2/14/2010

Francia abandona el feminismo

Desde otras ciudades

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Las mujeres participan en varios movimientos sociales en Francia
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París. La filósofa francesa Elisabeth Badinter publicó un nuevo ensayo: El conflicto, la mujer y la madre (*) sobre la regresión de las mujeres francesas y europeas en relación con sus conquistas históricas, impulsadas por la ideología del “naturalismo», hoy pregonado por médicos, ecologistas, religiosos y políticos, y debido al modelo poco atractivo de sus propias madres, pioneras del feminismo del 68, a quienes reprochan su ausentismo del hogar sin por ello haber obtenido la felicidad ni una verdadera igualdad de sexos en el campo profesional.

Este ensayo trae una vez más la polémica que suscitó su obra Madame du Châtelet, Madame d’Épinay : Ou l’Ambition féminine au XVIIIe siècle, al reivindicar a Emilie du Châtelet, nacida en 1706, “de sexualidad devoradora y a la vez traductora de los Principios Matemáticos de Newton, en cuya física introdujo a su amante, Voltaire”, y cuyo Discurso sobre la felicidad fue pionero, con la obra de Mme d’Epinay, en el cuestionamiento del determinismo biológico, que relega a la mujer a un papel subordinado y ajeno a la ambición personal.

En entrevista con el periódico L’Express (**), la ensayista reivindicó el sentido de la ambición (demonizado por la Iglesia como desafío a Dios) en tanto que remedio a la angustia existencial, antídoto del aburrimiento y la melancolía y que fuera plataforma de salvación de las escritoras del siglo XVIII. Ambición femenina a la que puso fin la Revolución Francesa con unos derechos humanos que se aplicaron a los hombres, pero no a las mujeres, consideradas, como los niños y los locos, sin derechos cívicos (en pro del) bien de la sociedad, para darle a cambio derecho absoluto sobre la familia, tal como regresa en el nuevo discurso social y que, junto con la victimización de la mujer golpeada, violada, sometida, nueva bandera feminista, fomenta su no responsabilidad en la incapacidad para lograr una vida plena, a la vez profesional, amorosa y maternal, fomentando así la renuncia a encontrar la felicidad mediante su trabajo.

El debate que el nuevo ensayo resuscita, se mezcla en el aire de los tiempos con el tema del proyecto de decreto del Ministro de la Inmigración para rechazar la petición de naturalización de un musulmán que obliga a su mujer a ponerse el velo integral, mientras que, por otro lado, colectivos de musulmanas reivindican su derecho a ponerse la burka como parte de sus libertades.

(*) Le Conflit, la femme et la mère, 2010 Ed. Flammarion (**)François Busnel, 01/05/2006)

Yuriria Iturriaga, corresponsal

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