Pedro Echeverría V.
1. Quien debatió por el candidato presidencial De la Madrid en 1981,
fue Salinas; quien polemizó por el candidato Peña en 2011, fue
Videgaray, y quien lo hizo por López Obrador fue Monreal. Así surge el
“hombre fuerte” y el seguro sucesor: De la Madrid –lo sabíamos años
antes- le pagaría a Salinas haciéndolo candidato presidencial del PRI;
pienso que Videgaray sigue muy firme en la competencia y Monreal se
vislumbraba que sería el sucesor indiscutible de López Obrador al
retirarse. Pienso que ese era el objetivo de Monreal del que estaba
seguro que no fallaría.
2. Que Monreal viene del PRI como Cárdenas, Muñoz Ledo, López
Obrador, Bartlett, Ebrard, Camacho, etcétera, pero otros más llegaron
del PCM, del maoísmo, hasta de la guerrilla, y fueron tan incapaces y
tan corruptos que los demás. En México, por el sólo hecho de aceptar un
cargo (diputados, senador, jefe de algo) cobrando una lana, te enloda
dentro de eso que se llama corrupción de la que nunca podrás salir sin
tu voluntad. Más aún basta con que aceptes ser dirigente del PRI, PAN,
PRD, para que la corrupción te cubra parte del cuerpo.
3. Muchos de los que brincaron al PRD en 1989 buscaron limpiar su
cuerpo y su nombre; muchos lograron demostrar que podían ser diferentes;
desafortunadamente el PRD se hizo tan corrupto como el PRI y el PAN y
los menos contaminados brincaron al partido Morena construido y
comandado por López Obrador y por.… Monreal. ¿Son buenos dirigentes
Claudia, Martí, Yeidckol, Bertha, Rocío, y otros jóvenes activistas de
Morena? Son muy honestos, probados y sacrificados, pero obviamente,
Monreal es otra cosa.
4. López Obrador parece tener muchas posibilidades de asumir la
Presidencia. Los enemigos de su gobierno serán los del PRI, PAN, el PRD,
los empresarios, los medios de información y necesitará gente que
piense, que sea analítica y crítica, que al mismo tiempo sea brillante
para defender los principios. Creo que Monreal es indispensable y debe
facilitarle el camino para desarrollarse. Van a aparecer otros críticos
que pretendan defender las posiciones de izquierda contra la acometida
de los enemigos. Si AMLO no sabe solucionar las contradicciones
internas, va a crear mil problemas.
5. El arribo a Morena de Bejarano, Dolores, Barbosa y otros de igual
calibre, no es para obedecer como esclavos, sino para pensar y proponer
iniciativas. Muchas, infinidad de veces, las propuestas entrarán en
choque pero, como diría Mao: “hay que aprender a solucionar las
contradicciones dentro del pueblo” que no son las mismas que entre
nuestros enemigos. Siempre serán diferentes porque los enemigos siempre
buscarán hacernos trampas para jodernos y nuestros amigos -a pesar de
ser duros críticos- buscarán siempre fortalecer las posiciones a favor
de los trabajadores.
6. No pertenezco a partido alguno, no estoy afiliado a Morena, jamás
he ocupado algún cargo político o empresarial, pero todas mis batallas
durante décadas han sido a favor de los trabajadores. Desde fuera veo
que muchas “legalidades” en política son auténticas jaladas. AMLO tiene
la obligación de hablar con Monreal y solucionar a fondo esos malos
entendidos tratando de evitar cualquier “nomenclatura”. El arte de la
política no es construir una estructura fiel, fuerte o militarizada,
sino estar siempre abierto para entender o comprender las
contradicciones que se dan en “el seno del pueblo”. (11/IX/17)
alterar26@gmail.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario