CIUDAD DE MÉXICO (Expansión) -
Las relaciones entre México y Estados Unidos se encuentran en el nivel más tenso desde 1914
cuando desembarcaron las tropas estadounidenses en Veracruz, pero ahora
como consecuencia de las amenazas proteccionistas de Donald Trump.
No
obstante, México tiene asuntos como migración y seguridad, que puede
jugar como cartas en las negociaciones con el nuevo gobierno
estadounidense el cual ha dicho que le conviene la estabilidad económica
y social de México.
Donald Trump ha dicho que construirá un muro en la frontera sur de Estados Unidos y México será el que pague la obra.
“México
contiene la migración centroamericana, dificulta el acceso a territorio
mexicano de ciudadanos de terceros países, pone restricciones de visas,
intercepta cargamentos de droga, permite que la CIA opere de manera más
o menos libre (…) La agenda es amplia”, dijo a Expansión el analista de
seguridad, Alejandro Hope.
Advirtió que limitar la agenda en
cualquiera de estos temas tiene costos para México, por ejemplo, el tema
migratorio podría generar una crisis humanitaria como la que ya viven
los haitianos en Tijuana, Baja California, o en la medida en que no haya
colaboración, la captura de cabecillas del narco se volverá más
complicada
"Lo que (México) puede hacer es señalar que piensa
hacer un cambio para disuadir. Pudiera anunciar que está revisando su
política migratoria y a lo mejor para fomentar el turismo piensa
eliminar el requisito de visa para algunos países (vetados por Trump),
solo señalarlo, sin hacer cambios. Otra, coquetear con un acercamiento
con China", comentó Hope.
Trump también ha usado el estandarte
del déficit comercial que tiene su país con México para abogar por
renegociar o en un extremo, retirarse del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), pero el déficit con México es seis veces menor que el que tiene con China, de 319,282 millones de dólares (mdd).
“Lo
que Estados Unidos no sabe es que esos desequilibrios (económicos) en
México pueden tener un impacto muy grande sobre la estabilidad política y
por esa vía, sobre la propia estabilidad estadounidense, al menos en
algunas regiones de Estados Unidos”, dijo a Expansión el director del
Centro de Estudios Históricos del Colegio de México, Ariel Rodríguez.
“No
sabe lo que es una efervescencia en México, ya se le olvidó porque la
última importante fue la Revolución Mexicana”, agregó Rodríguez.
El
TLCAN ha permitido que las exportaciones de México aumentaran 525% de
1994 a 2015. Para México, las exportaciones manufactureras representan
25% del Producto Interno Bruto (PIB).
Para Estados Unidos, el
TLCAN también es importante, si el tratado se rompiera, 4.9 millones de
estadounidenses quedarían sin trabajo, según un estudio del Wilson
Center.
“México puede decir, te vamos a dar seguridad pero ustedes también tienen que darnos algo. México tiene que retomar la whole enchilada”, dijo a Expansión el académico del ITAM, Athanasios Hristoulas.
El gobierno del presidente Vicente Fox impulsó una propuesta integral para regularizar a los mexicanos
sin estatus legal, una ampliación de visas, un programa de trabajadores
huéspedes, medidas para la seguridad fronteriza y acciones de
desarrollo regional, medidas conocidas como 'la enchilada completa', que
quedaron enterradas tras el atentado terrorista en Estados Unidos del
11 de septiembre de 2001.
“Llevamos 40 o 50 años tratando de
resolver los temas de la fontera. La única menera para resolverlos es
con acciones entre los dos. El muro no lo va a resolver. México tiene
que ser más innovador y proactivo de lo que está siendo”, dijo
Hristoulas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario