Enredo, por un departamento
OSC:
responsabilidad personal
Intrigas, en pos de Bucareli
Romero
Deschamps y Rosario Robles
Lo que resulta preocupante es
la falta de coordinación entre áreas clave del gabinete del presidente
Andrés Manuel López Obrador. La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez
Cordero (ministra en retiro, notaria pública y senadora con licencia)
había mantenido una marcada reticencia a hacer públicos todos los datos
correspondientes a su declaración patrimonial, a tal grado que llegó al
límite del plazo impuesto para darles publicidad, con la advertencia
tajante de su jefe, el Presidente de la República, de que quien no
hiciera transparente todo lo referente a sus haberes no podría continuar
colaborando en su gabinete.
La presentación de esa declaración patrimonial careció, para su
formato público, de la consignación de una propiedad inmobiliaria en
Houston, Texas, valuada en medio millón de dólares. Los ingresos de
Sánchez Cordero y de su esposo, notario público en ejercicio, acumulados
durante décadas, darían para esa compra sin mayor problema. Pero los
datos correspondientes no fueron hechos públicos y tal irregularidad fue
pescada y difundida por el diario Reforma, que se ha convertido en el principal destinatario andresino de los calificativos de
prensa fifí(ahora dirigido por Juan Ernesto Pardinas Carpizo, quien pasó del Instituto Mexicano para la Competitividad, y el activismo desde la
sociedad civil, a encabezar el citado periódico).
La secretaria Sánchez Cordero respondió durante la conferencia
presidencial mañanera. En esencia, descargó la responsabilidad en una
dirección de la Secretaría de la Función Pública, a cargo de Irma
Eréndira Sandoval. Ella, la secretaria Sánchez Cordero, habría indicado a
un funcionario de la SFP que se hiciera público lo referente a ese
departamento, pero la instrucción, dijo, fue desatendida.
El problema estriba en que la responsabilidad de la emisión de los
datos es absolutamente personal, como queda asentado en la última línea
del formato para realizar tales declaraciones patrimoniales. Sin entrar
al pleito, la SFP precisó esto mediante un cuidado boletín de prensa.
Por lo pronto, Sánchez Cordero avanzó mar adentro, hacia turbulencias
que ella misma alentó ayer, al mencionar que su estado de salud es
óptimo. El mensaje de la titular de Bucareli es que no renunciará al cargo por
razones de saludfísica.
El primer saldo de este incidente muestra la increíble incapacidad de
áreas estratégicas del gobierno federal para coordinar mensajes y
presentar frentes comunes bien armados ante pifias, especulaciones o
abiertos ataques políticos. La secretaria Sánchez Cordero debió haber
advertido de inmediato de la falta de publicidad de los datos de su
departamento a la hora en que su declaración patrimonial se hizo pública
y no hasta ahora, luego que un medio de comunicación exhibió tal
escamoteo, haya sido este intencional o por falla técnica.
El episodio en mención tiene como telón de fondo las pretensiones de
ciertos subgrupos del obradorismo de empujar a Sánchez Cordero de
regreso al Senado. La argumentación es variada: desde su alineamiento
con su gremio, el del Poder Judicial, contra la reducción de salarios,
hasta la supuesta promesa al panismo de que en Puebla le tocaría a los
sucesores políticos de Martha Érika Alonso nombrar de entre sus filas al
gobernador interino. Uno de los subgrupos que más atento está a la
suerte de la ministra en retiro es el encabezado por el ex gobernador de
Chiapas Manuel Velasco Coello.
Dos temas sugestivos: miembros de Petroleros Activos en Evolución
fueron a la Fiscalía General de la República a ratificar una denuncia
presentada en noviembre de 2016 contra el dirigente sindical Carlos
Romero Deschamps. Por otra parte, el secretario de Desarrollo Agrario,
Territorial y Urbano (Sedatu), Román Meyer Falcón, reveló que su
antecesora, Rosario Robles Berlanga, pagó del erario más de 13 millones
de pesos anuales por la renta de nuevas oficinas en la colonia Polanco,
luego del sismo de septiembre de 2017. Hubo otros gastos superfluos,
derrochadores. ¿Qué pasará con Romero y con Rosario?
Twitter: @julioastillero
Facebook: Julio Astillero
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx
No hay comentarios.:
Publicar un comentario