REVELES REPORTERO
Roberto Rodríguez Baños
(AMI) Mientras la democracia gana batallas asesinando civiles en Afganistán, el Banco de México advierte que sin los dólares de los braceros esto se va a poner más feo, Calderón se llena la boca de carnitas michoacanas e invectivas contra China y los demás que no se agachan ante usted ya sabe quién para hacerle la barba a ese en quien están pensado; y Pepe Reveles publica un libro con treinta casos, solamente treinta de las muchas denuncias que ha engarzado en su fructífero ejercicio de defensor de los derechos humanos. Simultáneamente, Carlos Ahumada invoca el derecho de réplica para repartir materia fecal entre sus patrocinadores, becarios, antiguos amores y víctimas.
La diferencia entre el pasquín de Ahumada y el libro de Reveles es que, todos y cada uno de los casos referidos por el periodista no solo verifican, ejemplifican con precisión cómo el concepto de delincuencia organizada es inconcebible sin la complicidad del sistema financiero o instituciones financieras no bancarias para el lavado de dinero; de la corrupción de la burocracia con la promesa, el ofrecimiento o la concesión de un beneficio indebido para que actúe o se abstenga de actuar en cumplimiento de sus funciones oficiales; y obstruya a la justicia mediante el uso de fuerza física, amenazas o intimidación, o la promesa, el ofrecimiento o concesión de un beneficio indebido para inducir a un falso testimonio u obstaculizar la prestación de testimonio o la aportación de pruebas en un proceso en la comisión de un delito*. De todo lo cual no se conoce mejor testimonio que Ahumada y asociados.
El sencillo volumen de bolsillo carece de pretensiones de lujo editorial, pero sobre sus 209 páginas transcurre una prosa de tersa lectura que captura al lector desde la primera hasta la última letra de las treinta piezas de narrativa periodística que las constituyen. La receta es de una transparencia conmovedora: Para escribir asi hay que saber de qué se habla. Eso hace diferente al reportero de los huéspedes transitorios o habitantes marginales del mundo periodístico. El conocimiento de su materia de trabajo. Para perpetrar un engendro como el de Ahumada basta contratar un mercenario de la tecla, hablar ante una grabadora, pasar los resultados por el cedazo de la impunidad y luego dispar la descarga de inmundicia sobre una sociedad inmisericorde, impíamente sometida al consumo de esta clase de deposiciones, con la intención nada soslayada de convertirla en coprófaga.
El libro de Reveles ha sido bautizado con una intrascendente perorata que no quisiera recordar pues demerita la consistente calidad de sus contenidos, consecuente con la alta estatura profesional de su autor y es una denuncia que, como la del evangelista parecería condenada a transcurrir en el desierto sin la atención que requiere. Pero no. La palabra periodística, aquí asi se demuestra, rescata la verdad y le restituye su dimensión histórica y su vigencia social. Con el agregado de la precisión verificable que hace de cada texto de este autor una invaluable fuente de consulta, pues cada dato está provisto del contexto que corresponde.
Hoy, lunes 11 de mayo, Sara Lovera, Pepe Reveles y Roberto Rodríguez Baños dedicaremos al tema la grabación del capítulo de la serie Periodistas que Capital 21 transmitirá mañana martes a las siete de la noche en http://www.canal21.df.gob.mx/index_periodistas.html donde se localiza el portal del sistema de radio y televisión digital del Gobierno del Distrito Federal.
La idea, naturalmente, es contribuir a hacer a usted beneficiario de la lectura de Las historias más negras de narco, impunidad y corrupción en México, cuyo autor es uno de los mejores reporteros que sobre este planeta haya caminado, empecinado en hacer de su vida una jornada sin fin en la defensa de los derechos humanos: José Reveles. rrb@red-ami.com
*2.1.2 Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Transnacional Organizada de 2000 (Convención de Palermo)
*2.1.2 Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Transnacional Organizada de 2000 (Convención de Palermo)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario