10/24/2015

Programa Tiempo de Mujeres en CFRU la radio universitaria de Guelph sabado 24 octubre 2015

TIEMPO DE MUJERES
Desde cfru 93.3 fm la Radio de la Universidad de Guelph
en Ontario, Canadá
escuchalo cada sabado en www.cfru.ca

MUJERES POR LA DEMOCRACIA
Bienvenida al programa de hoy
Noticias de Género en la Red
Género en la mira con
de vacaciones por motivos academicos

como siempre decimos la organizacion es la base de la sociedad, unidas podemos llevar a cabo las tareas mas dificiles, y los encuentros de mujeres en el mundo han podido cambiarlo, es por eso que estamos atentas a estas reuniones de mujeres en diversas partes de nuestro planeta, hoy toca a mi bello Mexico que arropo el Encuentro Nacional Feminista y tenemos su posicionamiento y una entrevista con una de las participantes, es importante reunirnos porque juntas podemos exponer, analizar y resolver los problemas que nos aquejan, exigir a nuestros gobiernos el respeto de nuestros derechos y espacios, pero tambien proponer soluciones y trabajos para mejorarlos, asi que hoy hablaremos sobre,  , 

En el espacio de Lorena tenemos una entrevista con la Psicologa Adriana Bautista integrante de la Red de Feministas Peninsulares y de la Escuelita Popular Feminista, ambas exponen lo sucedido en el Encuentro Nacional Feminista en Mexico,

Y por que es importante que nos organicemos, bueno la organizacion nos da la fuerza necesaria para llevar a cabo acciones contra quienes nos afectan por intereses diversos y ajenas a nuestra seguridad y respeto, en programas anteriores hemos hablado de la errada posicion de Amnistia Internacional con respecto su posicion en la Reunión del Consejo Internacional (RCI), que se celebró en Dublín, Irlanda, en agosto pasado, donde debatieron y aprobaron de manera preliminar la “política sobre las obligaciones del Estado de respetar, proteger y hacer realidad los Derechos Humanos de las personas dedicadas al trabajo sexual, todas sabemos que la prostitucion esta arropada por diversos delitos entre ellos desaparicion, esclavitud, violencia, homicidios, etc, esa política es contraria a la misión de cualquier organismo que se diga defensor de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que establece el derecho de toda persona a vivir una vida llibre digna y sin violencia, así como a los derechos de las mujeres establecidos en la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer (CEDAW, por sus siglas en inglés)

'Lento avance en la lucha contra la desigualdad de género'
Y es gracias a estas organizaciones que existen datos sobre las necesidades de las mujeres y que Organismos Internacionales obtienen las  estadisticas de avances y retrocesos en diversos paises en cuestiones de genero, ya que nuestras naciones han firmado tratados y convenios internacionales y son instrumentos que nos permiten presionar mas para obtener politicas publicas de avance para las mujeres y las ninas,  por lo que existe un informe llamado 'Las mujeres en el Mundo' , que se publica cada cinco años y es preparado por la División de Estadística de la ONU. este documento ofrece un análisis comparativo de la situación de los hombres y las mujeres en los países del mundo, lo que permite medir resultados y exponer propuestas,  

Huertos periurbanos germinan en manos de mujeres bolivianas
para terminar tenemos la historia de un grupo de mujeres bolivianas que organizadas an podido llevar a cabo un proyecto que les ha permitido independizarse y servir a su comunidad Mujeres de la Asociación de Productores Urbanos de Sucre, de barrios de la periferia de la capital oficial de Bolivia, nos muestran como han podido cosechar  hortalizas ecológicas en sus huertos tipo invernadero, con los que han mejorado la alimentación y la economía de sus familias,

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Activistas contra la trata “clausuran” sede de AI-México


   Repudian política de despenalizar explotación sexual comercial

La Coalición Regional contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe (CATWLAC, por sus siglas en inglés) clausuró simbólicamente las instalaciones de Amnistía Internacional (AI) en México, en rechazo a la propuesta de este organismo para despenalizar la explotación sexual comercial.

Defensoras de víctimas de trata de personas y explotación sexual se manifestaron hoy en esta capital con una manta de metro y medio de largo (con imágenes de niñas y adolescentes desaparecidas), y una cartulina con la palabra “clausurado” frente a las instalaciones de AI-México, ubicadas en la calle Luz Saviñón, en la colonia Narvarte.

Encabezadas por Teresa Ulloa Ziáurriz, directora regional de CATWLAC, las activistas –entre quienes iban familiares de víctimas de trata– protestaron porque durante la Reunión del Consejo Internacional (RCI), que se celebró en Dublín, Irlanda, en agosto pasado, las y los delegados de AI debatieron y aprobaron de manera preliminar la “política sobre las obligaciones del Estado de respetar, proteger y hacer realidad los Derechos Humanos de las personas dedicadas al trabajo sexual”.

De acuerdo con Ulloa, quien lleva más de 20 años atendiendo a las víctimas de este flagelo, esa política es contraria a la misión de AI de defender la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que establece el derecho de toda persona a vivir una vida digna y sin violencia, así como a los derechos de las mujeres establecidos en la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer (CEDAW, por sus siglas en inglés).

La activista denunció que esa política –presuntamente impulsada por Estados Unidos y aprobada por países de América Latina, Asia y África– plantea despenalizar totalmente el “comercio sexual”, incluyendo a proxenetas, dueños de burdeles y prostituyentes.

Señaló que si bien está de acuerdo con AI en que las personas en condición de explotación sexual comercial no deben ser penalizadas o sancionadas en ninguna jurisdicción, rechaza la decisión del organismo de despenalizar el sistema de explotación sexual que está basado en historias de “opresión, racismo, colonialismo, esclavitud, genocidio, naturalización de la violencia y la discriminación, principalmente contra las mujeres afrodescendientes, pobres y víctimas de violencia sexual, económica, incesto y marginación”.

La experta informó que 76 por ciento de las mujeres que actualmente están en condición de explotación sexual comercial iniciaron a los 12 años de edad, y muchas de ellas fueron víctimas de violencia sexual desde sus hogares.

“Hasta los 18 años ellas son consideradas como víctimas (porque son menores de edad), pero cuando cumplen los 18 (luego de vivir años de explotación sexual) ¿ya se convierten automáticamente en trabajadoras?”, cuestionó la también abogada.

CATWLAC también expresó su rechazo al término de “trabajo sexual” que defiende AI, ya que –observó– fue creado por la “industria sexual” perpetuada por los intereses multimillonarios de las redes del crimen trasnacional organizado y sostenida por los prostituyentes, quienes –en algunos países– también son considerados como “trabajadores sexuales”, por lo que con la política de AI podrían resultar absueltos del delito de comercializar el cuerpo de las mujeres.

El organismo también criticó que AI no haga mención a investigaciones o estudios y a un marco jurídico más amplio relacionado con la explotación sexual comercial y sus consecuencias, además de que ignorara la visita que las activistas hicieron a las oficinas de AI-México previo a la reunión en Dublín.

Ulloa llamó a que AI se posicione en solidaridad con las personas en situación de explotación sexual comercial, y que consulte con profesionales de la salud e investigadoras que reúnen datos sobre los profundos daños físicos, psicológicos y traumáticos –incluso la muerte– que enfrentan las mujeres en esta condición.

