AMLO-Trump
Van México y EU por un futuro próspero fincado en cooperación
Fallaron los pronósticos, no nos peleamos, festeja López Obrador
Agradece a Trump su respeto al país y los
connacionales
El mandatario estadunidense expresa su admiración por
los mexicanos y su presidente
▲ Durante la visita del presidente Andrés Manuel López Obrador a su
homólogo Donald J. Trump en la Casa Blanca, los jefes de Estado
intercambiaron bates de beisbol, deporte que apasiona a ambos. Después
de las reuniones de trabajo, los mandatarios de México y Estados Unidos
se dirigieron al Jardín de las Rosas con la finalidad de emitir sendos
mensajes y firmar una declaración conjunta ante representantes de la
prensa local y extranjera.
Nueva York. El presidente Andrés Manuel López Obrador, al
concluir las reuniones de trabajo con su contraparte Donald Trump y su
gobierno, resumió así la visita:
Fallaron los pronósticos, no nos peleamos, somos amigos y vamos a seguir siendo amigos. Su anfitrión coincidió al afirmar que tanto en México como en Estados Unidos
han aprendido a no apostar en contra de nosotros, en referencia a la
granrelación con su
amigo.
Trump recibió a López Obrador en la puerta de la Casa Blanca, donde
celebraron una sesión de trabajo y se comprometieron a lograr un futuro
próspero, con base en la cooperación bajo el nuevo tratado de libre
comercio.
El mandatario estadunidense declaró su admiración por los mexicanos, y
López Obrador agradeció a su anfitrión tanto el reconocimiento de la
soberanía de México como el respeto a los mexicanos de ambos lados de la
frontera.
La agenda de la visita de trabajo incluyó una reunión entre ambos
mandatarios, seguida por otra en la que participaron sus respectivas
comitivas y culminó con una cena donde los presidentes fueron
acompañados por empresarios de ambos países.
Al firmar la declaración conjunta en el Jardín de Rosas de la Casa
Blanca, con las banderas de ambos países flanqueándolos, los mandatarios
ofrecieron breves discursos en los que alabaron su cooperación, su
respeto mutuo y enfatizaron el nuevo tratado de libre comercio entre
México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) como fundamento para generar
empleo y prosperidad.
López Obrador, después de explicar los beneficios y virtudes de la
cooperación económica bajo el nuevo acuerdo entre los tres países de
América del Norte, declaró a su anfitrión que,
como en los mejores tiempos de nuestras relaciones políticas, durante mi mandato como presidente de México, en vez de agravios hacia mi persona, y lo que estimo más importante, hacia mi país, hemos recibido de usted comprensión y respeto.
Al agradecer la ayuda de Trump en asuntos de comercio, petróleo y en la adquisición de equipos médicos, López Obrador expuso:
Lo que más aprecio es que usted nunca ha buscado imponernos nada que viole o vulnere nuestra soberanía. En vez de la Doctrina Monroe, usted ha seguido el consejo de George Washington, quien advertía que las naciones no deben aprovecharse del infortunio de otros pueblos. Usted no ha pretendido tratarnos como colonia sino que, por el contrario, ha honrado nuestra condición de nación independiente.
El mandatario mexicano comentó a su homólogo, frente a las comitivas y
periodistas bajo intenso sol en el Jardín de las Rosas: “Ahora que
decidí venir a este encuentro con usted, presidente Trump, en mi país se
desató un buen debate sobre la conveniencia de este viaje. Yo decidí
venir porque… es muy importante la puesta en marcha del tratado, pero
también quise estar aquí para agradecerle al pueblo de Estados Unidos, a
su gobierno y a usted, presidente Trump, por ser cada vez más
respetuoso con nuestros paisanos mexicanos”.
Añadió:
Por eso estoy aquí para expresar al pueblo de Estados Unidos que su presidente se ha comportado hacia nosotros con gentileza y respeto. Nos ha tratado como lo que somos: un país y un pueblo digno, democrático y soberano.
López Obrador recordó como ejemplos históricos de una buena relación
en tiempos complejos el caso de Benito Juárez y Abraham Lincoln, así
como el del general Lázaro Cárdenas y Franklin D. Roosevelt, e incluyó
una mención sobre el respeto del estadunidense a la decisión de
nacionalizar el sector petrolero (tema que de nuevo está en la mesa por
la reapertura de ese sector a la inversión extranjera).
El presidente mexicano abordó el tema de los mexicoestadunidenses en
Estados Unidos, indicó que la “comunidad de casi 38 millones de
personas, incluidos los hijos de padres mexicanos, se trata de gente
buena y trabajadora que vino a ganarse la vida de manera honrada… que
mucho ha aportado al desarrollo de esta gran nación”.
Por su parte, Trump proclamó que
tenemos una relación sobresaliente, y haciendo eco de su invitado, indicó:
La gente apostaba en contra de esta relación, pero jamás ha sido más estrecha, más cercana, una relación basada en
confianza mutua, respeto mutuo. Consideró que
estamos haciendo un trabajo tremendo juntosy afirmó que el T-MEC es el tratado de comercio
más grande jamás elaborado.
Sostuvo que comparte con su invitado que
ambos hemos sido electos para luchar contra la corrupción, retornar el poder a los pueblos y fortalecernos (como países).
Reconoció y alabó a la
increíblecomunidad mexicoestadunidense –que él calculó en 36 millones de personas–, quienes
fortalecena las comunidades y
son sumamente exitosos, como usted, negociantes firmes y grandes personas de negocio, señor presidente.
Añadió que se está trabajando de manera conjunta con el fin de lograr
migración segura, humana y legal, y hemos sido ayudados por México en crear números sin precedente, en términos positivos, en nuestra frontera suren cuanto a frenar el flujo migratorio.
Subrayó que está construyendo la relación bilateral de una manera
que nunca se ha hecho antes.
Antes de la reunión, en conferencia de prensa por la mañana, el
secretario de Estado, Mike Pompeo, reiteró que se abordarían una amplia
gama de temas, pero destacó
lo que está ocurriendo en Venezuela hoy día–no se sabe si el tema se discutió.
En la cena con la que culminó la visita, un acto privado sin acceso
para la prensa, los 12 empresarios estadunidenses incluyeron a
ejecutivos de Shell Oil, Cabot y Sempra, entre otros de la industria
petrolera –sector que ha solicitado al gobierno de Trump presionar a
México por la incertidumbre de los nuevos reglamentos para inversiones
extranjeras–, así como a altos ejecutivos de Ford, General Motors,
Blackstone e Intel.
Por México asistieron 10 empresarios: Carlos Slim, Bernardo Gómez,
Ricardo Salinas Pliego, Miguel Rincón, Francisco González, Patricia
Armendáriz, Carlos Bremer, Carlos Hank González, Olegario Vázquez Aldir y
Daniel Chávez, de acuerdo con la lista oficial de la Casa Blanca.
Por el gobierno anfitrión asistieron los secretarios Pompeo; Steve
Mnuchin, del Tesoro; Wilbur Ross, de Comercio; Robert Lighthizer,
representante de Comercio, junto con el vicepresidente Mike Pence; el
jefe de gabinete, Mark Meadows, y los asistentes del presidente Trump,
Jared Kushner, Larry Kudlow, Stephen Miller (arquitecto principal de la
política de migración) y Mauricio Claver-Carone.
Foto Presidencia y Afp
David Brooks
Corresponsal
Periódico La Jornada
No hay comentarios.:
Publicar un comentario