6/03/2014

Los periodistas pal café . . . . . .



Miles de ciudadanos españoles han salido a las calles y las plazas públicas en demanda de un referendo sobre la monarquía justamente cuando, luego de casi 39 años de estancia en el trono, el rey Juan Carlos ha anunciado su abdicación para dar paso a su hijo Felipe como continuador del esquema impuesto por el dictador Francisco Franco como testamento político.
Las movilizaciones se dan en un cuadro de creciente exasperación social ante los lujos de las élites con cargo a las finanzas públicas, la corrupción de funcionarios, políticos y familia real en abierto tráfico de influencias, las frivolidades continuas y escandalosas como los safaris para cacería de especies en peligro de extinción y la incapacidad de toda esa clase gobernante para responder adecuadamente a la crisis prolongada que afecta sobre todo a clases medias y populares.
Lo que sucede en España (adonde EPN irá el próximo lunes para ser recibido por el abdicante) es parecido a lo que pasa en varios países, entre ellos de manera destacada el nuestro. No hay acá una monarquía parlamentaria como sistema oficial de gobierno, pero el amalgamiento de intereses cupulares ha dado por resultado la instauración de una clase dominante tan parasitaria, frívola, corrupta y dañina como la ridículamente extemporánea de los monarcas hispanos.
La familia real mexicana está compuesta por las pocas familias empresariales largamente beneficiadas por exenciones, concesiones y negocios que les permiten vivir en paraísos materiales subversivamente contrastantes con la miseria generalizada. A Juan Carlos, y ahora a Felipe, los mantiene constitucionalmente el erario español, mientras en México los reyes empresariales hacen ‘‘negocios’’ y obtienen ganancias descomunales aprovechando lagunas legales, corrupción compartida con políticos y otras fórmulas de cuello blanco que terminan sustrayendo millonadas ‘‘legítimas’’ que deberían servir para paliar las necesidades básicas de decenas de millones de mexicanos.
Los otros reyecitos mexicanos están en la nómina política, con ‘‘dinastías’’ enquistadas en los partidos políticos y en el consumo de recursos públicos a través de campañas electorales, prerrogativas generales y negocios ‘‘cabildeados’’. En la inmensa mayoría de los puestos importantes de la estructura nacional de los poderes ejecutivos (presidentes de la República y gobernadores, con sus gabinetes, y presidencias municipales con sus directivos y cabildos) se ejerce despóticamente el poder, estableciendo distancia y aprovechándose al máximo de los ‘‘plebeyos’’ sin influencias ni dinero para comprar los servicios gubernamentales. Desde luego, la arraigadísima corrupción hace que esos políticos vivan, en sus niveles, como remedos de emperadores junto con sus cortes. El peñismo, que explora la posibilidad de lanzar más delante el anzuelo de la relección presidencial, ya ha afianzado la continuidad de buena parte de esos políticos ‘‘imperiales’’ al modificar las leyes para permitir subsecuentes periodos en sus cargos, dinastías que se irán alternando en puestos para pasar la vida en pleno disfrute del erario y sus privilegios.
