By Nancy Flores / @Nancy_Contra
El
gobernador con licencia de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, estaría
involucrado en el desarrollo inmobiliario Campeche Country Club,
propiedad de Carlos Mouriño Antanes, padre del fallecido exsecretario de
Gobernación Juan Camilo Mouriño.
De acuerdo con el diario Reforma,
Duarte habría usado una empresa para adquirir terrenos ejidales donde
se edificó parte del conjunto inmobiliario. Por ello, la Procuraduría
General de la República estaría investigando la presunta triangulación
de unos 110 millones de pesos a la Inmobiliaria Cartujano.
Dicha
empresa es actualmente administrada por Moisés Mansur Cysneiros, amigo
del priísta actualmente prófugo de la justicia. Según Reforma, Mansur habría elaborado un testamento para heredarle a Javier Duarte todos sus bienes.
Las
parcelas donde se construyó el Campeche Country Club habrían sido
adquiridas por supuestos prestanombres del exmandatario de Veracruz, por
10 millones de pesos.
Además de Javier Duarte, en el mismo
consorcio inmobiliario estaría involucrado Felipe Calderón, quien fuera
amigo y jefe de Juan Camilo Mouriño durante su labor al frente de la
Secretaría de Energía –en el sexenio de Vicente Fox–, y al inicio de su
mandato como presidente de México tal como lo reveló en 2012 Contralínea.
A
pie de playa y rodeada de cordilleras y riscos se encontraría la casa
de descanso de la aún familia presidencial Calderón Zavala. El refugio
habría sido adquirido como parte de una inversión de Felipe Calderón
Hinojosa en el desarrollo inmobiliario-turístico denominado Campeche
Country Club, en el cual figuraría como accionista.
Se trata del
proyecto que edifica el Grupo Energético del Sureste –empresa de la
familia Mouriño– en 300 hectáreas, localizadas a la altura del kilómetro
193 de la carretera federal 180 (Campeche-Champotón). En su primera
etapa –cuyo objetivo es urbanizar 80 hectáreas– ha tenido una inversión
de 60 millones de dólares, unos 780 millones de pesos.
Según
fuentes allegadas al proyecto (que solicitan el anonimato por temor a
represalias) Calderón Hinojosa habría participado de esa millonaria
inversión a cambio de cuatro lotes exclusivos, donde se ubicaría su casa
de descanso.
Los familiares del fallecido secretario de
Gobernación Juan Camilo Mouriño planeaban este proyecto inmobiliario
desde 1991, según declararon en una cena organizada el 3 de septiembre
de 2011 para promocionar la venta de los lotes. Pero no fue sino hasta
el sexenio de su amigo, Calderón Hinojosa, cuando pudieron iniciarlo.
En
octubre de 2011 empezaron los trabajos de construcción, y para enero de
2012, las obras de una marina y la playa “privada”, pues el área,
aunque se encuentra a la orilla del Golfo de México, no la poseía de
manera natural. Para estas obras, la Secretaría de Medio Ambiente y
Recursos Naturales (Semarnat) ha emitido tres autorizaciones que la
prensa local califica como fast track, y una concesión por 15 años que legaliza la privatización de la playa.
Contralínea
solicitó conocer la posición del presidente Calderón Hinojosa sobre
este tema a través de la Dirección General Adjunta de Información de la
Residencia Oficial de Los Pinos, a cargo de Karin Helene Oechler
Rodríguez. Hasta el cierre de esta edición, no se obtuvo respuesta.
El complejo turístico
Con
el Campeche Country Club, el Grupo Energético del Sureste –a través de
su subsidiaria Inmobiliaria Supermex, SA de CV, cuyo apoderado legal es
Jorge Alberto Hernández Villanueva– incursiona por primera vez en los
sectores inmobiliario y turístico. Desde su constitución, hace 25 años,
el nicho de negocio del corporativo de los Mouriño ha sido la
paraestatal Petróleos Mexicanos: franquicias gasolineras y
transportación de energéticos.
El desarrollo inmobiliario se
localiza a 14 kilómetros del centro histórico de la ciudad de Campeche, a
la altura del kilómetro 193 de la carretera federal Campeche-Champotón.
De acuerdo con su página de internet (
http://campechecountryclub.com.mx
),
el complejo turístico se encuentra rodeado de cordilleras y riscos, con
vistas a la costa del Golfo de México y con “aspectos naturales
incomparables”, como un microsistema en la zona y acceso a playa.
