¿Hambretón?

Detrás de la Noticia

Ricardo Rocha

Así han comenzado a rebautizar los expertos a la Cruzada Nacional contra el Hambre (CNH). Con una mezcla de sorna, incredulidad y desilusión, los especialistas se refieren a la gran apuesta en política social del presidente Enrique Peña Nieto a cargo de Rosario Robles, a quien sorpresivamente designó secretaria de Desarrollo Social. Un programa sin pies ni cabeza, sobre todo esta última. ¿O hay alguien en este país que tenga claro en qué va a consistir, cómo exactamente va a operar y durante cuánto tiempo?

Hasta ahora las señales enviadas por doña Rosario son francamente contradictorias: aquejada de una soberbia prematura, no se ha acercado siquiera a sus colegas del gabinete que tendrían que coordinarse con ella; a eso se debe que se le vea sola y aislada en una causa que debiera concitar entusiastas voluntades por su indiscutible importancia para el país y para el Presidente. Tampoco se ha acercado a los grandes expertos en pobreza y desnutrición que, por el contrario, han sido tratados con indiferencia por la señora secretaria cuando se han acercado a ella a ofrecer sus conocimientos. Es el caso de las conclusiones del Foro Nacional para la Construcción de la Política Alimentaria y Nutricional, que le fueron entregadas en propia mano el 23 de enero de este año y que no le han merecido el mínimo comentario o un café con sus autores.

En cambio, ha sido pública y notoria su proclividad mediática para tomarse la foto con los directivos de las grandes transnacionales; una compulsión que nadie puede justificar salvo por los beneficios de imagen y dinero para esos fabricantes de alimentos industrializados: Pepsico, responsable de la ingesta de millones de litros de refrescos y que ahora —a través de su subsidiaria Quaker— ocupará bodegas y tiendas Diconsa porque le venderá a la ex dirigente de izquierda galletitas de avena supuestamente vitaminadas; tampoco se entiende el convenio con Nestlé para capacitar a 15 mil mujeres como expertas en alimentación, cuando es la empresa que más ha hecho a nivel mundial por desalentar la lactancia con leche materna a fin de impulsar sus ventas de lácteos. Así que más que implementar un programa de estado, la secretaria ha optado por un road show de relaciones públicas.

A ver: de origen no está mal la denominación de Cruzada Nacional contra el Hambre. Es social y políticamente impactante. El problema es que la titular de Sedesol no entienda el fondo de una realidad lacerante: primero, es el Estado y no la industria quien debe garantizar la alimentación de los mexicanos; pero no se trata de echar comestibles a las bocas de los hambrientos, sino de —como lo mandata el artículo 4º constitucional— que “toda persona tenga derecho a una alimentación nutritiva, suficiente y de calidad”; segundo, es absolutamente necesaria una estrategia agroalimentaria integral que privilegie la siembra, cosecha y distribución de alimentos del campo, para que en las mesas más pobres haya porciones suficientes de maíz, frijol, nopal y amaranto que conformen una dieta alimenticia y balanceada. En cambio, ahora se busca sustituir esos nutrientes saludables con el consumo de refrescos y papas fritas. Como si no supiéramos que el hambre subsidiada es generadora de obesidad, como el caso de los beneficiarios de Oportunidades que corren a comprar alimentos chatarra y gaseosas: un absurdo que ahora se institucionalizaría con todos los riesgos de daños irreversibles a la salud que ello implica.

La falta de inteligencia y propuestas claras ha sido tal que la Cruzada ya es duramente cuestionada por la oposición, que no encuentra en ella otra cosa que un programa electorero que sólo beneficiará a siete de 20 millones de hambrientos en municipios selectivos, de cara a las elecciones de julio.

Mientras tanto, estamos desperdiciando una oportunidad histórica de reactivar el campo mexicano, con la certeza de un “cliente” seguro como sería la CNH. En cambio, todo prefigura el que podría ser el primer gran fracaso de un nuevo gobierno calificado hasta ahora como “exitoso”.

@RicardoRocha_MX

ddn_rocha@hotmail.com

Periodista