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verdadoficial
Con 22 años en esa agencia, Cole conoce la política mexicana y sus
puntos críticos en relación con el crimen organizado y el fentanilo. En
su hoja de servicios destaca su experiencia en Colombia, Afganistán y Ciudad de México
. En 2020 se retiró siendo director regional interino para México, Canadá y América Central.
El 2 de abril de 2020, Breitbart News Network, el sitio de Internet
de ultraderecha fundado por Steve Bannon (quien fue consejero en un
tramo del trumpismo), publicó una entrevista con Cole: Los cárteles
de la droga trabajan en estrecha colaboración con funcionarios corruptos
del gobierno mexicano en los más altos niveles (...) Si el
contribuyente promedio tuviera un conocimiento básico de cómo estos dos
grupos trabajan juntos hasta el momento, se sentiría asqueado. A veces,
es difícil saber quién es quién cuando se trata con cárteles, la policía
federal, las fuerzas militares y el gobierno federal
.
En otra parte del texto, titulado Exclusivo: Químicos mexicanos ayudan al cártel de Sinaloa a excluir a China del comercio de fentanilo
, el próximo director de la DEA, si el Senado lo confirma, aseguró: El
gobierno mexicano, al más alto nivel, es cómplice y trabaja codo a codo
con estos cárteles en todos los niveles de fabricación, transporte y
distribución. Las unidades de élite como la Semar están totalmente
marginadas y la actual administración no les permite perseguir a los
líderes de los cárteles
(https://goo.su/aBKnK).
En otro flanco: el destemplado esfuerzo hecho ayer en la mañanera por
la presidenta Sheinbaum y el fiscal federal, Alejandro Gertz Manero, da
cuenta de la importancia que para la actual administración tiene tratar
de sepultar el caso Cienfuegos, sujetándolo a la verdad
oficial;
es decir, a la versión fabricada por el propio Gertz en México, sin
reconocer ni aceptar lo esencial: que el ex secretario peñista de la
Defensa Nacional fue devuelto a México, como consta en actas judiciales
del vecino país, por petición del Departamento de Estado, entonces a
cargo de William Barr, en atención a gestiones del gobierno obradorista.
El truco intentado pasa por centrar el caso en la exonerante resolución mexicana, es decir, en el acomodo de Gertz Manero, a las necesidades locales y en evitar, desacreditar o silenciar el hecho fundacional, definitorio, de las negociaciones entre los gobiernos de México y Estados Unidos para que el general Salvador Cienfuegos fuera devuelto mediante el acordado retiro de cargos, sin definirse si el militar era culpable o inocente.
De esas negociaciones se habló abiertamente en la mañanera
obradorista en noviembre de 2020. El entonces canciller, Marcelo Ebrard,
dejó testimonio inequívoco deesos arreglos, al argumentar que el
retorno de Cienfuegos implicaría una investigación mexicana sin
escenarios de impunidad: Sería muy costoso para México haber optado
por tener esta conversación, lograr que por primera vez se desestimen
los cargos, que sea retornado a México y no hacer nada sería casi
suicida; para eso, no hacemos nada, que se quede allá
.
Añadió, para tratar de explicar la postura mexicana que en su momento
se mencionó extraoficialmente como el amago de cancelar la colaboración
institucional con la DEA y la expulsión de México de sus agentes: Pónganlo
muy simple, hay dos caminos: o se repara esa violación al acuerdo que
existe entre ambos (al no avisar Estados Unidos que estaba investigando a
Cienfuegos), o entonces nosotros pondremos sobre la mesa a revisar toda
la cooperación
. Claro que hubo negociación y, derivado de ella, el
gobierno de Estados Unidos pidió a la jueza del caso Cienfuegos que
retirara los cargos, por razones de política internacional y cooperación
entre ambos países. ¡Hasta mañana!
X: @julioastillero, Facebook: Julio Astillero, juliohdz@jornada.com.mx
Si el irredentismo de Netanyahu depende de las dádivas de la jázara (https://bit.ly/3QqemJr) Miriam Adelson –viuda del mafioso casinero Sheldon Adelson– y de la voluntad de Trump, el expansionismo hobbesiano del presidente antiglobalista y petrolero número 47 de EU depende tanto de los límites que le impongan mil 800 millones de feligreses islámicos, hoy en plena apoplejía, como del poderío geoestratégico de Rusia y China.
La semana en curso asentará los reales de las tendencias y su
dinámica hacia el inevitable nuevo orden tripolar, donde destacan varios
incandescentes e indecentes temas regionales (el fenecido concepto de Norteamérica
), pasando por la anexión de Gaza, quizá como estado 54, hasta la trascendental conferencia de seguridad de Múnich (https://bit.ly/3CPbUcz).
¿Quién podrá detener hoy la militarizada despoblación de palestinos en Gaza (360 kilómetros cuadrados con alrededor de 1.8 millones de habitantes gobernados por Hamas) y Cisjordania (5 mil 655 kilómetros cuadrados con una población de más de 3 millones de habitantes, gobernada por la tan vulnerable Autoridad Nacional Palestina, sucesora de la OLP)? Más allá del apocalipsis en Gaza, el problema que sigue lo constituye Cisjordania, colonizada obscenamente por más de medio millón de Israelíes, sin contar otros 220 mil colonos israelíes que pretenden apoderarse de Jerusalén Oriental (Al-Quds).
