Q. Roo., 30 de marzo (apro-cimac).- El empresario Jean Succar Kuri, El Johny, fue sentenciado hoy a 13 años, un mes y 15 días de prisión luego de ser encontrado culpable de la comisión de delitos de pornografía infantil y corrupción de menores.
Además, deberá pagar una multa de 2 mil 625 días de salario mínimo, equivalentes a 85 mil 837 pesos, así como 350 mil pesos a cada una de las menores afectadas, como reparación del daño moral que les causó.
En un comunicado, el juez Segundo de Distrito, con sede en esta ciudad, Alfonso Gabriel García Lanz, explicó que la ley aplicable es la que regía entre 2000 y 2003, años en que se cometieron esos delitos, pues no era procedente aplicar la nueva legislación en la materia, que prevé penalidades mayores.
De entre los diversos juicios que se le siguen en juzgados federales y del fueron común por delitos relacionados con la pederastia, esta es la primera sentencia que recibe el empresario de origen libanés de 67 años de edad.
Succar Kuri nació en Becharré, Líbano, el 19 de septiembre de 1944. En su adolescencia llegó a México y en 1985 se estableció en Cancún, donde abrió una tienda de artesanías y una fuente de sodas en el aeropuerto local; con el tiempo, los negocios incluyeron varios centros de hospedaje -villas y hoteles-, entre éstos el Solymar, búnker de su red de pederastas, y propiciaron que amasarauna gran fortuna.
Descubiertas sus actividades ilícitas, escapó a Estados Unidos, donde a mediados de 2004 fue capturado en Chandler, Arizona, y dos años después fue extraditado a México.
En un principio, Succar Kuri ingresó al penal de máxima seguridad de El Altiplano, el que abandonó dos años después, al ser transferido a la cárcel municipal de Cancún, donde permanece, y enfrenta otros procesos por los delitos de estupro, violación equiparada y abusos deshonestos.
Succar Kuri estaba estrechamente vinculado al también poderoso empresario libanés Kamel Naciff, quien en años recientes movió sus influencias ante el ahora exgobernador poblano Mario Marín para "dar una escarmiento" a la escritora Lydia Cacho, por haber evidenciado -- su libro Los demonios del poder-- la red de pederastas que encabezaba El Johny.
En sus argumentos, el juez García Lanz consideró que el material probatorio que obra en el proceso penal es suficiente para tener por demostrado plenamente el delito de pornografía infantil, así como el de corrupción de menores y la plena responsabilidad penal Succar Kuri en su comisión.
A lo anterior se suman copias certificadas de diversos procesos penales seguidos ante autoridades judiciales del fuero común en contra del sentenciado por su probable responsabilidad en la comisión de delitos de violación, corrupción de menores y otros cometidos en agravio de diversos menores de edad.
Luego de conocer la sentencia, Xavier Olea Peláez, defensor legal de tres de las víctimas, celebra el fallo judicial.
En entrevista, dice: “El proceso jurídico, si bien fue largo, se llevó conforme a derecho, cumplió con todos los requisitos de la ley y el actuar del juez y del personal de juzgado fue el adecuado”.
Explica que la sentencia fue por dos delitos integrados en un solo procedimiento, aunque recuerda que aún hay una causa pendiente en el fuero común por los presuntos delitos de violación, violación equiparada y abuso sexual.
Además, recalca, la Procuraduría General de la República (PGR) tiene abierta otra indagatoria por lavado de dinero.
El abogado explica que Succar Kuri no tiene derecho al beneficio que otorga la ley de reducción de penas porque fue acusado de delitos sexuales y contra menores de edad, los cuales son considerados como “graves”, por lo que anticipa que el socio del empresario textilero, Kamel Nacif tendrá que cumplir hasta el último día de su sentencia.
Succar Kuri fue arrestado en 2004. Primero estuvo detenido en Chandler, Arizona, Estados Unidos, y luego de años de litigio fue extraditado a México donde enfrentó el proceso penal que hoy llegó a su fin.
Cabe mencionar que también se le acusó de urdir, junto con el entonces gobernador de Puebla, Mario Marín, y el empresario Kamel Nacif, la detención de Lydia Cacho, quien evidenció en “Los demonios del Edén” el reclutamiento y abuso sexual de niñas por parte de Succar Kuri.
Según los argumentos de las víctimas, todas procedentes de familias marginales, el inculpado se hacía llamar por las niñas "Tío Johny", las invitaba a una de sus lujosas villas en la zona hotelera de la ciudad de Cancún y allí abusaba de ellas.
Succar y Cacho
La periodista Lydia Cacho fue detenida por policías poblanos en diciembre de 2005 a las puertas de las oficinas en el Centro Integral de Atención a la Mujer (CIAM), en Cancún, Quintana Roo, bajo los cargos de difamación por su investigación publicada en “Los demonios del Edén”, donde denunció una red de pornografía.
Tras los hechos, Lydia Cacho interpuso tres demandas: contra el entonces gobernador de Puebla, Mario Marín; la procuradora estatal Blanca Alicia Villeda y otros funcionarios, por tráfico de influencias, abuso de autoridad y diferentes formas de tortura.
Denunció ante la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos contra Periodistas y ante la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), de la Procuraduría General de la República (PGR), a la presunta red de explotación sexual infantil destapada en su libro.
En 2007 Edith Encalada Cetina, una de las principales víctimas de Succar Kuri, demandó a Lydia Cacho por haber utilizado su testimonio públicamente en “Los demonios del Edén” y pidió la cantidad de 100 mil pesos para “resarcir” el daño moral, es decir, lo que entonces correspondía al 20 por ciento de las regalías del libro.
El 21 de agosto de 2009 la jueza del Juzgado 17 de lo civil en el DF, Rosario Mancera le notificó a Lydia Cacho que había ganado el juicio civil en su contra.
Entre las pruebas aportadas por la defensa de la periodista ante el Juzgado 17 de lo civil en el juicio que ganó después de dos años, estuvo un video de una entrevista que el conductor de televisión Óscar Cadena hizo a Edith Encalada dos años antes de que se publicara el libro, donde ella relata los abusos sexuales que sufrió por parte de Succar Kuri.
Con la sentencia que hoy dictó el Juzgado Segundo de Distrito en el estado de Quintana Roo se acredita la responsabilidad en los delitos de pornografía infantil y corrupción de menores que la periodista documentó en 2005 contra Succar Kuri.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario