6/01/2010

NIÑOS LATINOAMERICANOS DEJAN LOS JUGUETES PARA TOMAR LAS ARMAS

NIÑOS LATINOAMERICANOS DEJAN LOS JUGUETES PARA TOMAR LAS ARMAS

México pasa por una de sus mayores crisis de seguridad de las últimas décadas. Una crisis magnificada por los medios de comunicación y por los actores políticos que se ven beneficiados con la debacle de sus opositores en el gobierno. Pero también México está atravesando, al igual que toda América, por una crisis de valores, la cual se ve reflejada en sus jóvenes. En América son cada vez en mayor cantidad y en menor edad quienes ingresan a esa sub cultura del narcotráfico.

A continuación las experiencias compartidas por 60 periodistas de América que participaron en el curso "La Cobertura del Narcotráfico" del Nnight Center for Journalism in the Americas de la Universidad de Austin en Texas.


1. En tu país ¿a qué edad los jóvenes son acreedores a sanciones o penas carcelarias? Por ejemplo, en México a los menores de 18 años que delinquen se les canaliza a sitios especiales con penas distintas.
Actualmente hay una discusión sobre cómo juzgar a un menor que haya cometido un delito de alto impacto. En Guatemala, según el actual Código Procesal Penal, a un menor de 18 años se le puede condenar, entre 6 y no más de ocho años, por el delito de homicidio o asesinato por ejemplo.

Los dos Juzgados de Menores en Conflicto con la Ley que existen los envían a cumplir esa pena, por decirlo así, ya que por ser menores se les tiene que tratar de una forma especial. La pena la cumplen en correccionales que están a cargo de la Secretaría de la Presidencia, y que en muchos casos no tiene los recursos, ni planes, de reinserción a la sociedad. Esto ha causado desórdenes y amotinamientos que han terminado en muertes y heridos.


En Brasil también la mayoría de edad es a los 18 años. Los delincuentes juveniles son tratados de acuerdo con el Estatuto del Niño y del Adolescente. En Estados Unidos, al igual que México, el chico que delinque y es menor de los 18 generalmente no es castigado con cárcel; sin embargo, en los últimos años han habido casos en que a los 16 ya son juzgados como adultos.

En Honduras hay una legislación especial para ellos, no son recluidos en centros penales, si no que son enviados a centros correccionales y la edad es igual que México, 18 años.... Después de 18 años los envían a los centros de reclusión penitenciarios.


En Argentina las personas son penalmente imputables a partir de los 18 años. De los 16 a los 18 ingresan en un régimen especial, con tutela, pero no reciben las mismas penas que en caso de tener más de 18 años. Con menos de 16 años son inimputables, aunque hay caso en los que pueden ser alojados en Institutos de Menores hasta que cumplan la mayoría de edad.

En Colombia, los menores de 18 años que incurran en algún delito por porte ilegal de armas, drogadicción o delincuencia son trasladados a sitios especiales como el Centro Especializado para Atención al Adolescente del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar o a centros de paso en donde tienen una vivienda transitoria mientras se rehabilitan y cumplen la mayoría de edad.

2. ¿Sabes el promedio de edad de la gente relacionada con el narcotráfico? ¿A qué edad comienzan?

En Colombia, eso se debe verse desde diferentes puntos de vista, las personas del campo que crecen y viven de los cultivos ilícitos por lo general llevan consigo esa tradición familiar, de dejarle a sus hijos y de la misma manera a sus nietos las herencias de tierras para que sigan cultivando. Sin embargo, muchos de estos campesinos además de cultivar coca cultivan otros productos de la tierra, pero la violencia los ha obligado a dejar sus tierras para convertirse en desplazados por la violencia.

Otro punto para ver es que los traficantes que distribuyen la droga en las calles, son personas que no contaron con suerte para trabajar, estudiar o porque su familia nunca creó un vínculo suficientemente fuerte, entonces se dejaron llevar por la adicción a las drogas y el dinero fácil, anti valores que con frecuencia poseen estas personas en su mayoría jóvenes que inducen a otros por medio de la violencia forzada, a tomar ese camino de dinero fácil.


En Guatemala desde hace unos cinco años para la fecha, por tener un estimado, las pandillas son las que iniciaron los grupos organizados para delinquir. Hoy se sabe que desde los 10 y 11 años son reclutados los menores para integrarse a las pandillas y desde su seno se inician como sicarios y expendedores de droga al menudeo, los cuales se han extendido a muchos sitios.

En Estados Unidos, la edad en la que se relacionan es en promedio a los 14 años, a veces menos.

En Argentina, los condenados por narcotráfico en Córdoba (tendencia que se repite en toda la Argentina), por lo general son jóvenes y de extracción social humilde. Y casi siempre, son el último eslabón de la cadena de una organización narcotraficante, es decir, aquellos que venden al menudeo o que llevan pequeñas dosis en motos para repartir a un consumidor.

También, en los últimos tiempos, son muchas las mujeres condenadas, del mismo perfil antes descripto. Se trata de mujeres con hijos pequeños que venden droga en sus casas, en pequeñas dosis. Las edades de los condenados, en términos generales, oscilan entre los 18 y los 35 años.