En medio del cementerio creado por su correligionario jázaro
Netanyahu, con base en el proyecto inmobiliario de su yerno Jared
Kushner (https://bit.ly/3QgaPOa) para impulsar la riviera necrófila de Gaza (https://bit.ly/3TPNJQX),
su suegro Trump, con todo el poder militar nuclear que detenta todavía
EU, aprobó el traslado de 1.8 millones de palestinos a Jordania, que
parece haber aceptado el rey Abdullah, y a Egipto, que ha rechazado
tajantemente el presidente Al-Sisi. El premier israelí Netanyahu se
aprovecha del agujero negro geopolítico que se abrió en Gaza para
incitar a trasladar a los palestinos al desierto de Arabia Saudita (AS):
los sauditas pueden crear un Estado palestino en Arabia Saudita; tienen mucha tierra ahí
(https://bit.ly/41eVTGo).
En efecto, AS ostenta 2.15 millones de kilómetros cuadrados frente al territorio del Israel posmoderno que ostenta 21 mil 937 kilómetros cuadrados (prácticamente 10 por ciento de AS) y que carece de profundidad estratégica cuando en su seno existe un empate técnico entre la población palestina y la población israelí (whatever that means), debido a que su mayoría jázara, de origen turco-mongol, no es semita (https://bit.ly/4bpyNzl). ¿Who cares?
Funcionarios de alto nivel de AS han propuesto que los expoliadores
israelíes en la eterna Palestina pudieran ser trasladados a Groenlandia.
Para iniciar el plan mancomunado del suegro Trump y su yerno Jared
Kushner, el ministro de seguridad Israel Katz ya instruyó al ejército a
preparar un plan que permita a los gazatíes abandonar voluntariamente
, lo cual incluirá opciones de salida a través de los cruces terrestres, así como arreglos especiales de salida por mar y tierra
(https://bit.ly/3QeDnax).
Pareciera que la sepultura catastral de Gaza ya está resuelta,
mientras la anexión de Cisjordania y la expulsión de sus moradores
palestinos va viento en popa. La flagrante palestinofobia de la
administración Trump, que le satisface todos sus caprichos al premier
Netanyahu de los que nunca hubiera soñado, ha llevado al “desplazamiento
obligado en Cisjordania que ha escalado a un paso alarmante y ha
impactado a 76 mil refugiados palestinos (https://bit.ly/4icek4b)”. Suena increíble, pero en Gaza la geopolítica de la barbarie de Israel
(https://bit.ly/3CPMJGJ) parece ser rebasada por el megagenocidio en Cisjordania.
http://alfredojalife.com, Facebook: AlfredoJalife, Vk: alfredojalifeoficial, Telegram: https://t.me/AJalife, YouTube: @AlfredoJalifeR
destino manifiesto
destino manifiesto, resulta que en el caso concreto de México el enloquecido Donald Trump decidió imponer aranceles al acero y aluminio con todo y que Estados Unidos mantiene superávit en este renglón, es decir, su país los vende en un volumen y con una factura mucho mayor que en sentido contrario, amén de que el supuesto
incremento de mil 678 por cientoen los envíos mexicanos (algo que se sacó de la manga) de tales productos es simple y llanamente una mentira.
Eso sí, lo que el magnate que despacha en la Oficina Oval logró en
cuestión de minutos fue el rechazo absoluto a la guerra comercial que,
en su afán imperial, intenta imponer en contra de la comunidad de
naciones, porque sus decisiones no sólo afectan a sus socios
más
cercanos (México y Canadá), sino los países latinoamericanos, asiáticos y
europeos, a quienes, en tan sólo tres semanas, ya los tiene hasta la
madre por sus abusos, amenazas y desplantes.
Con paciencia digna de Job, la presidenta Sheinbaum reitera aquello de coordinación sí, subordinación no
, y en la mañanera de ayer dijo que si bien Trump tiene su estilo
, ella y su gobierno siempre defienden los intereses de México
. Cierto es, dijo, que tenemos que establecer la mejor relación posible
con el vecino del norte, pero
buscando convencer al presidente de Estados Unidos y a todo su gabinete
de que el Tratado Comercial (T-MEC) que tenemos ha generado una
integración económica que beneficia
a las tres naciones que, de común acuerdo, lo integran, y ese es un argumento muy importante
.
El problema es que no se trata del balance comercial, si un país exporta o importa más o menos, sino del caprichoso y chantajista comportamiento del magnate que terminó siendo presidente estadunidense. Trump trata de imponer su voluntad pasándose por el arco del triunfo si sus decisiones son o no legales, si violan el derecho internacional o si agrede a terceras naciones. A él lo que le gusta es enseñar músculo, enviar un mensaje de fuerza para que el mundo se pliegue, aún más, a sus imperiales caprichos. ¿Hasta cuándo? Dependerá de la reacción de la comunidad de naciones, siempre con aquella frase en mente: el valiente lo es hasta que el cobarde quiere, y hasta ahora ella ha sido bastante blandengue.
En vía de mientras, la presidenta Sheinbaum instruyó al
secretario de Economía que detallara cuál es el balance real en el
comercio exterior de acero y aluminio entre nuestro país y Estados
Unidos. De entrada, Marcelo Ebrard subrayó que es falso que la
exportación de acero y aluminio mexicanos se incrementó mil 678 por
ciento, que es la proporción que utilizó Trump en su orden ejecutiva
para imponer aranceles de 25 por ciento, concretamente para el caso mexicano.
