5/22/2012

Llegaron los jóvenes universitarios



por Alberto Aziz Nassif

En estos días los jóvenes universitarios llegaron al escenario político de la sucesión presidencial. Sin duda es el cambio más importante en todas estas semanas de spots. Si estuviéramos en el mes de febrero, las intenciones se podrían mover de forma importante, pero estamos a casi a finales de mayo. Sin embargo, en otras campañas en donde ha crecido una opción de izquierda, como en 1988 o en 2006, no había redes sociales y ese nuevo componente de la “sociedad red” (Castells) hace impredecible lo que suceda en las próximas semanas que le faltan a esta campaña electoral.

La protesta en la Universidad Iberoamericana para repudiar la presencia de Peña Nieto fue seguida de la demanda por una equidad informativa en la televisión y anuncia que en la campaña se acaba de construir el eje social de la contienda: no al regreso del PRI a Los Pinos.  La protesta de los universitarios, muy comentada y reproducida en las redes sociales, expresa impulsos profundos de malestar que no tienen visibilidad en los medios masivos, pero que son un hervidero en las redes sociales. No se sabe qué tanto puedan crecer estas protestas, pero lo que sí se sabe es que hay múltiples razones para una agenda política de los universitarios: desde el rechazo a la represión y a la violencia en donde los muertos los han puesto los jóvenes del país, pasando por la inconformidad difusa en contra de la imposición de un candidato mediante las pantallas de televisión, hasta el reclamo por las terribles condiciones sociales para conseguir un empleo digno. ¿Son estos estudiantes el equivalente a los jóvenes indignados en otros países? ¿Estas protestas modificarán la avalancha tricolor?

El debate presidencial dejó como secuela la discusión de un problema que se ve y se observa, pero se niega, la promoción disfrazada de políticos que invierten millones de pesos para construir una imagen en la mercadotecnia política. Hemos llegado a la farsa de dime cuánto has gastado en televisión y te diré cuál lugar ocupas en el hit parade de la política nacional. Este debate apunta a un tema que ya está prohibido y acotado por la Constitución, pero la ley tiene huecos y excepciones que permiten al abuso. Estos gastos legales e ilegales de los políticos son parte de un clientelismo entre élites, cobertura mediática por protección de intereses. Este clientelismo es uno de los motores que están detrás de la protesta universitaria del viernes pasado ante las oficinas de Televisa. La mejor expresión de rechazo a este intercambio entre políticos y televisoras se da en las redes sociales, nuevo mecanismo de movilización y tecnología de empoderamiento.

Los medios se vuelven cada día más poderosos e intocables ante la débil regulación de un Estado, porque la clase política ha optado por el rating antes que por el interés general. Sin duda estamos ante la pregunta que se repite por todas partes: ¿Es Peña Nieto el candidato de las televisoras? Si la respuesta es negativa entonces nos hemos equivocado durante años y habrá que reconocerlo. Pero todo indica que sobran los indicadores para una respuesta positiva. Hay un pacto, un clientelismo de élites cuyo resultado es la protección, el intercambio y las alianzas facciosas. Este pacto propicia un estancamiento en materia de regulación, competencia, pluralidad de opciones mediáticas y generación de un sistema de medios públicos potente para contar con un contrapeso democrático.

Sin embargo, hasta el momento la actitud de Televisa ha sido abrir las pantallas para dar espacio a las manifestaciones de los universitarios. Esta apertura –forzada por la presión de los jóvenes– es un elemento nuevo que también puede empezar a mover las preferencias electorales, sobre todo si se mantiene y no es sólo un momento que se vuelva a cerrar.

El alto contraste será cada día más visible. El priismo empezó a reaccionar ante las expresiones de los jóvenes universitarios en contra de Peña Nieto y las reacciones no se hicieron esperar como sucedió en Colima, donde un grupo de choque golpeó estudiantes, al más viejo estilo priista y porro. Por otra parte, la corrupción, que escurre por muchas partes, ha comenzado a salir a la luz pública, también para eso son las campañas. Las fotos y declaraciones de la hija del líder petrolero Romero Deschamps, publicadas en el diario Reforma, muestran abiertamente la corrupción que emblemáticamente representan estos actores, que siguieron tan campantes con los gobiernos panistas y hoy están abiertamente aliados con Peña Nieto. El candidato priista simplemente lo defiende y dice: “Es un dirigente que ha trabajado y que tiene el respeto de su gremio”. ¡¡Uff!!

Los indignados mexicanos han llegado al escenario político y las redes sociales serán un factor importante rumbo al 1 de julio. Veamos hasta dónde llega este movimiento, ¿será posible que ahora sí se muevan las preferencias electorales?

No hay comentarios.:

Publicar un comentario