Las fronteras
La decisión, acorde con las advertencias de Nancy Pelosi
La Cámara de Diputados pretende aprobar la próxima semana
la reforma a la Ley Federal del Trabajo en una decisión acorde con la
condicionante de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados
Unidos, Nancy Pelosi, de no firmar el tratado comercial si México no
modifica su legislación laboral.
En el proyecto de dictamen se advierte que la reforma tiene como
dinalidad no sólo agilizar los procesos de litigio entre empresas y
sindicatos, sino que va contra los
líderes ilegítimos que han hecho todo un negocio del sindicalismo, así como evitar que la huelga se convierta en
motivo de extorsión.
Las bancadas de Morena y PT rechazaron ayer que se quiera votar la
reforma con premura ante la presión de Estados Unidos. Incluso el
coordinador de la mayoría, Mario Delgado, argumentó que la cámara ya
planeaba votar la reforma en abril, antes de que existiera la
declaración de Pelosi.
Delgado presumió que tiene la opinión favorable de las otras bancadas para aprobarla y dijo que “sólo los sindicatos charros que quieran aferrarse a la falta de democracia” votarán en contra.
En tanto, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores,
Alfredo Femat Bañuelos (PT), rechazó que exista presión de Estados
Unidos para apresurar los cambios a la Ley Federal del Trabajo, Dijo que
ayer, en la reunión con congresistas de ese país,
en ningún momento cuestionaron ni condicionaronla firma del tratado a los cambios en materia laboral.
Morena pretende que la Comisión de Trabajo y Previsión Social vote el
miércoles el proyecto de dictamen –que ayer empezó a distribuirse entre
los diputados– yque se vote al día siguiente en el pleno.
El documento confirma que la facultad de mediación que tienen las
juntas de conciliación y arbitraje se traslade al Poder Judicial, pero
también se define que antes de llegar a los nuevos juicios laborales
habrá una etapa de conciliación.
Con esta figura
se abandona el paradigma del tripartismo como forma de integración y funcionamiento de las juntas, con el fin de mantener los propósitos de celeridad que exige un procedimiento de naturaleza preponderantemente oral.
Para la Comisión del Trabajo, la integración tripartita de las juntas generaba incertidumbre, porque los dirigentes obreros
no representaban a los trabajadores, sino a sus sindicatos, que no es lo mismo.
Los representantes, indicó, no resolvían los conflictos, pues en todo
caso sólo firmaban resoluciones que les presentaban las juntas.
Es decir, el tripartismo generó una especie de simulación en la solución de los conflictos laborales, opinó.
En cuanto a la elección de dirigencias, el proyecto considera que la libertad y la democracia sindical
son caras de la misma moneda, porque sin la primera no puede haber auténtica libertad.
Ratificó, por tanto, que la elección de dirigentes deberá ser por el
voto personal, libre, directo y secreto de los sindicalizados.
El modelo prevaleciente alienta el sindicalismo de protección patronal, que distorsiona y pervierte la relación laboral; en cambio, contar con sindicatos fortalecidos y representantes legítimos mejorará la relación con el sector empresarial.
Las fronteras
Seade: el T-MEC no podrá concretarse sin modificar la LFT
Descarta que existan presiones de EU
El subsecretario para América del Norte de la Secretaría
de Relaciones Exteriores, Jesús Seade, confirmó que si México no aprueba
una reforma laboral no podrá cerrarse el Tratado México-Estados
Unidos-Canadá (T-MEC). Descartó, sin embargo, que sea por presiones
estadunidenses que se avale el del marco legal.
En conferencia de prensa que se transmitió vía Internet desde
Washington, Estados Unidos, Seade reafirmó lo dicho por la presidenta de
la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, de que
discutirá el T-MEC hasta que México tenga una reforma laboral.
Seade confía en que ello ocurra a finales del mes en curso.
Sí la vamos a pasar y es la legislación más avanzada de cualquier país en desarrollo en Asia, África, Medio Oriente o Latinoamérica.
El funcionario rechazó que la aprobación de dicha reforma –que se
discute en la Cámara de Diputados– sea motivada por presiones
estadunidenses.
Esta legislación, todo el paquete laboral, refleja ciento por ciento la visión del presidente Andrés Manuel López Obrador. Desde que estuvimos en la negociación, la presión de nosotros era para reflejar compromisos fuertes que nos ayudaran a empujar una agenda ambiciosa, entonces no es presión, es algo totalmente elegido, dijo.
Añadió que el texto que enviado el 22 de diciembre
se renvió al Congreso con la intención de que se apruebe este mes; entonces, tengo la expectativa y la esperanza de que la legislación se apruebe.
Por otro lado, dijo que el acuerdo entre México, Estados Unidos y Canadá es de largo plazo.
Los temas de frontera son: qué está pasando ahora; lo del T-MEC es para la próxima y varias décadas.
Acerca de la industria automotriz y las amenazas de imponer aranceles
que lanzó Trump si México no soluciona los problemas en la frontera
sur, Seade expresó:
Lo acordado en la industria de autos está firme, no en amenazas.
Ana Langner
Periódico La Jornada
No hay comentarios.:
Publicar un comentario