que salir de la casa para hacer otro trabajo extradoméstico es emancipatorio. En los ’70 hubo un período en que las mujeres que salían a trabajar fuera de su hogar, reclamaban tiempo para amamantar, reformas en la organización del trabajo en función de sus capacidades reproductivas. Pero mientras tanto, se estaba desmantelando la gran industria como la habíamos conocido hasta el momento. 
Esta temática de cómo unir las dos partes del trabajo, productivo y reproductivo, vuelve a tener importancia. Estamos asistiendo a una gran crisis de la reproducción. El derecho al aborto y a la maternidad, el rol reaccionario de la Iglesia católica y los sectores fundamentalistas, el avance de la derecha en el continente, la depredación de la naturaleza y muchos otros temas se fueron desplegando a lo largo de casi dos horas de conferencia de prensa. Cuando compararon a Bolsonaro de Brasil con Trump, aprovechó también para desligarse del Partido Demócrata norteamericano. "El peligro de la derecha, como la que representa Trump, es que se termina idealizando lo anterior, como Obama, del Partido Demócrata. Lo peor de las últimas décadas en Estados Unidos, lo hicieron los demócratas. 
La alternancia en el poder de estos dos partidos es funcional al sistema." Terminó la conferencia de prensa. Mientras las periodistas salían de la sala, Silvia permaneció en su silla. Pensé que podía aprovechar la ocasión para hacerle una pregunta más de la que tenía permitida. Me invitó a sentarme a su lado y seguimos conversando por más de media hora. Le planteé que me inquietaba su afirmación sobre los comedores comunitarios y otras organizaciones impulsadas por mujeres, que permiten paliar el hambre en las barriadas populares. Que si bien permitían restablecer nuevas formas de relaciones y lazos comunitarios, como ella decía, se trataba de organizaciones para la resistencia, que surgían de las necesidades más acuciantes, de la emergencia que impone el ajuste estructural de la economía; que, entonces, teníamos que pensar cómo pasar a la ofensiva, sin idealizar las formas organizacionales a las que nos empuja la miseria capitalista para sobrevivir. 
Me dijo que estaba de acuerdo con que eran formas de resistencia que surgían como consecuencia de la emergencia de la crisis y me preguntó: "Pero, acaso, ¿no viven permanentemente en situaciones de emergencia las mujeres bajo este sistema?" Añadió: "Sé que, una vez que se estabiliza la situación económica, muchas mujeres vuelven al lugar donde estaban antes. Pero creo que la lucha debe ser constituyente, construir nuevos entramados y redes, desplegar la creatividad. Porque de esa manera, lo nuevo se va construyendo en la lucha misma y no hay que esperar a algún futuro lejano." No me dejó muy convencida; pero seguimos hablando de política. 
Le pregunté su opinión sobre el fenómeno Sanders en las últimas elecciones norteamericanas. Me quiso alertar de que Bernie Sanders no era verdaderamente socialista y le aclaré que yo no creía eso, pero que me parecía interesante el surgimiento de una generación de jóvenes norteamericanos abiertos a escuchar algunas ideas que, para Estados Unidos, parecían bastante radicales. "Sí, eso es cierto. Pero Sanders terminó apoyando a Hillary Clinton y el peligro es que, de ese modo, toda una generación caiga en el escepticismo y el cinismo". 
Enseguida me preguntó cómo podía ser que nadie dijera más nada contra el Papa, en Argentina, cuando se sabe que Bergoglio fue indagado por casos de robos de bebé durante la dictadura militar, como también por la desaparición de dos sacerdotes de la orden jesuita. Le dije que el Papa tenía una influencia muy directa en la política nacional, que mantiene vínculos con funcionarias y funcionarios del gobierno, pero también con sectores políticos y sindicales del PJ y el kirchnerismo, con movimientos sociales. Ya estaba al tanto de que se había hecho una movilización de sectores sindicales y políticos del arco opositor, hacia la Basílica de Luján para pedir pan y trabajo. Le parecía un grave error. Para ella, criada en la Italia de posguerra, la Iglesia es sinónimo de fascismo. 
Conversando con sindicalistas 
Al día siguiente, Silvia Federici se reunió con mujeres sindicalistas. Las organizadoras tuvieron la amabilidad de invitarme, una vez más. Federici volvió sobre los mismos tópicos, aunque esta vez, a diferencia de la conferencia de prensa, se trató de una conversación colectiva. Nuevamente se diferenció de la izquierda partidaria, señalando que contrariamente a lo que decían las corrientes políticas, que el sujeto primario era el obrero industrial, ella sostiene que "la cadena de montaje capitalista comienza en nuestras cocinas y nuestras camas." Remarcó que el trabajo doméstico es fundamental. "¿Por qué siendo tan importante, está invisibilizado? Por eso, porque es muy importante. 
Porque los patrones se verían obligados a pagarlo, no podrían acumular tanta riqueza como acumulan si fuera reconocido." Sin embargo, contra la posibilidad de interpretar que la lucha feminista es una lucha contra los varones, añadió: "Los reales beneficiarios de este trabajo son los hambreadores, los capitalistas." "Cambiar esta situación implica darle más poder a las mujeres, cambiar las relaciones con los hombres. A través del salario, el capital ha delegado en los hombres, el poder de controlarnos y controlar nuestro trabajo. La violencia doméstica siempre ha sido tolerada por el Estado, en gran medida, porque es parte del disciplinamiento del trabajo doméstico." Para Federici, este planteo que hicieron en los años ’70, cuando conformó con otras feministas la Campaña Internacional por el Salario para el Trabajo Doméstico, era "una medida para cambiar las relaciones de poder entre hombres y mujeres y empezar una lucha, pero teniendo más poder. No era la revolución. Algunas feministas nos acusaban de institucionalizar el lugar de la mujer en la casa, su encarcelamiento en el hogar. Pero nuestra respuesta era que las mujeres obreras nos decían que ya estaban encarceladas." 
Luego se refirió al papel que jugaron las profesoras y maestras en las recientes huelgas docentes en Estados Unidos. Ellas luchaban no sólo por sus reivindicaciones sino también porque se preguntaban "qué vamos a hacer con nuestros estudiantes, que no comen". Volviendo sobre el tema de los sindicatos, añadió: "Los hombres y las mujeres migrantes han encabezado las luchas en Estados Unidos, por la sindicalización. Sólo el 9% de los trabajadores norteamericanos están sindicalizados. 
Los únicos sindicatos fuertes son los de maestras y maestros. Y es un sector estratégico porque son un punto de unión entre el mundo del salario y el mundo del hogar." Quise retirarme antes de que la acusaran a Silvia de "trosquearla" con estas aseveraciones. 
Mientras me alejaba por la avenida Paseo Colón, me resonaba algo en lo que Federici había sido explícita y que, a pesar de nuestras diferencias, también compartimos: "El feminismo debe ser internacionalista. Los capitalistas se organizan internacionalmente, nosotras debemos hacer lo mismo."