Más allá de los incidentes y detalles
del primer debate entre candidatos presidenciales (que este tecleador
no pudo reseñar, por cuestión de tiempo), este primer ejercicio político
conjunto mostró, aun antes de iniciar, el grado de polarización que ha
alcanzado el proceso electoral en curso y la necesidad social de que
éste llegue a un final civilizado y aceptado por todos los ciudadanos.
Incluso, a la hora de cerrar esta columna, una hora antes del inicio del
acto en el Palacio de Minería, la tentación de la violencia política
inducida, presente en los peculiares grupos de manifestantes programados
contra el candidato de Morena, hacía más patente la necesidad de
rencauzar la contienda electoral y evitar acontecimientos negativos
mayores.
El contexto previo al mencionado debate dibujó una desesperación
entre los adversarios del candidato que lleva la delantera, Andrés
Manuel López Obrador (AMLO), que lo mismo ha incluido el lavado de
imagen del insólito inmobiliario queretano, Ricardo Anaya Cortés (como
si hubiera pactos secretos en curso, para ir disolviendo los puntos de
grave conflicto entre Los Pinos y el PAN y crear condiciones para
eventuales alianzas forzadas por las circunstancias) que la
traicióndel peñista (disfrazado de perredista) Silvano Aureoles para dejar de apoyar a Anaya y sumarse a José Antonio Meade (en un esfuerzo por atajar la versión de que el candidato TriDorito estaría por tirar la toalla, desde su tercer lugar consolidado).
Gran expectativa en el debate, relativamente infundada: el segmento
social que ya ha decidido su voto en favor de AMLO le ha brindado al
mismo tiempo un blindaje máximo, de tal manera que difícilmente un
detalle, incidente o momento del mencionado debate entre candidatos
haría que cambiara la intención de los seguidores del tabasqueño. A su
vez, la porción de ciudadanos que no desea a López Obrador como
presidente de la República podría sentirse más alentada e incluso
potenciada si el grupo de los cuatro (Anaya, Meade, Margarita y El Bronco) lograra mostrar algún plan viable de unidad de facto
que pudiera consolidar en una sola opción a esa tendencia antipejista.
Pero, a fin de cuentas, las grandes líneas divisorias están marcadas
entre los segmentos ya definidos.
En todo caso, el fantasma de presencia anterior y posterior al debate
es el del voto útil. Anaya y Meade seguirán tendiendo la alfombra roja
en Palacio Nacional para López Obrador si continúan divididos pero, a lo
largo de un año de atipicidad en el prianismo, Los Pinos y los
anayistas se fueron llenando de encono y aún a los tejedores más
expertos de alianzas de élite (Carlos Salinas y Diego Fernández, por
ejemplo) les ha resultado muy difícil tratar de restañar heridas y
restablecer complicidades. Las adhesiones a Meade por parte de Armando
Ríos Piter, y sus cientos de miles de firmas y credenciales falsificadas
o fotocopiadas, y del candidato que el PRD aceptó con encanto que le
impusiera Peña Nieto para la candidatura a gobernar Michoacán, Silvano
Aureoles, no habrían tenido viabilidad mercantil si Los Pinos no
garantizara que irá con todo y hasta el final para tratar de imponer a
Meade.
La búsqueda de la consolidación de un solo polo electoral
contrario a López Obrador tiene como acompañante el aumento de la
violencia en distintos flancos. Desde el señalamiento de los presuntos
riesgos que sufriría la economía nacional si ganara el candidato de
Morena y anexas (por lo pronto, ya lo acusan de la paulatina
depreciación reciente del peso) hasta el ya mencionado asomo de brigadas
contra el tabasqueño en las calles capitalinas, desde pocas horas antes
del inicio del mentado debate: grupos organizados, con mantas y
pancartas similares, aparecieron en las cercanías del Palacio de
Minería, anunciando que Ciudad de México había decidido mandar a La
Chingada a AMLO.
