Militante del PSOE y formadora de jóvenes feministas
Ayer
se conoció la noticia del fallecimiento de Elena Arnedo. Si algo
destaca en la vida y el perfil de Arnedo es su labor a favor de la
salud y los derechos de las mujeres.
No es el único mérito, pero más que suficiente para merecer un titular
y contextualizar la noticia de su pérdida. No era por tanto necesario,
como lo han hecho reiteradamente muchos y variados medios de
comunicación, apelar a su vida privada ni subordinarla a parentescos
algunos.
Afortunadamente, hoy ya encontramos artículos y despedidas surgidas de
plumas amigas, que ilustran con sensibilidad y justicia una trayectoria
vital íntegra y generosa, que representa bien a esa generación de
mujeres feministas de los años 60 en España, de las que bebieron las
más jóvenes.
Elena Arnedo nació en Madrid. Era hija de la escritora Elena Soriano y
de Juan José Arnedo. Como ginecóloga y experta en patología mamaria,
fue una de las pioneras de la educación sexual y afectiva de las
mujeres, y de la puesta en marcha en España de los primeros centros de
planificación familiar.
Formó parte del grupo “Mujer y Socialismo” del Partido Socialista
Obrero Español (PSOE), desde donde se promovió la puesta en marcha del
Instituto de la Mujer y las primeras políticas públicas de igualdad.
Arnedo fue número tres del PSOE al ayuntamiento de Madrid en las
elecciones municipales de mayo de 2003 y fue concejala. Contribuyó a
los grandes cambios legislativos que han propiciado la igualdad de las
mujeres en España.
El último, la Ley de Salud Sexual y Reproductiva y de la Interrupción
Voluntaria del Embarazo (IVE) de 2008, en la que formó parte del grupo
de especialistas creado para su elaboración.
En las entrevistas que concedió se mostraba orgullosa de haber
contribuido al mayor cambio del siglo XX, el feminismo, que definía
como “la única revolución incruenta y silenciosa”.
Participó de manera altruista y generosa en un sinfín de organizaciones
de mujeres y sociales. También publicó varios libros: “Rebeldes”, “La
picadura del tábano”, “El donjuanismo femenino”, o “El gran libro de la
mujer”, pensados para ayudar a las mujeres en su salud y en su lucha
por conseguir la igualdad. La igualdad que algún día impedirá
identificar a las mujeres como mujeres o ex de “fulanito”.
Por: la Redacción, Cimacnoticias/AmecoPress | Madrid, Esp.-
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