La rauda protesta de los republicanos españoles (antes hubo otra experiencia que debe ser analizada acá, la de Podemos, en las elecciones de diputados al Parlamento Europeo) fue posible gracias a las redes sociales. Los controles informativos tradicionales son superados mediante la comunicación directa de internautas. Así como en España, en México las monarquías resultan costosas, dañinas e inaceptables. Acá no habrá abdicaciones ni relevos principescos, todo disfrazado de democracia y elecciones. El esquema monarquista mexicano radica en el pacto tripartidista, en la complicidad de los grandes empresarios descomunalmente beneficiados, los clérigos, en general bien entendidos con los poderes terrenos, las televisoras adormecedoras y distorsionadoras y la consecuente abulia cívica.
Un periodista más ha caído. Según las denuncias publicadas sobre el caso, Jorge Torres Palacios, quien era vocero de la oficina de salud del gobierno municipal de Acapulco (antes había ocupado otros cargos similares en áreas oficiales), fue secuestrado la noche del pasado jueves por una docena de personas armadas que en tres vehículos llegaron al domicilio del comunicador y se lo llevaron a bordo de su propio automóvil. El primero de enero de 2001, el padre, un hermano y un primo de Jorge fueron asesinados durante una confrontación a tiros con pistoleros y familiares de un narcotraficante en el poblado Kilómetro 30, del municipio de Acapulco.
El secuestro de Torres Palacios movilizó a periodistas de la entidad, quienes reprocharon la inmovilidad e ineficacia del alcalde porteño Luis Walton y del gobernador Ángel Aguirre para garantizar seguridad y resolver lo denunciado. En Chilpancingo, periodistas llegaron hasta la 35 zona militar para exigir que Jorge apareciera vivo. Dado que se realizaba un cambio de comandante regional y los reporteros buscaban ser atendidos, ‘‘hubo un jaloneo entre los soldados, que aplicaron técnicas de sometimiento contra los comunicadores. Mientras esto ocurría afuera, en la explanada principal de la zona castrense otro grupo de comunicadores increpaba al gobernador Ángel Aguirre para plantearle el caso de Torres Palacios. Al final se acordó la instalación de una mesa de diálogo en la residencia oficial Casa Guerrero, lugar en el que se darían a conocer los avances de las investigaciones que se han realizado sobre el caso (http://bit.ly/U7qOAd). Muy pocas horas después apareció el cadáver del periodista torturado y secuestrado. Uno más.
Y, mientras vuelan las cifras alegres de Peña Nieto respecto de 3 millones de mexicanos que ‘‘hoy ya tienen seguridad alimentaria’’ (¿sería sólo ese ‘‘hoy’’, es decir, ayer, y ya?) gracias a la Cruzada contra el Hambre que encabezan Rosario Robles y su virtual subsecretario ejecutivo, Ramón Sosamontes, ¡hasta mañana, en esta columna que sigue sin conocer actas o pruebas democráticas firmes (no rollo) que sustenten destapes morenos!
Twitter: @julioastillero
Facebook: Julio Hernández