AI-MÉXICO SE REUNIRÁ CON CATWLAC

Luego de que la activista terminara de leer su pronunciamiento, la coordinadora de Incidencia de AI-México, Chasel Colorado, salió del recinto para recibir formalmente el documento de CATWLAC.

Cuestionada por la postura de AI frente al llamado de Ulloa, Colorado Piña precisó que todavía ningún país ha aprobado totalmente ni implementado esta política; sin embargo, durante la etapa de discusión sí fue aprobada. Explicó que lo que se aprobó fue “un primer borrador” del proyecto que aún tendrá que ser discutido por el Comité Ejecutivo de AI.

En breve entrevista con esta agencia, la representante de AI-México defendió la postura de que hay mujeres que se “autodefinen” como trabajadoras sexuales, y que es una actividad que ellas han elegido en contraste con las víctimas de trata de personas que están sometidas a regímenes de dominación, por lo que se debe garantizar su derecho a “trabajar en lo que ellas han decidido” y evitar que sean objeto de abusos.

La también experta en Derecho Internacional no precisó si esa política también aplicará para dejar sin sanción a los proxenetas, toda vez que –aseguró– la política aún no se discute a ese grado.

Chasel Colorado aclaró que AI siempre ha estado presente en la lucha por los derechos femeninos, principalmente los vinculados con la violencia de género, y los derechos sexuales y reproductivos.

Invitó a Teresa Ulloa para que la próxima semana se reúna con ella a fin de intercambiar información y profundizar en la discusión de esa política.

CATWLAC informó que esta clausura simbólica se hizo en paralelo en otros países del mundo por parte de otras organizaciones civiles que atienden a mujeres en condición de explotación sexual comercial, así como familiares de víctimas, para evitar que AI apruebe esta política, además de que se juntaron a nivel mundial 25 mil firmas en repudio a la propuesta.

AI también entregó hoy por escrito a los medios de comunicación su pronunciamiento global respecto a este tema, en el que se explica que las y los trabajadores sexuales son uno de los “grupos más marginados del mundo y que enfrentan una serie de abusos tales como la violación, las palizas, la trata de personas, la extorsión, el desalojo forzoso y la discriminación”.



CIMACFoto: César Martínez López
Por: Angélica Jocelyn Soto Espinosa
Cimacnoticias | México, DF.-

Exigirán AVG porque códigos transgreden derechos de mujeres


   Activistas de Chihuahua la solicitarán por “agravio comparado”


Ante la negativa del Congreso del estado de Chihuahua para reformar los códigos de Procedimientos Civiles y de Procedimientos Familiares, que violentan las garantías humanitarias de la población femenina, el Centro de Derechos Humanos de las Mujeres de Chihuahua (Cedehm) solicitará para la entidad una Alerta de Violencia de Género (AVG) por “agravio comparado”.

La solicitud ya se hizo del conocimiento de Alejandra Negrete Morayta, titular de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), quien se comprometió con el Cedehm a avalar la petición de AVG.

En entrevista con Cimacnoticias, Luz Estela (Lucha) Castro Rodríguez relató que el martes pasado la organización tuvo una reunión urgente con la funcionaria y con Ángela Quiroga, titular de la Fiscalía Especial para los Delitos de Violencia Contra las Mujeres y Trata de Personas (Fevimtra), para abordar la violencia contra las niñas, adolescentes y mujeres en Chihuahua, y en especial en la Sierra Tarahumara, región donde además ellas son víctimas de discriminación y pobreza extrema.

Al mismo tiempo se denunció el incumplimiento del gobierno de Chihuahua a las recomendaciones del Sistema Nacional para Prevenir, Atender, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (SNPASEVM), que ordenaban hacer compatibles las leyes con los derechos femeninos.

Y es que en julio pasado, el Sistema Nacional –integrado por dependencias federales, incluida la Secretaría de Gobernación (Segob) y los institutos de las Mujeres en las entidades federativas–instó a los poderes Ejecutivo y Legislativo del estado a modificar los códigos promulgados el 23 de julio de 2014.

El SNPASEVM llamó a adoptar las medidas necesarias para que los códigos de Procedimientos Civiles y de Procedimientos Familiares incluyeran “una perspectiva de género adecuada, y sean compatibles con los Derechos Humanos (DH) de las mujeres y los estándares internacionales en la materia”.

Tales normas –como denunciaron activistas en su momento– permiten la práctica de la conciliación sin diferenciar los casos de violencia familiar, lo cual contraviene la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia (LGAMVLV) y los estándares internacionales en la materia, “que establecen que en relaciones de sometimiento entre la persona agresora y la víctima de violencia, los procedimientos conciliatorios son inviables”.

No obstante la petición del Sistema Nacional, este martes 20 de octubre el Congreso de Chihuahua aprobó nuevamente “los códigos violatorios” a los tratados internacionales que México ha ratificado, contraviniendo el principio de igualdad y no discriminación, advirtió Lucha Castro.

Irma Villanueva, coordinadora del área jurídica del Cedehm, abundó que tras el pronunciamiento del Sistema (en julio pasado), el Centro, junto con otros grupos civiles, propuso mesas de trabajo para adecuar las normativas y plantear la creación del Código Familiar, hasta ahora inexistente en la entidad, así como la revisión del Código Civil vigente desde 1974.

Cabe recordar que Chihuahua fue la primera entidad del país en transitar de un sistema de justicia penal inquisitivo a uno acusatorio (juicios orales). Fue en 2006 cuando se aprobó el nuevo Código de Procedimientos Penales del estado.

Villanueva narró que las mesas de trabajo tuvieron que ser canceladas, luego de que integrantes del Congreso estatal “faltaran a su compromiso” y presentaran a las organizaciones civiles los mismos códigos, pero con supuestos cambios que retomaban las observaciones del Sistema Nacional.

El pasado 29 de septiembre, con la presencia de todos los coordinadores parlamentarios, se suscribió un compromiso que consistió en enviar a especialistas, entre ellos la académica Alda Facio, del Programa Mujer, Justicia y Género del Instituto Latinoamericano de Naciones Unidas para la Prevención del Delito y Tratamiento del Delincuente (Ilanud), con sede en Costa Rica, los códigos procedimentales para su revisión y modificación.

De nueva cuenta –afirmó Irma Villanueva– sin respetar el plazo pactado para la revisión de las y los expertos, el Congreso chihuahuense aprobó los ordenamientos legales sin tomar en cuenta las observaciones de las organizaciones civiles.

De acuerdo con el Cedehm, la aprobación de este martes obedece a una exigencia del gobernador estatal, César Duarte, quien en la reciente visita de Enrique Peña Nieto a la entidad insistió en que inaugurará la llamada Ciudad Judicial en la capital del estado y se “vanaglorió con los códigos”.

Ante estas supuestas irregularidades del Congreso local, el Cedehm prepara una solicitud de AVG por “agravio comparado”, que deberá ser presentada en breve ante el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), tal y como lo mandata el Reglamento de la LGAMVLV.

De acuerdo con la ley y su respectivo reglamento, se puede solicitar una AVG por “agravio comparado” cuando un ordenamiento jurídico o las políticas públicas en un territorio determinado impidan el reconocimiento o el ejercicio pleno de los DH de las mujeres, protegidos en todos aquellos instrumentos internacionales reconocidos y ratificados por el Estado mexicano.

Una vez que sea admitida la solicitud se conformará un Grupo de Trabajo –integrado por representantes de la academia y de dependencias federales y estatales–, que analizará la petición y determinará la procedencia o no de la AVG.


