2/17/2009

Lizette Clavel Sánchez, el duro viaje de liderar un sindicato




Secretaria general de ASSA
Primera de dos partes

Por Guadalupe Cruz Jaimes

México DF, 16 febrero 09 (CIMAC).- Para poder ser tomada en serio en el ámbito sindical, que sigue considerándose como “masculino”, Lizette Clavel Sánchez, secretaría general de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA), reconoce que ha tenido que modificar incluso su manera de vestir para desarrollarse con éxito.

Eso --además de la crisis económica internacional que vive el país y en particular el sector aeronáutico-- ha hecho de su gestión una tarea difícil de combatir que, lejos de abatirla, la ha llevado a encontrar áreas de oportunidad y nuevos aprendizajes.

Pese a la adversidad, Lizette Clavel Sánchez, quien llegó a ASSA, hace 17 años, está convencida de que “no hay que dejarlo de intentar” cuando se cree en lo que es justo.

El próximo 19 de febrero, la sindicalista cumple un año al frente de ASSA, en el que negoció con Aeromexico y Mexicana una demanda de tipo económico, con esta última aerolínea aún restan pendientes.

Pese a que con Mexicana las negociaciones van por buen camino y muestra de ello es que a mediados de enero pasado ASSA firmó un convenio para vuelos transoceánicos con la empresa, sigue pendiente la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

La SCJN definirá si la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) tenía la posibilidad de modificar el Contrato Colectivo de Trabajo (CCT); algo que es un convenio entre dos partes: ASSA y la empresa, explicó.

No obstante, esperan lograr un acuerdo previo para evitar que la SCJN, es decir, un tercero, sea quien determine las condiciones laborales de las y los sobrecargos, cuando deberían resolverse entre el sindicato y la empresa, dijo la sindicalista a Cimacnoticias.

Con este acuerdo, Lizette Clavel, quien se define como apasionada por la política, mencionó que confía en que superarán diferencias para que las condiciones contractuales “no se vean mermadas de manera definitiva” y al mismo tiempo se apoye a Mexicana mientras esté en crisis.

DISCRIMINACIÓN INCONSCIENTE

-- ¿Consideras que tu gestión al frente de ASSA ha sido más compleja por ser mujer?

-- Ha sido una gestión difícil, no tanto por la cuestión de género sino por el entorno. No ha sido fácil combatir, es decir, siempre ha habido crisis en el sector, pero no habían sido consecuentes en el mismo tiempo: crisis en el sector energético, apertura indiscriminada de aerolíneas, altísima competitividad y encima una crisis económica internacional.

“Es cierto –dice-- que es un ámbito ocupado más por varones, lo que como mujer me ha representado ventajas y desventajas que no tienen que ver con la capacidad de la mujer para desarrollar el puesto sino en ir desarrollando habilidades que permitan ir sorteando las dificultades que los otros te ponen.

“Cuando te encuentras con que es menos sujeto de crédito tu argumentación financiera, porque es difícil pensar que las mujeres tenga una buena argumentación de este tipo, lo que tienes que hacer es hallar el modo de que tu voz sea escuchada.

“Yo, más que una desventaja, la he encontrado como un área de oportunidades, de desarrollo de nuevas actividades que no consideraba antes, como una buena argumentación financiera”.

-- Entonces, ¿te ha tocado vivir discriminación?

-- No sé exactamente si se llame discriminación. Yo antes decía que no existía tal, sino que una misma se autolimita como mujer. Sin embargo, lo que si he encontrado es una exclusión inconciente.

“Me he encontrado con que de repente llegó a un foro, en el que hay 50 ponentes, donde 49 son hombres y yo soy la única mujer, menciono algún tema con alguna argumentación y no merece ningún comentario, pero cuando algún compañero lo hace, resulta que es el tema de interés en la reunión.

“Y realmente te preguntas: ¿y bueno, que no es eso exactamente lo que dije?, ¿por qué no generó interés? No percibo incluso que sea intencional, me parece que está en el inconciente el ignorar muchas situaciones. No es su intención, sin embargo, les sale”.

EL ACOSO

-- ¿El acoso sexual también es una constante en este ámbito?

