La Jornada
Empleo: daño estructural
Desde que la nueva administración entró en funciones, la tasa oficial de desocupación abierta apenas ha registrado movimiento, al pasar de 3.5 por ciento de la población económicamente activa (PEA) en diciembre de 2018 a 3.6 por ciento al cierre de marzo pasado.
La oferta laboral permanece estática, a grado tal que los indicadores del sector se mantienen prácticamente inamovibles desde hace tres años (3.4, 3.5, 3.6 por ciento de la PEA: el registro más bajo se dio en marzo y octubre de 2018, con 3.2 por ciento), mientras la tasa de informalidad se mantiene en rangos de entre 57 y 60 por ciento.
¿Qué pasa en el mercado laboral mexicano? El Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico lo analiza, y de sus resultados se toman los siguientes pasajes.
La precarización del mercado laboral constituye uno de los problemasestructurales más graves que el gobierno de México debe enfrentar: el crecimiento económico de 2 por ciento inhibe la generación de empleo, y durante 2019 la desaceleración del PIB restringirá aún más la creación de nuevos puestos de trabajo.
La relevancia de lo anterior debe contemplarse en que existen otros desequilibrios en el mercado laboral aún más graves, siendo la informalidad uno de los más silenciosos, pero probablemente el más difícil de solucionar.
El incumplimiento del marco legal es una característica de la informalidad. Se puede modificar la ley, hacer reformas laborales e implementar nuevos reglamentos, pero la informalidad se mantiene. Durante los pasados tres sexenios (Fox, Calderón, Peña Nieto) se intentó solucionar el problema de la precarización del mercado laboral, pero el resultado no fue exitoso, pues se implementaron políticas de nula eficacia con un costo social muy elevado. La 4T debe recordarlo, pues medidas aisladas o enmarcadas en un modelo económico incorrecto no bastarán para revertir la precarización laboral; únicamente nuevas estrategias integrales podrán hacerlo.
Felipe Calderón se autodenominópresidente del empleo, pero entre los resultados concretos destacó la precarización del mercado laboral: se perdieron casi 3 millones de fuentes de trabajo que pagaban más de 5 salarios mínimos y 1.3 millones que recibían una remuneración de entre 3 y 5.
¿Qué tipo de ocupación y empleo se creó durante el sexenio de Calderón? El que pagaba menos de 3 salarios mínimos. Además, en total, había 4 millones de personas que realizaban un trabajo pero que no recibían ingresos.
Ello permite definir que lapresidencia del empleogeneró la precarización del mercado laboral, particularmente por subestimar la dimensión de la crisis de 2009 (elcatarrito) y mantener una política económica que desdeñó el fortalecimiento productivo de las empresas nacionales.
Con Vicente Fox su gobierno secomprometiócon aquellos que habían formado unchangarroo pequeño negocio familiar. Mientras en el Pacífico Asiático, Europa y Estados Unidos avanzaba lo que hoy se conoce como la Cuarta Revolución Industrial, Fox hablaba de los changarros. Para este personaje elpilareconómico eran los micronegocios de bajo valor agregado, en su mayoría eran informales.
Con Peña Nieto –otro autodenominadopresidente del empleo– sucedió lo mismo: desapareció la ocupación y el empleo bien remunerado: cayó en 1.5 millones el número de personas que ganaban más de 5 salarios mínimos y en 500 mil quienes recibían entre 3 y 5. Nuevamente, los mexicanos debieron conformarse con un empleo que les pagaba menos de tres minisalarios.
Ante dicha experiencia, el gobierno actual debeser consciente de que la solución a la precarización de los salarios y la baja calidad del empleo se encuentra más allá de regulaciones y estrategias aisladas.El problema del mercado laboral mexicano es estructural y es una de las herencias de la política económica vigente hasta 2018.
Las rebanadas del pastel
Cuidado, que al salvaje de la Casa Blanca le urge un pleito con México, y sólo busca un pretexto para el inicio formal de hostilidades.
Twitter: @cafevega
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