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Aun cuando Noruega aparece en la lista de Bloomberg como el país que tiene la gasolina más cara del mundo, en realidad es a México al que corresponde ese lugar. Los noruegos pagan el equivalente a 126.34 pesos por galón, pero tienen un salario promedio de 3 mil 523 pesos diarios. Los mexicanos pagamos 47.93 pesos por galón de Magna, pero el salario mínimo es de $67.29. Veámoslo de este otro modo: a un noruego con un solo día de trabajo le alcanza para pagar 2.3 tanques de 45 litros de gasolina, mientras que en México, en caso de que un ciudadano llegara a tener un automóvil ganando el salario mínimo, necesitaría gastar ocho días y medio de su sueldo para pagar el mismo tanque. La mitad de la gasolina se importa de Estados Unidos, a precios internacionales. Pemex tiene un grupo de 20 proveedores. ¿Hay comisiones de por medio? No sería una sorpresa. Eso sin contar el sexto gasolinazo del año, que entrará en vigor el próximo sábado. Subirá 9 centavos el precio de la gasolina Magna, la cual quedará en $12.77 por litro. El aumento de la Premium y del Diesel será de 11 centavos, con lo cual los precios quedarán en 13.45 y 13.28 pesos por litro, respectivamente. México es el único país del planeta donde los combustibles aumentan cada mes.
Coinciden contra los impuestos
Rara (rarísima) vez coinciden en algo ricos, clases medias y pobres, y ésta es una de ellas. Están en contra de la reforma fiscal de Peña Nieto. Argumentan razones distintas, incluso opuestas, pero coinciden en un común denominador. Pocos aplausos y muchas críticas fue la cosecha que levantó el presidente Peña Nieto en la asamblea del Consejo Coordinador Empresarial el pasado viernes. En resumen: la reforma fiscal no sirve, no está funcionando, quieren otra. La responsabilizan en buena parte de la desaceleración económica. Consideran que ‘‘no ayuda a conseguir un mayor dinamismo del mercado interno y la actividad productiva’’. El presidente del CCE, Gerardo Gutiérrez Candiani, propuso a Peña Nieto la creación de un comité para la competitividad fiscal integrado por representantes del gobierno federal, el Congreso de la Unión y del sector productivo, con el propósito de impulsar una verdadera reforma fiscal integral que permita tener un régimen tributario y de gasto público ‘‘más eficiente, equitativo y justo, que promueva finanzas públicas realmente sólidas y sustentables y que al mismo tiempo sea promotor de la inversión, el crecimiento, el empleo y la formalización’’. Los empresarios también recordaron a Peña Nieto que para transformar la realidad nacional es necesario que se combatan la corrupción, la inseguridad, la delincuencia y la impunidad. Peña Nieto propuso un plan que incluye dar mayor participación al sector privado nacional en los negocios petroleros.
Siguiendo a Slim
Si Carlos Slim está concertando préstamos en pesos, llegó la hora de convertir nuestra hipoteca de udis a moneda nacional. América Móvil anunció dos emisiones de títulos de crédito extranjeros hasta 25 mil millones de pesos. Una parte de la emisión hasta 10 mil millones tiene plazo a cinco años, y otro, por 15 mil millones, tiene plazo a 10. Slim –dice Bloomberg– quiere reducir la dependencia del crédito en moneda extranjera, algo que los inversionistas apodan el ‘‘pecado original’’, desde que situaciones similares condujeran a impagos de deuda en América Latina en la década de 1980.