Los
datos oficiales indican que la primera etapa del desarrollo residencial
consta de 304 lotes urbanizados (“con servicios de alto nivel”),
diseñados con “las más altas especificaciones profesionales”. También
que está bajo el régimen de condóminos, por lo cual “se ha estipulado un
reglamento de construcción y de convivencia con el fin de cuidar los
estándares establecidos”.
Cuenta con tee de práctica de golf y snack,
con un lago principal, lagos pequeños, jardines, acceso controlado,
club deportivo, vialidades, servicios subterráneos (agua, luz y
teléfono), más de 300 metros lineales de playa privada, nueve hoyos de
golf, casa club de playa y una escuela (Instituto Cumbres, que ofrece
educación básica). Además, tiene áreas específicas para la instalación a
corto plazo de un centro de estudios superiores y un centro médico.
El
club deportivo se integra por nueve canchas profesionales de tenis, dos
canchas profesionales de tenis de arcilla, una cancha profesional de
tenis tipo estadio, dos canchas de racket ball, una cancha de pasto
sintético de futbol, una cancha profesional de futbol, juegos para
niños, una alberca semi-olímpica, una cancha de frontón, una cancha de
volibol playero, un salón de usos múltiples, palapa de servicios,
baños/vestidores y gimnasio.
Según la información oficial,
actualmente dicho club deportivo ya está en funcionamiento, a través de
las academias de tenis, futbol y natación.
Estancias de lujo
El
Campeche Country Club cuenta con seis tipos de lotes, valuados en
dólares estadunidenses. Los precios oscilan entre los 383 dólares y 123
dólares por metro cuadrado. Hasta ahora, de los 304 lotes planificados
en su primera etapa, 139 han sido vendidos y seis han sido reservados,
la mayoría en el área Premium, manzanas 1 y 2.
Los más caros son
precisamente los Premium: se ubican en la cordillera del desarrollo y
permiten una vista franca al mar. “Por las elevaciones del terreno, es
posible las construcciones aterrazadas”.
Por ejemplo, el
lote 79, de la manzana dos, cuesta 289 mil 230 dólares (unos 3 millones
760 mil pesos). Cada uno de sus 755.17 metros cuadrados vale 383
dólares. Los lotes Premium incluyen la adquisición obligatoria de una
acción del Campeche Country Club, lo que permite al propietario ser
socio de los clubes de playa y golf con el pago de la cuota mensual
correspondiente.
Le siguen los Diamante, ubicados en el gran lago y en las inmediaciones de la tee
de práctica de golf y del club deportivo, en la parte más plana de la
orografía del desarrollo. Éstos también incluyen la adquisición
obligatoria de la acción. El lote 69 de la manzana 12, perteneciente a
esta categoría y aún disponible para su venta, cuesta 183 mil 412
dólares. Cada metro cuadrado de sus 790.57 vale 232 dólares.
Los
Platino ocupan el tercer lugar respecto de los precios. Éstos tienen
vista al campo de golf e incluyen la adquisición obligatoria de la
acción. El lote 30, en la manzana 10, mide 654.45 metros cuadrados y su
importe asciende a 143 mil 979 dólares (1 millón 871 mil 727 pesos
aproximadamente).
Los lotes Oro están rodeados de áreas verdes
(glorietas, parques, jardines) y quienes los adquieren no necesariamente
son accionistas del complejo inmobiliario. El lote 15, ubicado en la
manzana 12, cuesta 152 mil 310.62 dólares (1 millón 980 mil 38 pesos).
El comprador pagará por cada metro cuadrado 154 dólares.
Los Elite
se ubican en circuitos interiores y tampoco es necesario ser accionista
del Campeche Country Club para adquirirlos. Uno de éstos es el 48, de
la manzana 10, cuyo precio asciende a 129 mil 193.74 dólares (1 millón
679 mil 518 pesos). Su extensión es de 943.02 metros cuadrados.
Finalmente
están los Prestige, ubicados en calles de circuito. Los interesados en
estas propiedades no tienen que adquirir acciones del desarrollo. El
metro cuadrado más barato es de 123 dólares, como el que se pagará por
el lote triangular 63, ubicado en la manzana 10 y cuya extensión abarca
880.14 metros cuadrados. El terreno se cotiza en 108 mil 257.22 dólares,
aproximadamente 1 millón 407 mil 343 pesos.
Presuntas irregularidades
La edificación del Campeche Country Club no ha estado lejos del rechazo social. En mayo pasado, el diario local Por esto!
denunció que las obras ponían en peligro a la tortuga carey. Ello,
porque la construcción de la playa privada y la marina afectan la zona
de tránsito de la especie, sin que se hayan tomado medidas para evitar
el daño.