¿Dónde estamos en las exportaciones de México a Estados Unidos en
2024?; pues casi en el mismo lugar del promedio de 2025-2017; no hay tal
mil 678 por ciento
. Nosotros importamos más (acero y aluminio) de
Estados Unidos; con México, ¿cómo le va a Estados Unidos? Pues nos vende
más, nos vende casi 6 mil 897 millones de dólares más de lo que
nosotros exportamos; por tanto, su balanza comercial le es favorable”.
Pero incluye a nuestro país en el arancel de 25 por ciento. Otra cosa es
cómo le va a Estados Unidos, si gana o pierde con cada país en materia de acero y aluminio
.
Puso tres ejemplos concretos: Estados Unidos mantiene un déficit por
315 millones de dólares con Australia (pero el primer ministro
australiano, Anthony Albanese, rápidamente anunció que Trump accedió a considerar una exención
para ese país); Canadá le vende mucho más acero a Estados Unidos del
que éste importa de la nación de la hoja de arce; China: Estados Unidos
importa directamente de este país asiático casi 14 mil millones de
dólares, y ese es su déficit.
Entonces, dijo Ebrard, “sería un caso inusual, porque se estaría imponiendo un arancel a un país al que tú, Estados Unidos, le vendes más; el presidente Trump a veces dice ‘sentido común’. Bueno, le tomamos la palabra, No balazo en el pie, no destruir lo que hemos construido los últimos 40 años”.
Las rebanadas del pastel
Es práctica común del Fondo Monetario Internacional meter
las narices y las manos en todos los países y en todos los temas, sin
que nadie lo convoque (condiciona, amenaza, chantajea), pero ahora que
debe pronunciarse por las barbaridades arancelarias de Trump,
serenamente asegura que es demasiado pronto para evaluar su repercusión en la economía mundial
. ¡Cara dura!
La Universidad de Guadalajara ha producido dos libros con experiencias de escritores en torno a la lectura
, Marca de fuego y Marca de agua,
ambos coordinados por el poeta Jorge Souza Jauffred y el narrador
Godofredo Olivares. Textos de, entre otros invitados (cito sin orden),
Carmen Villoro, Silvia Eugenia Castillero, Patricia Velasco, Luis
Armenta Malpica, Javier Ramírez, Rogelio Villarreal, Sara Velasco, Sara
Poot, Laura Solórzano, Luis Vicente de Aguinaga, Francisco – Pancho– Madrigal, Raúl Bañuelos y Jorge Esquinca, que muestran una diversidad de abordajes al obligado tema.
Alrededor de 50 autores, los propios coordinadores incluidos, dan fe de su fe en la lectura, una afición que lo mismo nació en la frecuentación de historietas, periódicos y revistas, que al contacto con libros como Corazón: Diario de un niño, El Principito, alguna saga de Salgari, Tom Sawyer, Platero y yo, las aventuras de Tarzán, las narraciones de Julio Verne… hasta llegar a Ray Bradbury, Lovecraft, Dostoievsky, Rulfo, García Márquez, Sabines, Hemingway, etcétera.
Hay desde la presencia de un malogrado tío poeta como
detonador de una ferviente vocación hasta quienes prefieren hablar de su
propia escritura, e incluso una maestra, Sara Velasco, que permutaba
horas de clase de sus alumnos por de lectura ad libitum en
alguna biblioteca. También maestra era la madre de Sara Poot, quien
cuenta una anécdota de infancia: “Mamá nos dice que no usemos el
pronombre ‘yo’. Digo que no tengo hambre. Nachito mi hermano dice ‘ni
yo’. Le reclamo que haya dicho ‘yo’; contesta que ‘ni modos que diga
ni’”. A la profesora le da literalmente un ataque de risa
.
Villoro, sobre Cortázar: Sus textos nos hacían percibir que había
otra dimensión, otras, detrás de la experiencia inmediata, y que el
mundo era curioso y grave, comprensible e incomprensible, real y
fantástico a la vez, familiar y siniestro
.
Los relatos y el trato de la Nana Carmen
hicieron que Yolanda Zamora, conductora de programas radiofónicos culturales, mirara la realidad cotidiana ¡alerta al milagro!
Hablábamos de magia, pero es mejor el término milagro al referirnos a la lectura, y –cierto– hay que estar expectantes, decididos, preparados para su aparición, para su realización.
Nos deja el legado de ser una mujer que entregó su vida al rock mexicano como cantante, compositora y activista durante 43 añosen esta liga están las rolas de Rock en tu corazón https://youtu.be/MJWn3Uv-XXI?si=y7RMvIerehd4z-40
Titans of Metal Fest: TOMF
El Parque Bicentenario recibirá el próximo primero de marzo siete bandas para la realización de Titans of Metal Festival. En el cartel aparecen nombres de agrupaciones instaladas en diferentes subgéneros del metal. A las 13:50 horas abre el festival, Infected Rain, liderados por el guitarrista Vadim Vidick Ozhog y por Lena Scissorhands, cantante y compositora de esta banda dedicada a el nü y al metal core; después se escuchará a Lizzy Borden y su heavy metal; Lovebites ejecutará su power metal; Six Feet Under hará sonar el death; Fear Factory dosis de nü. Los encargados de cerrar el TOMF serán, primero, los Cavalera con su thrash/black metal extraído por su paso por Sepultura y Soulfly. El estelar será WASP capitaneado por Blackie Lawless y su glam/shock rock. Y ya que andamos por los sinuosos caminos del heavy meta,l hay que escuchar por la plataforma de podcasts mixcloud.com, el programa Last Diabolus con Rogelio Matamoros y Víctor Jerez. Cada emisión es un recorrido por lo más pesado de esta corriente de guitarras distorsionadas, el doble pedal en la bataca y los gritos agudos/guturales.
