Contra Maduro: ya nadie le cree al derechista Calderón porque siempre está borracho o crudo

Pedro Echeverría V. 

1. Los dos presidentes panistas y anticomunistas, Fox y Calderón (2000-2012), no contentos con desfalcar  la economía de México y, como Calderón, provocar el asesinato de cien mil mexicanos y suramericanos, no descansaron de hacer campaña calumniosa contra los gobiernos venezolanos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro, también contra los gobiernos cubanos de Fidel y Raúl Castro por el hecho de ser “gobiernos de izquierda, antimperialistas o comunistas”.  Pero nadie les hace caso: El Fox dicharachero siempre es motivo de burlas y el asesino Calderón que fue a hacer campaña a Nuevo León por el PAN y contra el candidato independiente –según el gobernador electo, el famoso “Bronco”,  “nunca hay que creerle  a Calderón porque una de dos: o está borracho o está crudo amodorrado”. 

2. Calderón acusó de violentos a los futbolistas de Venezuela porque –dice- “fueron entrenados por el presidente Maduro” y parece que de paso también calificó con el mismo adjetivo a los colombianos. ¿Puede olvidarse que Calderón pertenece al grupo de “intelectuales” impulsados por el imperio de los EEUU arrastrados por Vargas Llosa, Felipe González, Krauze, Castañeda y otros, para exigir libertad en Venezuela, Cuba, Bolivia, “olvidando” que los trabajadores son perseguidos y asesinados en sus propios países?. Así han actuado siempre pagados por el imperio y de las burguesías a las que pertenecen. Los anticapitalistas, por el contrario,  defienden por convicción las luchas de los trabajadores por su liberación de la explotación y opresión donde estas se manifiesten. 

3. Ni Cuba, ni Venezuela, ni Bolivia, son regímenes socialistas o radicales de izquierda, como tampoco lo fueron Rusia, China o los países del bloque “socialista”; son países gobernados por partidos o personajes de enorme voluntad y honestidad que buscaron o buscan aplicar políticas y economías justas e igualitarias con el objetivo de que los pueblos salgan de la pobreza y escalen hacia mejores niveles de vida. ¿Qué les desagrada y les hace hervir la sangre a sus enemigos? La política antimperialista, las denuncias contra la burguesía y los medios de información a su servicio, el que estén llamando al pueblo a organizarse para producir para ellos mismos; sobre todo que se clausuren o se acaben los negocios que hacían con la protección de los regímenes dela llamada “democracia y libertad”. 

4. México se ganó el respeto de Cuba, y por décadas el trato distinguido, cuando López Mateos en 1962 no acató las órdenes del presidente yanqui  Kennedy  de romper relaciones con Cuba y se mantuvo como el único país de América abierto a intercambios. Sin embargo estas relaciones estuvieron a punto de romperse en enero de 2004, en la Cumbre de las Américas de Monterrey, Nuevo León cuando el boquiflojo Fox le pidió a Fidel Castro que “le hiciera el favor abandonara la Cumbre” porque a los pocos minutos llegaría el presidente yanqui Bush, (“nuestro amo”, pensó)  y no quería “problemas”. Antes colocó a Castro a su lado en el banquete y le dijo “comes y te vas, por favor”.  Estas políticas de Salinas, Zedillo, Fox y Calderón, así como de Peña, de vivir arrastrado tras el imperio, son las que han aislado a México de otras naciones. 

5. Durante esos doce años de gobiernos panistas de Fox y Calderón, obedeciendo a sus principios empresariales y clericales, se desarrollaron cotidianamente campañas contra Cuba, Venezuela y demás por todos los medios oficiosos. Durante toda la campaña presidencial de 2006 de López Obrador, empresarios y medios de información difundieron que “López Obrador era Chávez el loco, el opresor de los venezolanos, el comunista autoritario, el dictadorzuelo que era un peligro para México”.  Desafortunadamente López Obrador fue tan acorralado, intimidado y tuvo miedo a que continuaran despedazándolo en los medios de información, que nada pudo responder en defensa de Chávez.  Hoy Calderón parece arrinconado queriendo imponer a su mujer –que no tiene ni un ápice de independencia- como presidenta del PAN, pero al no poder la ha obligado  a hacer el ridículo como “candidata presidencial”.

6. Felipe Calderón fue presidente (2006-2012) de los peores que ha tenido México. Ante la acusación de haberle arrebatado la Presidencia a López Obrador, de haber sido desconocido y sufrir el acoso de la gente que bloqueó el Zócalo y varias calles de la Ciudad de México, tomo como estrategia de defensa militarizar al país con el pretexto de combatir el narcotráfico. Fueron seis años que el país vivió en medio del “fuego cruzado” entre soldados y delincuentes que llevaron a 100 mil muertos y al primer lugar a México como el país más peligroso del mundo. Pero Calderón –con el fuerte apoyo del gobierno yanqui y los gobiernos del PRI que no querían que el país se les deshaga entre las manos- pudo concluir sus seis años. Este tipo de respaldo PRI-PAN es el que ha consolidado la dictadura del capital.

7. A Calderón no lo quieren ni en su propio partido, el PAN; sólo cuenta con el apoyo de los muchos personajes que ocuparon cargos durante su gobierno. Pero así siempre ha sido en México: después de recibir grandes apoyos como si fuera el dios salvador, al otro día, después de entregar al mando el pueblo los tira a la basura y “muerto el rey, viva el rey”. Pero en México –quizá el país más corrupto del mundo- cuando se retiran los presidentes siguen recibiendo el resto de sus vidas como “jubilación”, enormes cantidades de dinero y servicio del gobierno, cantidades que representan más de 500 veces lo que reciben los trabajadores jubilados. Por ello cada vez que habla Calderón la gente pregunta: ¿Está en la cárcel? ¿Está borracho o está crudo amodorrado? (16/VI/15)

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