En la mirada internacional, demanda para que sea liberada
Aunque para la comunidad internacional Nestora Salgado García es una
activista que trabajó por la seguridad de su pueblo, para las
autoridades mexicanas es responsable de secuestrar a unas 55 personas.
Mientras las instancias internacionales siguen con atención el proceso
contra la ex comandanta de la Policía Comunitaria (PC) de Olinalá,
Guerrero, en México el juicio estuvo “congelado” por varios meses, y
muestra de ello es que lleva dos años y seis meses en prisión, primero
en un penal federal en Tepic, Nayarit, y ahora en el del fuero común de
Tepepan –al sur de esta capital–, sin sentencia y sin el derecho a
defenderse ante sus acusadores por el presunto delito de secuestro.
Durante los procedimientos estatales y federales, Nestora nunca
compareció ante un juez ni ha podido defenderse ante los tribunales, y
es que según los abogados de Defensa Estratégica en Derechos Humanos,
que litigan el caso, hasta ahora han sumado cerca de siete audiencias
que debieron realizarse en 35 fechas distintas, y que fueron canceladas
porque no se presentaron alrededor de 55 personas que la acusan.
Asimismo, las autoridades penitenciarias no permitieron el encuentro
entre la activista y sus abogados hasta el 8 de agosto de 2014, casi un
año después de su detención por parte de un impresionante operativo de
seguridad federal y estatal, el 21 de agosto de 2013.
Cuando finalmente se autorizó a uno de sus abogados reunirse con ella
en prisión el 8 de agosto de 2014, sólo fue posible hacerlo durante 45
minutos, y al litigante no se le permitió llevar ni un bolígrafo ni un
cuaderno, según reportó en su momento Naciones Unidas.
Finalmente hoy las posibilidades para que la ex comandanta salga de
prisión se hacen más reales luego de que esta madrugada “se repusieran”
las tres acusaciones por secuestro que enfrenta desde 2013, con lo cual
sus abogados confían en que la próxima semana los Juzgados Primero y
Segundo del Distrito Judicial de Morelos, con sede en el municipio
guerrerense de Tlapa de Comonfort, dicten el auto de libertad.
DETENCIÓN ARBITRARIA
En diciembre de 2015, el Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria
de la ONU emitió la opinión 56/2015 en la que reconoció a Nestora como
una defensora de la población indígena, y declaró que su caso muestra un
patrón de agravios contra las y los defensores de Derechos Humanos (DH)
en México.
En el documento que emitió la instancia internacional, los cinco
expertos independientes criticaron la forma en que Nestora fue arrestada
el 21 de agosto de 2013 en Guerrero, cuando elementos de la Marina y
soldados del Ejército la detuvieron como si fuera la peor de las
narcotraficantes, a pesar de que no había cargos en su contra ni
indicios de que incurriera en alguna actividad criminal.
Una vez que fue arrestada, la ex comandanta fue acusada de secuestro y
delincuencia organizada, por lo que fue trasladada al penal de máxima
seguridad en Tepic. En marzo de 2014 fue absuelta del cargo de
delincuencia organizada por un tribunal federal, y aun así pasaron
varios meses hasta que en mayo de 2015 fue reubicada al Centro Femenil
de Readaptacion Social de Tepepan.
Pese a ese fallo, la Fiscalía General de Guerrero presentó nuevos
cargos en su contra con base en los mismos hechos, a lo que el Grupo de
la ONU expuso: “Uno únicamente puede estar sorprendido por la situación
actual”.
Los expertos también llamaron la atención sobre el hecho de que el
Ejército arreste a civiles por presuntos crímenes, pues se podría
incurrir en detenciones arbitrarias.
Con el pronunciamiento, el Grupo de Trabajo colocó a Nestora Salgado a
nivel internacional como una presa política del Estado mexicano.
SEIS RELATORES SE PRONUNCIAN
Además del Grupo de la ONU, otros seis relatores de Naciones Unidas se
han pronunciado por las irregularidades en el caso de Nestora, cada uno
evidenciando las violaciones a DH que se han cometido contra una
activista que realizó tareas de seguridad y contra el crimen organizado
al amparo de la Ley 701 de Reconocimiento, Derechos y Cultura de los
Pueblos y Comunidades Indígenas de Guerrero.
En una comunicación enviada en marzo de 2015, el grupo de relatores
recordó al Estado mexicano sus obligaciones para proteger los DH, y
acatar las disposiciones de los tratados internacionales en la materia.
El caso de Nestora también fue llevado por sus abogados ante la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que en enero de 2015
solicitó proteger la salud de la defensora, pues en su demanda de
libertad realizó una huelga de hambre, además de que padece otras
enfermedades.
Por: Anayeli García Martínez
Cimacnoticias | México, DF.-
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