CIMACFoto: César Martínez López
Por: Anaiz Zamora Márquez
Cimacnoticias | México, DF.- 

ENF se pronuncia por Alerta de Violencia de Género nacional


   ENCUENTRO NACIONAL FEMINISTA
   Estado “misógino y patriarcal” agrede a todas las mexicanas

Con un fuerte llamado a erradicar las distintas formas de discriminación que enfrentan los mujeres, y que en su forma más extrema se traducen en feminicidio, concluyó este domingo el X Encuentro Nacional Feminista (ENF) que se realizó en esta capital mexiquense.

Luego de tres días de trabajo, en los que se realizaron mesas de debate, talleres, conferencias y se formaron redes de mujeres, las feministas se pronunciaron por una Alerta de Violencia de Género (AVG) nacional ante la realidad que viven las mexicanas en todo el país.

En el resolutivo final del ENF 2015 se denuncia que la discriminación contra las mujeres es “múltiple y diversa”, y que en sus manifestaciones más extremas se traduce en feminicidio, flagelo que padecen las mexicanas en todo el territorio nacional.

Las más de mil mujeres provenientes de 30 estados del país concluyeron que las mexicanas viven en un Estado “misógino y patriarcal” que desde diversas formas las violenta; por ejemplo, mediante la prohibición del aborto legal, la violencia sexual, y la trata de personas, entre otras problemáticas.

Para las feministas, otra forma de agresión la constituye la desaparición forzada, delito que se ha incrementado en las últimas décadas, ello en un contexto donde no se han destinado los mecanismos necesarios para erradicar la violencia y la delincuencia.

Al mismo tiempo, denunciaron que no se ha reconocido el trabajo que las feministas han realizado por el reconocimiento y defensa de los derechos de las mujeres, y que la integración de las feministas a la política, si bien ha traído avances legislativos importantes, ha mermado la articulación feminista.

“El cuerpo de las mujeres sigue siendo un lugar para violentarnos y agredirnos, particularmente en la prohibición del derecho a decidir, al mismo tiempo que la expoliación sexual y la desaparición constituyen mecanismos de control de nuestro cuerpo”, dijeron.

   

La feminista Enma Obrador señaló que si bien existen avances importantes, “estos se encuentran permeados por una simulación de las autoridades, que sólo traducen las necesidades de las mujeres en una imagen pública políticamente correcta”.

Propuso incorporar a la currícula educativa una materia de Derechos Humanos para agendas de formación feminista y género, así como incrementar las acciones de divulgación de la lucha feminista y la articulación del movimiento. “Juntas somos invencibles”, remató Obrador.

En la plenaria general previa al cierre del ENF se presentaron las conclusiones de las distintas mesas de trabajo.

Por ejemplo, las jóvenes se pronunciaron porque el movimiento feminista incida para que las políticas públicas sean pensadas desde la visión de las juventudes, ya que actualmente sus necesidades son excluidas.

Propusieron también que las políticas de atención contra el cáncer de mama (CaMa) tomen en cuenta a las jóvenes, pues actualmente para acceder a una mastografía deben esperar a tener 40 años de edad. Además demandaron que se ponga más atención en la infección del Virus de Papiloma Humano (VPH) y no sólo en el cáncer cérvico uterino (CaCu).

Por su parte, la mesa de “Política y género” llamó a sus compañeras a no dejar de vigilar que se cumpla la paridad “horizontal” y “vertical” en todos los ámbitos de gobierno, así como a apoyar la tipificación de la violencia política como un delito.

Las afromexicanas, que por primera vez acudieron al ENF, exigieron que se les reconozca en la Constitución, mientras que las indígenas continúan empujando el reconocimiento de sus saberes tradicionales.

Finalmente, se acordó que el próximo ENF, a realizarse en 2017, tenga como sede el estado de Puebla, mientras que la reunión preparatoria se realizará en Guerrero, como parte del apoyo que las feministas dan a las madres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa.

CIMACFoto: Anaiz Zamora Márquez
Por: Anaiz Zamora Márquez, enviada
Cimacnoticias | Toluca, Edomex.- 

Lento avance en la lucha contra la desigualdad de género


 

Mujeres activistas se oponen a un nuevo proyecto de Constitución que agravaría la desigualdad de género. Crédito: Post Bahadur Basnet
Mujeres activistas se oponen a un nuevo proyecto de Constitución que agravaría la desigualdad de género. Crédito: Post Bahadur Basnet
NACIONES UNIDAS, 22 oct 2015 (IPS) - Si bien el estatus de las mujeres mejoró en muchos aspectos en los últimos 20 años, el avance sigue siendo lento, remarca el informe “Las mujeres en el mundo”, del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales (DESA) de la Secretaría de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
En su sexta edición, el informe que examina el estatus de mujeres y hombres en el mundo coincidió con el 20 aniversario de la histórica Declaración y Plataforma de Acción de Beijing.
En particular, las mejoras se registraron en la esperanza de vida, la mortalidad materna y en materia educativa.
La esperanza de vida aumentó cinco años y las mujeres viven en promedio hasta los 72 años, y los hombres, hasta los 68. Esto obedece, en parte, a la disminución de la mortalidad materna, que entre 1990 y 2013 disminuyó 45 por ciento.
La brecha de género en la educación también se achicó, pues la participación tanto de niños como de niñas aumentó en todos los niveles de enseñanza.
Sin embargo, quedan profundas desigualdades, que constituyen un desafío hacia el futuro.
Por ejemplo, las jóvenes y las adolescentes son desproporcionadamente más vulnerables y corren mayor riesgo de contraer el VIH (virus de inmunodeficiencia humana), causante del sida. Según Onusida, 15 por ciento de las mujeres seropositivas mayores de 15 tienen entre 15 y 24 años. De las cuales, 80 por ciento viven en África subsahariana.
“Eso se debe a que no solo los sistemas de salud están poco desarrollados, sino que son incapaces de atender las necesidades de las mujeres, así como cuestiones de género”, señala el informe “Las mujeres en el mundo”, presentado el martes 20.
Lento avance en la lucha contra la desigualdad de género
Conferencia de Prensa del documento Las mujeres en el Mundo 2015. Lenni Montiel (Centro), Subsecretario General adjunto de la ONU para Asuntos Económicos y Sociales. Crédito: ONU/Eskinder Debebe.
Entre las cuestiones de género desatendidas se destaca el deficiente acceso a la educación, el matrimonio precoz, la falta de poder de decisión y la violencia contra las mujeres.
A pesar de los logros en la matrícula escolar, hay 58 millones de niñas y niños fuera de la escuela, y más de la mitad son niñas. Además, el informe subraya la elevada prevalencia del matrimonio infantil.
En 2010, alrededor de 26 por ciento de las mujeres de entre 20 y 24 años se habían casado antes de los 18, apenas cinco por ciento menos que en 1995. Esas proporciones aumentan en Asia meridional y África subsahariana.
En Asia meridional, 44 por ciento de las mujeres de entre 20 y 24 años se habían casado antes de cumplir los 18, y en África subsahariana, 44 por ciento.
El matrimonio infantil no solo es una violación a los derechos humanos, sino que eleva la exposición de las mujeres y las niñas al riesgo de sufrir violencia doméstica, subraya el informe.
DESA remarca que la violencia contra las mujeres sigue siendo un “motivo real de preocupación mundial”, pues una de cada cuatro mujeres sufrió violencia física y/o sexual y 60 por ciento de las víctimas no denunció el ataque ni buscó ayuda.
Además, las mujeres que sufrieron violencia de su pareja sentimental tienen 50 por ciento más de probabilidades de vivir con VIH que las que no soportaron esa experiencia.
Frente a estas desoladoras estadísticas, el informe destaca la creciente disponibilidad de datos en materia de género, que son esenciales para comprender las tendencias a escala mundial.
“Antes del primer informe, no había nada parecido a estadísticas de género en el mundo”, recordó el subsecretario general adjunto de DESA para el desarrollo económico, Lenni Montiel, en conferencia de prensa con motivo de la presentación del informe de este año.

