Álvaro Delgado Gómez
“A eso se le llama complicidad y es, exactamente, la que une a PRI, PAN y PRD con los oficios de Claudio X. González, cuyo talento político puede regresarlos al poder en 2024. En una de esas…”
Alejandro “Alito” Moreno fue escoria para los panistas hasta que unió al PRI a ellos en la elección de 2021. Luego lo llamaron traidor, corrupto, basura y otras lindezas por impulsar la enmienda para las Fuerzas Armadas. Ahora lo han perdonado por oponerse a la reforma electoral y hasta lo van a dejar impune de su riqueza espuria.
Y sí: Los panistas aman al priista “Alito” Moreno Cárdenas, porque en realidad son tan sinvergüenzas como él y no sólo lo van a salvar del desafuero como Diputado federal, sino que se convertirán en sus patiños en las elecciones de Gobernador en el Estado de México y Coahuila el próximo año, cuyos candidatos son del PRI.
Están muy contentos los panistas porque “Alito” les ha dicho que ellos definirán al candidato presidencial en 2024, aunque él terminará su periodo en agosto del próximo año, salvo que se quede al frente del PRI con las trampas que tan bien conoce y ejerce.
En eso acabaron los jerarcas del PAN: Revolcándose en el mismo chiquero con “Alito”, aterrorizados ante la posibilidad de enfrentar solos la competencia democrática ante Morena y sin confiar en sí mismos ni en la sociedad.
Lo mismo ocurre con los opinócratas: Saben de la larga cola de Moreno Cárdenas y de tantos corruptos del PAN, pero les gana el odio a Andrés Manuel López Obrador y además porque muchos son también como ellos.
En el desafuero de “Alito”, por cierto, no se reactivó nada: El juicio estaba previsto para este mes desde septiembre luego de que, el 16 agosto, la Fiscalía del Estado de Campeche presentó la solicitud por haber presuntamente cometido delitos de corrupción.
El propio presidente de la Sección Instructora, el morenista Jaime Humberto Pérez Bernabé, expuso desde septiembre, cuando se instaló ese órgano de la Cámara de Diputados, los tiempos previstos en la ley y hasta aclaró que Moreno Cárdenas quede quedar impune ante la posibilidad de un empate porque son cuatro sus integrantes y no hay voto de calidad.
Y, en efecto, eso seguramente ocurrirá: Los dos integrantes de Morena en la Sección Instructora son Pérez Bernabé y Leonel Godoy, mientras que el del PRI es su coordinador, Rubén Moreira, y el del PAN es José Elías Lixa Abimerhi, un incondiconal del presidente de ese partido, Marko Cortés, y de su jefe político, Santiago Creel.
La lógica establece que los dos diputados de Morena votarán a favor del desafuero de Moreno Cárdenas y el del PRI en contra, así que la decisión está en manos del PAN y no hay secreto en lo que sucederá: Este partido va a votar en contra y el empate librará a “Alito” de la cárcel, porque el proyecto ni siquiera llegará al pleno de la Cámara de Diputados.
La Ley Orgánica del Congreso General, en su artículo 45 fracción 7ª segundo párrafo, establece lo que ocurrirá si hay empate en la Sección Instructora: “Los proyectos de dictamen de la Sección Instructora y los de las comisiones encargadas de resolver asuntos relacionados con imputaciones o fincamiento de responsabilidades, así como de juicio político y declaración de procedencia, sólo pasarán al Pleno si son votados por la mayoría de los integrantes respectivos”.
Es decir, teniendo en sus manos que se haga justicia en el caso de Moreno Cárdenas mediante un juicio en el que se pruebe si es corrupto o es inocente, el PAN ha decidido exonerarlo de antemano sin considerar las pruebas en contra.
A eso se le llama complicidad y es, exactamente, la que une a PRI, PAN y PRD con los oficios de Claudio X. González, cuyo talento político puede regresarlos al poder en 2024. En una de esas…
Álvaro Delgado Gómez
Álvaro Delgado Gómez es periodista, nacido en Lagos de Moreno, Jalisco, en 1966. Empezó en 1986 como reportero y ha pasado por las redacciones de El Financiero, El Nacional y El Universal. En noviembre de 1994 ingresó como reportero al semanario Proceso, en el que fue jefe de Información Política y especializado en la cobertura de asuntos políticos. Ha escrito varios libros, entre los que destacan El Yunque, la ultraderecha en el poder (Plaza y Janés); El Ejército de Dios (Plaza y Janés) y El engaño. Prédica y práctica del PAN (Grijalbo). El amasiato. El pacto secreto Peña-Calderón y otras traiciones panistas (Editorial Proceso) es su más reciente libro.
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