PD: portadas y textos en C.C. El Rule. Mañana a las 17 horas se inaugura una muestras de fotos tomadas por su servidor que ligaron portada en la revista Conecte; también se exhiben algunos textos publicados en Generación, Playboy y en libros como Rock en salsa verde, Rupestres. En la música estará Rod Levario.
Salú.
simplificalos aranceles a las importaciones de acero y aluminio en 25 por ciento
sin excepciones ni exencionespara todos los países de origen, con lo cual elimina las dispensas y las cuotas libres de tarifas a sus principales proveedores, entre los que se cuentan (en orden de importancia decreciente) Canadá, México y Brasil. El magnate avisó que también exigirá que ambos metales ingresen fundidos y vertidos a fin de frenar las importaciones de acero chino con proceso mínimo, así como la posibilidad de imponer aranceles adicionales a automóviles, productos farmacéuticos y semiconductores. En particular, señaló que no va a permitir la continuidad del déficit comercial con México ni de las plantas automotrices instaladas aquí.
El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, acudió a la conferencia de prensa matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo para demostrar, con datos duros, que la medida del republicano no sólo atenta contra el sentido común, sino que representa un balazo en el pie. Por principio de cuentas, es un despropósito iniciar una guerra arancelaria de acero y aluminio con México cuando éste compra a Estados Unidos 6 mil 897 millones de dólares más de lo que le vende en esos materiales. Este superávit es de larga data, y se ha incrementado en años recientes hasta hacer de México el destino de 52 por ciento de los productos siderúrgicos estadunidenses.
Además, dado que una elevada proporción de las importaciones
y exportaciones
representa en realidad movimientos transfronterizos en la elaboración
de un mismo bien, los aranceles terminarían aplicándose varias veces a
una mercancía hasta incrementar su costo de producción a niveles
absurdos. Lejos de ser el golpe a México que Trump vende a sus
simpatizantes xenófobos y chovinistas, este crecimiento exponencial de
los precios afectaría a las empresas y a los hogares estadunidenses por
el elemental motivo de que la frontera es un límite político y cultural,
pero en lo económico América del Norte funciona como un solo territorio
a lo largo del cual se asignan diversas funciones, cada una de ellas
inseparable de las demás. En este sentido, cabe afirmar que, más que
balazos, Trump está tirando bombas a los pies de la economía
estadunidense.
El caso de las armadoras de vehículos resulta ilustrativo. En 2019, el salario promedio en el sector automotriz dentro de Estados Unidos era siete veces mayor al vigente en México, y en el segmento de autopartes esa brecha se elevaba 800 por ciento. Aunque de esa fecha a la actualidad se ha dado un crecimiento sostenido de los sueldos pagados en México, es evidente que el costo de trasladar plantas con valor de miles de millones de dólares al norte del río Bravo y absorber la diferencia salarial descarrilaría la rentabilidad de la industria automotriz estadunidense en momentos en que ya se encuentra acorralada por sus competidores.
En suma, el magnate y su entorno no atinan a entender o no se atreven
a confesar que México no es un competidor comercial de Estados Unidos,
sino su principal proveedor de mano de obra cualificada y un eslabón
imprescindible en la creación de valor para su cadena productiva. Si
desea cumplir sus promesas de devolver la grandeza
a su país,
disminuir el costo de la vida y potenciar la creación de empleos, Trump
deberá reconocer tarde o temprano que ello sólo es posible al colaborar
con México, no dinamitando la relación económica. Por su parte, el
gobierno federal hace bien en mantener una firme serenidad ante amagos
que vienen y van de acuerdo con los estados de ánimo y las necesidades
coyunturales del magnate.

Por ahora, el factor externo se cuela al interior nacional con la fuerza suficiente que le permite tamizar lo adicional. Es la irrupción de esa voz discordante, de escándalo continuo, proveniente del vecino norteño. Su ríspido ímpetu no deja entresijo alguno para asentar su pesada y contradictoria presencia. En respuesta a tal estímulo, se ha desatado una lluvia de opiniones, sesudos estudios, improvisados otros, libros al vapor, consejos al por mayor y severas alertas que examinan lo que, en realidad, ese alarido de escándalo, pretende encerrar en su fondo. Al mismo tiempo, se escudriñan con alarma los alcances y las consecuencias que podrían desembarcar con ella. Este fenómeno difusivo y sonoro no sólo apareció aquí en México –aunque las consecuencias puedan ser de la mayor importancia–, sino que se desparrama por incontables naciones. Todas ellas preocupadas por lo que tal alharaca pueda acarrear para cada quien.
En el centro de las preocupaciones multicitadas se enroscan los aranceles que, como castigos unilaterales, podría imponer, a diestra y sobre todo a izquierdosos, el ya inevitable huésped mundial: el señor Donald Trump, un intruso que, apoyado por una base de cegatones correligionarios locales, ha irrumpido frente al ancho mundo.