Desde otra óptica, el primer debate, realizado a 69 días de la
elección, poco podría cambiar o mejorar la situación institucional
desastrosa que enmarca tales comicios. La credibilidad del Instituto
Nacional Electoral y del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la
Federación están por los suelos, y no sólo a causa de la autorización de
las candidaturas tramposas de Margarita Zavala (reina de las
fotocopias) y Jaime Rodríguez Calderón (rey de las falsificaciones). En
general, el sistema político y económico parece colocado en una
situación de postración que le puede llevar a allanarse ante una
candidatura opositora hasta ahora incontenible (aunque ese mismo sistema
se afanaría en multiplicar las causas de tropiezo grave del gobierno de
alternancia que así surgiera) o, por el contrario, a colocar todas sus
fuerzas y recursos en la ruta del fraude electoral a cualquier costo.
En tal panorámica, los sucesos del debate dominical (éste, una
reunión de élites políticas, para presenciar el desarrollo de formatos
poco ágiles; escenografía, a fin de cuentas, del gran montaje simulador
de la
democracia) podrían ser simples arreos de guerra electoral o un ilusionado suspiro ciudadano en espera de que una posible crisis pudiera evitarse mediante el recurso simple de dialogar, discutir, hablar.
Un tecleador astillado informa que ha iniciado un programa de lunes a
viernes, a partir de las nueve de la noche, autodenominado Querida urna, el cual podrá ser visto en www.rompeviento.tv y en www.youtube.com/julioastillero. Como su nombre lo sugiere, Querida urna sólo
tendrá vigencia durante la temporada electoral y, eventualmente,
postelectoral. Por otra parte, todos los miércoles a las ocho de la
noche podrá verse Contraseñas, con el autor de estas líneas, a través de HispanTV (www.hispantv.com), sólo en Internet en México y en televisión por cable en algunas ciudades hispanohablantes de otros países.
Y, mientras Enrique Peña Nieto sigue aferrado a mantener un papel protagónico, defendiendo sus fallidas reformas
estratégicasen Alemania, ¡hasta mañana!
León Krauze, conductor de televisión de
Univisión en Los Ángeles, es uno de los que creen en la influencia de
Rusia en las elecciones de México. Publicó un texto el pasado 19 de
enero, en The Washington Post, titulado:
La posibilidad de que Rusia se inmiscuya en las elecciones de México no es una broma. Expone un áspero desencuentro que tuvo con Irma Eréndira Sandoval, quien sería incluida por Andrés Manuel López Obrador en su gabinete si ganara la Presidencia, pero –en palabras de Krauze–
desafortunadamente lleva a un socio inconveniente: está casada con John Ackerman, profesor y entusiasta simpatizante de López Obrador, y tiene supuestas conexiones con los rusos. Luego concluye así:
México, cuya frágil democracia ya ha sufrido un tremendo trauma y enfrenta una variedad de amenazas internas antes de las elecciones de este año, debe tomar todas las medidas posibles para evitar ser el próximo conejillo de indias en el experimento de Putin en desestabilización. Antes de descartarlo como un punto final, López Obrador debería ofrecer certeza absoluta, tanto dentro como fuera de México, de que no existe asociación sospechosa dentro de su equipo y campaña. La democracia mexicana e incluso una futura presidencia de López Obrador no tiene lugar para ambigüedades o sombras. El mundo sabe muy bien lo que sucedió la última vez que un país se rió de la posibilidad de interferencia rusa en un proceso democrático.
León Krauze está en su derecho de cuestionar a López Obrador y a los
miembros de su equipo. De eso no hay duda. Pero también es cuestionable
que el INE haya seleccionado a un personaje identificado como anti AMLO
para moderar el segundo debate, el mes de mayo en Tijuana, cuando hay
otros periodistas que no tienen ese antecedente. Una cualidad debe ser
la imparcialidad. De lejos se olfatea la influencia de Los Pinos y
Televisa. Para que no quede duda de sus filias y fobias, aquí está lo
que dijo en Twitter el 27 de noviembre de 2017:
Ahora: @lopezobrador_
debe estar preocupado por los tres debates. En ese terreno, Meade debe
ser un adversario intelectualmente formidable. Veremos a AMLO tratar de
desprestigiar los debates pronto.
