Las
diferencias de género entre mujeres y hombres –que actúan como normas
sociales– a la par que moldean las prácticas sexuales con consecuencias
directas en el riesgo de adquirir VIH, otras infecciones de transmisión
sexual (ITS), y tener embarazos no deseados, afectan también la manera
en que se vive con el virus una vez adquirido.
Esa es la tesis central del libro “Vivir con VIH en México.
Experiencias de mujeres y hombres desde un enfoque de género”, que es
resultado de una investigación de las doctoras e investigadoras
Cristina Herrera, Tamil Kendall y Lourdes Campero.
Publicado por El Colegio de México (Colmex), el libro recoge
testimonios de mujeres y hombres con VIH que viven en Guerrero, Morelos
y Distrito Federal, y subraya que mientras las políticas de prevención,
atención y tratamiento del virus no se construyan desde una visión de
género, no serán efectivas a largo plazo y tampoco garantizarán el
respeto de los Derechos Humanos (DH).
Durante la presentación de la publicación –ayer en El Colmex–, Cristina
Herrera explicó que muchos de los testimonios fueron recogidos hace
algunos años, por lo que algunas de las problemáticas han recibido
respuestas, por ejemplo el hecho de que las mujeres embarazadas ahora
tienen más acceso a información sobre la prevención perinatal, a
tratamientos antirretrovirales y a pruebas de detección rápida de VIH.
Sin embargo se mantienen vigentes problemas como el estigma y la
discriminación que enfrentan las personas que viven con el virus, la
falta de activación de estrategias que existen a nivel nacional y que
no son accionadas a nivel local.
Para la especialista si bien es cierto que se ha comenzado a
visibilizar a las mujeres con VIH, aún son una población que enfrenta
severos obstáculos. Puso como ejemplo que ellas siguen teniendo poca
capacidad de negociación sexual y en el uso del condón, sobre todo las
de escasos recursos.
Herrera abundó que aunque algunas de las estrategias tienen incluido el
discurso de género, esta perspectiva no se lleva en la práctica;
enfatizó que se tiende a entender el género “como salud de la mujer”.
Pero en este contexto, el género se debe pensar “como los sufrimientos
y las vulnerabilidades distintas de las personas a partir de imágenes,
normas y roles de género que la gente reproduce en su vida intima,
sexual y en su vida pública; así como la forma en que estas
concepciones están limitando la posibilidad de tener una vida digna y
respetando los derechos sexuales y reproductivos, y en primer lugar la
dignidad”.
Lourdes Campero, investigadora del Instituto Nacional de Salud Pública
(INSP), agregó que si bien las personas se rigen por comportamientos
racionales, también manejan sus prácticas sexuales desde el cuerpo, las
emociones, el impulso y en el caso de las mujeres desde el concepto del
“amor romántico”, elementos en los que intervienen visiones culturales
y sociales sobre los roles de género.
En el caso de las mujeres –acotó– es muy común no proponer el uso del
condón porque “no está dentro de las normas de género que la sexualidad
femenina sea activa, planeada y deseada de antemano, y por lo tanto eso
implica que no va preparada para una relación sexual”.
Desde ese postura explicó que las estrategias desarrolladas en México
para prevenir el VIH apuestan al cambio individual de comportamientos
asumiendo que las personas cuidan su propia salud y utilizan
racionalmente la información recibida, y que se relacionan entre sí de
manera coherente con identidades sexuales claras y basadas en la
naturaleza, es decir de forma únicamente homosexual o heterosexual, lo
que no sucede generalmente.
Expuso que si bien existe una responsabilidad individual en el
desarrollo de relaciones sexuales seguras, también las personas están
inmersas en culturas y valores, que en muchos sectores de la población
determinan las acciones que se realizan, por lo que las políticas
públicas no deben apelar únicamente a la responsabilidad del individuo
en la prevención, y comprender esos contextos sociales y culturales.
Por: Anaiz Zamora Márquez
Cimacnoticias | México, DF.-
No hay comentarios.:
Publicar un comentario