Nueva etapa
Es de madrugada cuando comienzo a escribir la primera entrega de un blog que creo me permitirá tener una comunicación diferente, más directa y cercana (evité, sonrojado, decir "íntima") con quienes formamos una especie de comunidad no oficialmente declarada. Junto con los Édgares con los que inicio esta nueva etapa (Rossano y Ramírez, respectivamente) que ofrecerá en primera instancia los videos ya distintivos de este espacio y el presente blog, he llegado, hace apenas unas horas, de los alrededores del Senado de la República donde hemos presenciado el inicio de la resistencia civil pacífica contra la privatización petrolera. Luego de un inicio femenino lleno de fuerza y alegría, de cantos y consignas, camisetas blancas y cachuchas de colores, llegó el relevo masculino nocturno con un aire ya más definido de reedición (parcial, reducida, nostálgica) de las noches del plantón Zócalo-Reforma. Para nosotros, quienes empezamos a marchas forzadas esta nueva etapa del esfuerzo voluntario de aportar un granito cibernético a la lucha diaria contra la cerrazón y la manipulación informativas, es significativo dar nuevos pasos el mismo día en que comenzó también a caminar la oposición organizada al intento de rapacidad petrolera. Por lo pronto, y para comenzar a compartir algo de lo que luego llega al buzón electrónico de juliohdz@jornada.com.mx, demos paso a algunos correos recibidos en estas primeras horas de viernes.
Humberto Olvera, por ejemplo, escribe:
Esa maldita minoría
Joaquín López-Dóriga, Adela Micha, Carlos Loret de Mola y todos los periodistas de Televisa tienen razón, es indignante que los pocos, una minoría, someta y pase por encima de todos. Por supuesto que están en lo cierto y en sus emisiones noticiosas se han desgarrado las vestiduras, pero les faltó decir algo, que así como han condenado al Frente Amplio Progresista por ser esa minoría que asaltó y "disolvió" al Congreso, otros que también son minoría, 14 familias para ser más preciso, son los que gobiernan, los que deciden y los que ordenan al gobierno federal y mandan sobre el resto de 100 millones de mexicanos. No dijeron que ellos, Televisa, otra minoría, manipulan las mentes y los cerebros de millones de mexicanos que sólo tienen un canal de televisión en sus hogares, desinformando cuando les conviene ya sea minimizando las acciones acertadas de sus enemigos, o maximizando, ampliando y exagerando las posturas erróneas de sus adversarios.
Es de madrugada cuando comienzo a escribir la primera entrega de un blog que creo me permitirá tener una comunicación diferente, más directa y cercana (evité, sonrojado, decir "íntima") con quienes formamos una especie de comunidad no oficialmente declarada. Junto con los Édgares con los que inicio esta nueva etapa (Rossano y Ramírez, respectivamente) que ofrecerá en primera instancia los videos ya distintivos de este espacio y el presente blog, he llegado, hace apenas unas horas, de los alrededores del Senado de la República donde hemos presenciado el inicio de la resistencia civil pacífica contra la privatización petrolera. Luego de un inicio femenino lleno de fuerza y alegría, de cantos y consignas, camisetas blancas y cachuchas de colores, llegó el relevo masculino nocturno con un aire ya más definido de reedición (parcial, reducida, nostálgica) de las noches del plantón Zócalo-Reforma. Para nosotros, quienes empezamos a marchas forzadas esta nueva etapa del esfuerzo voluntario de aportar un granito cibernético a la lucha diaria contra la cerrazón y la manipulación informativas, es significativo dar nuevos pasos el mismo día en que comenzó también a caminar la oposición organizada al intento de rapacidad petrolera. Por lo pronto, y para comenzar a compartir algo de lo que luego llega al buzón electrónico de juliohdz@jornada.com.mx, demos paso a algunos correos recibidos en estas primeras horas de viernes.
Humberto Olvera, por ejemplo, escribe:
Esa maldita minoría
Joaquín López-Dóriga, Adela Micha, Carlos Loret de Mola y todos los periodistas de Televisa tienen razón, es indignante que los pocos, una minoría, someta y pase por encima de todos. Por supuesto que están en lo cierto y en sus emisiones noticiosas se han desgarrado las vestiduras, pero les faltó decir algo, que así como han condenado al Frente Amplio Progresista por ser esa minoría que asaltó y "disolvió" al Congreso, otros que también son minoría, 14 familias para ser más preciso, son los que gobiernan, los que deciden y los que ordenan al gobierno federal y mandan sobre el resto de 100 millones de mexicanos. No dijeron que ellos, Televisa, otra minoría, manipulan las mentes y los cerebros de millones de mexicanos que sólo tienen un canal de televisión en sus hogares, desinformando cuando les conviene ya sea minimizando las acciones acertadas de sus enemigos, o maximizando, ampliando y exagerando las posturas erróneas de sus adversarios.