Resiste bien la moneda
El peso está resistiendo la presión que siempre se
presenta en los momentos críticos del proceso electoral. Dice un
análisis de Citibanamex:
Si hace un año nos hubieran preguntado por un estimado del tipo de cambio para abril de 2018 suponiendo una ventaja de dos dígitos de AMLO sobre su rival más cercano, un nivel de 18.17 pesos por dólar habría provocado gran escepticismo. Sin embargo, éste ha sido el promedio del tipo de cambio para la primera mitad de este mes, a pesar de que López Obrador supera a Ricardo Anaya, y vale agregar, al favorito del sector financiero, José Antonio Meade. A esta situación los analistas de Citibanamex llaman
la paradoja de abril. En realidad AMLO supera a Meade y Anaya juntos, al menos hasta antes del debate de anoche. Hay un movimiento especulativo contra el peso en el mercado de Chicago, con el aparente propósito de devaluar en alguna medida la moneda y dañar la imagen del candidato de la izquierda. Había bajado el dólar hasta $17.95, pero para el fin de semana subió a 18.80 (promedio). Sin embargo, el consenso de especialistas consultados por Citibanamex, de acuerdo con su publicación del 20 de abril, indica que las estimaciones del tipo de cambio
son revisados marginalmente hacia un peso más fuerte. El consenso situó en un nivel de 18.60 la paridad peso-dólar al cierre de 2018 desde un previo de 18.63, mientras para 2019 éste cambió a 18.20 desde 18.21. Descontado ya el efecto de un probable triunfo de AMLO. Para los especialistas, la explicación sobre la fortaleza que ha mostrado el peso –lo que llaman la paradoja de abril– y en general el desempeño de los mercados financieros es una combinación de factores, como un dólar débil, una demanda alta de instrumentos en pesos, porque las tasas de interés en México son elevadas respecto de otros países, y mayor optimismo por la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, según Citibanamex. También vaticina cambios en la economía. Lógico. Si se cambia la base de corrupción que tiene actualmente, deberán modificarse muchos elementos de la economía.
De una manera bastante abrupta dejamos a la candidata
totalmente Palaciode… Baillères, en un majadero impasse. Me disculpé en su momento y lo repito, pues múltiples miembros de la multitud no estuvieron de acuerdo con esa decisión, dado que consideraron de más importancia la asunción de Margarita, que la muy poco decorosa y bastante desaseada ascensión de don Bronco.
En mi nada modesta opinión los nuevos participantes en la contienda y
por lo mismo en la boleta, importan mucho menos que las razones y las
maneritas de su inusitado, inexplicable y sospechosísimo perdón y,
¡quién lo creyera! de los premios que el Instituto Nacional Electoral
(INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federacion
(TEPJF) consideraron de justicia otorgarles a algunos participantes en
la tómbola electoral. El INE, a Margarita, un reintegro. El tribunal, a
don Bronco y a Margarita (ratificación), una aproximación.
(Esto último es un decir, pues de las firmas entregadas al INE por cada
candidato, vean que tan aproximados estuvieron cada uno en el
cumplimiento de lo estipulado por las leyes respectivas. Las y los
candidatos independientes debían reunir 864 mil 536 firmas válidas.
¿Cómo les fue en la tarea?