-- Sí, es un hecho que ocurren este tipo de cosas, que van de los silbidos a más. Yo quisiera ver que a un varón le dijeran “papacito” entre ellos. Ante esta situación, lo que he hecho es tratar de hacer de eso una condición que favorezca el liderazgo.

“Cuando voy a un evento sindicalista y los compañeros empiezan con las rechiflas y demás, lo que hago es cambiar el “switch” y decir en este momento tengo la atención de todos y es cuando puedo exponer las ideas.

“Lo que tienes que aprender a manejar es que no se exceda de las rechiflas, que no vaya más allá. Por supuesto, no es algo que resulte cómodo, pero tampoco es algo que voy a poder cambiar de un día para otro.

“Y por lo tanto, resulta en una adecuación que tengo que hacer de mis actitudes, discurso, condiciones e incluso de mi vestimenta.
Para poder ser considerada más en serio he tenido que tratar, si voy a un evento de esos, de no llevar ni falda, ni pantalones ajustados.

“Sin embargo, si te enojas creo que lo provocas más; si haces como si no pasara nada, sigues propiciándolo. Entonces, lo que he tratado de hacer es combinar esa condición desfavorable con un área de oportunidad y tratar de transformarla”.

-- ¿De qué forma?

-- Un ejemplo es que en esos momentos incómodos, donde la atención se centra en mí, emito mi discurso y hasta ahora me ha funcionado.

MUJERES Y SINDICATOS

--¿A qué crees que se deba la menor participación de las mujeres en los sindicatos?

-- Interferir en su entorno es una condición aprendida de los varones y la de las mujeres históricamente ha sido más pasiva.
Creo que muy pocas mujeres se atreven a dar el paso y ponerse en la vitrina para que otras y otros voten por ellas, en el caso de ASSA, soy la tercera secretaria general, en más de tres décadas de la asociación.

“Cuando vez las listas para el cargo de Secretaría general, muy pocas son las mujeres que se postulan. Ahora que me postulé yo y también otra compañera, pero éramos dos mujeres y 8 varones. Y entre menos mujeres que elegir, las posibilidades se reducen mucho.

“En nuestro gremio somos 3 mil 500 sobrecargos, de los que el 70 por ciento son mujeres. Esto te habla mucho más de cómo en un gremio integrado principalmente por mujeres ellas deciden no participar.

“Con la secretaría de relaciones públicas, ocurre algo arraigado culturalmente: es en la que siempre hay mujeres, es raro que un hombre llegue. En tanto, a la general, el porcentaje de hombres es altísimo. Este año fue excepcional, 80-20, pero la mayoría de las veces puede ser 90-10, ó 100 por ciento hombres.

-- ¿Cómo llegaste a la Secretaría general?

-- En este ámbito yo me he formado en la adversidad. Como sobrecargo, me preocupaba mucho mi ingreso económico, y desde siempre ASSA ha establecido que si no asistes a una asamblea te descuentan, entonces para que no me descontaran asistía a todas las que podía. Y ahí observé prácticas que no me agradaban.

“Después, con la intención de buscar un mejor ingreso, mientras estudiaba la licenciatura en ciencias de la comunicación, en la Universidad del Valle de México, se abrió la posibilidad de una beca, concursé por ella y fui rechazada.

“Y como no entendí por qué me rechazaron, recurrí a los estatutos y al CCT y encontré que el dinero que por concepto de beca no era entregado a las y los solicitantes se iba directo al sindicato.

“Entonces, hice un reporte para preguntar a quién entregaron las becas; no me respondieron, pedí una revisión de mi expediente y no me respondieron.

“Después hice una consignación y sorprendentemente a los 4 días me dicen que yo fui acreedora a la beca; eso ya no me gustó. Y empecé a asistir más activamente a la asamblea.

“Al poco tiempo, terminé mi carrera, y tuve la oportunidad de concursar por la Secretaría de Prensa de ASSA, intenté y quedé, ahí estuve de 1997 al 2000. Pero tuve problemas por este idealismo en contra de prácticas como la reelección, y me vuelvo disidencia estando dentro del Comité Ejecutivo.