Tiene, o aparenta tener, consigo la fuerza necesaria para solidificar sus pretensiones en órdenes, decretos y leyes. Armado de esta manera se cuela entre rendijas y fronteras para inducir miedos, prevenciones y urgencias de atención. Su presencia no llega en medio de aprecios y entendimientos, sino que el ventarrón se apareja con amenazas y peticiones unilaterales. El respeto, tanto a Trump como a su propio gobierno y país, queda atorado en estos alocados vaivenes. El daño apunta a convertirse, con un poco de tiempo adicional, en factor determinante. Un trasfondo de decadencia hegemónica es sello y verdad económica, social y política.
Las reacciones que está provocando dentro de su país empieza a articularse con la debida presencia. No han tardado en aparecer varios jueces que vetan o condicionan sus palabras y órdenes ejecutivas. Algunas llevan la ruta de atascarse en definitiva: es el caso de la nacionalidad adquirida por el simpe hecho de nacer en ese territorio. Tal y como sucede en México, por ejemplo.
La contienda básica, crucial, no se dirime entre Estados Unidos y sus aliados o socios, sino con el rival que osa retar sus negocios comerciales, tecnológicos, militares o científicos: China. Esta nación les ha manoseando y relativizado su hegemonía, otrora indisputable. El dólar, la moneda de intercambio y medida, ya es retada en la práctica internacional. Y este es, en verdad, un punto neurálgico que Trump resiente y que le causa irritante dolor. El uso del dólar en tal categoría, les acarrea condiciones y ventajas cruciales que podrían perder: les permite ignorar las consecuencias (internas y externas) de los déficits en los intercambios comerciales –balanza comercial–. Un motivo de serias preocupaciones en todos los demás países. Las palabras del ya célebre bocón anaranjado no se ciñen a los aranceles, sino que se extienden por numerosos ámbitos geopolíticos. Afanes territoriales, nomenclaturas caprichosas, conflictos bélicos a zanjar (Ucrania) o adquisiciones de gran calado y consecuencias: Gaza o Groenlandia. Toda esta galaxia de asuntos ha penetrado en la actualidad nacional y forma densas atmósferas que es indispensable atender.
En medio de este maremágnum de circunstancias, peligros y costos de serias magnitudes se escurren, por el subsuelo anímico, pasiones de variada índole. Una de ellas irremediable e incontenible: la del poder político. Esa pulsión se ha introyectado en varios de los actores preponderantes de la vida pública mexicana. Y ahí crece y adopta diversas formas que condicionan su actuación. También se instala en los que les rodean o, incluso los que vigilan. Ya es, y crecientemente será, factor coadyuvante en el diario acontecer nacional. A días y meses de iniciado el nuevo gobierno, la pelea por aparecer ante el ojo público es notable a simple vista. Por ahí circulan los inoculados con esa pasión que les trastoca toda su existencia. Al mismo tiempo, se convive con otra ocupación, también inevitable y urgente: orientar y conducir el trasteo para la continuidad del modelo. Bien puede imaginarse el abarcante uso del tiempo personal, tanto de los postulantes como de responsables para lidiar con tan íntimas pasiones: celos, corajes, males estomacales, enajenantes competencias, desvelos y demás derivados de los continuos acomodos del poder. De ese tipo que se enseñorea mientras más se acerca a la cúspide, a la misma presidencia.
Cónclave es una película dirigida por el alemán Edward Berger y escrita por Peter Straughan, basada en la novela homónima de Robert Harris, publicada en 2016. Debo decirle que he pasado por siete pontífices y he seguido de cerca los cuatro últimos cónclaves. Las historias, intrigas y aspirantes me los conozco bien. Por ello, el filme de Berger representa una metáfora inteligente puesta en escena, un suspenso que va in crescendo en la medida que los cardenales punteros van tomando posiciones.
La obra refleja la asamblea del cónclave con eficacia como un acto político, jurídico y un momento sagrado. En la trama, después de que el papa muere de un ataque cardiaco, el cardenal decano Thomas Lawrence, protagonizado por Ralph Fiennes, quien vive en ese momento una crisis de fe, organiza el cónclave para elegir al sucesor. Convoca a todos los cardenales de todo el mundo. Los cuatro candidatos principales son Aldo Bellini (Stanley Tucci), secretario de Estado y ex arzobispo de Milán, considerado un intelectual y sucesor ideológico del difunto papa; Joshua Adeyemi (Lucian Msamati), de Nigeria, un conservador social; Joseph Tremblay (John Lithgow) canadiense, conservador pragmático y ambicioso; Goffredo Tedesco (Sergio Castellitto), de Italia, tradicionalista reaccionario, pues quiere regresar a la misa en latín, luchar contra el acoso del Islam, acoger la lucha anti LGTB+ y antimujeres. Finalmente, surge una figura misteriosa que se presenta al iniciar el cónclave, se trata de un cardenal in pectore, es decir, nombrado por el papa en secreto para salvaguardar la labor del purpurado mexicano Vicente Benítez (Carlos Diehz), arzobispo de Kabul. Dado el peligro que su vida corre, el papa lo nombra bajo reserva.
La película se estrenó en Estados Unidos en octubre de 2024. Recibió comentarios elogiosos de los críticos, tanto por las actuaciones, la dirección, el guion y la cinematografía. Recaudó más de 100 millones de dólares ante un costo de 20 millones. Tiene ocho nominaciones, incluyendo mejor película, para el Oscar 2025.