En razón de estos resultados, pensé que ninguno de los tres citados
podría aprovechar las firmas recabadas en su favor, bueno, ni siquiera
ejercer su propio voto dado que, para junio, podían estar ya consignados
por una serie de delitos electorales. Pero, para variar, que la
realidad me muestra el dedo y, como señalé al inicio, el INE y el TEPJF
consideran que las travesuras realizadas por la señora de Calderón y don
Bronco no son sino pecadillos veniales que hasta un monaguillo
menor podría, con una simple penitencia y un claro propósito de la
enmienda, desaparecer: ¿Verdad, hijos, que de aquí al próximo primero de
julio no volverán a intentar pasar fotostáticas por originales? ¿No
desearán credenciales ajenas ni imitarán la firma de sus prójimos? ¿No
aprovecharán los éxodos de los migrantes para fomentar el turismo
electoral? ¿No revivirán a los muertos, aunque sea en fotografía, nada
más para (como dicen en mi tierra), inflar el quórum? ¿No
intentarán la multiplicación de los pan-es, los equinos (aunque sean
broncos), ni de los felinos (aunque sean domesticables)?
Ante esta realidad legal, queda claro que no hay otros parámetros que los de los tiempos,
no idos. Por ejemplo: –Pero, entonces, doctorcito, mi vieja con la que me acabo de casar, ¿está embarazada? –Bueno, Hermenegildo, no sea usté tan radical, dejémoslo en que está apenas medio embarazada, ya Dios dirá.
En 1956, en plena era de discriminación racial, en Estados Unidos (EU) se estrenó la película Gigante,
que describe la odisea de la transición texana de la preminencia de la
economía ganadera a la petrolera, pero también del profundo racismo que
en esos años prevalecía en Texas y el resto de EU. En diversas escenas
se da cuenta de la discriminación contra aquellos de piel no blanca. En
una escena dramática del filme, el dueño de un restaurante se niega a
servir alimentos a una pareja, por su color de piel y su origen
mexicano. En aquellos años, situaciones similares eran parte de la vida
cotidiana en un país que se negaba a otorgar los mismos derechos a todo
aquel que fuera o aparentara ser de un origen diferente al anglosajón.
Hace unos días, en un café Starbucks de la ciudad de Filadel- fia,
con población en su mayo- ría afroamericana, la gerente del
establecimiento indicó a dos jóvenes negros su obligación de consumir
algo si querían permanecer en el lugar. Los jóvenes dijeron que
esperaban a una tercera persona. La gerente solicitó la intervención de
la policía que, sin más explicación, arrestó a los jóvenes. El hecho
suscitó protestas de comensales, y a las pocas horas miles de personas
protestaron afuera del establecimiento y en las redes sociales contra lo
sucedido. Lo que siguió es historia: disculpas de la policía, de las
autoridades de la ciudad y de los directores de la cadena Starbucks,
admitiendo que la conducta de la encargada del negocio fue un exceso,
además de su actitud no exenta de racismo.
Cero y van tres. Como en los procesos electorales de 2006 y 2012, en el actual crecen las
advertenciasy el ruido sobre el
peligrode
cambiar de caballo a la mitad del río(el jinete sin cabeza Vicente Fox dixit, en sus tiempos como inquilino de Los Pinos), y se repite el desgastado guion: si ya saben quién gana los comicios, el tipo de cambio se irá a las nubes, la deuda pública se incrementará velozmente, la economía crecerá muy poco,
se perderá todo lo que hemos ganado, la fuga de capitales no se detendrá, la crisis estallará y, en fin, el nivel de vida de los mexicanos se irá a pique. El caos, pues.
Es la misma gata, pero más que revolcada. El problema es que esa
desgastada campaña de miedo esconde el hecho de que en las elecciones de
2006 y 2012, haiga sido como haiga sido los candidatos oficiales (léase los prianistas)
terminaron en Los Pinos, y que pese a ello todos los pésimos augurios
en materia económica se materializaron, y de qué forma: devaluación,
deuda en niveles inmanejables, economía estancada, fuga de capitales,
crisis y caída libre en el bienestar de los mexicanos, entre otras
gracias, sin olvidar la corrupción galopante y el creciente grado de
inseguridad y violencia, con más de 240 mil muertos y 30 mil
desaparecidos, de tal suerte que el verdadero peligro para México fue la
dupla Felipe Calderón-Enrique Peña Nieto.
