4/06/2011

Sobreviviente de feminicidio tuvo que demostrar que actuó en defensa propia


Pasó un mes en prisión acusada de “homicidio en riña”


Por la Redacción

México DF, 5 abr 11 (CIMAC).- Después de pasar casi un mes en prisión, Rosa Ema Silva, acusada de “homicidio en riña” en Chihuahua, fue liberada al comprobarse que el asesinato de su esposo fue en “legítima defensa”, informó el Centro de Derechos Humanos de las Mujeres de Chihuahua (Cedehm).

En comunicado de prensa, el Cedehm indicó que el caso de Rosa Ema “pone en evidencia el derecho de la mujer a defenderse de un feminicidio y también la criminalización de las mujeres que usan la legítima defensa, por razones de género”.

Ese argumento fue una de las conclusiones a las que llegó la Cuarta Sala Penal del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Chihuahua, que ayer puso a Rosa Ema en libertad, al resolver favorablemente el recurso de apelación que interpuso el Cedehm, y considerar que no había delito que perseguir.

Durante el juicio, la abogada Luz Estela Castro, directora de este Centro de Derechos Humanos, demostró al tribunal las violaciones a los derechos fundamentales que sufrió Rosa Ema, debido a que “la valoración inicial de las pruebas estuvo plagada de estereotipos de género que utilizó la fiscalía, de manera errónea, para desestimar la legítima defensa y solicitar que se condenara a Rosa Ema por homicidio en riña“.

Relató que Rosa Ema Silva sufrió violencia física y sexual por parte de su esposo Jaime Josué durante siete años. El pasado 4 de marzo, días después de que lo abandonó, él fue a buscarla, entró a la fuerza a su casa, la golpeó y amenazó con matarla a ella y a sus cuatro hijas e hijos (de 4, 10, 11 y 14 años de edad).

Ella trató de detenerlo, forcejearon con el cuchillo que el agresor tenía en las manos, él perdió el equilibrio, cayó y el arma quedó clavada en su pecho. A pesar de que estaba herido seguía amenazando a Rosa Ema, quien lo llevó al hospital, donde murió horas después.

A pesar de la evidencia, la fiscalía acusó a la originaria de Aldama, Chihuahua, quien fue condenada a prisión, debido a que los tribunales tienen estereotipos de género que limitan el derecho a la legítima defensa para las mujeres que sufren violencia, sostuvo el Cedehm.

Este Centro cuestionó que el sistema de justicia considere la violencia contra las mujeres como “peleas y discusiones privadas”, ya que al calificarlas de este modo las mujeres que se defiendan de la agresión son condenadas.

En el fondo, dijo Luz Estela Castro, se trata del no reconocimiento de que las mujeres tienen derecho a defenderse, “por lo que la resolución recurrida fue producto de los prejuicios sexistas que justifican la violencia contra las mujeres”.

Con este caso, el Cedehm, cuyos argumentos en la defensa de Rosa Ema se basaron en convenciones internacionales de derechos humanos de las mujeres firmados por México, sentó precedentes en el nuevo sistema acusatorio para los casos en donde las mujeres no tienen otra opción que ejercer el derecho de la legítima defensa.

En su más reciente publicación, “El acceso a la justicia para las mujeres víctimas de violencia de género en el sistema penal acusatorio”, escrito por Luz Estela Castro, señala que la modalidad de sistema penal permite que las mujeres víctimas, sus familias y sus representantes legales participen activamente en los juicios, sin embargo el acceso a la justicia se complica por las deficiencias en la obtención y valoración de las pruebas.

De igual modo, se obstaculiza porque persisten estereotipos de género, prejuicios y discriminación en la investigación y resoluciones judiciales y el caso de Rosa Emma, es un ejemplo de ello.

En Chihuahua, durante 2010 fueron asesinadas 446 mujeres y tan sólo en enero pasado se registraron otros 29 homicidios dolosos.

Datos del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), señalan que en los últimos tres años se registraron mil 768 homicidios dolosos de mujeres, de los cuales sólo 3.7 por ciento (40 casos) recibieron sentencia.

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