La cinta nos muestra que, tras la muerte del papa progresista, cada
cardenal no está ahí por casualidad. Los purpurados aspirantes no son
blancas palomas. El filme dice: Jamás encontraremos un candidato cuyo historial sea del todo intachable
. Los candidatos son astutos y sagaces, tienen diferentes armas. Para mí, la obra es una analogía de poder en la Iglesia. Cónclave
muestra que cada candidato tiene ambiciones y determinación. Cada uno
guarda un lado oscuro que pretende enmascarar. El cardenal Bellini, el
progresista, quiere impedir que el conservador Tedesco se convierta en
papa, pero el secretario de Estado se deja sobornar. El cardenal
canadiense, Joseph Tremblay, compra votos y juega sucio. Se desenmascaró
su simonía, exhibida por el decano, cayendo en desgracia. Joshua
Adeyemi, de Nigeria, falta al celibato obligatorio. Ahí le muestran que
tuvo relaciones con una religiosa de la cual tuvo un hijo no reconocido.
El decano o camarlengo, Thomas Lawrence, a pesar de su crisis de fe,
duda ante la tentación de ser elegido pontífice. El propio papa
fallecido, seguía creyendo en Dios, pero dudaba de la santidad de la
Iglesia católica.
El colegio elige nuevo papa a Vincent Benítez, al misionero mexicano, que había sido nombrado en secreto por el papa. El decano Lawrence descubre que la visita médica cancelada de Benítez era para una histerectomía laparoscópica. El mexicano elige el nombre de Inocencio, reconoce tener órganos femeninos y masculinos, renunció a la cirugía porque Dios le dio esa constitución.
Berger hace un esfuerzo notable para introducirnos en el palacio Vaticano. Algunos detalles se le escapan. Por ejemplo, el hotelito de Santa Martha, Domus Sanctae Marthae, está a unos pasos de la Capilla Sixtina. Ahí vive Francisco, sin embargo, el filme muestra pequeños autobuses que en que se desplazan los cardenales o esa hermosa imagen de los paraguas blancos.
Otro acierto de Berger es que no se atrapa en las reglas y normas que
rigen en la asamblea. Las reglas están contenidas en un espeso
documento llamado Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis,
redactado por Juan Pablo II en 1996 con ligeros ajustes de Benedicto
XVI. El texto tiene muchas prohibiciones, como hablar en grupo o hacer
proselitismo a favor o en contra de cualquier candidato. Por ello en los
años 80, el entonces cardenal emérito de Viena, Franz König, decía que
los cónclaves son eventos aburridos y tediosos. Contrasta con el enfoque
del filme en que predomina el enfoque político y sus intrigas.
Contrasta cuando Bellini reclama a Lawrence: Esto no es un cónclave, es la guerra
.
Finalmente el tema de las mujeres. En Roma las monjas caminan mirando al piso. La hermana Agnes (Isabella Rossellini), responsable de los alimentos de la asamblea, reprocha que las mujeres son invisibles en la Iglesia, pero Dios les ha dado ojos y oídos. Saben todo, pero no tienen voz. La película termina con una imagen de esperanza, con dos hermanas desenfadas que atraviesan los patios vaticanos como avizorando otro futuro para la Iglesia.
Lo vi por vez primera en 1960 en la acera de la casa de sus padres en
Managua, recién llegado del seminario de la Ceja en Medellín. Flaco y
narizón, sin barba, en bluyines y camisa de cuadros, esperándonos porque
íbamos a Masatepe de excursión, los del grupo de la generación
traicionada y del grupo Ventana, en pleitos literarios pero juntos bajo
la admiración que él despertaba entre todos los aprendices de poetas. Yo
me sabía de memoria Hora 0
: Noches tropicales de Centroamérica, /
con lagunas y volcanes bajo la luna / y luces de palacios
presidenciales, / cuarteles y tristes toques de queda…
Y después en San José, leyendo sus poemas al aire libre en la Universidad de Costa Rica en medio de una multitud de jóvenes, y la vez en 1976 que fuimos juntos a Solentiname con Julio Cortázar, y la misa que celebró, en la que Cortázar, feligrés improvisado, comentó el evangelio del prendimiento en el huerto y reflexionó acerca del porqué Jesús no había invocado a su padre para que enviara una legión de ángeles a salvarlo; y el ruido de los pasos de la revolución por venir que ya se oían llegar en el silencio de la noche del Gran Lago.
Y tantas andanzas juntos, el congreso del Pen Club en Elsinor, en Dinamarca, buscando firmas de solidaridad para la lucha en Nicaragua, o durmiendo en el piso de una casa llena de gatos en Ámsterdam, junto a un canal donde desayunábamos arenques en un puesto callejero, en busca de apoyo ante gobiernos, parlamentos, fundaciones, todas las puertas se abrían ante Ernesto, una celebridad en Europa desde la publicación de los Salmos, que se volvió una Biblia de los jóvenes: Bienaventurado el hombre que no sigue las consignas del Partido / ni asiste a sus mítines / ni se sienta en la mesa con los gánsteres…
Luego, volando en una avioneta a medianoche de San José a León el 16
de julio de 1979, en las puertas del triunfo de la revolución,
aterrizamos en el aeropuerto sin asfalto donde operaban los aviones que
fumigaban los plantíos de algodón, y le dije, y lo recordó en un poema, este es el olor de Nicaragua
,
la brisa cargada de insecticida; y sus años en el Ministerio de
Cultura, burócrata a la fuerza, sus oficinas en la mansión de Somoza,
inventando de la nada un mundo nuevo, escuelas de teatro y de danza,
talleres de artesanía popular, de pintura primitiva, de poesía.
