De cada 100, 73 han vivido violencia en sus espacios laborales
De
cada cien mujeres que trabajan en algún medio de comunicación en
México, 73 han vivido una o más situaciones de acoso, hostigamiento o
agresión sexual en su empresa, evidenció el “Sondeo sobre acoso,
hostigamiento y violencia sexual contra las mujeres que trabajan en
medios periodísticos en México”, elaborado por la colectiva Periodistas
Unidas Mexicanas (PUM).
El informe realizado por AcosoDATA, una división de la Colectiva PUM,
se basó en 392 encuestas virtuales a mujeres que trabajan en medios de
comunicación, de las cuales 299 pertenecen a la Ciudad de México y 93 a
Baja California, Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Estado de México,
Guanajuato, Hidalgo, Jalisco, Morelos, Nuevo León, Oaxaca, Puebla,
Querétaro, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tamaulipas y Veracruz.
Dentro de los hallazgos, se encontró que las principales formas de
agresión van desde comentarios realizados sobre la vestimenta de las
encuestadas o la forma en que lucen día a día, hasta miradas lascivas y
comentarios sexuales o en doble sentido.
Las comunicadoras también afirman haber recibido llamadas
telefónicas, mensajes o correos con connotaciones sexuales sin su
consentimiento; han sido tocadas de forma inapropiada; y también se les
han condicionado permisos, horarios, vacaciones o crecimiento laboral a
cambio de invitaciones personales.
El estudio indica que 99 por ciento de los agresores son hombres, de
los cuales 63 por ciento son compañeros de trabajo y 49 por ciento jefes
o algún otro superior.
Ante esto, las comunicadoras afirmaron haber sufrido afectaciones
directas sobre su vida; ejemplo de ello es que 40 por ciento declararon
haber desarrollado problemas de autoestima y de salud derivados del
estrés provocado y volverse desconfiadas y antisociales, al grado de que
cambiar de trabajo les generaba ansiedad.
“Afecta la manera en la que me visto”, “afectaba mi economía y mi
estado emocional porque ya no quería ir al trabajo” y “uno se concentra
más en sentirse segura que en el propio trabajo”, fueron algunas de las
respuestas textuales.
Para protegerse frente a estas amenazas, 57 por ciento de las
entrevistadas desarrollaron mecanismos de defensa entre los que destacan
guardar distancia con respecto a sus perpetradores o evitarlos en la
medida de sus posibilidades; confrontarlos o hacerles saber su
incomodidad, ser cortantes con ellos y cambiar su forma de vestir o de
actuar frente a ellos.
Entre algunas frases que las comunicadoras plasman en este estudio
que revelan también lo que han tenido que hacer para evitar la violencia
son “Renuncié”, “Primero saludo de mano antes de dar besos, no visto
provocativamente”. Otras fueron: “No tener contacto cercano con mis
jefes, ni una amistad, ni compartir comidas, etc.”, “Compré un gas
pimienta” y “Enfrentarles, avergonzarles, no dejarles, reportarlo”.
DEFICIENCIAS AL INTERIOR DE LAS EMPRESAS
En el informe se destaca la falta de mecanismos o protocolos
especializados para presentar quejas por casos de hostigamiento, acoso o
agresión sexual en las empresas, debido a esto, sólo 18 por ciento han
realizado alguna queja al interior de sus espacios de trabajo.
Y este problema continúa aun cuando se denuncia, ya que de aquellas
que sí presentaron una queja, más de la mitad (64 por ciento) afirmaron
que la empresa no hizo nada o que las medidas que tomó fueron
insuficientes y no funcionaron.
En el área de prevención, las empresas periodísticas tampoco están
cumpliendo con su labor, ya que 76 por ciento de las mujeres aseguraron
que en sus empresas no existe ningún tipo de campaña, curso o acción
para sensibilizar al personal sobre el hostigamiento y acoso sexual.
Ante la problemática expuesta en su reporte, la colectiva Periodistas
Unidas Mexicanas exige “medios éticos que garanticen espacios libres de
violencia y acoso” en todo el país.
CIMACFoto: César Martínez López
Por: la Redacción
Cimacnoticias | Ciudad de México.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario