Pedro Echeverría V.
1. Este es un maldito sistema capitalista que explota, oprime, roba, asesina, es violento y provoca la violencia; pero culpa a sus enemigos, los más pobres y miserables de ser ellos los violentos por el hecho de defenderse. Te mata de miseria, hambre y enfermedades, por desempleo y falta de alimentación, pero te acusa de flojo, drogado y delincuente para lanzar contra la población a todo el aparato represor y asesino. Para mí -que creo no ser un retrasado mental- la violencia en toda la historia, siempre ha sido ejercido por el poder que controla la riqueza, posee la fuerza y la defiende contra más del 80 por ciento de la población que la produce y necesita para vivir.
2. Pero siempre me he preguntado: ¿Por qué ese 80 por ciento de población no puede someter al tres por ciento de gobiernos, ricos multimillonarios? Sencillo, como dijo hace 500 años Etienne de la Botié: Por el control mental total del pensamiento de la población, por el control de las fuerzas armadas y hoy por el dominio de la iglesia, de los medios de información y la escuela. ¿Cuánta propaganda, calumnias, se han desatado cuando los trabajadores se defienden protestando en las calles, haciendo huelga, campesinos tomando tierras y estudiantes ocupando escuelas? A la población que le han lavado el cerebro, los han enseñado a aplaudir a los ricos y condenar a los pobres.
3. Debo repetir que la violencia viene de arriba buscando someter y dominar a los de abajo. Los gobiernos y los ricos comenzaron a difundir que los miserables son los violentos cuando lo único que han hecho en su vida es defenderse. Entonces los pobres comenzaron a formar grupos de solidarios y decidieron defenderse; por ello comenzaron a llamarles “terroristas”. ¿Cómo carajos enfrentar el hambre de los hijos, la familia, si después de girar 15 días, un mes en busca de cualquier empleo y éste no se da y cuando hay vacante se paga una miseria? ¿Qué pasaría si se dinamitan muros, se rompen alambres y se destruyen boyas por grupos rebeldes que llamo héroes?
4. Lo que provocan los políticos y ricos empresarios con su gigantesca acumulación de riquezas, es que los pobres, para evitar morir de hambre hagan crecer su rebeldía. ¿Será que quieran conocer una revolución de verdad o por lo menos sus prolegómenos? No sé hasta qué grado sirvieron las revoluciones de Francia, Rusia, China, Cuba, Nicaragua ante la gigantesca acometida del capitalismo y su imperio. Al parecer sólo permitieron un cambio de hombres en el poder y la promulgación de unas reformas. Pero no se puede permitir que gobiernos y millonarios nos sigan tratando como lacayos cuando hemos creído que somos seres humanos libres. (26/VII/23)
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