Su militancia en una iglesia de los pobres, recriminado por el papa Juan Pablo II en el aeropuerto de Managua mientras él permanecía de rodillas, suspendido ad divinis de su ministerio sacerdotal en castigo, y luego reivindicado poco antes de su muerte por el papa Francisco, misa íntima concelebrada en su cuarto del hospital, el nuncio apostólico y él, que yacía en la cama con la estola puesta y la plena felicidad en su rostro porque volvía a ser cura de pleno derecho.
Y nuestra vecindad de 40 años en colonial Los Robles, calle de por medio, sus llegadas cada día temprano de la mañana a dejarme los capítulos de sus memorias a medida que los iba escribiendo, y yo, a mi vez, los originales de mis novelas, hasta aquel domingo de marzo en el hospital, yo de pie, contemplándolo en su lecho, él ya del otro lado del misterio que exploró en su poesía, vida y muerte, los hemisferios de un todo sin antes y sin después, la primera vez que mediaba entre nosotros el silencio.
Y su terrible funeral en la catedral de Managua, entre vociferaciones, empellones y amenazas de las turbas oficiales cuando sacábamos el féretro, el que más había amado a su país escarnecido por el odio.
Para él la elevación mística fue siempre el abandono de la envoltura terrenal, y decía que había aprendido de San Juan de la Cruz que un líquido no puede recibir otro líquido si antes el recipiente no se vacía. Vaciarse, para llenarse de Dios, y viendo a Dios en cada uno de sus semejantes marginados y oprimidos, el reino de Dios en la tierra.
Terrenal y místico, creyó en la comunión del espíritu con la materia y
en la inmensidad irreal del universo, empeñado en una búsqueda que dejó
anunciada en el poema Con la puerta cerrada
: “Somos semillas que para nacer tienen que morir / es el precio necesario de la nueva vida…”
Credo que transformó en el par de líneas que, según dejó dispuesto, se inscribirán en una placa en su lugar final de reposo frente a la iglesita de muros blancos en Mancarrón, su isla de Solentiname, ahora confiscada: Morir no es salir del universo sino profundizar en él. Y la muerte es una mayor intimidad con Dios.
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el que no transa no avanza, a la que se sumó en una conducta que responde a la injusticia a la que fue sometida sistemáticamente. Ello construyó una escalera de víctimas y victimarios que enlodó de arriba abajo el tejido social.
Cuando se aborda el fenómeno de la corrupción en México la conversación conlleva de manera implícita, pero no discursada, una carga histórica que se remite a la Conquista y al mecanismo de defensa al que las mayorías tuvieron que acudir como respuesta adaptativa para subsistir, algo que se traslada al inconsciente colectivo y es antepuesto por el señalamiento únicamente de las conductas de figuras que ejercieron cargos públicos y sus secuaces. Más allá de ellas, parece que acciones reprobables de ciudadanos de a pie como la mordida al policía de crucero, el moche para un trámite, o la luz roja no respetada, no formaran parte del ciclo de corrupción del que nos quejamos, pero del que también, sin reconocerlo, hemos formado parte por lo menos en una ocasión. No olvidemos que la corrupción requiere tanto de la existencia del corrupto como de la del corruptor.
Si partimos de que esa escalera de descomposición contagia de arriba abajo, es normal que en el imaginario colectivo queden presentes sólo los actos corruptos que las élites del poder han llevado a cabo, finalmente ellas marcaron la pauta del cauce de inmoralidad al que posteriormente se sumaron otros sectores de la población. Ante la necesidad de terminar con esa inercia de deshonestidad normalizada, surgió con la llegada de la Cuarta Transformación la importancia de construir un modelo de austeridad gubernamental que vaya en la misma dirección que durante tanto tiempo tomó el cohecho, de arriba abajo.
La austeridad republicana es un modelo opuesto al que se normalizó de
manera institucional por parte de funcionarios, el dispendio. Pasamos
de un modelo de saqueo antes de 2018 a otro de austeridad, con una
característica que en su momento Andrés Manuel López Obrador llamó pobreza franciscana
,
en una frase que más allá de lo religioso conlleva un significado
social y nos remite a la orden de los franciscanos, cuya principal
característica es la pobreza que otorga la riqueza, algo que por más
contradictorio que pueda escucharse lejos está de serlo. Responde a la
profusión que da el no necesitar más de lo justo para conseguir
bienestar.
Francisco de Asís se veía a sí mismo como un caballero al servicio de un señor y una dama; su Señor era Jesús y su dama la pobreza, lo que no significa romantizar la penuria, sino adoptar la pobreza para emular el estilo de vida sin lujos ni propiedades y con lo justo necesario para subsistir para entonces dedicarse a la labor enteramente espiritual.
Si para el gobierno de México su señor es el pueblo y su dama la pobreza, el mensaje de austeridad republicana y de pobreza franciscana puede referirse a que, sin lujos y con lo justo necesario para operar, pueda dedicarse a su labor social. No debe existir gobierno rico en un país empobrecido.
