Al arrancar su campaña, la candidata del PRI-PVEM a la jefatura del Gobierno del Distrito Federal, Beatriz Paredes Rangel, se comprometió a mantener los programas sociales y propuso blindarlos para impedir que su entrega quede condicionada al voto.
En su primer acto proselitista, que arrancó con música de mariachi y con el Himno Nacional entonado por simpatizantes que llenaron el Auditorio Nacional, Paredes Rangel advirtió que los programas sociales no son patrimonio ni de los partidos ni de los gobiernos en turno.
Con el respaldo del candidato presidencial de la coalición Compromiso por México, Enrique Peña Nieto, y la cúpula del PRI, encabezada por Pedro Joaquín Coldwell, la política tlaxcalteca pidió detener lo que llamó “manipulación” de los programas sociales.
“Basta de manipulación interesada de los programas sociales. Basta de interpretaciones dolosas y ajenas a la verdad”, sentenció la candidata de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Verde Ecologista de México (PVEM).
Pero las promesas mas importantes de Paredes en su discurso fuero casualmente, los programas que la Izquierda ha impulsado desde 1997, y que tuvieron una importancia nacional y mundial en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, ahora candidato a la presidencia de la República, Beatriz aseguró: "continuarán los apoyos a las personas de la tercera edad, a las madres solteras, a los jóvenes, y lo que se denomina subsidios focalizados."
Paredes Rangel celebró que Peña Nieto haya garantizado la continuidad y el crecimiento del programa federal denominado Oportunidades, y con ello “desterrar la idea de su desaparición”.
De acuerdo con la candidata priista, los mexicanos pueden identificarse con Peña Nieto, porque en su proyecto pueden “reencontrar la grandeza que los gobiernos de la primera alternancia, por su ineptitud, nos escamotearon”.
Aseguró que en la campaña de Peña Nieto no hay gastos excesivos, sino ingenio para dar a conocer sus propuestas, como fue en su arranque de campaña, mismo que no puede valuarse.
Pidió a Peña Nieto, de llegar a Los Pinos, “su más decidido apoyo para resolver, de una vez y para siempre, en seis años de gestión comprometida y eficaz, la problemática del agua potable”.
Por otro lado y según imágenes que circulan en las redes sociales, el Auditorio Nacional no se llenó, pese a que la mayoría de las personas fueron acarreados del Edomex.
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