El lanzamiento también coincidió con el Día Mundial de la Estadística, conmemorado el mismo martes 20 bajo el lema “Mejores datos, mejores vidas”.
“Los buenos datos y estadísticas son indispensables para que los actores de la sociedad puedan tomar decisiones de forma informada”, remarcó el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
“Debemos asegurarnos que se cuenta a todo el mundo, en especial a los más pobres y vulnerables”, puntualizó.
Sin embargo, todavía hay países que fallan en la recolección de datos.
La directora de la sección de Estadísticas Sociales y de Vivienda de DESA, Francesca Grum, reveló que no habían datos disponibles de Medio Oriente sobre la magnitud de la violencia machista.
“Medir la violencia contra las mujeres es relativamente nuevo. Recién ahora trabajamos con los países para asegurarnos de que adopten medidas estándares”, subrayó Grum, una de las autoras del informe.
Desde 1990, las sucesivas ediciones de “Las mujeres en el mundo” se concentran en ocho aspectos primordiales: población y familia, salud, educación, trabajo, poder y toma de decisiones, violencia contra las mujeres, ambiente y pobreza.

Lorena Cabnal: defensora del cuerpo-tierra de las mujeres


   ENTREVISTA
   “Complejo” ser feminista indígena en comunidades patriarcales


Originaria del pueblo Xinca-maya de Guatemala, Lorena Cabnal reivindica los Derechos Humanos (DH) de las guatemaltecas, y se define a sí misma como feminista y defensora comunitaria, aunque serlo en este país centroamericano “es complejo”, dice en entrevista con Cimacnoticias durante su participación en el “Encuentro de Corresponsales Voces Nuestras”.

Para la socióloga de profesión, ser defensora del territorio significa defender las tierras ancestrales, los bienes naturales, el agua, los monocultivos… la vida misma.

“Es una lucha ancestral de los pueblos que no nació hace 524 años con la colonización, pues las feministas guatemaltecas planteamos que es una lucha histórica desde antes de la colonización. Esta etapa es la cuna perfecta para esta disputa por la vida y por el territorio y los cuerpos, cuerpos esclavizados, si no, basta recordar toda la violencia sexual sobre los cuerpos de las indígenas”, señala.

Y agrega: “Ha habido toda una continuación histórica de violencia, de racismo, de discriminación, de capitalismo y de liberalismo arremetiendo sobre la vida de las comunidades y de los cuerpos, por eso es que decimos que somos defensoras ancestrales no sólo de DH sino de la naturaleza, y a eso hay que remitirse cuando se construye el Estado Nación colonial, y debajo de éste, perviviendo de una manera oprimente, la vida de los pueblos”.

Para la guatemalteca e integrante de la Red de Sanadoras Feministas Comunitarias, su lucha no es sólo contra el racismo o el neoliberalismo, es plural, y darla ahora en este contexto es complicado.

Quien también forma parte de la Alianza Frente a la Criminalización contra Defensoras y Defensores de DH y Bienes Naturales, recuerda que una estrategia política que se utilizó en la guerra contra las defensoras fue la violencia sexual, y hoy de nuevo se está imponiendo y utilizando en el caso de las mujeres que defienden la tierra.

“Yo creo que ahí colocar el cuerpo, en la línea frontal del ataque, es sumamente complejo, ser mujer y ser defensora es sumamente complejo”, advierte Lorena Cabnal.

DESARMONIZACIONES EN LA VIDA
 

–Lourdes Godínez Leal (LGL): ¿Cómo te asumes feminista?
–Lorena Cabnal (LC): Yo creo que asumirse feminista pasa por una decisión personal y consciente, y en mi caso, en mi historia, me llevó a buscar elementos para acercarme a conocer qué era eso que se llamaba feminismo.

“Creo que se me abrieron los ojos cuando me di cuenta que había ¡más de 50 feminismos en el mundo! Pasé por muchas interpelaciones personales sobre qué tipo de feminista era, pero luego me di cuenta que entre estos feminismos sentía vacíos.

“Y es que en ese momento, de los feminismos que leía, no me dieron el sustento político y categórico que necesitaba para hacer reinterpretaciones de la vida como mujer indígena en una comunidad indígena”.

–LGL: ¿Qué necesitabas?
–LC: Por ejemplo, yo sentía que la interpretación del machismo no pasa en la comunidad, el género como tal, como construcción categóricamente como tal. ¿Cómo lo traduces a la vida comunitaria para que haya una comprensión de lo que se está planteando como una subordinación histórica y una relación de poder desigual de cuerpos sobre otros, de cuerpos masculinos sobre cuerpos femeninos?

“¿Entonces cómo la traduces? y luego parece que hace clic en ti y empiezas a interpretar y reinterpretar, y entonces creo que ahí es donde empiezo a plantearme cuál es esta otra codificación  comunitaria.

“Ahí es donde empiezo a sentir que las cosmogonías –que son diferentes interpretaciones de la vida– tienen elementos hermosos que interpelan las desarmonizaciones en la vida, y las maneras como se van a interpretar en los pueblos es diferente.

“Y entonces los elementos que me proveyeron diferentes feminismos occidentales entonces sí que se van a convertir en unos elementos que me permiten acercarme a hacer otras interpretaciones de la vida comunitaria ¡y no le voy a nombrar como tal dentro de la comunidad!

“Decir por ejemplo recuperación del territorio cuerpo-tierra te está situando en una relación de armonización o desarmonización; te está hablando de relaciones desiguales de poder. ¡Eso sí que lo entiende la comunidad! Ahí no estoy hablando de género, no estoy hablando del machismo construido como tal, pero sí que estoy planteando la desarmonización en la red de la vida.

“Entonces no me quedo sólo nombrándome feminista; nos nombramos feministas comunitarias porque es el sentir que nos nació no sólo porque reconocemos que la comunidad, los cuerpos son comunidad, la comunidad es plural; es un cuerpo vivo en su pluridimensionalidad y porque también la comunidad, si quisiéramos mencionarla, hoy por hoy es patriarcal; y emancipar y liberar muchas de las relaciones de poder que se dan en las comunidades indígenas pasa por la cosmogonía, pero también por una relación político-feminista.

“Cuando nos acercamos a las comunidades, escucho a los compañeros con muchas de sus expresiones machistas, esencialistas, les escucho, pero antes de interpretarlo para no ser radical, hay que sentir y sentir justamente su corporalidad de poder ejerciendo poder y control con las hermanas; es regresar la relación para que él empiece a sentir la responsabilidad de desarmonización que está generando en este espacio. ¡Y sí que empieza a sentir!

“En ese momento no racionaliza el ejercicio de su poder, pero sí empieza a sentir porque entonces hablamos con otros códigos, de códigos cosmogónicos que te interpelan, y esta es otra manera para nosotras de hacer feminismo”.

