Cortesía de Secretaría de Gobernación
Ciudad de México. Luego de 22 días consecutivos de
sostener un plantón afuera de Palacio Nacional, familias de víctimas de
feminicidio fueron recibidas por la Secretaría de Gobernación, con quien
se hicieron acuerdos.
Desde el pasado de 6 julio, un grupo de seis familias víctimas de
feminicidio de distintas entidades del país se instalaron en un plantón
afuera de Palacio Nacional para exigir que el presidente de México,
Andrés Manuel López Obrador las recibiera y escuchara sus demandas
puntuales.
Entre las demandas específicas de las familias estaba poder ingresar
al programa de recompensas para la búsqueda de los agresores, acceder a
fondos para víctimas y que la Fiscalía General de la República les
informe sobre sus acciones en cada uno de sus casos.
Las madres que encabezan esta manifestación pusieron como condición
mínima para retirarse que fuera directamente el mandatario federal quien
las recibiera. No obstante, y pese al riesgo de contagio al que están
expuestas las familias, López Obrador se ha negado a recibirlas y en su
lugar se ha enviado a hablar con ellas a personal de la Secretaría de
Gobernación, quien ha argumentado que el Presidente tiene muchos temas
que revisar.
Fue hasta este 27 de julio, cuando las familias fueron llamadas a
reunirse con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, en la
sede de Bucareli, en la Ciudad de México. De acuerdo con un comunicado
de la Segob, la secretaria dijo que las familias serían atendidas a
través de la Unidad de Apoyo al Sistema de Justicia a cargo de la
dependencia.
La funcionaria también indicó que con respecto al caso de Diana
Velázquez Florencio (una adolescente asesinada el 2 de julio de 2017 en
Chimalhuacán, Estado de México) ya fue ejecutada la orden de aprehensión
del probable responsable del feminicidio, esto tras haber sido detenido
por otro delito. De acuerdo con la Segob, se convino con Lidia
Florencio Guerrero, madre de Diana, que hoy permanece en el plantón
frente a Palacio Nacional, sostenga un encuentro con la Fiscalía General
del Estado de México para tener acceso al expediente que corresponde.
Asimismo, según la Segob, se acordó dar continuidad y resolver temas
relacionados con el Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de
Derechos Humanos y Periodistas, así como la revisión a la Ley para el
Tratamiento de Menores Infractores y también a aspectos concernientes
con beneficios a niñas y niños en condición de orfandad por causa de
feminicidio.
Esta sería la segunda mesa de trabajo que realizan las familias de
víctimas de feminicidio en lo que va de la administración de Andrés
Manuel López Obrador. La primera vez, el 17 de junio de 2019, Sánchez
Cordero las recibió, tuvieron un diálogo con ella de 10 minutos, “se
tomó la foto y se fue. No escuchó las demandas de las familias, no
escuchó todas las propuestas. Como siempre, la mesa de diálogo no se
continuó”, de acuerdo con Malú García Andrade, hermana de Alejandra
García, víctima de feminicidio en Chihuahua e integrante del plantón.
Hasta ahora, en ninguno de los intentos de las familias de víctimas
de feminicidio, el presidente de México ha aceptado reunirse
directamente con ellas, como sí ha hecho con familias víctimas de otros
delitos, como el caso Ayotzinapa, la familia Lebarón o de la guardería
ABC.
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