Aunque la “guerra” inventada por Felipe Calderón en contra de los cárteles de la droga ha dejado de ser una “guerra” por designio de él mismo, es una realidad el incremento en los fondos públicos destinados para que las Fuerzas Armadas puedan adquirir mejor armamento y más aeronaves que les permitan hacerle frente al crimen organizado.
En la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) apenas se están reponiendo del susto que les causó una investigación del Órgano Interno de Control (OIC) –cuyo titular es un militar– sobre un contrato para dar mantenimiento a cinco helicópteros Mi-17, cuando esa misma dependencia, junto con la de Marina, solicitaron la autorización de la Secretaría de Hacienda para adquirir otras 17 aeronaves a un costo aproximado de 10 mil millones de pesos.
En el expediente abierto por el OIC de la Sedena, se explica que la Dirección General de Administración de esa Secretaría asignó de manera directa un contrato millonario a la empresa Volans, SA de CV, cuyo director general es el ruso Yuriy Chumak, para el mantenimiento en Rusia de cinco helicópteros Mi-17; sin embargo, las aeronaves nunca se enviaron a ese país y siempre permanecieron en México, donde actualmente siguen volando.
Esto generó dudas e inquietud en algunos mandos castrenses, pues en los últimos años han ocurrido accidentes aéreos que han costado la vida de militares. Además, hay varios niveles de mantenimiento: en Rusia alcanzan un nivel V de reparación, mientras que el máximo en México es III.
En 2009, el OIC solicitó la información de ese contrato millonario a la Dirección General de Administración de la Sedena, pues el secretario de la Función Pública, Salvador Vega Casillas, pidió conocer cómo se habían gastado esos recursos públicos.
La Sedena se limitó a informar que se había hecho un convenio modificatorio para que Volans diera mantenimiento en México a los cinco helicópteros, por lo que ya no fueron trasladados a Rusia, lo que representó un ahorro importante en el gasto inicial presupuestado.
Según la Sedena, esta explicación bastó para que el OIC cerrara el expediente bajo supervisión de la Función Pública. Del dinero ahorrado en el mantenimiento de las aeronaves, la Sedena explicó que se reintegró a la Tesorería de la Federación. ¿Por qué se pactó un primer contrato para darles mantenimiento en Rusia y, de pronto, deciden dejarlos en México y que sean los técnicos de Volans los que viajen aquí?
Más aeronaves y más gasto
La semana pasada, El Universal destacó en su primera plana una nota del reportero Noé Cruz, relativa a la compra de 17 aeronaves para las secretarías de la Defensa y de Marina, a un costo de 9 mil 888 millones de pesos.
Sobre esa información, la Sedena confirmó la petición hecha por ambas secretarías a Hacienda para que autorice el presupuesto correspondiente y puedan adquirir los aviones y helicópteros. Para la Sedena, estas nuevas aeronaves se suman a las más de 200 que ya tiene los militares y se utilizan para el traslado de personal en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado. Actualmente, la Defensa cuenta con 206 mil efectivos.
En la información de El Universal, se explica que esa Secretaría solicitó la compra de cinco aviones Hércules versión H usados; mientras que la Marina pretende adquirir seis aviones versión transporte militar y carga y seis helicópteros versión transporte de personal.
La nota agrega que la demanda de transporte de efectivos en la Marina aumentaría de 19 mil en 2009 hasta casi 51 mil en 2012, y la compra de las aeronaves permitiría hacerle frente.
En el blog Todo por México, donde militares y civiles intercambian opiniones sobre las Fuerzas Armadas, explica que el Mi-17 es un helicóptero bimotor de transporte con capacidad de portar cohetes y misiles guiados antitanque.
Desarrollado a partir del fuselaje de los Mi-8, especialmente para la guerra de Rusia en Afganistán y producido en las fábricas de Ulán-Udé y Kazán, el Mi-17 fue equipado con motores TV3-117MT más grandes, los rotores y la transmisión desarrollada para el Mi-14, junto con mejoras del fuselaje para cargas más pesadas.
La designación Mi-17 es para exportación; las Fuerzas Armadas rusas lo llaman Mi-8MT. El Mi-17 se puede reconocer porque tiene el rotor de cola en el lado izquierdo y guardapolvos en frente de las tomas del motor.
En México, la Fuerza Aérea cuenta con 24 Mi-17, 19 en servicio y cinco, retirados, matrículas 1701 a 1724. La Armada de México tiene 23 Mi-17, 21 en servicio y dos retirados, con matrículas AMHT-200 a AMHT-222. La Policía Federal cuenta con cuatro Mi-17, todos en servicio, con matrículas XC-PFD (PF-302, número de serie 312 M82), XC-PFE (PF-304, 95582), XC-PFF (95663) y XC-PFG (PF-305, 96077).
Pedidos internacionales del Mi-17
El 11 de junio de 2009, se anunció que Estados Unidos entregó más de cuatro helicópteros de carga Mi-17 al Ejército de Pakistán para facilitar su operación contra el terrorismo.
El 16 de septiembre de 2009, la Marina de Estados Unidos entregó dos de los cuatro Mi-17 para el Cuerpo Aéreo del Ejército Nacional Afgano. El 19 de junio de 2010, se anunció que el gobierno estadunidense compraría y restauraría 31 helicópteros Mi-17 de Rusia para abastecer a ese ejército.
Estados Unidos considera añadir el helicóptero Mi-17 para sus Fuerzas Especiales, con el fin de ocultar los movimientos de tropas. También ese país ha adquirido unidades para los aliados en Irak y Pakistán.
En agosto de 2010, se firmó un contrato por la Fuerza Aérea Argentina para dos Mi-17, además de una opción para otros tres, para apoyar las bases de la Antártida. En septiembre de 2010, el ministro de Defensa polaco anunció que su país compraría cinco nuevos Mi-17 de Rusia, con el propósito de fortalecer la participación de Polonia en Afganistán.
*Periodista
No hay comentarios.:
Publicar un comentario