Recesión, estancamiento, atonía, atorón y demás términos (sin olvidar factores climáticos nacionales e internacionales) se utilizan, de un lado y del otro, para explicar el verdadero momento económico mexicano (en extremo distante del presumido por la propaganda oficial), pero también para evadir la verdadera causa por la cual el país acumula más de tres décadas sin registrar crecimiento real, suficiente, sostenido y con beneficios sociales. De todo y a todas horas, pero a nadie convencen.
De los tiempos de Miguel de la Madrid a los actuales, cada alegre declaración oficial ha recibido puntual respuesta de la realidad y el país se mantiene desbarajustado; cuando logran tapar un hoyo aquí, tres más se abren allá, pero la reacción es histérica cuando alguien propone debatir la necesidad de encontrar alternativas al actual modelo económico que ha procurado tantos éxitos a los menos de siempre y tantas derrotas a los más. Todo se ha modernizado, todo se ha reformado, pero lo cierto es que México se hunde cada día más.
Que aquí no pasa nada y que son meros ajustes de cálculo, dicen en el gobierno peñanietista, pero en este contexto el Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC) plantea: ¿Quién paga la factura del bajo crecimiento? La respuesta a la interrogante se encuentra en la población, particularmente en la más pobre, y en las empresas. Las consecuencias del bajo crecimiento se pueden observar en un mercado laboral deprimido y en una pobreza que lacera el tejido social.
La tasa de crecimiento económico de los últimos 30 años, que no supera 2.5 por ciento anual como promedio, así como el del primer trimestre de 2014 (1.8), se encuentra por debajo de la capacidad potencial del país y sintetiza que el problema de coyuntura en México es también estructural. Además del debate sobre si esto implica que la economía se encuentra o no en recesión, o sobre qué paso con el momento mexicano, se deben considerar los efectos que lo anterior tiene sobre la vida de las personas que con su trabajo diario buscan hacer realidad el sueño de un futuro mejor para ellos y sus familias.
Menor crecimiento implica disminución en la posibilidad de encontrar un trabajo digno. En México existen 10 millones de personas que cuando mucho ganan un salario mínimo, de las cuales 3.5 millones no reciben remuneración alguna por su trabajo. Ante dicha situación una pregunta natural es sobre cómo cambiará su bienestar ante el escenario de menor crecimiento económico.
El ajuste a la baja del pronóstico oficial fue de casi una tercera parte a lo planteado inicialmente por la autoridad económica (de 3.9 a 2.7 por ciento), merma de casi 15 mil millones de dólares en la generación de riqueza. Sin lugar a dudas que ello tiene consecuencias que van más allá de las esferas macroeconómica y política, efectos que llegan a una sociedad afectada por una espiral de precarización laboral, apunta el IDIC.
Una de las secuelas del menor crecimiento económico puede medirse a través del indicador de la tendencia laboral de la pobreza (ITLP) que publica el Coneval. Derivado de las estadísticas generadas por el Inegi, el ITLP muestra trimestralmente la tendencia de la proporción de personas que no pueden adquirir la canasta alimentaria con el ingreso de su trabajo. Básicamente, ese indicador aproxima si una persona que cuenta con empleo puede satisfacer o no uno de los requerimientos más básicos para cualquier ser humano, el de alimentarse.
La mala noticia es que durante el primer trimestre del año el ITLP registró un aumento anual de 3.5 por ciento en la proporción de personas que sufren precarización en su ingreso laboral, de tal manera que no pueden adquirir una canasta alimentaria adecuada. La evidencia muestra que una de las facturas del bajo crecimiento es pagada por la población que depende de su ingreso laboral como fuente de manutención. Lejos de los argumentos de si la desaceleración es atribuible a los problemas invernales en Estados Unidos o por las decisiones en materia fiscal de la autoridad mexicana, lo que se tiene claro es que existe un número creciente de mexicanos que enfrentan dificultades para vivir a pesar de tener un trabajo.
El problema es mayor en las ciudades, es decir, en las zonas urbanas del país (en las que se concentra 75 por ciento de la población nacional), en donde el aumento del ITLP fue de 4.2 por ciento. Esto último refleja que la contratación en los sectores industriales y de servicios se realiza con menores remuneraciones, aun en aquellas de mayor peso económico y donde radican las empresas más grandes.