SOY UN “MAL EJEMPLO”
–LGL: ¿Has tenido que pagar los costos de asumirte feminista en la comunidad?
–LC: Yo creo que tiene sus complicaciones, tiene sus duelos y sus pérdidas. Creo que sí, en este camino hay desavenencias; a veces las pérdidas son afectivas, a veces son políticas.

“No ha sido fácil; me ha tocado en una buena parte del tiempo, 16 años de caminar en la montaña tejiendo posibilidades que nos ha llevado hoy a plantear estas reflexiones, me ha conllevado a sentirme en un momento ajena a la comunidad.

“En 2011 se pronuncia el destierro de mi persona de la comunidad; eso va a ser una de las pérdidas muy fuertes; el hecho de verme caminar con mi hija de territorio en territorio, porque a partir de entonces yo ya no puedo regresar a mi vida porque tuve un mandato patriarcal y no lo cumplí.

“Soy mal ejemplo para las mujeres porque sólo tuve una hija y entonces, si quería seguir trabajando con las mujeres, tenía que tener más hijos. ¡Es inconcebible que una mujer tenga una hija!

“Luego llega un momento en el que también las relaciones afectivas van a pasar por otras demandas; llega un momento en el que el feminismo te apasiona, se vuelve tu sentido de vida político porque te ha hecho mucha interpelación.

“Pero también cuando empiezas a sentir el disfrute de la emancipación ¡es hermoso! Y luego te das cuenta de que hay decisiones en tu vida muy fuertes.

“Yo creo que tomar a veces esas decisiones ha sido fuerte, sin embargo creo que también ha sido hermoso, esperanzador, creo que hoy otras mujeres que hablan del territorio cuerpo-tierra; son regalos que han caminado con las niñas, con mujeres jóvenes”.

FEMINISMO COMUNITARIO, PROPUESTA DE LIBERTAD
“Creo que hoy por hoy la propuesta del feminismo comunitario desde Guatemala aporta un elemento que es la sanación cósmica- política de los cuerpos en relación con la tierra para armonizar.

“Entonces a pesar de que ha habido muchos costos, pues sí que ha habido manera de sanarnos, y colectivas también; entonces creo que eso es lo que nos da fuerza y es lo que me permite continuar y caminar este camino”.

–LGL: ¿Cómo llegas a ser defensora?
–LC: Creo que aunque es complejo nombrarte como defensora, creo que he sido defensora ancestral y no sólo porque defiendo los DH de las mujeres y de los pueblos indígenas, sino también de la naturaleza, y porque históricamente no teniendo yo toda la conciencia plena hoy como feminista, desde muy pequeña hacía una defensa de mi cuerpo ante las formas de violencia sexual que viví desde niña.

“Estaba inconforme, estaba indignada; quería trabajar y quería luchar para que a muchas niñas y niños no les sucediera lo que yo había vivido de violencia sexual, tampoco me imaginé aportar para la fundación de una organización en la montaña.

“Yo creo que es cómo las opresiones me atravesaron la vida, cómo me indignaron, cómo en el camino la vida hermosa, el cosmos, las abuelas, las energías positivas, digamos, fueron juntando a mujeres hermosas que me acompañaron en la vida y fueron despertando mi conciencia, y ese despertar de la conciencia no ha sido personal, ha sido colectivo, y entonces en ese sentido yo me asumo defensora ancestral del territorio-cuerpo y del territorio-tierra.

“Yo siento que muy dentro de nuestro ser las mujeres tenemos tejido un hilo ancestral para la vida y un hilo de rebeldía, entonces yo no me concibo como que todas las mujeres seamos felices cuando el marido nos golpea, felices cuando somos discriminadas, felices por tener un montón de hijos porque para eso nacimos.

“Para mí no es concebible la forma de cómo se ha estructurado la violencia sobre los cuerpos de las mujeres y por lo tanto que las mujeres digamos ‘bueno es que para eso nací, o porque esa es la vida triste de las mujeres, o porque eso es lo que Dios quiere, porque eso es mi cruz’.

“¡Yo me opongo y me niego porque este cuerpo nació –aun en medio de esta vida jodida– como un cuerpo que también tiene la enorme potencia política para liberarse, para sospechar, para estar inquieta, para cuestionar, para volver a pensar dos veces las cosas, para atreverme a la posibilidad de recuperarme el cuerpo ante la vida!

“Yo creo en la posibilidad de reivindicarme en la alegría por mucho que la vida también ha sido jodida, más que la vida, las formas opresivas machistas en la vida que he tenido.

“Puedo elegir quedarme llorando toda la vida victimizada en estas opresiones, o puedo tener la posibilidad de buscar acuerparme con otras mujeres, escuchar sus historias, la organización, la comunidad y los espacios para poder escuchar esas experiencias de liberación y emancipación, y que eso me acompañe y me acuerpe en mis momentos complejos”.

Lorena Cabnal | Foto: Sarita Bonilla Barahona/Voces Nuestras
Por: Lourdes Godínez Leal, enviada
Cimacnoticias | Guatemala, Guate.- 

Compañera, madre y trabajadora


   DESDE LA LUNA DE VALENCIA


mientras cenaba, casi se me para el bocado al ver un anuncio de una crema para la cara en la que la protagonista afirmaba que como mujer podía hacer varias cosas a la vez, puesto que era compañera, madre y trabajadora, y que había encontrado una crema que también podía hacer, como ella, varias cosas a la vez. Obviamente voy a omitir la marca de la crema.

Alucinada me quedé de ver cómo el patriarcado se transmuta en sus formas para continuar reforzando su alianza con el capitalismo con el objetivo de seguir vendiendo.

No es la primera ocasión en la que observo cómo la gente que se dedica a la publicidad usurpa parte del discurso feminista revistiéndolo de música y glamour, para llevarlo a sus intereses que son los de vender los productos en cuestión, y que “casualmente” siempre son productos destinados a ser consumidos por mujeres-diseño, puesto que ese es el modelo patriarcal.

Son productos con cero calorías, cremas para la cara o tortitas de maíz con sabores estupendos que ha preparado un cocinero guaperas que está de moda. Como vemos, todos ellos destinados a mantener cánones de belleza, figura y, por supuesto, para seguir siendo deseada por ellos.

Las modelos que protagonizan estos anuncios no son mujeres mayores, gruesas, con discapacidades o diversidades funcionales, en definitiva, mujeres normales.

No, todas ellas son las mujeres deseables por el patriarcado y que se deben mostrar como modelos a seguir. Modelos artificiales que llevan a muchas niñas y no tan niñas por caminos tortuosos de problemas alimentarios para llegar a ser ese tipo de mujer.

Y esto sólo con respecto a las formas de la publicidad. Si nos vamos al fondo es todavía peor, puesto que al intentar usurpar el discurso feminista, lo quieren mercantilizar y de alguna manera descargar de su parte más reivindicativa.

Se olvida esta gente de la publicidad que aparte de ser “madres, compañeras y trabajadoras” somos personas únicas y con derechos propios. Pero esa es la esencia patriarcal: despojarnos a las mujeres y a las niñas de nuestra condición de personas para convertirnos en objetos de consumo y para consumo de sus necesidades patriarcales.

Somos o hemos de ser mercado para consumir sus productos o para ser consumidas como carne en los prostíbulos, o en las calles o en cualquier parte. De nuevo la alianza entre patriarcado y capitalismo.

