Porque la homofobia no es solamente una enfermedad siquiátrica que se expresa como odio o discriminación contra las personas que integran la diversidad sexual, es también una expresión de opresión cultural relacionada con el género y la sexualidad. Los individuos nacen sexuados, pero sin género, y son después construidos como masculinos o femeninos. Paradójicamente, desde bebés se oculta el sexo, y al mismo tiempo cada cultura despliega sofisticadas vestimentas para marcar las diferencias de género, después las normas prescriben formas masculinas y femeninas de moverse y jugar, de gesticular y hablar, de expresar o negar los sentimientos, de bailar y actuar, de negociar y trabajar, y hasta de comer y satisfacer los deseos sexuales. La sexualidad es resultado de prácticas sociales que dan significado a las actividades humanas, y es producto de luchas y negociacio- nes entre quienes tienen poder para reglamentar y quienes se resisten. Todos y todas crecemos luchando frente a imposiciones que regulan nuestro comportamiento en la casa, en la escuela, en la calle; aunque en principio todos y todas lo que deseamos es amar, ser amados y hacer lo que nos gusta. Bien dice Judith Lorber que para el individuo el género es semejanza y para la sociedad el género es diferencia
(Paradoxes of Gender, Yale University Press, 1994).
En el fondo, la homofobia es la imposibilidad de aceptar las necesidades semejantes que tenemos todos los seres humanos, y se expresa como desprecio a lo femenino
; por eso sus principales víctimas son los hombres gay y bisexuales. ¡Se parecen tanto a las mujeres! Pero también son víctimas las lesbianas, los travestis, transexuales, transgénero e intersexuales, quienes no ocultan su feminidad
; los y las heterosexuales no somos inmunes. El odio ha llegado a múltiples ejecuciones con saña para quienes no parecen ser suficientemente hombres
. La comunidad LGBTTTI considera grave el decreto calderonista, porque desvirtúa el sentido de la lucha contra la homofobia, al cambiar el título por el del Día de la Tolerancia y el Respeto a las Preferencias
, y no llamar las cosas por su nombre.
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