10/31/2009


Más allá de lo inmediato

Muchos aplauden la decisión de Felipe Calderón por haber iniciado la liquidación de la Compañía de Luz y Fuerza del Centro (LyF), empresa que se distinguía por su ineficiencia, me dicen que la decisión estaba tomada desde hace tres años, algunos manejan que finalmente el presidente asumió la mano dura que debe tener y se ha logrado fortalecer, y se ha orquestado una campaña de medios donde se crucifica al sindicato culpándolo de todos los males de la empresa. Todos estos argumentos son riesgosos, la mayoría son inmediatistas y con eso demuestran la poca sustancia sobre el sistema.

El presidente de la república, dado en parte a la inexistencia de la reelección y más importante a la exigencia de ver hacia los grandes intereses nacionales, no debe aunque puede, tomar decisiones que alimentan su posición personal, aunque ciertamente debe contar con una condición política fuerte para promover su agenda de gobierno, la que en el caso de Calderón no es evidente y las acciones tomadas muestran un enfoque de corto alcance que no va más allá de lo electoral y el logro de posiciones que fortalezcan a su partido.

Esto estaría muy bien siempre y cuando hiciera explicito su modelo de nación.
Si se pusiera en la balanza de la ineficiencia de LyF contra la de (Comisión Federal de Electricidad (CFE), PEMEX, Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), etc., quién sabe cual saldría peor parada. LyF perdía dinero entre otras porque CFE le vendía energía muy cara, así que ahora seguramente cambiara el balance contable.

EL contrato colectivo de CFE es al parecer más generoso que el de LyF pero su sindicato no es de izquierda.
Si la empresa es ineficiente hay que traer a cuentas a sus gerentes y directivos, pero ahora los han liberado de toda responsabilidad. ¿Podemos asumir que ahí no había corrupción? ¿Que dirán los empresarios que tenían que cohechar funcionarios con tal de vender aunque ganaron concursos? ¿Dónde queda la responsabilidad de los directivos que no frenaron la corrupción del sindicato, que no frenaron el robo de energía? ¿Tienen responsabilidad oficial? Por cierto, sería bueno conocer los salarios de la alta gerencia de la empresa en liquidación.

Se ha tratado de justificar la decisión de liquidar la empresa en el ataque a la corrupción sindical. Se habla de venta de plazas, de negocios sindicales, mal uso de los fondos sindicales, negocios personales del líder. Es muy posible que la mayoría de las acusaciones sea cierta, pero también lo es que esta no es una situación exclusiva de esta empresa o este sindicato. Se habla de corrupción generalizada en el gobierno, de no reducirse en PEMEX y hasta se menciona la existencia de una red en Hacienda que facilita una evasión que alcanza miles de millones de pesos al año.

Si se limpiara el sistema fiscal no haría falta elevar impuestos o inventar nuevos. Se podría sostener que si todos son corruptos la acción exclusiva contra el Sindicato Mexicano de Electricistas es persecución, el contra argumento es que si todos son corruptos había que empezar por algún lado, de aquí debe desprenderse que para la salud ética de la nación el gobierno asuma una gran cruzada contra la corrupción. Luego entonces deben explicar por donde sigue.


Queda la duda si el gobierno intentará una escalada anti-sindical que facilite una reforma laboral que modifique las relaciones de contratación, que reduzca los beneficios de los trabajadores y que podría terminar con la seguridad social mexicana tal y como la conocemos, lo que podría tener un efecto muy grave frente a la salida de la crisis. No hay duda que los sindicatos deben democratizarse pero lo mismo debe suceder con todo el sistema, incluyendo a los partidos políticos, centrales patronales y campesinas y por supuestos las asociaciones de profesionistas.

Ya de paso se podría reformar el aparato de control electoral que es muy caro y poco efectivo. ¿Se atreverá a tanto el presidente Calderón?
Ya metidos en los grandes propósitos o deseos, no estaría de mas limpiar el periodismo mexicano que en este caso ha demostrado su parcialidad y poca objetividad. ¿Se atreverá Calderón a informar sobre las concesiones económicas a ciertos periodistas, o al costo de las entrevistas en los medios electrónicos? En el caso de LyF escuchamos las voces del gobierno y sus aliados pero la del otro bando esta oculta y casi vedada en micrófonos, cámaras y páginas de periódicos. Los sindicalistas se han visto forzados a tomar la calle para que se les escuche.

Si los medios de comunicación funcionaran como debe ser la gente no tendría que usar otros medios para promover sus intereses. La mordaza tiene utilidad temporal pero genera un grave daño estructural porque refuerza la cultura de la presión en contra de la de la convivencia y negociación.
Posiblemente el presidente Calderón gane esta batalla pero el sistema político seguirá perdiendo la guerra y con él la muy maltrecha democracia mexicana

Samuel Schmidt
schmidt@mexico.com


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