MUJERES AL PODER 2012
Le exigen a Alejandra Barrales intervenga en el caso
Por Anayeli García Martínez
México, DF, 23 abr 12 (CIMAC).- Mujeres indígenas representantes de distintas organizaciones y predios de la colonia Roma, en esta capital, pidieron a la candidata del Movimiento Progresista al Senado Alejandra Barrales que las ayude a resanar sus casas, toda vez que –dijeron– están a punto del colapso.
En un mitin este fin de semana en el parque Alexander Pushkin, las mujeres recibieron con pétalos de rosas a la abanderada de la coalición integrada por PRD, PT y Movimiento Ciudadano, quien se comprometió a atender sus demandas.
Con más de media hora de retraso, Barrales llegó al encuentro convocado por la Red Ciudadana de Mujeres Indígenas, quienes colocaron una ofrenda de frutas e hicieron un ritual prehispánico para iluminar a las candidatas de izquierda al Senado por el DF, Alejandra Barrales y su suplente, Martha Tagle –también presente en el evento–.
Antes de pronunciar sus discursos, las abanderadas fueron sahumadas con copal como muestra de apoyo vecinal y para que no tengan obstáculos en su búsqueda de una curul. Las indígenas también les pidieron que promuevan políticas públicas a favor de la población.
Con camisetas con la leyenda “Mujeres amorosas”, banderines color naranja de Movimiento Ciudadano y pancartas con la imagen del candidato presidencial de izquierda, Andrés Manuel López Obrador, las cerca de 300 asistentes reclamaron que los políticos siempre prometen apoyos, pero al llegar al cargo se olvidan de la gente.
La candidata respondió: “Estoy muy conciente de lo que aquí nos comentan nuestras vecinas; tengo muchos años caminando las calles de esta ciudad, conociendo sus colonias, sus delegaciones, cómo opina la gente y no es nuevo para mí que la gente diga que los políticos sólo les vienen a visitar cuando están en campaña”.
Explicó que López Obrador es un ejemplo de que hay políticos que sí regresan a convivir y escuchar a la gente, por lo que pidió el voto para las y los candidatos de Movimiento Progresista, quienes –aseguró– promoverán mayor cobertura de los programas sociales.
En lengua otomí, náhuatl y mixteco, las indígenas acusaron que deben enfrentar procesos burocráticos ante el Instituto de Vivienda del DF (Invi), el cual –denunciaron– amenazó con desalojar a las familias que habitan viviendas en mal estado sino les hacen los arreglos necesarios.
Explicaron que en los predios de la colonia Roma –muchos de ellos aún irregulares– hay casas en malas condiciones que pueden caerse de un momento a otro. Advirtieron que no cuentan con los recursos necesarios para mejorar las construcciones, además de que tienen que seguir una serie de trámites.
“Tengo muchos años dedicando una gran parte de mi vida a defender las causa de la gente, sobre todo las causas de las mujeres. Me formé en el ámbito sindical defendiendo los derechos de las mujeres trabajadoras”, dijo la candidata.
Barrales también señaló que en la Ciudad de México la pobreza todavía tiene rostro de mujer: “Todavía somos las mujeres las que tenemos muchas desventajas, y no lo digo en detrimento de nuestros compañeros hombres, pero lo que queremos es que nuestras mujeres progresen”.
Aprovechó para señalar que ella, al igual que sus compañeros del Movimiento Progresista, trabajaría por “el derecho a la felicidad” de la ciudadanía a través de la promoción de políticas públicas que mejoren las condiciones de vivienda, salud, empleo y seguridad.
Dijo que como presidenta de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del DF promueve una Ley de Planeación Participativa, para que la ciudadanía decida cuáles deben ser las prioridades del presupuesto público en la capital del país, como por ejemplo atender los problemas de vivienda.
También indicó que a unos días de que terminé el periodo de sesiones, las y los asambleístas trabajan para aprobar una Ley de Vivienda, una Ley Indígena para la Ciudad de México, y llegar a un consenso sobre las corridas de toros.
Barrales se comprometió a que de llegar al Senado no se alejará de los temas de la Ciudad de México, y seguirá acercándose a la gente para ayudarla, escuchar sus demandas y mantener los programas sociales.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en el DF viven 122 mil 411 personas indígenas.
Cimacnoticias ha reportado que entre los predios irregulares donde habitan indígenas en la colonia Roma, está el del número 74 de la calle de Zacatecas. Ahí, en 700 metros cuadrados viven 27 familias, cada una conformada en promedio por seis integrantes que habitan en “cuartos de lámina” de tres por cinco metros cuadrados.