A pesar de los desastrosos resultados de la parejita presidencial
(Fox y Martita), en junio de 2006, a escasos días de los comicios
presidenciales y pasándose la ley electoral por el arco del triunfo, el
Consejo Coordinador Empresarial (en ese entonces con José Luis Barraza
como cabeza visible) gritaba histéricamente para evitar el
riesgo de cambiar de rumbo, porque
apostarle a algo distinto implicaría retroceso.
Pero no sólo la citada cúpula empresarial mexicana atizaba la campaña (organismo que nació inyectando miedo a la sociedad:
Vienen los comunistas). Coincidentemente otro análisis advertía sobre el
peligroelectoral. Dos semanas antes de los comicios de 2006, la trasnacional financiera española BBVA (cuyo presidente recién fue condecorado con la Orden del Águila Azteca por el gobierno de Peña Nieto) subrayaba que el
nerviosismopor el resultado comicial
puede tener impacto en las decisiones de consumo e inversión y frenar la recuperación que ha mostrado la economía mexicana (por cierto, ésta creció a una tasa anual promedio de 2.3 por ciento con el ahora ex presidente mariguanero, es decir, 35 por ciento menos que en el sexenio zedillista); la situación política interna constituye un factor de riesgo para la economía mexicana similar al efecto negativo que tendría un menor crecimiento y un repunte de la inflación en Estados Unidos.
A la campaña del miedo se sumaron la televisión (Fox recién había
palomeado la ley Televisa y tocaba pagar), las cadenas de radio y la
mayoría de los medios, subrayando aquellos del caos económico si a Los
Pinos llegaba ya saben quién. Y la pandilla lo logró: en la residencia
oficial se instaló el repugnante Felipe Calderón y gentuza que lo
acompañaba (uno de esos elementos hoy se presenta como candidato
independiente).
Y lo dicho: se materializaron todas las tenebrosas predicciones que
cubrirían de negro a México, pero con Felipe Calderón en Los Pinos.
Sexenio de muerte, inseguridad, impunidad, corrupción, crisis,
devaluación, economía raquítica (prometió 5 por ciento de crecimiento,
pero en los hechos a duras penas registró 1.9 por ciento), saqueo de los
bienes nacionales… La plaga, pues. Pero, según decían, el
peligropara México era otro.
Eso fue en 2006, pero el numerito se repitió seis años
después, en el proceso electoral de 2012, cuando de nueva cuenta los
organismos cúpula del sector privado se metieron hasta la cocina para
inyectar miedo, lo mismo que las trasnacionales financieras y demás
empresarios marca Forbes quienes, cual viles plañideras, repetían hasta la ignominia lo del
peligropara México.
Allá por junio de 2012, a escasas dos semanas de los comicios, el
Consejo Coordinador Empresarial (en ese entonces con Gerardo Gutiérrez
Candiani como cabeza visible; por cierto, en julio de 2016 este
personaje fue designado por Peña Nieto como titular de la autoridad
federal para el desarrollo de las zonas económicas especiales, órgano
desconcentrado de la Secretaría de Hacienda) se pronunció en contra de
la reducción salarial de la alta burocracia, porque “si se pagan menores
sueldos se tendrán funcionarios de menor calidad; disminuir los
ingresos de los burócratas que más ganan también podría generar más
corrupción (lo mismo dice Javier Lozano Alarcón, y ya ven: recibe
regalosde los huachicoleros); si hacemos un ejercicio donde cada vez les paguemos menos a los que más responsabilidad tienen, al rato vamos a tener gente de acuerdo con los niveles que pagamos y no de las responsabilidades que tienen”. ¿Quién proponía tal reducción? Pues ya saben quién, el mismo que en aquel entonces calculó un ahorro cercano a 300 mil millones de pesos si los sueldos de la burocracia dorada se reducían a la mitad.
