Eduardo Ibarra Aguirre
Dos caras de lo que parece ser el mismo problema. Mientras La Jornada (15-II-09) dio cuenta que el kilogramo de tortilla se vende al consumidor final hasta en 12 pesos, El Universal (13-II-09) reportó: “En distintas regiones del país el robo de granos se disparó en el último mes. Con piedras, machetes y en ocasiones con armas de fuego, grupos de hasta 100 personas detienen trenes o tráileres para despojarlos de su cargamento, principalmente maíz”.
Como se recordará, el gobierno de Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, productores agrícolas, industriales, comercializadoras y empresarios de la cadena maíz-tortilla, fijaron en 8.50 el precio del kilo, tras oficializar un aumento de 40 por ciento. 13 meses después, el acuerdo sirvió para dos cosas, para nada y para nada. El costo, por cierto, es mayor en donde se recibe subsidio en la harina de maíz.
Las grandes beneficiarias del acuerdo fueron las trasnacionales que dominan el sector, como la comercializadora Cargill que informó que en enero de 2009 se incrementó en 192 por ciento el robo a sus unidades cargadas con maíz blanco, respecto al mismo mes de 2008.
Mas no sólo fue el transporte el asaltado, sino también “han sustraído toneladas de alimentos que se encontraban en bodegas y silos”. Y entre las empresas más afectadas se encuentran, también, Portimex, Archer Daniels Midland, Bunge, Granjas Carroll, Grupo La Moderna y Malta Texo.
Es claro que una vertiente de los asaltos a trenes y tráileres, con machetes y piedras, es por hambre. En la otra es inocultable la intervención de bandas en el robo de silos y bodegas.
El paro de 500 mil transportistas de carga y de pasajeros en 17 estados, para que se reduzca a 6.31 pesos el precio del litro del diesel, muestra a un nuevo actor en la arena social, merced al incumplimiento de una de las ofertas de campaña de Calderón Hinojosa –la de no incrementar los precios de los combustibles--, junto al objetivo de convertirse en “presidente de empleo”. Promesas que nuevamente están a la orden del día y en las que destaca el PRI al exigir, por ejemplo, el seguro del desempleo que negó mientras ocupó la Presidencia.
La política oficial de utilizar los bienes y servicios públicos para recaudar, generó la convergencia de 200 asociaciones en la Alianza de Transporte Multimodal. Su dirigente Carlos Demuner Pitol rechazó la propuesta de cancelar el paro a cambio de un incremento de tarifas, hecha por el gobernador de Chihuahua José Reyes Baeza Terrazas, “porque los ciudadanos nos quemarían las unidades”.
Resulta notable la mayor sensibilidad social de sectores del empresariado, comparativamente con el gobierno del “mejor equipo económico del mundo” que se avocó a subestimar el paro, justificar los altos precios de los combustibles mientras en la aldea tienden a la baja, y el jefe de aquél guardó silencio cuando Jesús Aguilar Padilla le solicitó congelar el precio del diesel porque “alienta desacuerdos y discordia social”. La solicitud del gobernador priísta no obstó para que los cuerpos policiacos sinaloenses amenazaran a los paristas con reprimirlos si no suspendían las protestas antes de la llegada del michoacano, durante una de las giras más vigiladas por el Ejército y la Marina con armas de grueso calibre que atraviesan todos los blindajes.
Simultáneamente, miles de productores de leche se pusieron en movimiento para demandar la reorientación de las políticas agropecuarias que tan torpemente defiende Alberto Cárdenas Jiménez, y que ya produjeron la quiebra de decenas de miles de ellos porque el jalisciense y su jefe permiten la competencia desleal que representa la leche en polvo importada.
El descontento y la movilización se multiplican. El grupo gobernante se refugia en la indiferencia y la demagogia, como lo evidencia el anuncio de Calderón de que para julio la crisis económica estará superada.
Acuse de recibo
El colega Javier Cruz escribió en el diario El Vigía, de Ensenada, Baja California, del 13 de febrero: “Pero poco se habla de una tercera, odiosa y peligrosa calamidad que enfrenta el periodismo critico nacional: la inhibición e intimidación oficial a quienes, desde los medios de comunicación, son discordantes e independientes. Una de las armas que Calderón y gavilla que lo acompaña utiliza para premiar afinidades, servilismos y sumisiones, y para castigar discrepancias y posturas autónomas, es el reparto faccioso y arbitrario de la publicidad oficial”. Y ejemplifica con Forum, revista que ya cumplió nueve meses de boicot… Integrantes de La Voz del Amate, organización de presos, denuncian actos de hostigamiento y represión en contra de quienes iniciaron el 10 de febrero una jornada de ayuno y oración al interior del Centro Estatal para la Reinserción Social de Sentenciados No. 14 en Cintalapa, Chiapas”… Antonio Camacho Hernández, ejemplar ciudadano y trabajador electricista, cumplió una década de muerto. Previamente libró una tenaz batalla por la vida mientras realizaba casi todas las actividades de un hombre sano.
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