En el anuncio de marras se hace del todo evidente cómo nos quieren: madres, compañeras y trabajadoras. Se les “olvidó” que también nos quieren sumisas, calladas, solas y desarraigadas, y siempre dispuestas a satisfacer sus deseos de todo tipo.

También “pasaron por alto” nuestra condición de mujeres libres, con autonomía, independientes, con derecho a la privacidad y a una vida propia más allá de lo que nos quieren imponer, combativas, con criterios propios y algunas, incluso, feministas. Unos pequeños detalles que no les interesa demasiado remarcar, pero que están ahí.

Ese modelo que pretenden vendernos para, supuestamente, modernizar esquemas a algunas nos parece que es más de lo mismo pero con esa pátina de actualización que, además, pretende integrar reivindicaciones de las mujeres en el discurso globalizador y comercial que viene siendo la publicidad. Integrarlo para ningunearlo y destruirlo como ya hicieron con otros discursos.

A algunas no se nos escapa que la intención de volver a cosificarnos ahora desde una posición un poco menos doméstica y más pretendidamente reivindicativa, no es más que otra herramienta patriarcal para mantener las cosas como están, sin demasiados cambios.

Para que nos puedan ningunear, más guapas y más delgadas. Para que nos puedan explotar más pero con menos arrugas. Para que nos puedan asesinar con la piel más hidratada o nos puedan violentar de cualquier manera con una piel más tersa también. Pero eso sí, sin voz propia y a ser posible solas, porque los pactos de mujeres han de ser impedidos a toda costa. De ahí que en el anuncio siempre se hable en singular y nunca en plural.

Las alianzas femeninas siempre han sido temidas, puesto que la sororidad acaba apareciendo cuando entre nosotras comprobamos que sufrimos los mismos males y las mismas desigualdades.

Por ello es tan importante para el patriarcado dividirnos y enfrentarnos, para que no consigamos establecer un verdadero pacto entre las mujeres que perfore y destruya ese acuerdo tácito entre ellos que, a pesar de su metamorfosis aparente, sigue buscando y consiguiendo de momento la gobernanza total sobre toda la población mundial.

Despojarnos de forma sibilina de nuestra condición de personas libres es el objetivo nunca escrito de forma explícita, pero presente en muchas decisiones que van desde lo local hasta lo global.

Globalizar mercados y beneficios, pero no derechos de ciudadanía. Exportar productos y capitales, pero impedir a toda costa que nuestro derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y/o maternidades sea eso: un derecho universal que acabe con imposiciones incomprensibles.

De ahí la importancia de que en las movilizaciones de mujeres, como la que se avecina el próximo 7 de noviembre en Madrid, seamos capaces de aparcar nuestras diferencias y buscar desesperadamente puntos que nos unan.

Será una demostración de lo que somos capaces de hacer cuando anteponemos nuestra condición de mujeres, feministas o no, a los mandatos patriarcales de separación y desunión.

Somos mujeres, somos personas. No sólo somos destinatarias para el consumo o para ser consumidas. Somos diversas y capaces de todo. Somos muchas y muy comprometidas. Somos mayores, jóvenes, con arrugas o sobrepeso, inteligentes, independientes, únicas, con derechos de ciudadanía que hay que reivindicar.

Somos (algunas) madres, muchas trabajadoras, otras compañeras o esposas, solteras, divorciadas, militantes por partida doble e incluso triple, creyentes o ateas, viajeras de vida y de espacios, amigas, amantes y amadas, combativas, etcétera.

Pero sobretodo somos personas con derechos propios que, aunque pretendan arrebatarnos, se lo vamos a poner difícil al patriarcado.

Al menos esa es mi posición y en ella me voy a mantener, pese al cansancio que a veces provoca. Sentirse parte de grupos ricos y diversos de mujeres comprometidas siempre ayuda a vencer los naturales cansancios que aparecen. Descansar siempre, dejarse vencer nunca. Siempre hay una mano amiga en el momento justo.

A eso se le llama SORORIDAD y no entiende de distinciones entre mujeres. Aquí está mi mano también.

tmolla@telefonica.net

*Corresponsal en España. Comunicadora de Ontinyent.
  
CIMACFoto: César Martínez López
Por: Teresa Mollá Castells*
Cimacnoticias | México, DF.- 20/10/

Logró regularizar tierras; ahora pelea contra rapiña empresarial


   Hermelinda venció al machismo para ser líder agraria

Hermelinda Gutiérrez Luján en entrevista con Cimacnoticias 

Tras años de enfrentar la violencia machista en su natal Chihuahua, Hermelinda Gutiérrez Luján, de 53 años, logró convertirse en una de las mil 227 mujeres líderes de núcleos agrarios que hay en el país, desde donde impulsa un proyecto ecoturístico y desafía a ejidatarios detractores y a una compañía de gasoductos que la quiere despojar de su territorio.

“Las cosas para las campesinas son muy difíciles porque el machismo sigue existiendo y porque no entienden que no estamos peleando por quién manda, sino es nada más saber quién hace mejor las cosas, quién tiene la razón, sea hombre o sea mujer. Es justicia nada más, en equidad”, reclamó Hermelinda, quien está a cargo de 26 mil 600 hectáreas de uso ganadero.

La ejidataria forma parte del escaso 4 por ciento de mujeres líderes de núcleos agrarios. Conversó con Cimacnoticias durante su participación en el “Encuentro Nacional de Mujeres Rurales, Indígenas y Campesinas”, organizado por la Procuraduría Agraria y el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), los pasados días 15 y 16 de octubre en esta capital. 

AMOR AL CAMPO

Hermelinda –la quinta de 15 hermanas y hermanos– ha trabajado en la agricultura desde su infancia a pesar de que su padre insistía en que era una actividad “muy pesada”, y que sólo la llevaban a cabo los varones.

“Mi primer reto fue demostrarle a mi padre que podía, y pude. ‘Soy mujer, pero te voy a demostrar que voy a ser tu brazo derecho’”, recordó la campesina que le dijo a su padre cuando tenía apenas seis años de edad.

“Me gustaba siempre estar viendo las estrellas y un día me quedé dormida en el campo. Cuando llegó del riego (su papá) le dijo a su compañero: ‘Siquiera tú que tienes hombres que te ayuden, pero yo no tengo a nadie’”, contó Hermelinda.

Y agregó: “Entonces le dije ‘te voy a demostrar, pa, que soy mujer pero que te puedo ser tan útil como si fuera varón’. Y se lo demostré, luché por ser su orgullo y lo conseguí”.

La líder agraria –de cuerpo delgado, pero con las yemas de los dedos muy curtidos– reconoció que gran parte de sus conocimientos los adquirió de su familia y de la gente de su comunidad.

“Yo estaba vestida de una armadura que me enseñaron en mi casa que es la responsabilidad, el respeto, el trabajo, el valor civil, el amor. Toda esa cultura la trae una en la sangre, pero se había quebrantado en mí porque se da uno de topes contra todo, en oficinas. Luchar por cada causa cuesta lágrimas”, relató.

Hermelinda estudió hasta la secundaria abierta y después se dedicó junto a su padre a cuidar las tierras de cultivo que tenían para que sus hermanas y los cinco hermanos varones que nacieron después de ella fueran a estudiar.

“Yo dije: ‘este año yo no me voy (a la escuela), ya que se vayan mis hermanitos y yo me voy al siguiente, pero mentira, como venía una escalerita no se pudo, o sea que yo preferí que se fueran ellos a estudiar y yo me quedaba con mi papá porque al final a mí me gustaba hacerlo.