La fórmula es un modelo de austeridad que permita la liberación de recursos para que se entreguen a quienes más los necesitan, además de destinarse a proyectos que generen oportunidades de desarrollo, lo que no estuvo en el interés de funcionaros de los gobiernos que utilizaron el servicio público para enriquecerse con el hambre de los pobres.
Se debe entender que la austeridad no significa no gastar, más bien
es no hacerlo en lo que no se necesita para en su lugar dirigir los
recursos adonde sí deben ir. Se vigila que los precios no estén inflados
y que, por ejemplo, no se compren tornillos de 10 centavos en 100
pesos. No se trata de no utilizar –como parecen desear algunos
opinadores– Palacio Nacional, sino de aprovecharlo y dejar de construir cabañas
en Los Pinos para, en su lugar, abrir sus puertas a la gente y dar
sentido a lo que de origen no lo tuvo. La austeridad no es cerrar la
llave, sino ponerle un filtro para no desperdiciar.
No se preocupe, estimado lector, por lo que haya leído en chats de tías y tíos que, preocupados, forman parte de los agoreros que vaticinan una crisis económica derivada de un modelo de austeridad que no comprenden. Preocupante sería que en nuestro horizonte se acercara de nuevo aquella sombra del dispendio que durante tanto tiempo se normalizó y a través del cual funcionarios, sus familias, y amistades, usufructuaron los recursos de la nación en beneficio propio y en detrimento del pueblo.
Aunque su familia no tenía una tradición artística, la inclinación de Rodrigo Ímaz (Ciudad de México, 1982) hacia las artes se manifestó desde su temprana infancia. Se desarrolló en un entorno familiar que valoraba las ciencias sociales y las humanidades, hubo una fuerte tendencia hacia temas políticos que lo llevaron a involucrarse en movimientos estudiantiles y al activismo. De ahí que en su práctica artística, Ímaz busca establecer un diálogo con otros artistas y con su contexto social para mejorar la vida de los demás y para combatir las injusticias.
La semilla que llevó a Rodrigo Ímaz hacia el arte se sembró en su infancia. Asistió a una primaria que ofrecía diversos talleres creativos todas las tardes, la ilusión de asistir a estos talleres era su mayor estímulo para ir a la escuela. Recuerda que en una ocasión, él y su padre visitaron a una persona muy enferma y le llevaron un dibujo de Rodrigo para brindarle consuelo y alivio, lo que desató las lágrimas y despertó una profunda emoción en la persona que lo recibió. Ese instante se grabó en su memoria y fue un punto de inflexión, una revelación de la poderosa conexión que existe entre el arte y la emoción humana.
Rodrigo Ímaz exploró su talento creativo en diversas áreas. Desde niño, tocó la batería, luego la guitarra y más tarde el piano; también se aventuró en el teatro desde una edad muy temprana. Aunque el futbol siempre estuvo presente en su vida, intuía que el dibujo sería su salvación. Estudió en la Secundaria Pública número 29, donde su habilidad para el dibujo fue valorada por sus compañeros, quienes pedían que les hiciera dibujos para sus tareas a cambio de frituras Cazares, que eran un tipo de recompensa o trueque.
En su camino hacia las artes, Rodrigo Ímaz consideró la posibilidad
de estudiar arquitectura, pero su madre le hizo una pregunta que lo
llevó reflexionar: ¿por qué no estudias arte, si eso es lo que realmente quieres hacer?
Fue otro punto de inflexión en su vida y se dio cuenta de que podía confiar en su instinto.
Ingresó al Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH)-Sur de la UNAM y posteriormente ingresó a la Escuela Nacional de Artes Plásticas (ENAP), actualmente Facultad de Artes y Diseño, donde descubrió el fascinante mundo de la gráfica.
Ante una profunda inquietud, incursionó en la cinematografía cuando su tío, Rubén Ímaz, lo invitó a colaborar en un documental sobre su bisabuelo Eugenio. Así comenzó su interés en capturar a través de la cámara y documentar sus raíces y origen. Sus abuelos paternos fueron refugiados de la guerra civil española, mientras sus abuelos maternos son originarios de Tixtla, Guerrero, influidos por el movimiento cardenista y la escuela socialista.
Actualmente, Rodrigo Ímaz trabaja en un documental titulado AVIA. Es una reflexión sobre el exilio, la vida y la muerte, pero sobre todo una celebración a la vida cuando se enfrentan juntos a los últimos días de una mujer que vivió con dignidad y principios.
Tiempo atrás, Rodrigo realizó el documental Juan Perros (2016), que narra la vida de un hombre que vive de la basura en medio del desierto de Cuatro Ciénegas rodeado de sus animales. El documental recibió varios galardones, entre ellos fue premiado en el Festival Internacional de Cine de Morelia, en el Festival Docs Mx y estrenado en la Semana de los Críticos de Cannes.
El arte de Rodrigo Ímaz tiene una dosis de humor que le permite conectar con la gente. Una de sus obras recientes es la intervención de su acta de nacimiento, en la que remplazó su apellido por un anagrama que se convirtió en Rodrigo Maíz. Al cambiar su nombre establece una conexión entre su herencia y la cultura mexicana, explorando la idea de la identidad y la pertenencia a través de la modificación de un documento oficial. Para mayor información sobre su obra, se puede consultar www.rodrigoimaz.com y su Instagram: @imazrodrigo
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