Todo ello aderezado con los apocalípticos
estudios seriosde las trasnacionales financieras y demás botanas rancias. El hecho es que a Los Pinos arribó Enrique Peña Nieto, quien entre tantas otras cosas prometió que con sus reformas la economía crecería 5 por ciento anual en el último bienio de su mandato. Lo cierto es que a duras penas el sexenio cerrará con una tasa promedio anual de 2.1 por ciento, en medio de la corrupción galopante, impunidad garantizada para los cuates, negocios jugosos para la famiglia, y más muerte e inseguridad que en tiempos de Calderón, lo que ya es decir. Pero, otra vez, insistían que el
peligroera otro.
En su Perspectiva Económica Mundial
(abril 2018) el Fondo Monetario Internacional establece que ésta creció
3.8% en 2017, tasa ligeramente superior a su pronóstico de octubre
pasado (3.6). Para 2018 y 19 se estima de 3.9 (Gráfico 1).
En 2017, las economías industrializadas crecieron 2.3% en conjunto,
destacando España 3.1, Canadá 3.0, Alemania 2.5, y Estados Unidos 2.3; y
las economías rezagadas crecieron 4.8, destacando India 7.2% y China
7.1. México creció 2.0%
Para 2018, estima que las economías industrializadas crecerán 2.5%
(Estados Unidos 2.9, España 2.8 y Alemania 2.5). Para las economías
rezagadas estima un crecimiento de 4.9%, destacando India 7.4% y China
6.6. Para México se estima un crecimiento de 2.3%
Por regiones, Asia en desarrollo mantiene en 2018 un crecimiento de
6.5% bajo el impulso de China e India, aunque los países del ASEAN-5
(Filipinas, Indonesia, Malasia, Tailandia y Vietnam) vienen creciendo al
5.3% (Gráfico 2).
PIB.- En dólares a paridades de mercado, en 2017 el PIB mundial
totalizó 79 billones 865 mil millones de dólares, ligeramente arriba de
la estimación de octubre (79.281 b). Del total, el PIB de las economías
avanzadas representó el 60.3% (48.188 b) y el de las rezagadas el 39.7%
(31.678 b) (Gráfico 3).
Con esta paridad, las cinco mayores economías se mantienen en los
lugares de 2016: Estados Unidos, China, Japón, Alemania y Reino Unido,
pero en el sexto lugar India desplazó a Italia. México sigue en el 15.
Con la paridad de poder adquisitivo (PPA), el PIB mundial se eleva en
2017 a 127.044 billones de dólares, de los cuales el 41.3% (52.483 b)
corresponde a las economías avanzadas y 58.7% (74.561 b) a las rezagadas
(Gráfico 4). Aquí, la mayor economía del mundo es China, seguida de
Estados Unidos, India, Japón, Alemania y Rusia; México mantuvo el lugar
11.
PIB por habitante.- En su medición a paridades del mercado,
Luxemburgo sigue en primer lugar con 105 mil 803 dls en 2017, y en el
segundo Suiza; en el tercero Macao desplazó a Noruega. Irlanda sigue en
quinto, Estados Unidos en octavo, México en 73, China en 75 e India sube
al 143 (Gráfico 5).
Las mujeres son la
vanguardia de la resistencia y rebelión en la era de Trump. Maestras,
estudiantes, actrices, jornaleras, atletas, sindicalistas, entre otras,
fueron las primeras en repudiar de manera masiva al nuevo régimen, y son
las que podrían traducir la resistencia en cambio y con ello rescatar a
este país.
Un presidente abiertamente misógino acusado de hostigamiento y abuso
sexual por unas 20 mujeres, y que ha sido grabado hablando de su
derecho, por ser famoso, a tocar los genitales de cualquier mujer,
rodeado de otros que son cómplices en todo esto (incluidas varias
mujeres), que promueve políticas formuladas por derechistas religiosos,
ha detonado una respuesta masiva de mujeres en todos los ámbitos
públicos. Vale recordar que la primera respuesta masiva a Trump fue la
Marcha de las Mujeres al día siguiente de rendir protesta como
presidente, cuando millones marcharon en Washington y otras ciudades y
pueblos del país.