“Yo decía (a mis hermanos menores) váyanse a hacer lo que quieren hacer y yo pues amo esta tierra, este trabajo, me gusta hacer parir a la tierra, me siento orgullosa, no me avergüenzo de eso. Vayan ustedes a estudiar, a sacar una carrera y yo trabajo el surco para que ustedes salgan”.

SER LÍDER A PESAR DEL MACHISMO

Hermelinda afirmó que el principal reto de dirigir un núcleo agrario es ganar la credibilidad y la confianza de las personas, “principalmente si eres mujer”.

“Dirigir un ejido significa mucha responsabilidad, porque tienes que inyectar las ideas, porque primero las adquiere una y luego hay que inyectárselas a los demás y ver quién se queda con ellas, que  acepten esa idea para seguir adelante. Y ese es un reto que dice uno ‘ya lo vencí’, pero de repente se da cuenta que no es verdad.

Si la líder es mujer –prosiguió–, los ejidatarios a quienes representan le ponen el doble de pruebas para confiar en ella. “Fallas poquito y ya valió todo el asunto, tienes que estar siempre, siempre, luchando, luchando porque en lo menos que te equivocas te dicen: ‘Te dije que no ibas a poder’.

“El primer reto es que crean en ti en cualquier proyecto, porque luego te dicen ‘estás loca, no pudieron ni los hombres, ¿vas a poder tú?’”, narró la campesina.

Desde su juventud, Hermelinda –quien nunca se casó porque no estaba en sus planes– se dio cuenta de su liderazgo y su gusto por el trabajo agrario, por lo que decidió “salir” de su parcela y trabajar en el ejido de la comunidad donde ahora dirige a 40 varones que son titulares de las tierras.

“A la mejor tengo la gracia, el don para poder dirigir a mis compañeros, pero a la mejor no tengo la gracia de cocinar”, reconoció entre risas la líder, quien recordó que su juventud fue la etapa más difícil de su vida porque en su comunidad no había otras mujeres que, como ella, trabajaran en los ejidos.

“En mi juventud, ya cuando empecé a volar y no estaba en mi parcela sino que me fui al ejido que son montes y sierras, mi trabajo ahí era diferente. Salir sola a los campos, a la serranía, a los montes, a las negras noches, no fue fácil.

“Tenían en la mente (los campesinos varones) que una mujer sola busca hombre, una mujer entra a la bola porque busca hombre. Entonces es ponerles el stop (alto): ‘Hasta aquí puedes llegar, mírame como uno más de tus compañeros que andamos en la chamba, no me mires ahorita como mujer, soy tu compañera de trabajo y hasta ahí son las cosas, y si no, mira, tengo garras’”, le decía la joven a sus compañeros.

“EL SUEÑO DE LOS VIEJOS”

La vida de Hermelinda se va en gestionar proyectos, de cualquier tipo, pero principalmente agrarios, lo que –aseguró– define su estilo de vida. “Si esto sólo fuera por dinero le aseguro que no lo haríamos bien, pero esto es por amor”, precisó.

Y enfatizó: “Me fui formando una coraza; mi vida es muchos años al frente de muchas cosas. Tengo que ser responsable, así me enseñaron mis viejos de la comunidad, mis abuelos y luego mis padres y mis maestros ancianos”.

La mujer también dirige una colonia agrícola en la que consiguió lo que llamó “el sueño de los viejos”: que un conjunto de hombres que lucharon y esperaron por más de 80 años que regularan sus terrenos finalmente lo consiguieran.

“Todavía recuerdo ese evento. Imagínate lo que es tener un documento por el que habían luchado por más de 80 años, pero ya nomás se los entregue a tres de la lucha que sobrevivieron porque el resto se murió”, relató la campesina, quien continúa con proyectos agrarios cada vez más grandes, como terminar de regularizar los terrenos de sus compañeros, y concluir su proyecto ecoturístico que lleva por nombre “Parque Ecoturístico Sierra y Cañón el Peguis”.

“Mi proyecto me nació desde 1994, cuando me subí al cerro a bajar unas chivas y allá me quedé viendo. Como las ovejas, correteé la idea”, contó.

Hermelinda relató algunas de las dificultades que ha enfrentado con este proyecto: “La gente no entendía que había que poner una parte. Tocar las puertas, correr y correr para que te atendieran, para que creyeran en ti, para que lo miraran viable; fue tan difícil pero lo logramos.

“Lo difícil es aterrizarlo. Empecé sola, luego completé un grupo de 12 y luchamos, pero luego entramos a un área que tenía un conflicto fuerte y ahí sí me quedé sola.

“Dormía en la montaña si era tiempo de calor o si era tiempo de frío porque no sabías a qué hora llegaba el enemigo. En casa no te podías quedar. ¿A ver dónde vas a dormir esta noche?”, se preguntaba Hermelinda todos los días tras las múltiples amenazas que había recibido de sus detractores, otros campesinos.

En 2008, una catastrófica creciente de ríos arrasó con una parte del parque que ya estaba construida, así como con otros terrenos de cosecha. Hermelinda y los otros labriegos tuvieron que volver a empezar.

“Pero dígame usted qué funcionario fue a preguntar en qué te puedo echar la mano, nadie. No encontré eco”, reconoció la dirigente agraria.

Si bien Hermelinda salió adelante de este desastre natural, ahora enfrenta una pugna con una compañía de gasoductos que quiere ocupar sus terrenos.

“Estoy luchando todavía porque anda una compañía de gasoductos que no puede negociar conmigo. Yo le estoy diciendo: ‘Dame tanto por lo que me vas afectar’, y no quiere. Me dice: ‘Ahora te vamos a quitar el parque’”, reveló.

Hermelinda afirmó que aún está estancada en terminar el parque, que alberga desde pinturas rupestres hasta plantas silvestres endémicas y ríos que están en conservación.

“Yo quiero hacer algo presentable, digno, que no digan ‘¿esa bola de campesinos tienen eso?’. Yo quiero demostrar que los campesinos pueden”, enfatizó.


| CIMACFoto: Angélica Jocelyn Soto Espinosa
Por: Angélica Jocelyn Soto Espinosa
Cimacnoticias | México, DF.-   

Revictimización de las mujeres en el Sistema Penal


   QUINTO PODER
Por: Argentina Casanova*

Si en materia de atención a las personas afectadas por los delitos hay un grave rezago general en todo el país, en lo que se refiere a las mujeres y niñas víctimas de violencia, especialmente la sexual, existe una situación más grave, como la revictimización, la cual no sólo es resultado del desconocimiento de los derechos de ellas, pero también de la falta de voluntad por respetarlos, y se sustenta en gran medida en prejuicios, estereotipos y roles que sesgan el trato hacia las víctimas.

En particular, las víctimas de delitos sexuales afrontan una exposición o sobre exposición a riesgos no sólo del o los agresores, sino que la propia comunidad puede con los actos omisos o las acciones del propio Estado representado por sus agentes, ser un causante de la violencia comunitaria contra las víctimas derivando en la revictimización.

Además de que los actos y omisiones de los servidores públicos constituyen por sí mismos hechos de revictimización, o facilitan que alguien más los cometa, como ocurre con la filtración de información que intencionalmente se ofrece a los medios de comunicación y que su difusión constituye nuevas formas de agresión hacia las mujeres y niñas vulneradas en sus derechos y afectadas por delitos.

