Leonardo García Tsao
Como todo cinéfilo de la vieja guardia, uno agradece la aparición inusual de un western en la cartelera. Sobre todo si se trata de un western sobrio, sin pretensiones posmodernas, como Hostiles: violencia americana.
El cuarto y hasta ahora mejor largometraje de Scott Cooper vuelve a
poner en la mesa el dilema básico del género, la dialéctica entre
civilización y barbarie. Lo segundo está intensamente representado por
la secuencia inicial: en Arizona, 1892, una banda renegada de indios
comanches ataca el modesto rancho de unos colonos blancos y masacran a
la familia entera, salvo a la madre Rosalee (Rosamund Pike), quien logra
esconderse.
Ese acto violento encuentra su contraparte en la siguiente secuencia,
cuando el capitán Joseph Blocker (Christian Bale) lidera la partida que
ha recapturado a un indio que es maltratado a lo largo del trayecto de
regreso al fuerte. Allí, el oficial recibe la orden presidencial de
escoltar a su viejo rival, el jefe Halcón Amarillo (el siempre digno Wes
Studi) y su familia a su lugar de origen en Montana, pues Blocker
conoce el territorio y el dialecto Cheyenne de sus prisioneros. El
capitán se niega a obedecer la orden, pues va contra sus principios
racistas. Sólo le falta decir
el único indio bueno es el indio muerto.
Sin embargo, Blocker acepta la misión cuando su superior amenaza con
una corte marcial y cancelarle su ya cercana pensión. La escolta
encuentra a Rosalee, enloquecida de negación y rodeada por sus cadáveres
en las ruinas de su cabaña. Ella se une al grupo aún cuando teme la
compañía de los indios, que han sido encadenados por órdenes de Blocker.
Este es, pues, un western de travesía. A lo largo de la
ruta, el protagonista tendrá oportunidad de revisar sus rígidos
principios, pues el comportamiento de Halcón Amarillo y acompañantes es
un modelo de nobleza. Tal vez este sea demasiado arquetípico: debemos
aceptar dicha nobleza como un valor inherente del nativo americano, pues
no hay mucho desarrollo de personaje.
Lo más válido de Hostiles es la dimensión moral de Blocker.
Conocido como exterminador de indios, el capitán deberá enfrentar a una
encarnación de su mala conciencia al tener que escoltar a un preso
blanco llamado Willis (Ben Foster), quien asesinó a una familia de
indios a hachazos. Para este personaje clave, Blocker es de su misma
calaña y por ello exige un trato igualitario. Pero el oficial insiste en
marcar la sutil diferencia. Misma que lo hará redimirse hacia el final.
Su solitaria vida será susceptible de reconciliación y cambio, quizá
con la ayuda de Rosalee.
Aunque los peligros acechan a cada instante, el realizador y
guionista prefiere optar por un tono meditabundo. Tan taciturna como el
propio Blocker, la película evita la pompa épica de los westerns clásicos.
Incluso la música es diferente. No son las briosas partituras de un
Elmer Bernstein, sino una bastante fúnebre debida al alemán Max Richter.
Mientras los soleados paisajes de belleza agreste contrastan con la
sombría brutalidad de las acciones.
Tanto Bale como Pike, actores británicos de primera, expresan con
ejemplar sutileza su evolución emocional. Si bien Cooper se ha asegurado
que los personajes secundarios, y hasta los incidentales, sean
interpretados en su mayoría por actores de similar profesionalismo. Así,
Rory Cochrane, Jesse Plemons, Adam Beach, Stephen Lang, Peter Mullan,
Scott Wilson y hasta el joven actor de moda, Timothée Chalamet tienen
breves pero importantes aportaciones.
Es muy probable que el público consumidor de películas de superhéroes
de fácil esquema maniqueo no esté dispuesto a entrar en ese prohibitivo
territorio que le resulta tan ajeno. Sin embargo, para el cinéfilo
conocedor del western –ya quedan pocos, supongo– Hostiles: violencia americana servirá como paliativo por el momento.
Hostiles: violencia americana
(Hostiles)
D: Scott Cooper/ G: Scott Cooper, basado en el manuscrito de Donald
E. Stewart/ F. en C: Masanobu Takayanagi/ M: Max Richter/ Ed: Tom Cross/
Con: Christian Bale, Rosamund Pike, Wes Studi, Rory Cochrane, Jesse
Plemons/ P: Le Grisbi Productions, Waypoint Entertainment. EU, 2017.
Twitter: @walyder
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