Soy un periodista en Brasil y la siguiente liga lo remitirá un documental sobre los niños y jóvenes que estuvieron involucrados en el tráfico, así que creo que tendrá una idea de cómo funcionan las cosas aquí. documental

En Honduras comienzan desde muy jóvenes para evitar ser requeridos y librarse más rápido de la justicia, por lo general los utilizan para el narcomenudeo hasta que son mayores de edad los ingresan a la organización. Ojo que todo esto se relaciona con más delitos, como el robo de vehículos, asociaciones ilícitas, secuestros...

3. ¿Los narcotraficantes utilizan a los jóvenes para realizar sus actividades? ¿De qué forma? En Colombia sí, todos usan personas jóvenes débiles que no contaron con suficientes oportunidades de empleo y/o estudio, y se tuvieron que ver obligados a participar de estos actos de violencia.

Muchas de las historias de estos jóvenes empiezan y terminan igual las muertes por venganzas o drogadicción son un común denominador entre algunos de ellos. Sin embargo, el gobierno nacional adelanta campañas de desarme y educación. Porque el talento que existe en Colombia es enorme y ha dado para que muchos de ellos hayan ganado grandes reconocimientos a nivel internacional.

Un dato importante: el porcentaje de jóvenes involucrados en el tema del narcotráfico no supera el 20 por ciento total de los jóvenes a nivel nacional, diferente al porcentaje por consumo de droga que si se eleva un poco más.

Anécdota: Muchos de los líderes comunitarios de los barrios periféricos de la ciudad son los que se encargan de llevar a sus amigos vecinos y demás jóvenes por el camino del trabajo y de la diversión sana.


En Honduras los utilizan para el sicariato (asesinatos), muertes por encargo. Para que ellos se inicien en la organización los llevan a lugares solitarios a presenciar actos de sicariato, una vez que ellos presencian estos actos los inducen a que ellos lo hagan y de esa forma "ingresan" a ese mundo.

En San Pedro Sula, las organizaciones de sicarios llevan a los jóvenes en medio de la noche a lugares como cementerios o bordos de ríos a presenciar estos actos y luego los ponen a ellos para que sean bautizados dentro de la organización.


En Argentina, claro que los utilizan, cada vez más, ya que no son imputables. Por lo general, los contratan para distribuir la droga.


En Guatemala, hace unas semanas fue capturado un menor de 13 años quien fue contratado por 100 quetzales (161 pesos mexicanos aproximadamente) para matar a una mujer en la zona 5 capitalina.

Este hecho causó consternación, porque el menor le dio muerte a la mujer frente a sus dos niñas, ya que se dirigía a dejarlas al colegio. Hasta el momento se sabe que fue contratado por extorsionadores, pero en otros casos son sicarios del narcotráfico que han cumplido con cometer crímenes de alto impacto y las autoridades lo deducen porque disparan con fusiles.

El narcotráfico, dijo la semana anterior el ministro de Gobernación, Carlos Menocal, subcontrata a los pandilleros, que en la mayoría de casos son entre 11 y 17 años, para cumplir tareas de sicariato. Después lo usan para custodiar, trasladar y trasegar la droga.


En Colombia, las autoridades trabajan en eso todo el tiempo, en mi concepto en ocasiones trabajan erradamente, no encuentran una solución que traiga el beneficio para todos. Pero sí adelantan estrategias para involucrar a los jóvenes en actividades culturales educativas, empresariales, etcétera.


4. Las autoridades de tu país ¿han hecho algo para combatir la incursión de jóvenes en actividades delictivas?

En Guatemala se quedan en hablar sobre la creación de planes integrales. Fue creada a través de la vicepresidencia la Secretaría contra las Drogas y Adicciones, pero hasta el momento su trabajo no se ve reflejado con la cantidad de grupos organizados que expenden drogas.

La corrupción en las cárceles y en la misma Policía Nacional Civil han hecho que los jóvenes, en la mayoría de casos residentes en asentamientos, sean los que formen parte de los carteles.


En Argentina no han hecho nada. Sólo promesas que no se plasmaron. Ningún proyecto serio de contención social ni de formación laboral. Nada de nada. Hoy, en Argentina hay muchos chicos y jóvenes a la deriva, sin expectativas de futuro, que desertan rápido del sistema educativo y se quedan todo el día sin hacer nada... son caldo de cultivo para los narcos, que sí les ofrecen un lugar donde alguna vez podrán ser reconocidos.
Muy poco se ha hecho realidad para cambiar la realidad de la trata.

Echa un vistazo aquí:
http://armabranca.blogspot.com/2010/05/cerca-de-40-dos-jovens-na-antiga-febem.html

En Estados Unidos sí, las autoridades intentan combatirla.

En Honduras se ha hecho poco o nada; hay un programa de reinserción o rehabilitación pero sin éxito para revocar el índice delictivo de los jóvenes, no existe una política de gobierno dura para frenar ese flagelo.


Este es el panorama de América. Gracias a Diana Paola Torres, Manuel Antonio, Julio Federico Lara García, Karina Méndez, Juan Federico, Lilian Caballero, Reyna Luna y Cecilia Olliveira, en estricto orden de aparición.

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