Madrid, 10 ener. 2011. El pasado sábado dos ciudadanas españolas y una argentina fueron presionadas por las autoridades marroquíes para abandonar los territorios ocupados del Sahara Occidental. Se encontraban en El Aaiún para realizar un proyecto de radio desde los Territorios Ocupados, Radio Aswad.
Las tres militantes feministas Elena Pollan Gonzalez, Covadonga Canteli De Castro (españolas) y Emilce Haydee Farias (argentina) han llegado el domingo a Madrid, donde reiteraron sus acusaciones contra la policía de Marruecos por el acoso al que fueron sometidas.
A su llegada al aeropuerto de Marraquech una de las activistas españolas, Elena Pollán, explicó que fueron acosadas y presionadas por la policía, para que entregaran su documentación y que se fueran en un vuelo que han tenido que gestionar por su propia cuenta.
El acoso de la policía marroquí, según manifestó Pollán, se intensificó después de que visitaran el viernes a la familia de Said Uld Sidahmed Uld Abdelwahad, un joven supuestamente asesinado por la policía en el pasado mes de diciembre.
Según indicó Pollán, ella y sus compañeras viajaron a El Aaiún en calidad de turistas, el pasado 30 de diciembre, para poner en marcha un proyecto de radio desde la capital del Sáhara Occidental, Radio Aswad. Sin embargo, este plan no llegó a buen término, puesto que fueron retenidas en la habitación de su hotel y vigiladas por más de una decena de policías de civil.
En este contexto, los policías marroquíes informaron a las activistas que tenían que dejar la ciudad porque se las acusaba de actividades que atentaban contra la integridad del territorio. Además, les presentaron un documento escrito en francés, que se negaron a firmar por no entender su contenido.
Tras la presión policial las tres observadoras internacionales eligieron trasladarse en autobús a Marraquech ante el temor de que la policía se vengara con la familia de Said Uld. Las activistas han expresado que esta "expulsión demuestra, una vez más, el ocultismo que sigue practicando Marruecos, respecto a la grave situación que sigue viviéndose en la ciudad ocupada de El Aaiún, donde las detenciones políticas y extrajudiciales, el acoso y hostigamiento, las torturas y las violaciones totales de Derechos Humanos, se han convertido en el pan de cada día de la población saharaui que vive en la ciudad”.
Foto archivo AmecoPress.
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