De acuerdo con la nota del reportero Daniel Sánchez, la
Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, el centro de
investigación Epomex, la Dirección General de la Zona Federal Marítimo
Terrestre, la Secretaría de Medio Ambiente y Aprovechamiento
Sustentable, la Comisión Nacional para el Uso y Aprovechamiento de la
Biodiversidad y el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua se
opusieron al proyecto inmobiliario, por las repercusiones ambientales
previstas.
A pesar del rechazo, la Secretaría de Medio Ambienten y
Recursos Naturales ha emitido tres dictámenes para autorizar la
construcción del fraccionamiento Campeche Country Club. También, le ha
autorizado la concesión para “usar, ocupar y aprovechar una superficie
de zona federal marítimo terrestre y/o terrenos ganados al mar”, con lo
que se legaliza la privatización de la playa al menos por 15 años.
En entrevista con Contralínea,
el delegado en Campeche de la Semarnat asegura que las solicitudes se
han resuelto como marca la ley en materia de medio ambiente.
“Primero,
la Semarnat no hace autorizaciones fast track. Resuelve las solicitudes
como lo marca la ley. En este año, 2012, hay tres autorizaciones [a
favor de la empresa de los Mouriño]: dos son por la Dirección de Impacto
y Riesgo Ambiental, de oficinas centrales de la Semarnat, y la otra por
parte de la delegación de Campeche”, indica Tomás Ávila Argaes. Agrega
que las resoluciones se dieron entre 2011 y 2012, y autorizan el
proyecto de la marina, el campo de golf y las viviendas,
respectivamente.
—Se ha señalado que, con la familia Mouriño, la
Semarnat ha tenido una conducta obsequiosa, ¿qué responde usted a esos
señalamientos?
—Hemos comentado en los medios locales que la
Semarnat está abierta a cualquier promovente. No tenemos favoritismos,
así nos lo marca la ley, y no podemos favorecer a nadie. Aquí atendemos a
la persona física y a la moral, a los municipios, al gobierno del
estado. La instrucción que ha dado el secretario Juan Rafael Elvira
Quesada es trabajar de la mano con los ayuntamientos, con el
gobierno y sobre todo atender al promovente que ingresa cualquier
trámite aquí con nosotros. Nosotros no podemos favorecer a nadie. No nos
interesan, la verdad, las cuestiones políticas, si no por el contrario
estamos trabajando por el medio ambiente y el desarrollo del estado de
Campeche.
Las denuncias, sin embargo, no cesan contra este desarrollo inmobiliario. En el diario Por Esto! se
dio a conocer la presunta extracción ilegal de arena del campamento
tortuguero Xpicob, para rellenar la playa privada; situación que pondría
en riesgo directamente el hábitat de la tortuga carey. Al respecto, el
funcionario de la Semarnat, Ávila Argaes, desestima la versión.
“Nosotros
lo que hicimos fue darle parte a la Procuraduría Federal de Protección
al Ambiente. La Procuraduría hizo su inspección y no había ningún
indicio de obra. Así se manejó [en la prensa] pero fue algo falso. No
inició obra la promovente y nosotros nos quedamos en la etapa de
evaluación. Estábamos evaluando si el proyecto cumplía con lo técnico y
con lo jurídico para ser factible. Y en ese momento el promovente se
desiste. Entonces concluimos ahí el caso.”
—Hay alguna
preocupación acerca del impacto que tendría este desarrollo, sobre todo
respecto del hábitat de la tortuga carey. ¿Qué se está haciendo para
preservar este hábitat?
—La Semarnat debe cuidar y proteger el
medio ambiente, ésa es su función principal. Nosotros no podemos
autorizar nada que violente al medio ambiente y sobre todo a este
hábitat que está protegido por la NOM-059-SEMARNAT-2010, que es la norma
que protege a la tortuga marina. Entonces definitivamente tenemos que
cuidarlo, protegerlo, entonces no podemos autorizar nada que violente a
esa especie –asegura el funcionario.
El Campeche Country Club “es
sólo el inicio de muchas cosas que vienen. Los que conocen la ciudad
[saben que] es algo sumamente precioso, es patrimonio cultural de la
humanidad. Es el sitio primero en seguridad pública. El sitio más
tranquilo del país”, dijo Carlos Mouriño Atanes, presidente del consejo
de administración del Grupo Energético del Sureste y padre de quien
fuera secretario de Gobernación hasta su muerte, en la actual
administración federal, cuando hizo público su proyecto (Guadalupe
Martínez, Milenio, 4 de septiembre de 2011).
Inmobiliaria Supermex, SA de CVFecha de constitución: 28 de agosto de 2007Número de escritura pública: 326Representante legal: Jorge Alberto Hernández Villanueva
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