Teodoro Rentería Arróyave
especial para ARGENPRESS.info)
Se defiende el líder del yunquismo, después de que el presidente Felipe Calderón Hinojosa, en el regaño al ala dura del panismo describiera un traje a la medida de la ultraderecha activa.La guerra que enfrentó el extinto secretario de gobernación, Juan Camilo Mouriño, obedeció a una decisión del Gobierno federal de frenar al narcotráfico, alegó en su defensa el ex presidente nacional del Partido Acción Nacional, Manuel Espino Barrientos.
El actual presidente del ente ultraderechista, Organización Demócrata Cristiana de América, ODCA, rechazó en esa forma que el Yunque haya orquestado una guerra contra Juan Camilo Mouriño, y agregó que lo que debería preocupar al gobierno son los narcotraficantes.Además, lanzó un dardo cargado de veneno en contra del gabinete presidencial y demás funcionarios del Gobierno federal, puesto que entre ellos, señaló, se podría encontrar en esos ataques el objetivo de intereses políticos futuristas.Como se sabe, Juan Camilo Mouriño Terrazo se había quejado constantemente de que la extrema derecha panista alentaba las versiones sobre su salida de Gobernación.
Precisamente a ello se refirió el Calderón Hinojosa en su reprimenda del pasado domingo, durante el homenaje póstumo en la sede del Partido Acción Nacional al extinto secretario de gobernación.Nadie duda y negarlo sería absurdo que Mouriño Terrazo fue un personaje polémico, de quien se puso en duda su honestidad a causa de los famosos contratos con Petróleos Mexicanos, PEMEX, y sus empresas familiares y tampoco nadie debe olvidar que el propio funcionario ya en la titularidad de la Secretaría de Gobernación, aceptó que él mismo los firmó.Con esta defensa a ultranza y que no aguanta el menor análisis, ahora resulta que el Gobierno de Felipe Calderón Hinojosa es único culpable de la guerra sucia contra el extinto secretario de Gobernación, por haberle declarado la guerra al narcotráfico y al crimen organizado.
Es obligación de todo gobierno, como principio primario, y en México en particular, en cumplimiento de la Constitución y demás leyes, que se le garantice la necesaria seguridad pública para su pleno desenvolvimiento-Manuel Espino Barrientos nuevamente se equivoca en sus alegatos, o mejor dicho acierta en sus provocaciones, en la autodefensa del yunquista.
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