Dentro del ámbito formal del juego poítico, el número de mujeres que
se han registrado o que han indicado que pronto serán candidatas
electorales a nivel federal, estatal y municipal nunca ha sido mayor en
la historia del país. Para los puestos federales hay por ahora 472
mujeres contendiendo para la Cámara de Representantes, y unas 57 para el
Senado, casi el doble de las que se inscribieron para la pugna
electoral de ambas cámaras en 2012. El número de mujeres que buscan una
gubernatura también es sin precedente: 78. La abrumadora mayoría de las
candidatas son demócratas, lo cual indica que la ascensión de Trump
tiene mucho que ver con sus decisiones; muchas de ellas confirman eso,
incluso varias dicen que esa fue la razón por la cual decidieron
participar. Entre ellas, según expertos, también hay mayor diversidad de
raza y con muchas más inmigrantes.
Ilustración Manjarrez / @Flores Manjarrez
Así como a mí me ha enseñado a hablar
ante la cámara, y ante el público, ha enseñado a varios compañeros míos.
Y creo que todos juntos debemos decir: Ismael Rodríguez, muchas
gracias.Pedro Infante
Siempre se le menciona como el hombre
que convirtió en estrella a Pedro Infante, pero ese es apenas uno de
sus logros. Artesano máximo, con una concepción del trabajo como una
condición de excelencia y un natural instinto de innovación, fue pionero
en nuestro cine y tuvo logros de reconocimiento mundial. Considerado el
Director del pueblo, responsable de varias de las películas
más taquilleras y memorables de nuestra historia fílmica, inventivo y
hasta locuaz, fue el tipo de creador que nunca se conformó; ni con lo
aprendido, ni con los retos, ni con los elogios, ni con los éxitos, ni
con amontonar galardones en una repisa. Ismael Rodríguez fue más, trató
de todo, se golpeó con muchas paredes, pero salvó la mayoría de las
bardas para poner a todos a llorar, reír y festejar frente a la
pantalla.
Todólogo inquieto
Ismael Rodríguez hizo de todo antes de ocupar la silla de
director. Antes de los 10 años llegó con su familia a Estados Unidos;
ahí empezó su conocimiento sobre la industria fílmica y fue donde sus
hermanos mostraron una asombrosa pericia técnica para diseñar su propio
sistema de sonido, mismo que se emplearía en la primera película sonora
mexicana: Santa (Antonio Moreno, 1931), donde un muy joven y delgado Ismael se cuenta entre los extras.
Estudió sonorización en la Radio Institute of California y tenía
apenas 19 años cuando él y sus hermanos fundaron la empresa Películas
Rodíguez. Esto cimentó su gusto por los apartados técnicos de la
industria y alentó su concepto del cineasta completo: conocer en forma
íntegra los procesos de desarrollo de una película. Cuando demandaba
algo de uno de sus colaboradores, sabía exactamente lo que necesitaba,
cómo funcionaba y qué hacía falta para alcanzar los objetivos, sin
diferencia entre la cinefotografía, la dirección artística, el registro
sonoro, etcétera. Debutó en la silla de director con ¡Qué lindo es Michoacán!
en 1942. Después de eso su carrera fue intensa, prolífica y pasó por
todos los géneros, con particular éxito en el melodrama y la comedia
ranchera.
Tras varias jornadas de
protestas y de violentos choques entre manifestantes y policías, que han
dejado un saldo de decenas de muertos –entre 26 y 31, dependiendo de
las fuentes–, 67 heridos, 43 desaparecidos y unos 20 detenidos, el
presidente de Nicaragua, Daniel Ortega Saavedra, reculó ayer en la
impugnada decisión de reducir los montos de las jubilaciones e
incrementar las cuotas obreras y patronales al Instituto Nicaragüense
del Seguro Social (INSS), adoptada el pasado 16 de abril con el
argumento de que era necesario dar estabilidad financiera al sistema de
pensiones de ese país centroamericano.