En el peor de los casos, son los propios servidores públicos a través de las áreas de comunicación quienes al ofrecer datos irrelevantes acerca del hecho, visibilizan más las condiciones en torno a la víctima en vez de centrarla en el delito, poniendo énfasis en contextos sexistas que invisibilizan la acción del agresor.

De tal forma que tenemos diarios llenos de notas rojas que se centran en quién era la víctima, pero aportando elementos desde una visión sexista, machista, patriarcal y por supuesto misógina.

De ahí que sepamos que una mujer era “exigente, era infiel, trabajaba en un bar, era prostituta, era drogadicta, era una ‘nini’, era mesera, y muchos largos etcétera, que podemos encontrar al abrir la sección policiaca de un diario, incluso si la víctima de violencia sobrevive y no denuncia, la perspectiva se centra en fortalecer el estereotipo de que las mujeres no denuncian y por eso les pegan.

Esos mismos casos podrían abordarse desde las perspectivas que se encuentran en la información, pero que no son destacados aunque constituyen detalles fundamentales para entender por qué se convirtieron en víctimas de delitos graves de violencia sexual o feminicida, tal es el caso de las niñas que trabajan en bares y en los que no se identifica ¿intencionalmente? que esto constituye una responsabilidad del Estado, al no ejercer vigilancia y control sobre espacios de bares en los que se comete abuso laboral, se violan los derechos de la infancia, y por supuesto concurren hechos de explotación sexual.

Visibilizar todos estos elementos que eran las condiciones de la víctima ayudaría a una visión más objetiva de las circunstancias que rodeaban a la víctima, y que son formas de la violencia estructural que vulnera la vida de las mujeres y constituyen por sí mismas los argumentos concretos de la desigualdad y la discriminación en la que viven las niñas, y que las hace víctimas de una violencia que pudo prevenirse si el Estado hubiera hecho su trabajo.

Aunado a ello, los familiares de las víctimas y ellas mismas cuando son sobrevivientes afrontan a servidores públicos que se convierten en jueces y se adelantan a la posibilidad de que un juez reciba la información y decida la culpabilidad, y hacen desistir a la víctima diciéndole que no tiene condiciones para probar el delito que denuncia, y por supuesto así logran que acepten acuerdos que poco les favorecen.

Tenemos cientos si no es que miles de casos en los que las víctimas tras pasar por procesos desgastantes de denuncia, se les niega el acceso a la justicia por una mala investigación, reconocida por el juez en su sentencia, y que no es sino la irresponsabilidad de un MP que no hizo las diligencias correspondientes. Largas horas de esperas, citas interminables, dejarles la carga de la prueba y muchos otros actos son revictimizantes.

Y por parte de los jueces los tenemos ahí descartando pruebas científicas, peritajes y por último negarle voz a las víctimas, descartar su testimonio o no considerarlo válido para fundar el delito y dejarlo por escrito en los expedientes; ésa es sin duda una de las más graves y constantes formas de revictimización.

Hace unos días escuchaba a la experta peruana Julisa Mantilla exponer justo lo que tantas abogadas mexicanas exponen: ¿Por qué si se denuncia el robo de una computadora en un lugar público, se le cree a la persona que lo denuncia, pero si una mujer denuncia que ha sido víctima de violencia sexual, lo primero que hacen es pedirle pruebas y se le deja a ella la carga de la prueba?

Tienen que ver los prejuicios, tiene que ver que las mujeres no tienen voz, que no se les reconoce como “personas confiables” cuyo testimonio pueda ser tomado en cuenta, y por eso hasta los jueces estiman que no pueden ser testigos confiables de los hechos de los que fueron víctimas.

Además, afrontar en todos los procesos un lenguaje que genera revictimización al señalar por ejemplo “relaciones sexuales” cuando se trató de un abuso, violencia y no un acto consensuado.

La principal forma de revictimización es negarles el acceso a la justicia.

*Integrante de la Red Nacional de Periodistas y del Observatorio de Feminicidio en Campeche.

Cimacnoticias | Campeche.- 

¡Paridad a la vista!


   CRISTAL DE ROCA
Por: Cecilia Lavalle*



Cuando mi abuela nació, votar era un sueño. Cuando mi madre nació, votar era una posibilidad. Cuando yo nací, votar era un hecho. Cuando nació mi hija, las cuotas venían en camino. Hace poco nació mi sobrina nieta, y hoy podemos gritar: ¡Paridad a la vista!



Así de personal puede ser la historia de los derechos políticos de las mujeres.

Las mujeres que nacen este año ya tienen un horizonte con el que no nacimos ni sus madres ni sus abuelas (o tías abuelas). Ese horizonte se llama paridad y lo hemos hecho posible sus madres y sus abuelas (o tías abuelas).

Paridad significa la mitad del poder. No más. No menos. La mitad.
En nuestro país la paridad nació legalmente en 2014, cuando se reformó el artículo 41 de nuestra Constitución.

Y antes de que alguien me salga con que “la otorgó” o “la concedió” el presidente de México, déjeme precisar que detrás de esa iniciativa de reforma hay muchísimas mujeres: senadoras, diputadas, funcionarias, académicas, defensoras de Derechos Humanos, periodistas; en movimientos organizados, como Mujeres en Plural, o fuera de ellos; de distintos partidos o sin militancia partidista.

De hecho, de manera destacada senadoras, diputadas y algunas funcionarias lograron que fuera reforma constitucional, porque no iba a serlo.

Se lograron también reformas importantes a leyes secundarias como la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales y la Ley General de Partidos Políticos, en las cuales se establece paridad en candidaturas a la Cámara de Diputados, Senado, congresos estatales y la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.

Y, por si fuera poco, distintas sentencias y un trío de jurisprudencias del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación permitieron que la paridad constitucional tuviera un mejor horizonte, porque alcanza para los ayuntamientos y hace más parejas las postulaciones por el principio de representación proporcional.

Así, a 62 años de haber conseguido el reconocimiento legal a nuestro derecho a votar, la paridad legal comienza a rendir frutos en los hechos.

En la Cámara de Diputados, las mujeres por primera vez en la historia ocupan 42 por ciento de las curules.

En cuatro de los 17 estados en los que hubo elecciones concurrentes este año se superó la paridad: Querétaro, Guanajuato, Colima y Chiapas.

Aún están pendientes resoluciones de tribunales en Campeche y Tabasco, pero se prevé que las mujeres ocupen 43 por ciento de las sillas en sus respectivos congresos.

Y, aunque la paridad en ayuntamientos depende de juicios, en Chiapas fueron electas 35 presidentas municipales, cuando su máximo histórico había sido seis.

Nos queda claro que el camino apenas comienza.

La paridad ganada hasta hoy ofrece igualdad de condiciones legales para contender por algunos cargos de elección popular. Pero, falta: igualdad de condiciones legales en todas las entidades; igualdad de condiciones legales para todos los cargos de elección popular; igualdad de condiciones reales en contiendas y, una vez electas, en el ejercicio del poder.

No obstante, tenemos rumbo y un promisorio horizonte. ¡Paridad a la vista!

Apreciaría sus comentarios: cecilialavalle@hotmail.com.

*Periodista y feminista en Quintana Roo, México, e integrante de la Red Internacional de Periodistas con Visión de Género.
  CIMACFoto: César Martínez López
Cimacnoticias | México, DF.-