En nuestro territorio hay poco más de 11 mil kilómetros de costas incluyendo las islas; es una gran riqueza, pues casi dos tercios de las entidades del país dan al mar. Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Michoacán, Colima, Jalisco, Nayarit, Sinaloa y Sonora están en la costa del océano Pacífico; Baja California y Baja California Sur se ubican entre el Golfo de California y el Pacífico.
Sabemos que las culturas cazadoras, pescadoras y recolectoras aprovecharon desde la antigüedad los recursos marinos y generaron técnicas para la conservación como la salazón de pescado y probablemente el deshidratado de camarón.
En la actualidad existen varias formas y técnicas para el aprovechamiento de estos recursos, algunas se han registrado en los recetarios de la serie Cocina Indígena y Popular editados por el Conaculta. En el Pacífico se utilizan entre otros pescados, lisa, mojarra, cabrilla, sierra, mero, mantarraya, cazón, robalo, jurel, pargo, lenguado, huachinango, saramuyo y tamborillo que se encuentra en la Bahía de Escuinapa al sur de Sinaloa; entre los mariscos hay calamar, camarón, ostión, pulpo, pata de mula, almejas y jaiba. Aunque también se come la tortuga caguama, es una especie que debe protegerse.



Por unos días de diferencia no pudimos disfrutar el apasionado partido entre el Atlético y el Real Madrid en la bella Lisboa (el resultado ya lo sabemos), pero luego de dos posteriores recorridos de 12 horas cada uno (el primero en avión (Madrid-Distrito Federal) y el segundo en un etilizado traslado nocturno por tierra (Distrito Federal-Tehuantepec), nos tocó ver esa batalla pambolera en la calurosa y florida ciudad del Istmo oaxaqueño. En ambos casos, el pretexto fueron los libros.
El underground editorial portugués
La mayoría de los editores mexicanos, independientes o no, alternativos o no, profesionales o no, comerciales o no, llámeseles como quiera, ya no se dan abasto para cumplir con su presencia en las decenas de ferias librescas que se realizan en las principales ciudades del país y el extranjero. Ya nos referimos en este espacio al idílico Encuentro de Editores Independientes. EDITA que cumplió su 30 aniversario en la ciudad que vio nacer al gran Fernando Pessoa (su presencia es abrumadoramente popular y a la vez profunda en cada instante del acontecer urbano). Entre otras publicaciones presentadas en la capital portuguesa, mecionaremos a la aguerrida revista underground Biblia Revolucionaria, que ha cumplido ya 18 años del poeta Tiago Gómez. También conocimos al legendario dibujante e historietista Geraldes Lino, entrañable dibujante que ha sabido convertirse en aglutinador de los mejores exponentes del género, mediante publicaciones colectivas que van del rescate histórico a la necesaria pornografía artística. Se presentaron otras publicaciones en verdad alternativas, incorrectas, que fusionan la denuncia social (una constante fue el cuestionamiento a las políticas de la Comunidad Económica Europea) con el sentido del humor. Es el caso de las revistas Flanzine y Nicotina (prohibida para los que prohíben fumar), dirigida por la sensible poeta Marta Navarro, quien presentó también su poemario de largo título: E se por hipótese esta máquina comecasse a funcionar agora e se desse início ao longo processo tentativa-erro. Recordaremos siempre el jardín La Estrella y el viejo bar Estadio. 




La abdicación de Juan Carlos de Borbón al trono de España, conocida desde meses atrás en la intimidad cupular del poder político de ese país, tiene todas las trazas de una operación de control de daños y limpieza de imagen cuidadosamente calculada en todos sus detalles: desde las líneas de la renuncia dirigidas al jefe de gobierno, Mariano Rajoy, hasta el mensaje televisado del monarca a la opinión pública, pasando, desde luego, por la circunstancia elegida para hacerla pública: cuando la economía pasa por un respiro en medio de la catástrofe y en momentos en que el jefe de Estado parece recuperarse de su larga cadena de achaques y accidentes.

El Príncipe y Mafalda
En mérito a sus ideas políticas y sociales y a su reconocido humor democrático, Mafalda acaba de recibir el preciado Premio Príncipe de Asturias. Creo indispensable consultar su opinión antes del traspaso de la Corona del Reino de España a Felipe, el actual Príncipe de Asturias.

El 22 de noviembre de 1975 Juan Carlos I fue proclamado rey de España por las Cortes españolas (a la izquierda, su esposa Sofía) Foto Ap
Monarquía en crisis

El futuro Felipe VI y su padre, Juan Carlos I, durante la Pascua Militar celebrada el pasado 6 de enero en Madrid Foto Ap

La abdicación de Juan Carlos I está plagada de incógnitas, y más allá de las manifestaciones que se suceden en toda España, demandando la celebración de un referendo constituyente en el que se pregunte al pueblo si quieren república o monarquía, la única realidad que no se pone en duda, al menos por ahora, es la continuidad de la institución monárquica. El escenario político en el corto plazo está definido por los tiempos para el advenimiento de Felipe VI.

La punta de lanza del desarrollo capitalista desde hace algunas décadas ocurre a través de la creación de startups, nacidas en Sillicon Valley después de un periodo de gestación de algunos lustros. A pesar de que, según The Wall Street Journal, tres de cada cuatro startups financiadas por Venture Capital no consiguen devolver el dinero prestado, una gran cantidad de gobiernos desean su propio Startups Ecosystem, a imagen y semejanza de Sillicon Valley. Ese deseo es tan intenso que se ha metido gran cantidad de dinero público para tratar de hacer despegar aunque fuere menos de 25 por ciento de esas empresas. Hay casos extremos: Canadá actualmente paga hasta 80 por ciento de los altísimos salarios de los ingenieros y técnicos inmersos en la innovación tecnológica de las empresas que intentan convertirse en una startup con futuro, a fondo perdido.

