Rosa Isela desapareció el miércoles 30 de noviembre en la prolongación Las Bajadas, en el municipio de Veracruz. Al parecer, la joven fue citada por una mujer que presuntamente quería donarle artículos para su bebé. Sin embargo, Rosa Isela no regresó a casa después de encontrarse con ella.
El cuerpo de la joven fue localizado sin vida y sin su bebé el pasado sábado 3 de diciembre en el rancho «Los Arrieros», en la localidad Rancho del Padre perteneciente al municipio de Medellín de Bravo. Ese mismo día, la Fiscalía veracruzana informó sobre la detención de Gonzalo N. y Verónica N., presuntos responsables de la desaparición y el feminicidio de Rosa Isela, así como de haber extraído a su hija de su vientre. De acuerdo con la institución, al momento de la detención, los presuntos culpables tenían consigo a la recién nacida, quien fue rescatada por las autoridades.
Por otro lado, la FGJEV también informó que los restos fueron reconocidos por los familiares de la víctima, quienes —no obstante— denunciaron a diversos medios locales que las autoridades les negaron en primera instancia la oportunidad de ver el cuerpo de Rosa Isela.
Mara Lizbeth Castro Vázquez, hermana de la víctima, declaró que, en primer lugar, ella y su familia se enteraron del hallazgo de Rosa Isela por cuenta propia y no a través de las autoridades. Una vez confirmado el hecho, el personal de la FGJEV le dijo a ella y a su madre que no podían ver el cuerpo de Isela por el estado en el que se encontraba. Además, la funeraria advirtió que les entregaría el cuerpo en un ataúd sellado por esa misma razón. Fue hasta el domingo 4 de diciembre que la misma Mara Lizbeth pudo reconocer el cuerpo de su hermana, el cual fue velado en su domicilio ese mismo día.
El caso ya está siendo investigado por la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Violencia Contra la Familia, Mujeres, Niñas y Niños y Trata de Personas como feminicidio. Los presuntos responsables serán presentados en audiencia inicial ante juez de proceso y se hará un procedimiento penal oral en el distrito judicial de Veracruz para definir su situación legal.
Rosa Isela no es la única: hay por lo menos 6 casos similares
Durante una conferencia de prensa a raíz del feminicidio de Rosa Isela, la Articulación de Defensoras de Veracruz denunció que este caso no es aislado. Según informó la agrupación de colectivas y organizaciones feministas, de 2018 hasta la fecha se han registrado por lo menos seis agresiones similares en contra de mujeres embarazadas en diferentes municipios del estado.
De acuerdo con Metzeri Ávila San Martín, integrante del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, algunos de estos feminicidios han sucedido en Alvarado, Coatzacoalcos y Boca del Río. Las víctimas son mujeres de entre 17 y 23 años que son enganchadas con engaños cuando están en las últimas etapas de gestación; luego las raptan y extraen a sus bebés como en el caso de Rosa Isela.
Tanto el Observatorio como otras colectivas lamentaron que, a pesar de estos hechos, las autoridades de Veracruz no han sido capaces de frenar la violencia contra las mujeres en la entidad. Actualmente, Veracruz cuenta con dos alertas de género (una de ellas por Violencia de Género contra las Mujeres y otra por Agravio Comparado por Discriminación Normativa en Derechos Sexuales y Reproductivos) y hay una más que se está impulsando desde 2019.
«Derivado de estas graves situaciones, exigimos que las investigaciones de estos delitos se realicen con pleno apego al debido proceso y con perspectiva de género», declararon colectivas y organizaciones feministas en un comunicado.
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