México, DF, 23 abr 12 (CIMAC).- Mujeres indígenas representantes de distintas organizaciones y predios de la colonia Roma, en esta capital, pidieron a la candidata del Movimiento Progresista al Senado Alejandra Barrales que las ayude a resanar sus casas, toda vez que –dijeron– están a punto del colapso.
En un mitin este fin de semana en el parque Alexander Pushkin, las mujeres recibieron con pétalos de rosas a la abanderada de la coalición integrada por PRD, PT y Movimiento Ciudadano, quien se comprometió a atender sus demandas.
Con más de media hora de retraso, Barrales llegó al encuentro convocado por la Red Ciudadana de Mujeres Indígenas, quienes colocaron una ofrenda de frutas e hicieron un ritual prehispánico para iluminar a las candidatas de izquierda al Senado por el DF, Alejandra Barrales y su suplente, Martha Tagle –también presente en el evento–.
Antes de pronunciar sus discursos, las abanderadas fueron sahumadas con copal como muestra de apoyo vecinal y para que no tengan obstáculos en su búsqueda de una curul. Las indígenas también les pidieron que promuevan políticas públicas a favor de la población.
Con camisetas con la leyenda “Mujeres amorosas”, banderines color naranja de Movimiento Ciudadano y pancartas con la imagen del candidato presidencial de izquierda, Andrés Manuel López Obrador, las cerca de 300 asistentes reclamaron que los políticos siempre prometen apoyos, pero al llegar al cargo se olvidan de la gente.
La candidata respondió: “Estoy muy conciente de lo que aquí nos comentan nuestras vecinas; tengo muchos años caminando las calles de esta ciudad, conociendo sus colonias, sus delegaciones, cómo opina la gente y no es nuevo para mí que la gente diga que los políticos sólo les vienen a visitar cuando están en campaña”.
Explicó que López Obrador es un ejemplo de que hay políticos que sí regresan a convivir y escuchar a la gente, por lo que pidió el voto para las y los candidatos de Movimiento Progresista, quienes –aseguró– promoverán mayor cobertura de los programas sociales.
En lengua otomí, náhuatl y mixteco, las indígenas acusaron que deben enfrentar procesos burocráticos ante el Instituto de Vivienda del DF (Invi), el cual –denunciaron– amenazó con desalojar a las familias que habitan viviendas en mal estado sino les hacen los arreglos necesarios.
Explicaron que en los predios de la colonia Roma –muchos de ellos aún irregulares– hay casas en malas condiciones que pueden caerse de un momento a otro. Advirtieron que no cuentan con los recursos necesarios para mejorar las construcciones, además de que tienen que seguir una serie de trámites.
“Tengo muchos años dedicando una gran parte de mi vida a defender las causa de la gente, sobre todo las causas de las mujeres. Me formé en el ámbito sindical defendiendo los derechos de las mujeres trabajadoras”, dijo la candidata.
Barrales también señaló que en la Ciudad de México la pobreza todavía tiene rostro de mujer: “Todavía somos las mujeres las que tenemos muchas desventajas, y no lo digo en detrimento de nuestros compañeros hombres, pero lo que queremos es que nuestras mujeres progresen”.
Aprovechó para señalar que ella, al igual que sus compañeros del Movimiento Progresista, trabajaría por “el derecho a la felicidad” de la ciudadanía a través de la promoción de políticas públicas que mejoren las condiciones de vivienda, salud, empleo y seguridad.
Dijo que como presidenta de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del DF promueve una Ley de Planeación Participativa, para que la ciudadanía decida cuáles deben ser las prioridades del presupuesto público en la capital del país, como por ejemplo atender los problemas de vivienda.
También indicó que a unos días de que terminé el periodo de sesiones, las y los asambleístas trabajan para aprobar una Ley de Vivienda, una Ley Indígena para la Ciudad de México, y llegar a un consenso sobre las corridas de toros.
Barrales se comprometió a que de llegar al Senado no se alejará de los temas de la Ciudad de México, y seguirá acercándose a la gente para ayudarla, escuchar sus demandas y mantener los programas sociales.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en el DF viven 122 mil 411 personas indígenas.
Cimacnoticias ha reportado que entre los predios irregulares donde habitan indígenas en la colonia Roma, está el del número 74 de la calle de Zacatecas. Ahí, en 700 metros cuadrados viven 27 familias, cada una conformada en promedio por seis integrantes que habitan en “cuartos de lámina” de tres por cinco metros cuadrados.
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