Sobre la renegociación
del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC), López Obrador dijo que
éste proponía originalmente una integración total del sector
energético, algo que rechazaron y obligaron a modificar para preservar
la soberanía nacional.
Foto: Cuartoscuro
Andrés Manuel López Obrador aseguró que la Reforma Energética fue un “rotundo fracaso” y aunque no se echará abajo durante los primeros tres años de su gobierno, trabajará por fortalecer al sector energético.
En entrevista para #AristeguiEnVivo, el próximo presidente de México dijo que son necesarios los inversionistas nacionales y extranjeros para extraer petróleo y producir gasolina.
“Vamos a actuar con la misma legalidad (…) la política se inventó
entre otras cosas para evitar la confrontación, para lograr los
objetivos sin agravar conflictos”, aseguró.
Sin embargo, dijo que esto no significa que la extracción de crudo quedará en manos de las empresas particulares, sino que rescatará a Pemex y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), a las cuales se les dejó sin recursos de “manera deliberada”.
“Se ha apostado por desmantelar a estas empresas y vamos a rescatar a Pemex y a la CFE y por eso estamos haciendo los ahorros para aumentarles la inversión (…) Pemex va a tener inversión pública suficiente porque necesitamos invertir y extraer petróleo con urgencia“, dijo López Obrador.
Recordó a aquellos que defendieron la Reforma Energética,
argumentando que el sector recibiría inversión extranjera: “Llegó en 4
veces más la inversión a Telecomunicaciones que a la Energética. Decían
que para ahora íbamos a estar produciendo 3 millones de barriles diarios
y estamos en 1 millón 800 a la baja”.
“Si seguimos así y no intervenimos pronto, entonces sí, la debacle va a ser mayor”, agregó.
Además, para el próximo presidente de México, Pemex Internacional, el brazo comercial de Pemex en el mercado internacional, es un “enigma” y aseguró se transparentará “quién compra y a qué precio se compra”.
En tanto, López Obrador recordó un pasaje de su libro 2018. La salida. Decadencia y renacimiento de México donde expone que la apertura del negocio energético a la libre importación “sacrifica” la calidad de la gasolina, lo cual pone en riesgo la salud de los mexicanos.
“Ya no hay control de la calidad. Consumimos 800 mil barriles diarios de gasolinas y se están comprando 600 mill barriles en el mercado”, aseguró el presidente electo de México.
La renegociación del TLC y la relación con Estados Unidos y Trump
Sobre la renegociación del nuevo TLC, ahora llamado Tratado México-Estados Unidos-Canadá
(T-MEC), López Obrador dijo que éste proponía originalmente una
integración total de la producción petrolera, algo que no aceptaron.
“Todo el capítulo energético lo cambiamos. Era muy grueso lo que tenían y no lo aceptamos porque era una integración plena, una pérdida de soberanía en materia energética”, dijo.
Y detalló que la nueva propuesta planteada por su equipo negociador,
que según AMLO al final aceptó el propio presidente estadounidense
Donald Trump, fueron dos párrafos en los que quedó “la soberanía de
México”.
En cuanto a la relación con Trump, el presidente electo de México afirmó que ha hablado con él tres veces y éste se ha conducido de manera “respetuosa”.
“Yo tengo que actuar de manera responsable, es un asunto de vecindad,
de geopolítica. Hasta ahora vamos bien en esa relación”, aseguró.
También habló sobre la propuesta de un plan de inversiones conjunta con EU y Canadá para crear “cortinas de desarrollo” en el sur de México y en los países de Centroamérica que deriven en una “migración optativa, no forzada”.
“Vamos a ponernos de acuerdo para que la droga no sea una opción, una
alternativa por qué no vamos al fondo del asunto a atender las causas
que originan la drogadicción, cuánto se destina para ver este asunto
desde el punto de vista de salud”, agregó López Obrador.
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