“Después de “juegos no muy limpios” me excluyen de mi derecho a participar por un cargo sindical, me voy muy desilusionada. Y regresé un año después, cuestionándome ¿dónde quedaron mis convicciones? Si antes defendía los derechos de los demás, ahora debo defender los míos.

“Entonces, decidí demandar la restitución de mis derechos, demandé al sindicato y a la dirigencia de ese momento y al pasó de 5 años gané. Luego de ocupar un cargo sindical ya nunca pude ser sobrecargo y alejarme de la cuestión sindical. Y finalmente por sugerencia de unos compañeros, en medio de una crisis de liderazgo en ASSA, me lanzó y quedé”.

-- ¿Cómo logras sostenerte en el ámbito sindical después de diez años transcurridos en adversidad, dentro del sindicato?

-- Al final decidí que hay tres premisas básicas para mí: intentarlo siempre, no darte por vencido, creer y luchar por algo justo y creer que puedes hacer prevalecer la ley.

“Y así llevó ya 17 años en ASSA, de los cuales 3 estuve en la secretaría de prensa, 2 en el Centro de Estudios y 12 continuos como sobrecargo pero, a diferencia de muchos compañeros, mientras estuve en el sindicato yo nunca dejé de volar.

CALIDAD, NO CANTIDAD

-- ¿Qué opinas del liderazgo femenino?

-- Reducido numéricamente, pero no la calidad del mismo. Ejemplo de ello es el liderazgo de la profesora Elba Esther Gordillo, secretaría general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE). Sin embargo, es preocupante que los números no reflejen una igualdad social.

“No estoy de acuerdo con las cuotas de género, porque no garantizan el liderazgo de las mujeres. Es mejor que lleguemos por nuestras capacidades, que por un obsequio de un número puedan llegar a una representación sindical.

“No están midiendo efectividad, sólo cubrir cuotas, y me parece que no es a lo que debemos aspirar las mujeres. Debemos aspirar a tener niveles de participación real y efectiva. El día que haya competencia entre muchas mujeres para ocupar un cargo, se lograrán mejores liderazgos”.


LÍMITES

-- ¿Qué factores limitan el liderazgo de las mujeres?

-- Uno de ellos es el apego cultural a la familia, que es mucho más marcado en nosotras que en el hombre, independientemente de cómo esté integrada la familia. Si no supera el apego, difícilmente concebirá para sí misma que puede haber una distribución de los tiempos para ella, la sociedad y su familia.

“El día que deje de pensar que al ejercer una función social está descuidando a sus hijos, entonces cambiará, digo, un hombre no piensa en estas cosas”.

-- Entonces, ¿consideras que debe haber cambios en las responsabilidades del hogar, más equitativos para mujeres y hombres? Porque, como tú dices, ellos no se preocupan si descuidan o no a sus hijas e hijos y es que en la mayoría de los casos hay una mujer cuidándolos.

-- Quizás en mi entorno hay cada vez más hombres haciendo estos roles, eso también nos va a liberar de que para ellos todo es el trabajo. Sí debe darse un equilibrio y en los dos rubros, tanto en la función del varón como de la mujer.

-- ¿Has contemplado la posibilidad de volver a contender por una diputación u otro cargo dentro de la política nacional?

-- A mí me gusta mucho la política, incluso antes de contender por la Secretaría General de ASSA, en 2003, lo hice por una diputación federal como candidata independiente, pero quien me postulaba era el Partido de Acción Nacional (PAN).

“Sin embargo, hice el compromiso con mis compañeros sobrecargos de optar por una o por la otra y me quedé en ASSA.
Me parece que pocas organizaciones son tan representativas de la sociedad como lo son los sindicatos porque conoces las necesidades de la gente y el Congreso requiere de muchas de estas voces.

“Es mucho más fácil tener una buena gestión en el Congreso si antes pasas por una organización sindical”.

-- ¿Para este proceso electoral recibiste invitación?

-- He recibido la invitación para participar en las elecciones intermedias de este año, por parte de otro partido, ya no por los azules, pero no sería una opción por el momento. Sin embargo, no descarto la posibilidad de contender en el futuro por una diputación federal, porque creo que desde ahí se pueden hacer cosas importantes a favor de la gente que te elige.
09/GCJ/GG

No hay comentarios.:

Publicar un comentario