Otra vez los Abascal

Pedro Salmerón Sanginés

Recién descubrí y exploré la página oficial del Frente Nacional AntiAMLO (Frenaaa) y hallé cosas bastante divertidas, pero también dos datos preocupantes: tiene una Comisión de Vinculación Militar: Grupo Tlaxcala (que nadie parece saber qué es, quiénes son, qué pretenden, pero da miedo) y una Comisión de Vinculación Religiosa: Juan Bosco Abascal. Ese sí sabemos quién es… y también da miedo (https://bit.ly/3g7jdMb).

Juan Bosco Abascal Carranza es el mayor de los 11 hijos de Salvador Abascal Infante (1910-2000), a quien un historiador definió de una plumada en el título de su tesis de maestría: A la extrema derecha del conservadurismo mexicano (https://bit.ly/304XXRy). Sin entrar en materia, digamos que para el patriarca de los Abascal, todo lo que no se ajustaba a su concepción del mundo, era marxista . Quizá de esa corriente de ¿pensamiento? viene la inconcebible necedad de Frenaaa de llamar comunista al actual gobierno.

Para Abascal Infante, la violencia puede ser válida y legítima si se emplea en pro de su muy peculiar e intransigente concepción del mundo. Personajes como José de León Toral (asesino de Álvaro Obregón) o Enrique Goroztieta (jefe militar de la rebelión cristera) son para él mártires y héroes.

La corriente representada por Abascal siempre fue muy minoritaria, aun cuando uno de sus hijos dio un gran salto: el 1º de diciembre de 2000 tomó posesión como secretario de Trabajo Carlos María Abascal Carranza, quien en junio de 2005 dejó ese encargo para ocupar por el resto del sexenio de Fox la Secretaría de Gobernación. No parecía burla: era una burla imponer como titular de Trabajo a quien había encabezado la Coparmex (1995-97) con un talante más conservador del que de por sí suelen tener esos voceros (como lo vivimos hoy con Gustavo de Hoyos). Alberto Sauret sintetiza: Una sorpresa del mismo tipo me provocó el grotesco nombramiento como secretario de Trabajo de este gobierno de Carlos Abascal, quien simplemente por su actuación al frente de la Coparmex podía verse como enemigo histórico de la gran mayoría del país. Pero el odio de clase del secretario, así como otras manifiestas fobias, no son originales, sino réplica facsimilar de las de su padre, hombre prolífico: autor de más de 20 libros y 12 hijos (todos cortados por la misma tijera), en quien se centra la mayor parte de esta exhaustiva investigación (https://bit.ly/39z19rV).

Sauret se equivoca: no están todos cor­tados por la misma tijera. Aun en los extremos hay extremos. En 2000 murió el patriarca Abascal Infante y ganó las elecciones el partido que antes de ser gobierno podía parecer de centro derecha y, tras ser­lo, no puede ya negar su cercanía al fascismo. Ambos hechos sacaron a la luz que en la hasta entonces monolítica familia Abascal había extremos. Dos de los hermanos Abascal Carranza denunciaron que su hermano mayor, Juan Bosco, abandonaba las ideas de su padre. Uno escribió: “La absurda comparación del triunfo de Fox con la independencia lograda por Iturbide, los criterios demoliberales [sic] que Juan Bosco hace suyos… la astuta tesis masónica de que la alternancia es de suyo un cambio que beneficia al pueblo… y estos son apenas unos de los errores” de mi hermano Juan Bosco.

Páginas del libro de Édgar González Ruiz, Los Abascal, conservadores a ultranza se dedican a esos pleitos. Resulta inaudito, escuchando, leyendo a Juan Bosco, que alguien pueda considerarlo liberal.

Para escribir este texto estuve a punto de adquirir la biografía de Carlos María Abascal, escrita por María Luisa Aspe Armella, porque, al parecer, relataba enfrentamientos familiares derivados de la absoluta intransigencia religiosa de ellos, pero decidí que esos 160 pesos podría gastarlos en otra cosa y bastaba para mostrarlos una publicación en el muro de Facebook de Juan Bosco, retomando a un cuñado suyo: En la biografía de mi cuñado Carlos Abascal Carranza que recientemente publicó la Fundación Carlos Abascal se describe con falsedades y calumnias un penoso episodio que dividió a la familia Abascal Carranza a principios de los 90 derivado del matrimonio de mi cuñado Mauricio con Colette Marie Abascal, quien había estado en un convento y había hecho votos como monja (https://bit.ly/2OZwuKy).

Estas intransigencias pintan al personaje que regresa a la vida nacional de la mano de Frenaaa. Podemos estar tranquilos: siempre han sido una minoría muy marginal. Termino: Juan Bosco tiene, además de su talante profundamente intolerante, una vena abiertamente violenta. En 2012 me amenazó abiertamente. Entonces no lo escribí con la claridad debida (https://bit.ly/302VFCo), pero ahora lo hago: Juan Bosco me amenazó en 2012 y en 2015. Ahora que escribo sobre él, quiero hacerlo explícito…

Twitter: @HistoriaPedro