Un ejercicio sumamente interesante se llevó a cabo en la Universidad Nacional Autónoma de México durante el coloquio denominado Los grandes problemas nacionales, coordinado por el doctor Héctor Vasconcelos, acto en el que participé en la mesa Movimientos Migratorios. La finalidad del coloquio era comparar la situación actual con la descrita por Andrés Molina Enríquez en el libro del mismo nombre, Los grandes problemas nacionales, publicado en 1906, diagnóstico que se convirtió en la agenda de la Revolución Mexicana. El autor llamó a uno de los capítulos El funesto error de la importación de maíz americano, explicando que al romperse el equilibrio entre la nueva industria fabril y la producción de maíz se había decidido importar el grano de Estados Unidos y con ello, no sólo se perdió la autosuficiencia alimentaria, sino que se despojó a los campesinos de la posibilidad de vivir de su trabajo, cuya consecuencia fatal fue la emigración. Es muy interesante el énfasis que hace Molina Enríquez acerca de la importancia que tiene el grano para el país, pues constituye la base principal de la alimentación de la población mexicana, como lo demuestra palpablemente la cocina nacional.

El pasado 25 de mayo el subcomandante insurgente Marcos, después de varios años, se hizo presente en el sentido homenaje al votán Galeano en La Realidad y afirmó categórico: Éstas serán mis últimas palabras en público antes de dejar de existir, y señaló que “se da a conocer esta decisión colectiva… Tal vez después, días, semanas, meses, años, décadas después se entienda lo que ahora decimos”.

Hace 15 días escribí: “El ‘antisionismo’ no es otra cosa que un mal disfraz del agresivo prejuicio racial que ha ido creciendo en México, hasta adquirir tintes de odio que se expresan cada vez más abiertamente en las redes sociales y la vida pública”. Casi todas las respuestas que recibí confirman mi apreciación, sobre todo aquellas que, con profusión de adjetivos, demuestran la virulencia de la judeofobia y la xenofobia. También confirmé esa apreciación en la lectura de argumentos idénticos a los de esa izquierda antisionista (y similares fundamentos, desde Los protocolos de los sabios de Sión hasta Salvador Borrego) en los foros y páginas nazis y ultramontanas de los que me ocuparé en su momento.

Este estudio proporciona evidencia de que un individuo con un sexo genético masculino puede embarazarse y dar a luz a un niño sano, concluyen M. Poláková y sus colaboradores del Centro de Medicina Reproductiva de Praga en un artículo publicado hace menos de un año, en noviembre de 2013, en la revista checa Ceska Gynecol. Hasta ese momento se habían reportado al menos 15 casos de embarazos exitosos en condiciones análogas. Si bien lo anterior puede no ser motivo de sorpresa para los especialistas en este campo, si lo es para la mayoría de las personas que han sido educadas bajo la creencia –equivocada– de que el sexo se define por los cromosomas sexuales (46, XX las mujeres, y 46, XY los hombres).

En forma independiente a los gustos y al modo como cada quien calibre la muestra coordinada por la crítica de arte Avelina Lésper, lo que puede decirse de entrada es que resulta indispensable hacer una visita al ex convento diseñado por fray Andrés de San Miguel, porque hay varios ámbitos recuperados que por largo tiempo tuvieron otras funciones además de que su preservación hoy día lo convierte en un recinto perfectamente acorde con una de sus funciones principales, alojar un taller de restauro que involucra muy en primer término la rica colección carmelitana que añade piezas valiosas a las que se encuentran en el templo, cuya fachada ahora pintada de un blanco deslumbrante no resulta muy grata a la vista, pero se supone que corresponde a sus albores.

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