Lejanas, muy lejanas en el tiempo parecen haber
quedado las palabras declamadas en cadena nacional por Enrique Peña
Nieto en Los Pinos el pasado 5 de abril. Enmarcado por los símbolos
nacionales (la bandera y el escudo), ese día Peña emitió un mensaje
centrado en un falso patriotismo para consumo interno, que recogió el
aplauso del respetable, incluidos todos los candidatos a la Presidencia
de la República, la llamada clase política y los capitanes de industria
del Consejo Coordinador Empresarial.
¿Cómo lidiar con el ánimo que está cundiendo, moldeado con la mezcla de miedo y falsas esperanzas que impone la incontinencia verbal y escénica de candidatos y partidos?
Muchos mexicanos creen que por condiciones
semidesérticas y carecer de frondosas selvas y bosques, en la península
de Baja California no existe una variada e importante biodiversidad. La
hay en tierra y en el mar. Por algo, al Golfo de Cortés se le denomina
el acuario del mundo. No debe entonces extrañar que numerosos
investigadores, instituciones científicas, estudiantes e integrantes de
la sociedad civil de esa parte del país hayan rechazado el contenido de
la Ley General de Biodiversidad aprobada de mala manera en el Senado de
la República y enviada luego para su ratificación a la Cámara de
Diputados. Ese sentir se hizo patente en el foro realizado en la La Paz,
Baja California Sur, en junio del año pasado.
Quedan solamente 68 días para la elección
presidencial, pero la coalición de la continuidad todavía no logra
ponerse de acuerdo con respecto a quién apoyar, con el fin de mantener
sus privilegios, prebendas e impunidad. Mientras Andrés Manuel López
Obrador sigue recibiendo apoyos tanto de luchadores sociales, como José
Manuel Mireles o de votantes que antes militaban en el PRD, el PAN o el
PRI, Ricardo Anaya y José Antonio Meade continúan con sus luchas
intestinas, su elección primaria, para saber quién tendría mejores
posibilidades para derrotar al tabasqueño.
La corrupción domina la
campaña política por la Presidencia. Es el tema recurrente en las
declaraciones que a diario hacen los candidatos. Eso dice mucho acerca
de la situación que prevalece en el país y es, sin duda, un componente
relevante de las percepciones de la gente hacia la próxima elección.
Juntos descubrimos lo
cerca que está la muerte de la libertad. Fue un resplandor que cegaba.
De inmediato tuvimos que ponernos las pilas. Casi colgábamos de un árbol
precario varios metros arriba del abismo. Tumultuoso y turbio, el río
Amarillo no corría, volaba bajo nosotros. En la camioneta de redilas
veníamos unas 12 personas de regreso del Pueblo de Dios, una aldea en la
Montaña mixteca donde el Juicio Final parecía haber ocurrido ya, así
que veníamos sensibilizados. Un respiro o movimiento en falso y el
vehículo caería, y lo que la caída no terminara, lo haría el agua. Había
que apearse sin que el meneo nos precipitara. Despacito, uno por uno
nos arrimamos a nuestra izquierda susurrándonos indicaciones. Fui el
último. En cuanto puse un pie sobre la brecha lodosa que nos hizo
derrapar me apretaste la mano, y por la forma en que me miraste a través
de tus lentes grandísimos sentí que viviríamos por siempre. Eras tan
joven.
El 24 de mayo de 1978, en la plenitud de su sabia madurez, Jorge Luis Borges deslumbró una vez más diciendo:
De los diversos instrumentos del hombre, el más asombroso es, sin duda, el libro. Los demás son extensiones de su cuerpo. El microscopio, el telescopio, son extensiones de su vista; el teléfono es extensión de la voz; luego tenemos el arado y la espada, extensiones de su brazo. Pero el libro es otra cosa: el libro es una extensión de la memoria y de la imaginación.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario