En el aniversario del cobarde asesinato del General Emiliano Zapata
Pronunciamiento 10 de abril del Frente Nacional de Lucha por el Socialismo |
A los medios de comunicación nacional y del extranjero
A las organizaciones políticas, democráticas e independientes
A las victimas del terrorismo de Estado
A las organización campesinas
Al pueblo en general
Se cumple un aniversario más del cobarde asesinato del General Emiliano
Zapata Salazar, héroe popular quien junto a los miles de campesinos
pobres, con determinación y firmeza lucharon contra el yugo explotador y
opresor de terratenientes a principios del siglo XX en nuestro país;
siempre firme con el ideal agrarista de que la tierra es de quien la
trabaja.
La lucha emprendida hace más de 100 años por Zapata y
el pueblo trabajador, es un legado de esos hijos del pueblo, que más
tarde los desposeídos dieron continuidad con la organización de los
campesinos pobres por la recuperación de la tierra y su defensa. Hasta
la fecha el ideario de justicia de luchar contra la clase que detenta el
poder que explota y oprime, se mantiene tanto en el campo y la ciudad.
El Estado mexicano junto con la burguesía local y trasnacional no han
desistido en su intento por destruir la organización del pueblo, a pesar
de la represión, de innumerables crímenes que se cometieron contra los
trabajadores, el legado de hombres y mujeres que lucharon junto a
Zapata, siguen vivos, hoy su experiencia de lucha robustece la
conciencia política del pueblo para que en nuestro país, en el actual
momento histórico, al tiempo que se lucha por la tierra y su defensa, se
hace también la lucha por el socialismo, ésta como la única alternativa
política e histórica de los explotados y oprimidos.
En la
actualidad, se mantiene la explotación y opresión del pueblo, de éstas
hablan las actuales condiciones económicas y políticas que vivimos en el
país, las cuales entre sus causas está la crisis capitalista
prolongada, así como el terrorismo de Estado como política de gobierno;
con el primero ha aumentado la pobreza, miseria, la carestía de la vida,
con el segundo, las víctimas de crímenes de lesa humanidad crecen, con
ello las cientos de fosas clandestinas como testimonio de la
desaparición forzada y la ejecución extrajudicial.
A esto se
suma el despojo legalizado de las tierras en el país. El Estado con las
leyes neoliberales, en particular de la reforma energética, dio
celeridad al despojo de tierra de manos campesinas, con ello se obliga a
vender las tierras a golpe de represión y a través de medidas
legaloides. Política que conduce paulatinamente a la precariedad de la
vida de los trabajadores del campo, es decir, la miseria campea en todo
el territorio nacional.
De ahí que los programas PROCEDE, FANAR
han favorecido a la oligarquía nacional y transnacional, aeropuertos,
autopistas y otros megaproyectos que se construyen para la producción y
circulación de mercancías a costa de la vida de miles de familias
campesinas.
Las comunidades organizadas a lo largo de los años
no solamente defienden las demandas agrarias, sino que abrazan todas las
demandas del pueblo, como la defensa de la educación pública, la salud,
la presentación con vida de los detenidos desaparecidos, libertad a los
presos políticos; por solidarizarse con éstas causas es que también son
alcanzados por la mano represora del Estado.
El
paramilitarismo como política de Estado es parte del espectro represivo
en el país, mediante grupos paramilitares es como se apuntala la
represión contra comunidades organizadas de manera independiente.
Mediante esta política el gobierno antipopular intenta frenar la
organización y unidad del pueblo, aunado a la militarización de las
comunidades viven diariamente la incertidumbre y el riesgo que se
cometan crímenes de lesa humanidad contra éstas.
Policías,
militares y paramilitares gozan del cobijo e impunidad que el Estado les
otorga, para ejercer de múltiples formas la represión, así como el
cometido de crímenes de lesa humanidad, de ese modo provocan miles de
casos de desplazamiento forzado, lo cual implica el despojo violento de
sus tierras; sólo así se realizan los megaproyectos de muerte,
aterrorizando a regiones enteras, ésta es la expresión concreta del
fortalecimiento del Estado policíaco–militar.
Las fosas
clandestinas muestran también la contundencia con la que se ejecuta el
terrorismo de Estado en un contexto donde la crisis capitalista provoca
mayor descontento popular; éstas expresan el doble crimen de lesa
humanidad contra hombres y mujeres del pueblo, detienen-desaparecen,
ejecutan extrajudicialmente para saciar mezquinos intereses, tratan el
derecho a la vida como a cualquier objeto, se niega este derecho, es el
rostro represivo y fascista del régimen.
El caso de nuestro compañero Héctor Sántiz López, Mártir en la lucha por la tierra, su defensa y por el socialismo,
asesinado el 29 de septiembre de 2015 por las balas del Estado en el
ejido El Carrizal, Chiapas; la desaparición forzada del compañero
Fidencio Gómez Sántiz, la ejecución extrajudicial del niño Humberto
Morales Sántiz, más una larga lista de víctimas que el Estado mediante
el estado policíaco-militar es responsable. Todos ellos, campesinos
organizados en el FNLS quienes además de luchar por la defensa de la
tierra se sumaron de manera consciente en la solidaridad con todas las
victimas del terrorismo de Estado.
No hay que pasar por alto la
barbarie con la que fueron reprimidos los comuneros de Arantepacua en
el estado de Michoacán, crimen de Estado y de lesa humanidad al que como
Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (FNLS) condenamos
enérgicamente. Nuestros fraternos y combativos saludos a los familiares
de las víctimas, refrendamos nuestra solidaridad para exigir justicia y
castigo por esos abominables crímenes.
Resultan un absurdo los
argumentos del gobernados Silvano Aureoles Conejo que las comunidades
son “utilizadas” por agentes “externos”; en los hechos es la
criminalización y la forma en cómo de pretenden elaborar expedientes
incriminatorios para cometer más crímenes de lesa humanidad esto nos
comprueba que el terrorismo de Estado no tiene distinción de partidos o
siglas políticas. ¡El pueblo trabajador somos las víctimas, no los
victimarios!
Numerosos son los casos que demuestran que tanto
en el campo como en la ciudad se viven las consecuencias de este régimen
neoliberal, por lo tanto, la unidad del pueblo es una necesidad
impostergable ante la inmensidad de injusticias que se comenten a diario
contra los desposeídos, porque cada víctima de la desaparición forzada y
ejecución extrajudicial es del pueblo, sin importar su sector, si es
campesino u obrero, por ello es indispensable coordinaran esfuerzos como
hermanos de clase.
Cada víctima representa una injusticia, la
solidaridad no se regatea, el humanismo proletario forja entre los
explotados y oprimidos la identidad como hermanos de clase, a pesar de
la distancia o tiempo, nos identifica la lucha contra los opresores, por
lo tanto, no podemos olvidar a ningún hijo del pueblo víctima del
terrorismo de Estado.
Mediante la Jornada nacional de lucha: las víctimas del terrorismo de Estado son el pueblo, no desistiremos ¡Hasta encontrarlos!,
continuamos con la búsqueda de justicia para las víctimas. por cada
ejecutado y por la presentación con vida de los más de 300 mil detenidos
desaparecidos, en los que figuran los revolucionarios Edmundo Reyes
Amaya, Gabriel Alberto Cruz Sánchez; nuestro compañero Fidencio Gómez
Sántiz, así como la de Daniela y Virginia Ortiz Ramírez integrantes del
MULT, Teodulfo Torres Soriano, Francisco Paredes Ruíz…
Invitamos a todas las víctimas del terrorismo de Estado a denunciar, a
exigir justicia para los responsables, no permitamos que la
indiferencia, el terror, los dichos y calumnias del Estado minen nuestra
voluntad de luchar por nuestros seres queridos, donde haya una
injusticia ¡no callaremos, denunciaremos y saldremos a las calles a
exigir justica!
No descansaremos en la lucha por la tierra y su
defensa, como tampoco desistiremos por exigir la presentación con vida
de los detenidos desaparecidos del país, mucho menos dejaremos de luchar
por el socialismo en México; los crímenes de lesa humanidad no minarán
la decisión de luchar de todo un pueblo.
Convocamos al pueblo, a
luchar hombro con hombro, la situación actual de nuestro país con
cambiará con sólo contemplarla, es necesario la organización
independiente y resistencia popular combativa del pueblo para
defendernos del Estado represor.
¡Presentación con vida de Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez!
¡Presentación con vida de nuestro compañero Fidencio Gómez Sántiz!
¡Alto al terrorismo de Estado!
¡Alto a la militarización y paramilitarización del país!
¡Por la unidad obrero, campesina y popular!
Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (FNLS)
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