Los de la televisión, una minoría, no dicen que ellos controlan a los medios de comunicación por encima de la radio y la prensa escrita, encauzando juicios y puntos de vista según a ellos les convenga, pues al fin y al cabo son controlados desde arriba por la primera minoría citada. Callaron que otra de tantas minorías, los empresarios millonarios favorecidos por gobernantes sin escrúpulos, mangonean el derecho y se salen con la suya en lo que les plazca, pagando a los obreros lo que les conviene, cerrando fuentes de empleo sin importarles que trabajadores y sus familias se vayan al diablo, a pedir limosna o a morir de preocupación, sencillamente. Ellos, los comunicadores de televisa, se refirieron a perredistas, petistas y miembros del Partido Convergencia, como pelafustanes que osaron, siendo minoría, ponerse al tú por tú con la mayoría que representan el PRI y el PAN, pero omiten mencionar a otras minorías como las de los poderosos que con dinero evaden la ley.
En México estamos sujetos, secuestrados, atados por las minorías en muchas de las actividades cotidianas dependiendo de nuestras ocupaciones. Una minoría, la de los secuaces de Elba Esther Gordillo, mandan y controlan a millones de profesores que sólo agachan la cabeza sin atreverse a opinar bajo amenaza de que no les paguen sus quincenas, futbolistas de todo nivel, desde los llaneros hasta los profesionales, son mangoneados, ultrajados en sus derechos, por una minoría, desde mafiosos que controlan sus ligas locales hasta directivos y dueños de equipos de primeras y segundas divisiones. Padres de familia son también víctimas de minorías, como esas en que una sociedad y directores corruptos hacen sus negocios en escuelas públicas o privadas. Por todos lados nos manipulan y controlan las minorías, pero la única minoría malévola y diabólica es esa que se atrevió a no dejarse más de los políticos poderosos.
Ni en el Congreso de la Unión ni en el Senado de la República iban a debatir. El objetivo ya está trazado, listo y negociado: mayoritear sin consenso la reforma energética y aplanar a la minoría que está en contra de esto, similar a como lo hicieron la reforma a la Ley del ISSSTE y a la ley de Seguridad Pública, ocasiones en que priístas y panistas se pusieron de acuerdo para aplastar a los del PRD, PT y Convergencia, pero ahora, al ver que ya respingaron y no se van a dejar, los acusan de intolerantes y violentos. ¿A poco cree que el diputado, nuestro diputado federal por este distrito 15 de Jalisco, Gerardo Amezola, del PAN, vendrá a pedirnos opinión acerca de cómo votará al momento de discutir esa reforma? Si eso pensaba qué ingenuo. Él y los otros legisladores panistas no irán a sus distritos a preguntarle a los ciudadanos a quienes representan lo que piensan, ellos ya saben qué hacer, votar a favor de que Juan Camilo Mouriño y su empresa, la española Repsol, junto con otras compañías vampiresas insaciables de petróleo y sangre, puedan operar en México sin inconveniente alguno, pasando por encima de la mayoría de mexicanos. Ellos, los magnates petroleros, también son minoría. ¿A poco se creyó eso de los bonos de 100 pesos por cuya compra lo hacen de inmediato socio de Pemex? Si fue así seguramente cree en los Reyes Magos y en Santa Claus. Ellos, la minoría, pretenden ganarse adeptos entre los mexicanos más ilusos con la venta de bonos de 100 pesos mientras a sus cómplices les dan miles, millones de dólares por saquearnos el tesoro.
Ya una minoría, 200 españoles comandados por el conquistador Hernán Cortés, sometieron a miles de aztecas con espejitos en 1521. Hoy, en el 2008, otra minoría, heredera esta de aquellos extranjeros, harán lo mismo a menos de que alguien se los impida. Lamentablemente esos que tratan de salvar el pellejo de la patria, son condenados por secuestrar las instituciones, como si López-Dóriga, Adela Micha y Loret de Mola no supieran que hace años que nos tienen secuestrados.
Otro lector comenta:
Hola Julio Un comentario acerca de lo que supuestamente se está haciendo como debate "abierto en televisión". Fue realmente decepcionante el programa final de hoy de El Futuro del Petróleo en Canal Once. ¿Cómo es posible que como "conclusiones" pongan únicamente a los personeros de la mal llamada "reforma energética" (deberían llamarle reforma petrolera)? ¿Los mismos que ya fueron vapuleados en la cámara? ¡Ah, pero aquí en televisión no tienen a nadie que les cuestione nada, claro! ¿Quién diseñó la serie? ¿la Secretaría Mouriñesca de Desgobernación? No hay que ser ni pejista ni de nueva o vieja izquierda para darse cuenta de la burda intención manipuladora... Qué decepción... Pero bueno, ¿qué podríamos esperar a estas alturas, con la mayoría de las expresiones alternativas ya desaparecidas?
Alguien que pide no dar su nombre, para no sufrir represalias:
Ahora en plena efervescencia por el debate sobre el petroleo intente subir un par de insultos a Joaquin Lopez Dog en su "blog" EN
Lo cual no debe sorprendernos. Por si alguien le interesa (te suplico no publiques mi correo, porque trabajo en televisa, jejejejeje) el tel de televisa es 57283999
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